Al salir de la mansión, Zhan solo le pudo avisar a Lay para que contactara con sus padres y le expliqué a dónde había ido. Cuando subió a la camioneta de su abuelo, no reconocía al custodio.

- ¿Eres nuevo? - preguntó con cierto temor en su voz

- Así es joven.

- Ok. - trató de relajarse. Pero aún sentía algo en el pecho. Hasta no llegar a la empresa Xiao no estaría tranquilo.

*

*

- Joven Wang - Habló la nana de JiYang pasándole un sobre negro - Esto llegó para usted.

- Gracias. - tomó el sobre mirándolo detenidamente - No me diga joven Wang. Solo Yibo, nana.

- Está bien, Yibo. Te dejo, iré a preparar el almuerzo. - asintió a la mujer y siguió avanzando hacia la sala. Estaba esperando al señor Song para ir a su empresa ya que lo requerían urgentemente en ella.

Giró y giró el sobre en sus manos, lo puso a contra luz para ver si había algo ahí. De repente una punzada en el pecho lo hizo agitarse. Se sentía vacío. Se desabotono los primeros botones de su camisa y se deshizo del nudo de su corbata.

Volvió a mirar el sobre y sin pensarlo más veces lo abrió, en ella había una nota, al leerla el color abandono su rostro, sus manos comenzaron a temblar y lágrimas se asomaban y caían por su mejilla.

- Yibo. ¿Qué pasa? - El señor Song llegaba a su encuentro. Lo había visto desde que bajaba las escaleras. El temblor en el castaño era visible.

- Tengo que irme. ¡Tengo que irme!

- ¡Qué está pasando?

- Lea. Por favor mandé refuerzos. Yo iré primero. - sin más Yibo salió corriendo y tomó el auto de su jefe. Colocó la dirección que decía la carta y activó su GPS viendo que a ubicación y el otro punto rojo estaban en el mismo sitio. Partiendo a toda la velocidad posible que le permitía el auto.

El señor Song tomó la carta en sus manos y leyó:

Hola Wang Yibo. ¿Sabes? Cuando uno se mete en dónde no debe y con menos con quién debe, se pagan las consecuencias. Si deseas ver vivo a tu amado niño embarazado ven a la oficina de Yizhong. Tienes hasta las 3:00 PM para llegar. Ven solo.

- ¡Dios! Este chico. - volvió a la cocina - Nana. ¿Dónde está Darren?

- En la cochera señor.

- Llámelo, que saque la camioneta blindada.

- Señor, pe-pero...

- Tranquila, llámalo. Lo espero en la entrada.

Mientras se dirigía a la puerta principal tomó su celular y marcó a su amigo.

- ¿Dónde estás?

- Estamos en Pekín, terminando unos contratos.

- Tienen que regresarse ya.

- ¿Qué pasó?

- Xiao Zhan ha sido secuestrado y Wang va camino hacia él.

El señor Xiao se tensó en su lugar y tomó de la mano a su esposa, mirándose ambos un tanto exaltados.

- HaoXuan. Regresemos a la casa. ¡Ya!

- no, no, no...- repetía la señora Xiao.

- Cálmate querida. Nuestro hijo estará bien.

El viaje solo sería un par de horas, pero HaoXuan lo haría en menos por la velocidad en la que iba. Escuchar lo que le contaba el señor Song por el celular solo le hacía hervir la sangre.

*

*

Xiao Tian y Xiao Li llegaron a la mansión, apresuraron sus pasos hacia el interior y se encontraron con su amigo Song y su hijo.

- Zhan los estuvo llamando y no entraba la señal. Me dejó encargado de avisarles que se iba hacia la empresa. - comentaba Lay a la pareja.

Mientras contaban lo sucedido se había llamado a la policía. Tian fue por todas las pruebas necesarias para dárselo a las autoridades. También llamaron a JiaCheng, si él sabía algo, tenía que hablar en ese momento. Al llegar lo acorralaron, pero este en definitiva no sabía nada.

- Iré tras Yibo. Ya no aguanto más. - HaoXuan tomó su arma y se dirigió a la salida.

- ¡Amor! - el rubio lo alcanzó - Iré contigo

- ¡No! - gritó el pelinegro

- ¡JiYang! - su padre lo llamó - No irás. Quédate aquí.

- A-Hao, vamos contigo - Xiao Tian le dejó un beso en la frente a su esposa.

- JiYang cuida de tu tía hasta que lleguemos.

- Papá, no por favor...

- Tranquilo, vamos a regresar todos. Los necesitamos a ustedes aquí en la mansión.

- Vayan con cuidado por favor. - Habló Xiao Li en medio de su nerviosismo y llanto.

El trío de hombres asintió y se dirigieron a la camioneta blindada junto con Darren.

Activaron el GPS y salieron a toda velocidad a donde indicaba ambas la señales.

En el camino Xiao Tian recibió una llamada - Wang Yibo aún no llega. Xiao Zhan está encerrado en el cuarto de la planta superior.

- Avísame en cuanto llegue.

- Ok.

