12 años de edad.

AARÓN

— ¡Hanna! ¿Dónde carajos estás? — el tono que utilicé fue algo brusco para estar hablando con una contestadora pero ya le había marcado a Hanna como 10 veces y dejado más de 50 mensajes y no respondía.

Las cosas serían diferentes en otras circunstancias pero ahora estoy parado enfrente de nuestro nuevo instituto. Hanna y yo habíamos decidido cambiarnos de colegio al entrar a Junior High School porque en uno privado somos consientes del trato especial que recibiríamos al saber quiénes eran nuestros padres, por esto ahora estábamos en uno público, aquí importaba un carajo eso, lo que relevante era lo que hicieras para hacerte notar.

Y con esto en mente el entrar a esta escuela me ponía más nervioso, no conocía a nadie, el nuevo y de primer año por ende me verían como un tarado. La idea de llegar con Hanna siempre me calmó porque ella nunca se ha dejado de nadie, en cambió yo… digamos que nunca he sido fastidiado porque saben que soy amigo su mejor amigo y eso siempre significa algo para los burlones que bien, saben que con Hanna no se deben meter o les gusta.

En primaria más de uno me utilizó para llegar a ella pero Hanna jamás se visto colada por algún chico, o al menos nunca me lo ha dicho.

Volviendo a mi cruda realidad, miré la hora y al notar que solo faltaban alrededor de 5 minutos para que la campana sonara decidí que lo mejor era resignarme a que Hanna ya aparecería.

Tomé la mochila del piso y una vez  que la coloqué en mis hombros dispuesto a dar el primer paso alguien gritó mi nombre.

— ¡AARÓN! — iba a girar para ver quien me llamaba pero aquella persona no me dio tiempo de hacerlo porque se me echó encima haciendo que cayéramos al piso. Creo que no hace falta decir quién era.

— ¡Demonios, Hanna! — me quejé en el piso en el momento en el que ella se ponía de pie. — ¡Me tacleaste!

— ¡Ay! No te portes como un bebé, peores golpes te he dado, además, me estabas por abandonar, es lo mínimo que te mereces. —me tendió la mano y una vez que la tomé me ayudó a ponerme de pie para finalmente animarnos a entrar a la escuela.

El habiente se sentía algo pesado pero la verdad no tanto como lo pensé, o mejor dicho como nos lo pintan en las películas de dramas adolecentes, y no, yo no veo esas cosas, pero mi hermana sí y de repente presto atención a algunas cosas.

En eso recordé algo.

— Hanna — dejó de mirar la escuela para mirarme a mí. — ¿Por qué llegaste tan tarde? —  sonrió.

— Ya lo verás. — y al perder su vista de nuevo en el pasillo su sonrisa permaneció; algo no estaba bien.

🌼🏈🌼

Hanna y yo estábamos en las mismas clases, fue el único favor que les pedimos a nuestros padres y claro nos lo cumplieron, pues de hecho no estaban muy contentos al escuchar que queríamos ir a una escuela pública, menos les gustaba la idea de que estuviéramos separados.

Ahora nos encaminábamos al auditorio, porque al parecer nos darían una charla de bienvenida.

— Hanna, ya dime que hiciste. — pregunté por milésima vez,

— No es nada grave, ya relájate. — le reto importancia pero eso no me hacía sentir mejor porque ella siempre me ha contado todas las bromas que planea hacer y ahora que lo estaba guardando para sí misma me preocupaba que se hubiera pasado de la raya.

— Solo espero que no te hayas pasado. — esta vez me miró con el ceño fruncido.

— ¿Y si fuera así qué? — la miré sorprendido porque era la primera vez que me hablaba molesta. — De todas formas quien se metería en problemas soy yo, no tú. Deja de cuidarme como si fueras mi padre. — intentó adelantar el paso para dejarme atrás pero justo antes la tomé del brazo para detenerla.

—Bien, ya no te molestes, solo me preocupo, Hanna, somos amigos y no quiero que hagas algo estúpido pero si lo haces está bien, no me voy a meter. — ella sonrió de lado.

—Gracias por entenderlo, Aarón, es solo que ya me harté de tratar de ser la niña buena ¿sabes? — En eso lo entendía, Hanna hizo muchas bromas en el pasado pero siempre en el anonimato y todo por el apellido.

—Bien, solo espero que no te expulsen.— estamos a unos metros del auditorio.

— Yo también lo espero.— abrí mucho los ojos al escucharla pero ella solo le limitó a reír antes de entrar.

Ay, Hanna ¿Qué demonios hiciste?

🌼🏈🌼

Al entrar al auditorio la mayoría de los estudiantes ya estaban en algún asiento.

