*Capítulo 28 (Parte 2): Los sueños se vuelven realidad...
AARÓN
10 minutos después.
Por última vez respiré profundo, miré fijamente la puerta del baño y la abrí.
A primera vista no vi a Hanna, después pasé mi vista a la cama y apenas logré ver una silueta recostada en esta desvié mi vista antes de cerrar los ojos.
Cuando Hanna salió de ducharse yo tenía tapados los ojos con mis manos, ella tuvo que ayudarme a llegar al baño con indicaciones y uno que otro empujón.
Prácticamente su silueta era todo lo que había visto... pero fue razón suficiente para ponerme nervioso.
Con las manos me fui guiando de la pared para acercarme a la cama, y justo cuando creí que iba a llegar choqué con la mesa de noche.
— ¡Mierda! — dije entre dientes.
— ¿Quieres que te ayude?
— ¿Y cómo piensas hacerlo si tampoco puedes ver?
— Podría hacerlo si tú quieres... — sentí como me comenzaba a poner rojo de la cara ¡Carajo! — Pero sé que la respuesta será no y es la única razón la cual lo sugerí.
Respiré profundo, porque para ser sincero, su primer comentario me excitó un poco.
— En eso tienes razón. — una vez que llegué a la cama se senté antes de acostarme. Ambos estábamos de espaldas, así que no había problema con que tuviera los ojos abiertos. — Creí que ya estarías dormida.
— La poca luz que entra de la ventana no me deja...
— Cierto, tú duermes en completa oscuridad. Fue mala idea escoger ese lado.
— No había opción, de haberme puesto de tu lado: uno, me habrías visto en cuanto abrieras la puerta, y dos, sin ver sería muy difícil rodear la cama solo para llegar aquí.
— Cierto... — se hizo el silencio por unos segundos. Cerré los ojos listo para dormir, inconsciente estuve listo para girarme a la izquierda, pues siempre he dormido en esa dirección, pero a los pocos segundos de pensarlo me detuve. — Tenemos otro problema...
— Ya lo recordé, tu duermes volteando al lado izquierdo.
— Sí...
— Vaya suerte...
Nuevamente el silencio se hizo presente.
— Bueno estamos cansados, puede que logremos dormir.
— Cierto. — confirmé.
30 minutos después.
— ¿Hanna? — dije en un susurro.
— No, no me he podido dormir.
— Mierda...
— Aarón... — su voz era a penas un susurro. — ¿Y qué te parece si nos giramos? — de inmediato toda mi piel se erizó.
— Ah...
— Lo que dije es verdad, no me incomoda está situación, creo que nos tenemos la confianza suficiente para manejar la situación... ¿Tú no?
¡Mierda! Claro que le tenía confianza, claro que me tenía confianza, a quien no le tenía confianza era a la conexión que hacía mi mente y mis palabras cuando me ponía nervioso.
— Ah... — pero tenía que hacerlo... Hanna me tenía confianza, tengo que demostrar que eso es recíproco. — Está bien.
HANNA
Escuchar su respuesta fue un gran alivio, en primera porque realmente ya no aguataba la luz que entraba por la ventana, y en segunda porque pensé que quizá le estaba pidiendo demasiado Aarón... por un momento creí que la razón de su incomodidad tenía que ver con sus sentimos hacia mí... pero su respuesta me confirmaba que no. No mentiré, me desilusionó un poco... porque yo lo quiero, pero es lo mejor, entre los dos no puede y no va a existir nada.
— Okay... ¿A la cuenta de tres? — escuché un suspiró de parte.
— Sí, tú cuenta.
AARÓN
— Uno...
¡Mierda que acabo de hacer!
— ...dos...
¡POR FAVOR MENTE, NO ME HAGAS DECIR ALGUNA TONTERIA!
— ...tres... —Cerré los ojos y comencé a girarme.
HANNA
— ...tres... — no quería darle más vueltas al asunto y fue por lo que rápidamente cerré mis ojos y me giré.
Por otra parte, cuando yo ya estaba en mi posición, se seguían escuchando movimientos en la habitación, además de un constante cambio de peso en la cama. Al parecer Aarón se estaba tomando su tiempo, era lógico considerando su lesión, luego de unos segundos se detuvo.