- ¿Qué te dijeron?

- Wang aún no llega y mi hijo está encerrado en un cuarto en la segunda planta. A ese edificio nunca pude ir. Mi padre nunca me dio el permiso. Ahora sé que era ahí donde hacía sus porquerías. Mi hijo. ¡Dios!

- Tranquilo Tian. A-Zhan es fuerte.

- Lo sé.

- HaoXuan, Yibo también es fuerte.

- Lo sé señor. Él estará bien.

*

*

- Déjeme ir por favor.

- Estás loco niño. La única manera de salir de aquí es... Muerto o sin tu bastardo.

- Maldito! -

Zhan estaba en un cuarto de descanso, de paredes celeste y ventanales grandes. Estaba amarrado en la una silla de metal. Hacía de todos los movimientos posibles para poder aflojar la cuerda, pero no lo conseguía. Estaba perfectamente amarrado.

- Deja de hacer eso que lo único que consigues es hacerte daño - Zhan se tensó al escuchar esa voz - Mi querido nieto. - de entre las sombras se dejó ver. Xiao Wen se acercaba a su nieto con una gran sonrisa... Siniestra. - Oh mi querido ZhanZhan si hubieras obedecido no estarías aquí.

- ¿Abuelo, por qué?

- ¿Por qué? - se rió - ¿Cuándo mi descendencia a estado manchada?. Tú el nieto del más grande, rico y famoso Xiao Wen, enredándose con un don nadie. Me das asco.

- ...

- Señor, ya llegó. - Bowen entró al cuarto.

- No dirás nada. ¡Bien! - se acercó a la puerta de salida - Vamos a ver qué hará tu queridísimo guardaespaldas.

- NO LE HAGAS NADA! - Gritó el menor al escuchar a quien se refería

- Muy tarde. Te advertí y mírate embarazado de esa poca cosa. - Caminó unos cuantos pasos más y volvió a voltear - No te encariñes con el pedazo de carne que crece en ti. En un momento lo perderás. - Miró al hombre que tenía al lado. - Bowen estate atento ahora que lo bajes.

- Sí señor.

- ABUELO. ABUELO - gritaba Xiao Zhan desgarradoramente.

*

*

Al llegar al lugar indicado, Wang Yibo descendió rápido del auto, caminó hacia el edificio. Respiro y soltó el aire antes de ingresar.

Al momento de ingresar se dio cuenta que ya lo esperaban. Tres hombres vestidos de negros y lentes oscuros le dieron la bienvenida.

- Señor Wang Yibo. Deje todo lo que trae en esta bandeja.

- No lo haré.

- Bien. - los tres hombres lo rodearon. Dos de ellos lo tomaron por los brazos mientras el tercero lo cateaba. De entre sus prendas sacaron, un cuchillo, dos pistolas y un juego de llaves. - Ahora sí. Pase.

Los tres sujetos lo soltaron y caminaron uno delante de él y dos atrás para guiarlo y asegurarse que no haría algún movimiento en falso. Subieron por el ascensor. Yibo solo veía marcarse los pisos. 3, 5, 7, 9, 11.

Piso 11, era el lugar el cual había indicado el viejo Xiao para el final del castaño.

- Avanza. - lo empujó uno de los hombres que lo acompañaba.

Caminaron por un largo pasillo hasta que se detuvieron en una puerta ancha y alta. Uno de los hombres giró la perilla y le indico que pase. Al entrar se dio cuenta que había muebles, un escritorio, una puerta y al lado otra silla más, también habían dos hombres más y sobre todo uno sentado frente a él que fumaba tranquilamente mientras reía.

- Bienvenido joven Wang.

-...

- Wow! No sabe responder. No sé puede esperar nada de un pordiosero.

- JAJAJAJAJAJAJA.... - Wang Yibo soltó una carcajada.

- Para ti es gracioso ¿verdad? Vamos a ver si a partir de ahora seguirás riendo. - tomó su celular y marcó - Bowen ingresa.

La puerta de al lado sé abrió. Wang Yibo se tensó en su lugar. Quiso correr, pero dos hombres se lo impidieron. Ante él estaba su hermoso pelinegro. Amarrado, con ojos cansado, rojos y llorosos.

Zhan vio a su amado guardaespaldas agarrado entre dos hombres mientras que tres más le apuntaban, fue de terror.

- Abuelo suéltalo - pedía entre sollozos. - Abuelo por favor... XIAO WEN ¡BASTA!

- Siéntalo. - le ordenó a Bowen, quien acató de inmediato y agarró fuerte de los hombros al menor.

- Como te dije en la carta, Wang... Te metiste en donde y con quien no debías. ¿Sabes que mi nieto espera hijo tuyo? - Zhan solo lloraba y negaba con la cabeza mirando a Yibo quien también tenía la mirada sostenida en él. - Verás como mi nieto pierde a tu hijo frente a ti y - Señaló al menor - Tú, Xiao Zhan verás morir al padre de ese bastardo.