Yo estaba delante de Aarón así que me dirigí a los asiento que quedan más en medio del auditorio pues quería tener una gran vista de lo que tenía planeado.

Al sentarnos tuvimos que esperar alrededor de 10 minutos para que finalmente un profesor apareciera en el escenario. Pero antes de eso Aarón solo se la pasó moviendo una de sus piernas, señal de que a pesar de sus anteriores palabras se estaba preocupando más de la cuenta.

¡Por dios! Aarón a veces me sorprendía de lo nervioso que podría llegar a ser ¡Ni yo estaba así! Y eso que ya sabía lo me vendría en encima después todo lo que planee.

— Aarón, calma tu pierna, por favor, me estas fastidiando.— al ver la seriedad con la que lo dije su movimiento paró de golpe y se enfocó en el escenario al ver que alguien nos llamaba a todos.

— ¡Bien día estudiantes! Les pido amablemente tomar asiento y guardar silencio para recibir con un fuerte aplauso a nuestro señor director. — inmediatamente todos obedecieron con borregos lo que el profesor pidió y en cuento el director salió al escenario el auditorio se llenó de aplausos.

— Buenos días estudiantes, primero que nada les quiero dar la bienvenida a la nueva etapa de sus vida, sé que alguno están asustados… — el director siguió con el mismo discurso que hace cada año y cada segundo que pasaba ahora yo era quien movía la pierna pues solo quería que el reloj marcara las 11 hasta que finalmente eso sucedió.

— Y es por eso que… — el director no pudo terminar la frase porque ese momento se escuchó un fuerte golpe y seguido de una mezcla de salsa de tomate que salió del techo y cayó justo sobre el director.

La sala entera quedó en silencio unos segundos antes de un nuevo golpe se hiciera presente y cayera más salsa pero ahora sobre los profesores que estaban sentados a un costado del escenario. Pero las cosas no pararon ahí porque luego de la salsa plumas de gallina comenzaron a volar, pegándose  en los profesores y el director.

Para ese momento el auditorio estaba lleno de las risas y carcajadas de los estudiantes. Todo mundo reía a excepción de una persona, Aarón. Él miraba la escena con absoluto horror antes de posar su vista en mí.

— ¿Qué has hecho Hanna?

— Y no ha llegado la mejor parte. — sonreí con malicia y él me respondió con una mirada cargada de miedo y preocupación.

En ese momento el director comenzó a golpear el pódium con su mano, proporcionando que el auditorio volviera a caer en el silencio.

— ¡QUIERO SABER QUIEN HIZO ESTA BARBARIDAD! ¡Y NO NOS HIREMOS..! — Su frase se vio interrumpida en el momento en el que subí a mi silla y levanté mi mano.

— ¡Fui yo! — todos me miraban sorprendidos incluso los maestros, al parecer no creían que una estudiante de primer años haría algo así y menos que confesara.

— La quiero en mi oficina ¡Ahora! — hice un puchero.

— ¡Pero todavía no llegamos a la mejor parte! ¡Le gustara tener salsa de tomate cuando se de cuenta! — el director me miró incrédulo hasta que mi última sorpresa apareció.

— ¡Zorritos! — se escuchó el grito de una chica de las filas de enfrente e inmediatamente todos entraron en caos.

Aarón y yo nos pusimos rápidamente de pie y salimos del auditorio como los demás, claro que los de las primera filas no tenían forma de salvarse.

— ¿Hanna, por qué hiciste eso? — me preguntó Aarón mientras tratábamos de recuperar el aliento por la corrida. Yo sentí ante si pregunta.

— Queríamos hacernos notar por nosotros mismos y no por nuestros padres ¿verdad? Bueno, créeme que después de todo nadie nos olvidará. — Aarón me dio una mirada reprobatoria y no tuve más remedio que sonreír como una niña traviesa que se había salido con la suya.

🌼🏈🌼

— ¡NO PUEDO CREER QUE ME HAYAS SACADO DE UNA JUNTA POR ESTAS TONTERIAS HANNA! — gritó papá en cuanto entramos a la casa

Obviamente el director no iba a dejar las cosas así, me mandó a llamar y en ciento entré a la oficina mi papá ya estaba ahí.

El director le contó con lujo de detalle todo lo que había hecho creyendo que mi papá estaría de acuerdo con que merecía la expulsión pero no fue así. En su lugar papá comenzó a preguntarme cómo había hecho todo eso, lo con respondí con mucha tranquilidad.