— Listo... — soltó un suspiro, con es pequeña acción supe que no estábamos lejos pues pude sentir su aliento.
El silencio se apoderó de nuevo de la habitación, eso no fue bueno, porque lo único que ocasionó es que la imagen de Aarón apareciera en mi mente, sus ojos estaban abierto mientras me observaba con ternura.... ¿Me estará observando? Esta idea cruzó una y otra vez por mi mente, hasta que la curiosidad me ganó, quería saber, y fue por eso que abrí los ojos.
Claro que esa imagen en mi cabeza no tenía nada que ver con la realidad, Aarón no era así, él tenía los ojos cerrados, tan cerrados que parecía tener el ceño fruncido. Eso en lugar de decepcionarme hizo que mi corazón diera un brinco y que una sonrisa se asomara en mis labios porque así era Aarón... noble, honesto y protector...
Había una palabra que lo describía perfecto, quería que la supiera y por eso la dije; ojalá no la hubiera hecho.
— ¿Alguna vez te han dicho que eres un caballero? — de inmediato su ceño fruncido desapareció, ahora estaba sorprendido.
—Gracias... ¿Pero por qué ese comentario tan repentino? — ahora parecía divertido.
— Porque no has abierto los ojos. — mi voz sonó con una ligera risa, porque supe que con ese comentario él se daría cuenta que yo había roto nuestro acuerdo fantasma.
Creí que haría una broma al respecto o en el peor de los casos se molestaría. Pero nada de eso, ocurrió algo peor y que nunca pensé, se veía asustado. Lo supe porque su rostro permaneció neutro mientras su cara se volvía cada vez más pálida.
— ¿Có...Cómo sabes eso, Hanna?
AARÓN
Por primera vez en mi vida quería que esto se tratara de una más de sus bromas.
— ¿Tú cómo crees que lo sé?
— Mierda... tienes abierto los ojos ¿verdad?
— Sí... — su voz apenas fue un susurro, se notaba su arrepentimiento, eso solo me confirmó que no se trataba de una broma.
— Hanna... — de inmediato un escalofrió recorrió mi cuerpo, las palmas de mis manos me comenzaron a sudar mientras mis labios se hacían secos.
La chica que amo me estaba viendo desnudo ¿QUIÉN NO SE PONDRIA NERVIOSO CON ESO?
— Lo siento Aarón... de haber sabido que te pondrías así no lo habría hecho. No quería incomodarte, solo... quería verte. — mi corazón comenzó a latir fuerte.
— ¿Por qué querías hacer eso?
HANNA
"Porque me gustas"
— Sentí curiosidad de si tú tenías abierto los ojos....
— Bueno, ya pudiste ver que no ¿Los podrías cerrar ahora, por favor? — no quería seguir incomodándolo, así que lo hice.
— Sí... — comencé a pensar que las posibles razones por la cual esto le incomodaba tanto, y solo se me ocurrió una. Supuse que el saberla lo calmaría un poco y es por lo que la dije. — Si de algo sirve... no vi hacia abajo, mi vista estuvo en tu rostro todo el tiempo...
— Hanna ya no hubieras dicho nada...— no me importó y abrí los ojos, quería ver sus expresiones, quería saber que le pasaba.
Ahora sus manos cubrían su rostro. Estaba frustrado.
— Perdón... solo quiero que dejes de estar incómodo...
— Eso no tiene que ver con lo que hagas o no Hanna, eso es culpa mía. — eso me confundió.
— ¿Qué quieres decir con eso? — soltó un suspiro con las manos todavía en su cara.
— Es solo que temo decir o hacer algo estúpido que haga que te termines alejando de mí.
— ¿Y por qué harías algo estúpido? — creo que ya tenía una idea del por qué... pero necesitaba escucharlo.
— Me pones nervioso... y no solo lo digo por la situación... en general cuando estás muy cerca me pongo así...
Y con eso lo supe, yo le gustaba Aarón. Por eso se comportaba de esa manera, porque él creía que al no ser correspondido cualquier cosa que hiciera podría hacer que me alejara de él... Pero el gran error que él tenía con todo esto era pensar que no era correspondido.