- Maldito viejo - gruñó el castaño - Me la vas a pagar - con esto último logró zafarse del agarré de ambos hombres. Se dio inicio a una pelea de cuerpo a cuerpo. Lamentablemente por ser uno, Wang Yibo quedó en el piso, golpeado en el rostro, pecho y piernas. Entre otros dos hombres lo volvieron a parar. Zhan vio con terror como el rostro de Yibo sangraba y tenía sus ropas rasgadas.

- JAJAJAJAJA... ves lo que pasa cuando se atreven a faltarme el respeto.

- Te odio. - Xiao Wen miró a su nieto - Te odio - volvió a repetir.

Mientras el viejo Xiao intercambiaban miradas con su nieto. Había otros dos que hicieron lo mismo. De repente se escuchó un disparo haciendo caer a uno de los hombres que tenía agarrado a Yibo.

- ¡Ahora! - Bowen aventó una pistola al castaño. Tomó a Xiao Zhan del brazo y lo levantó. Yibo disparaba al azar, a dónde cayera para distraer al viejo y sus hombres.

- ¿No pudiste comenzar antes?

- Lo siento amigo. Pero teníamos que actuar bien.

Pararon en el ascensor - ¿Me pueden explicar qué pasó? - Xiao Zhan estaba tratando de entender lo que había pasado.

- Vamos. Te lo explicaremos cuando estemos a salvó.

- Me lo explican ahora. Sobre todo, tú... - picaba fuertemente el pecho del castaño - ¡Wang Yibo!

Wang sonrió ante la actitud feroz de su amor. - Ven aquí - Lo abrazó fuerte. Ante este acto Xiao Zhan comenzó a llorar mientras se aferraba a ese abrazo. - Tranquilo amor, nadie le va hacer daño a nuestro bebé.

El momento se interrumpió cuando sintieron el celular de Bowen sonar. Este sin dudar contestó.

- Sí, ya los tengo.... Entendido señor. - cortó y guardó el celular, para luego informarle a Yibo que los refuerzos estaban llegando.

- ¿Quiénes?

- Su padre, el señor Song, HaoXuan, Darren y las autoridades.

- Mi pa-papá. - suspiró - Todos me la pagarán cuando lleguemos a casa por ocultarme las cosas.

- No podías saberlo cariño. Lo siento. De verdad, lo siento - volvió abrazarlo - Lo que me arrepiento más es todo esto, es el verte llorar.

- Pero...

- ¡Shhhh! - colocó un dedo en los labios del pelinegro. - Sé que mi conejito es fuerte. Pero ahora está embarazado y tiene que proteger a este - Tocó su vientre, este acto hizo que Zhan temblara - Pequeño que crece en tu interior.

- Eres un idiota gorilita.

- Ya llegamos. - Avisó Bowen - Tienen que estar bien atentos. Abran bien los ojos, tenemos que ocultarnos hasta que lleguen los demás. - Salieron del ascensor.

Los tres caminaron en silencio hasta llegar a una de las oficinas en el piso número 1 del edificio una vez ahí Bowen pasó su celular al castaño ahora que configurar el GPS y mandara la ubicación exacta de los tres.

- ¡Listo! - volvió a entregarle el celular a Bowen y miró a Xiao Zhan. - Qué bueno que nunca te lo quitaste y me hiciste caso.

- ¿Ah?

Yibo llevó su mano hacia el pecho del menor, abrió un poco la camisa de este y de ella sacó la cadena en forma de rompecabezas, ante esto sonrió.

- Gracias a esta cadena nos encontrarán.

- ¡Wang Yibo! - Zhan odiaba que le ocultaran las cosas - Me vas a explicar muchas cosas.

- Igual tú cariño - sonrió - En fin, la hipotenusa - se cruzó de brazos y desvió la mirada sacando un puchero.

- ¿Ahora me imitas?

- Aprendí del mejor en dramas. - Alzó los brazos.

- Basta muchachos. No podemos hacer mucho ruido.

Ambos asintieron y esperaron.

A fuera se escuchaba movimiento, incluso llegaron a ingresar a una de las oficinas cerca a la puerta principal, pero se supieron escabullir bien. Cuando el peligro de ser encontrados cesó, volvió a sonar el celular de Bowen.

- Hay hombres afuera. - silenciosamente Bowen se acercó y abrió la puerta. - Hay cerca de 7 hombres en la primera planta. Listo, recibido señor. - Vio a la pareja y añadió - Al primer disparo se cubren la nariz y corren.

- Entendido. - contestaron al mismo tiempo.

Uno...

Dos...

Tres....

¡PUM!

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Bowen es bueno 🥹

Maldito viejo Xiao 🤨

La cadena resultó ser un rastreador 😅

Que no pase nada malo 🥲

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Holaaa Holaaaaa 👋🏻👋🏻

Aquí un capítulo más 🤭
Espero traerles más capítulos la siguiente semana... No me maten 🙂

Gracias por seguir mis historias 🥰

Las quierooo 🤗

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Spoiler

- Escúchame bien. No nos puedes dejar. Entiendes!

- Tranquilo hijo.

- NOOOO!!! Despierta... No me hagas esto.

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