Primero que nada busque fotos y vídeos sobre la bienvenida para ver exactamente dónde estarían pasados todos, luego con ayuda de Bob, el chófer, fui a buscar todo lo necesario, luego ya en la noche entré a la escuela e instalé todo. Entrar a la escuela fue muy facial pues no había seguridad u ahí fue donde mi papá atacó.

Papá comenzó a anaqueles cosas sobre la seguridad de la escuela y que llamaría a varias personas para quitarlo de su puesto y bla, bla, bla. En resumen el director solo me dio una semana de detención  y pidió que no se volviera a repetir; ¡sí, cómo no! Tener a uno de los mejores abogados del país como padre tenía sus ventajas.

— No va a volver a pasar, solo quería divertirme un poco…

— ¡ESO NO ES DIVERSIÓN! ¡LO QUE HICISTE FUE SALVAJISMO! ¡¿SABES CUANTOS CARGOS TE PUDIERON HABER PRESTADO?!... — solo estaba callada recibiendo el regaño de papá pero en ese momento mamá llegó al rescate.

— ¡Qué pasa aquí! — dijo mamá mientras cerraba la puerta, al parecer acaba de llegar de su clase yoga.

— ¡Pues a ti hija se le ocurrió hacer una bromita al director y a los profesores! ¡E hizo que sus compañeros fueran rociados por zorrillos!... — mamá le restó importancia.

— Bueno, es solo una broma, nono9 volverá a hacer, ya cálmate. — papá quería ponerse a discutir pero al mirar el reloj se detuvo.

— No tengo tiempo para esto.— tomó las llaves de su auto y se marchó.

— Bien.— mamá me miró con una sonrisa. — ¿Quieres un helado mientras me cuentas como planteaste todo? — sonreí luego de asentir.

Amaba a mi mamá.

🌼🏈🌼

AARÓN

— Y así de fácil se hacen las divisiones, Jess. — terminé de explicar pero al ver el rostro de mi hermana supe que no había entendido nada.

— No te entendí nada, Aarón, esto es muy complicado. — sonríe al  ver si rostro de frustración.

— Bueno, comencemos de nuevo… — en eso el sonido de la  puerta principal al cerrarse resonó por toda la casa, señal de que papá había llegado y no estaba de humor.

Eso se confirmó cuando entró al comedor y me miró de mala gana.

— Te quiero en la oficina, Aarón. — fue todo lo que dijo antes de marcharse.

— Creo que está molesto. — le dije a Jess quien me miró preocupada.

— ¿Qué hiciste?

— Yo nada.

Me puse de pie para encaminarme a la oficina y una vez llegué papá ya me estaba esperando sentado en su escritorio.

— Cierra la puerta y siéntate.

Hice lo que me pidió y una me senté no pude evitar sentir mi garganta seca. Nunca había visto a papá así de molesto y no tenía idea de porque estaba así.

— ¿Pasó algo? — pregunté luego de que no dijera nada.

— Creo que ya sabes lo que hizo tu amiga en la escuela. — ya sabía a donde iba todo esto.

— Sí, estaba en el auditorio cuando pasó.

— ¿Y tú sabías lo que iba a hacer? — rápidamente negué.

— No, no lo sabía.

— Bien, porque gracias eso perdimos a un cliente muy importe, todo porque el padre de Hanna tuvo que ir a ayudarla.

— Lo siento. — me disculpe por ella.

— Quien debe sentirlo es ella, no tú, hijo. Pero no quiero que algo parecido vuelva a pasar así que voy a pedirte algo muy importante. — eso llamó mi atención.

— ¿Qué cosa?

— Necesito que cuides de Hanna. — escuchar eso me sorprendió.— No importa que haga mil bromas, lo único que no quiero es que eso afecte al despacho. Así que tu tarea será que  Hanna no deje trasto de las bromas, págale a quien tengas que pagarle pero no quiero nadie fuera de tu escuela conozca las barbaridades que ella haga ¿Bien? — asentí algo confundido.

— Entonces ¿yo seré como su guardaespaldas?  — papá lo pensó.

— Más serás como un agente secreto que trabaja para mí ¿bien? — asentí.

— Está bien, papá, no volverás a escuchar de las bromas de Hanna.

Una cosa estaba clara con todo esto, Hanna no debía enterarse o de lo contrario haría todo lo posible para que sus bromas fueran conocidas en todo el país.

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Hola!!!

Bueno aquí está el nuevo capítulo!!! ¿Qué tal les pareció descubrir que Aarón tiene que limpiar todo el desastre que haga Hanna? 😱

No sé ustedes pero a pesar d todo to sigo amando a Hanna 🤣

Bueno, espero que les haya gustado el cap! Los amo y nos seguimos leyendo!!! 😋

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