— No importa lo que digas o hagas Aarón, jamás me alejaré.
— Eso es porque no lo sabes... — las cosas no parecían mejorar, todavía se veía angustiado y todo porque él creía que no lo estaba entendiendo, pero claro que lo hacía.
Tenía que demostrarle que era correspondido. Por primera vez no me importaba lo que pasara después, no me importaba mi papá y ni mi madre en es momento... solo quería ver a Aarón bien, él no merecía estar así por mi culpa, tenía que saberlo... y fue por eso que tomé una de sus manos.
— Claro que lo sé... — Atraje su mano hacía mí.
— ¿Qué estás haciendo, Hanna? — se escuchaba nerviosismo en su voz, pero aún así no se opuso.
No le respondí, porque sabía que lo entendería.
Atraje su mano hasta que las yemas de sus dedos tocaran la piel de mis caderas.
— Hanna...
—Eres libre de retirar tu mano... pero como dije, a mí no me incomoda tenerte cerca estando desnuda.
Esperé unos segundos... no hizo nada. Comencé a hacer un recorrido con su mano. Sus dedos acariciaron la piel de mi cadera y cintura, todo fue lento, quería disfrutar de su tacto porque sentía que en cualquier momento se alejaría. Pero no fue así, seguí subiendo hasta llegar a mis senos, ahí no me detuve. Tomé su palma y la coloqué alrededor de mi seno izquierdo, de forma natural su pulgar tocó mi pezón, creí que en ese momento se alejaría pero en su lugar, sin que yo se lo pidiera, hizo movimientos circulares con su pulgar, acariciando el contorno de mi pezón, provocando que un suspiro saliera de mi boca. A pesar de que su tacto me gustaba lo tuve.
Sus ojos seguían cerrados... quería que me viera... quería que viera que lo deseaba más que nada.
— Si quieres que sigamos tienes que abrir los ojos, Aarón.
AARÓN
Claro que quería seguir, pero tenía miedo, miedo de que si abría los ojos todo fuera un sueño, porque no podía creer que esto realmente estuviera pasando.
Pero también quería confirmar que todo era real... y fue por eso que abrí los ojos.
Lo primero que vi fue el rostro de Hanna, estaba sonrojada, sus ojos brillaban más que nunca... se veía más hermosa que nunca.
— ¿Qué quieres hacer? — sabía exactamente la respuesta, hace años la sabía.
Alejé mi mano de su seno para poder acariciar su mejilla, al mismo tiempo me acerqué quería estar cerca de ella. Nuestras narices se rozaban pero en ningún momento nos dejamos de ver a los ojos.
— Hace años que he querido hacer algo...
— Pues hazlo. — esa mirada de Hanna nunca la visto antes, era de deseo.
Ella quería esto tanto como yo, y fue por eso que de una maldita vez, luego de tantos años, deshice la distancia que había entre nuestros labios para besarla.
No, no fue como cuando tenemos 14, un beso lleno de inocencia. Estaba vez no había nada más que deseo.
Y a pesar de eso se sintió como la primera vez; cosquillas...
HANNA
... en todo el cuerpo...
AARÓN
Hanna llevo sus manos a mi torso para acercarme más. Yo no me resistí y me puse encima de ella.
Sus manos pasaron a mi espalda para acariciarla y hacer un recorrido hasta mi cabello donde con suaves movimientos jugaba con este.
Sus labios están tan suaves, podría acostumbrarme a ellos para todo mi vida. Me fue difícil pero quería saborear más de ella, así me alejé.
Mis besos bajaron por su cuello, al mismo tiempo comencé a jugar con mi lengua provocando pequeños quejidos de su parte los cuales me exitaban cada vez más.
Seguí bajando por pecho hasta llegar a sus senos y ahí me detuve. Di un corto beso a cada uno de sus pezones, antes de rozar con mi nariz el izquierdo haciendo que hiciera pequeño suspiro por mi tacto. En ese momento lo besé con mi lengua. Por mientras, con ambas manos me abrí paso entre sus piernas para poder acariciar sus muslos, subí lento hasta tocar la entrada de su parte íntima. Hanna en respuesta levantó las caderas.
— Aarón... — suplicó.
— Me podría acostumbrar a ese sonido...
— No es momento de bromas... — jalé un poco su pezón con mis dientes y al mismo tiempo con mi pulgar comencé hacer movimientos circulares en su clítoris, provocándole un gemido.
HANNA
Yo no estaba haciendo mucho, solo acariciaba el cabello de Aarón mientras me hacía complemente suya.
Jugaba conmigo como quería y eso era lo que más me excitaba. Verlo y sentirlo así, posesivo y deseoso de mí.
Mientras jugaba con mi clítoris sus besos bajaron de mi senos hasta mi abdomen, ahí levantó un poco la cabeza para mirarme, su mirada estaba cargada de deseo, pudo haber hecho que me corriera en ese momento pero no. Me contuve porque lo quería a él, quería correrme con él.
— Te quiero adentro. — Aarón sonrió antes de regresar para darme un beso en los labios.
Acto seguido se alejó de mí, miró atrás de la cabecera y para cuando regresó tenía un condón en la mano.
— Yo...
— Después... — y lo volví a besar, de donde salió eso era lo menos, no me importa si eso haría que tuviera dentro de mí de una vez.
Cuando logró ponérselo, se sentó en la cama con las piernas estiradas, yo sabía lo que quería hacer así que no perdí el tiempo y me senté sobre sus piernas.
Con una mano acerqué su rostro al mío para poder besarlo. Y con la otra tomé su pene y lo comencé a introducir en mí lentamente. Tanto Aarón como yo gemimos sobre nuestros labios.
Y una vez que estuvo adentro puse mis manos sobre sus hombros y Aarón las tuyas sobre mi cadera para que pudiera moverme arriba y abajo.
Ya no nos besamos, nuestras narices se rozaban y solo nos miramos a los ojos. Poco a poco Aarón me guió para que mis movimientos se fueran haciendo más rápidos, a medida que estos aumentaban también lo habían nuestros gemidos.
Aarón me besó y al mismo tiempo pasó amabas manos a mi trasero, lo apretó, el gesto me excitó aún más pero sirvió pero también sirvió aumentar nuestro ritmo hasta que finalmente nos corrimos.
Ambos nos quedamos quietos, con la respiración agitada, yo tenía la cara escondida en si cuello y él en mi cabello mientras acariciaba mi espalda y yo la suya. Solo estábamos disfrutando el momento, el momento que durante años ambos estuvimos anhelando.
Los minutos pasaron hasta que nos decidimos tumbarnos en la cama pero ahora no estábamos en extremos opuestos, sino abrazados para poder disfrutar del tacto y el calor del otro.
Antes de cerrar los ojos para dormir, Aarón me dio un último beso, este fue lento, se notaba que quería disfrutar el momento, al igual que yo.
Para cuando cerramos los ojos todo siguió en silencio, ninguno de los dos había dicho ni una sola palabra... por qué ahora ese era nuestro nuevo miedo.
¿Qué pasará ahora cuando el sueño que habíamos tendido durante años se vuelve realidad?
__________________________
Hola!!!!
Por las personitas que lo pidieron!!
¿¡QUÉ LES PARECIÓ!!!!!!????
YO ESTOY MUY EMOCIONADA!!! AL FIN AMBOS HICIERON ALGO CON RESPECTO A SUS SENTIMIENTOS!!! 🥺🥺
¿¡SE DAN CUENTA DE LA VOLUNTAD QUE TIENEN ESOS DOS!? Literalmente los tuve que poner en la misma cama ¡Desnudos! Para que hicieran algo!!! Por lo menos ya sacaron toda la tensión sexual que tenían. 😂😂
Pero ahora se viene lo bueno... ¿qué creen que pase después de esto? ¿Estarán juntos!? ¡Hanna le dirá la verdad a Aarón sobre el trato de sus familias?! Bueno... tendremos que ver que pasa. 😁😁
No olviden comentar!!! Realmente quiero leerlos!!! Los amo!!! 🥰🥰
— books-silent-reader.
Instagram: bsr.pau
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro