2 de septiembre de 1995

Severus Snape

Severus estaba completamente seguro de que cada año escolar era peor que el anterior, ahora que había llegado Harry Potter. El engendro de Potter parecía haber traído una suerte terrible, eventos y decisiones administrativas junto con él desde su primer año de escuela, y ahora aquí estaba Severus, mirando un horario con Dolores Umbridge enseñando Defensa Contra las Artes Oscuras y otro año de un curso compartido. Siendo 1998 los TIMO's de la clase de pociones de Slytherin y Gryffindor.

Esto iba a ser un desastre y Severus ya estaba calculando los horarios de detención. Si alguna vez hubiera tenido la oportunidad de elegir, no habría sido maestro. Igualmente, si su trabajo no hubiera sido el resultado de las maniobras de Albus, ninguna escuela hubiera siquiera considerado contratar a Severus. No era una persona particularmente amigable con los niños, y esa era una característica muy obvia de su disposición. Pero, por desgracia, aquí estaba, esperando que llegara su clase de quinto año.

Sus Slytherins más estudiosos fueron, como era de esperar, los primeros en llegar, ocupando el lado izquierdo de su salón de clases como siempre lo habían hecho y asintiendo al hombre adusto mientras tomaban sus asientos. Menos de dos minutos después, la señorita Granger arrastró al niño Weasley más joven, con Potter detrás. Era un comportamiento predecible para el trío, a menudo se podía ver a Granger obligando a los otros dos a llegar a clases a tiempo o temprano, pero hoy, Severus los observaba en silencio.

Más específicamente, observó a Potter. Severus no había llegado tan lejos en su vida o carrera, ninguna de ellas, por no ser observador, y había estado observando a Potter desde que llegó a Grimmauld Place. El chico estaba distraído, apático. Incluso entonces, esperando que Pociones comenzara con sus dos amigos hablando con él, tenía una mirada distante en sus ojos y obviamente no estaba escuchando. No sería algo que preocupara a Severus fuera del salón de clases, pero mientras se preparaba, la distracción era algo peligroso.

Ser fácil con él no era una opción, en realidad. Severus no hacía eso en su clase, y ciertamente no para gente como Potter. Detendría al chico, lo castigaría y lo enviaría lejos o lo obligaría a tomar notas antes de que estropeara demasiado las cosas.

El resto de la clase se filtró lentamente, y Severus se puso de pie, agitando su túnica detrás de él y burlándose hacia el oscuro salón de clases.

— Como todos saben, este es su año de TIMO's. Como tal, su carga de trabajo y nivel de desafío aumentarán drásticamente. Espero que nadie reciba menos de un E en su TIMO, y solo se aceptarán puntajes sobresalientes en pociones de nivel EXTASIS. Si deseas continuar más allá de este punto — Severus hizo contacto visual con varios de sus Slytherins más talentosos y se volvió para mirar al puñado de Gryiffindors que había escuchado que planeaban continuar — debes estar preparado para trabajar más duro este año que cualquier año anterior. No tolero a los holgazanes, a los fracasados ​​ni a los bromistas.

Neville Longbottom tragó saliva audiblemente unas pocas filas atrás, y Severus se giró para burlarse con saña del chico. Era un peligro en el salón de clases de Severus y estaría feliz de deshacerse de él lo antes posible.

Entonces, la túnica crujió dramáticamente de nuevo mientras se retorcía, Severus se giró y comenzó a escribir en la pizarra — Hoy prepararás la "poción de la paz", una opción ansiolítica y calmante. Sea cauteloso, porque si es demasiado torpe, el bebedor caerá en un sueño pesado, a veces irreversible. Requiere el cumplimiento cuidadoso de las instrucciones, y no habrá lugar para errores en sus exámenes, ni en el salón de clases. Esto estará en su TIMO, y espero que tomes notas cuidadosas. Tienes una hora. Comiencen.

Mientras los estudiantes luchaban por los ingredientes, Severus no podía decidir si estaba agradecido de que Potter y Longbottom no se hubieran emparejado. Por un lado, ellos dos junto con Potter en cualquier estado en el que se hubiera metido sería un desastre absoluto; por otro lado, Severus también podría haber enviado lejos a Longbottom cuando hizo que Potter se detuviera.

Sin embargo, tal como estaban las cosas, Granger estaba con Longbottom, y Potter estaba esperando a que Weasley sacara los ingredientes del almacén mientras miraba fijamente el caldero.

Severus se giró para observar el lado Slytherin de la habitación, ya que los Gryffindors aún no habían comenzado y por lo tanto no necesitaban estar en su línea de visión, para que no causarán una explosión. Sus Slytherins eran mucho menos riesgosos, y solo podía darse el lujo de verlos por curiosidad. En términos generales, al menos, excluyó solo un puñado de sus serpientes de la categoría de "seguro para mirar hacia otro lado".

Varios de su casa habían venido a la escuela con un aspecto particularmente desgastado ese año, en su mayoría con padres mortífagos. Theodore Nott siempre había tenido una vida hogareña pobre, pero su padre parecía haber empujado su entrenamiento aún más este año con el regreso del Señor Oscuro.

Su ahijado era otro asunto completamente diferente. Severus observó por el rabillo del ojo cómo Draco comenzaba a colocar y preparar sus ingredientes cuidadosamente y sin un cabello fuera de lugar.

Se preocupaba por Draco, sinceramente, el chico podía ser una amenaza y muy difícil, pero tenía un deber con Draco. Hubo murmullos de que el Señor Oscuro se mudaba a la mansión Malfoy, y la idea preocupó a Severus. Aunque ciertamente no podía plantear ninguna preocupación con Draco, y Lucius era leal cuando se acercaron al Señor Oscuro, era peligroso para Draco estar cerca de alguien tan... inestable. Tan amenazador, y tan magnético. Loco y deforme o no, como Severus sabía que el Señor Oscuro era ahora, sin duda era capaz de atraer a Draco. Este año sería Severus el tratar de disuadir a Draco de ver esto como un juego, y que lo vea como un peligro.

Giró hacia el otro lado de la habitación cuando Weasley pasó a su lado; el reloj estaba encendido para que Potter indudablemente estropeara algo, y cuando eso sucediera, Severus simplemente lo sacaría de clase y lo castigaría. Fácil.

Habría sido más difícil si no fuera conocido dentro de los Gryffindors por apuntar específicamente a Potter. Longbottom estaba metiéndose más en líos que Potter, aunque Granger lo estaba controlando un poco; ciertamente castigaría a Longbottom, pero no tenía ningún interés en pasar una detención con el chico. No es que él particularmente quisiera pasar uno con Potter, pero algo estaba pasando con el chico, y Severus no estaba dispuesto a dejarlo pasar si se convertía en un problema para él más tarde. Solo necesitaba averiguarlo primero. Severus solo tardó unos veinte minutos en quitarle veinte puntos a Longbottom por sus habilidades mediocres en pociones, y apenas un minuto más para pasar a Potter.

— ¿Estás mal? — le espetó al chico en un tono que no dejaba dudas de que no le importaba si Potter estaba enfermo o no. Potter y Weasley se congelaron, y Potter sacó sus ingredientes apenas preparados del caldero — Detén eso de una vez. Sr. Potter, parece que no está en condiciones de preparar pociones. Veinte puntos de Gryffindor por no preparar adecuadamente sus ingredientes y detención por no llegar a clase listo para preparar adecuadamente. Preséntate en mi oficina mañana a las 5:30.

La boca de Weasley se abrió como si fuera a discutir, pero Granger le dio una patada en la parte posterior de la pierna y su mandíbula se cerró de golpe. Potter finalmente levantó la vista de su mesa de laboratorio con esos ojos alarmantemente cansados ​​y dijo — No puedo. Tengo detención con la profesora Umbridge mañana a las cinco — agregó apresuradamente — Señor.

Los Slytherins, y algunos Gryiffindors, alrededor de la habitación comenzaron a reírse por lo bajo — ¿Dos detenciones en un día, y en el primer día de clase? Por merlín, Sr. Potter, su incompetencia realmente no tiene límites. Bien entonces. Mi oficina mañana a las siete. No llegues tarde. No vas a continuar con tu poción hoy. En cambio, espero seis pulgadas extra en la tarea de esta noche. Puedes comenzar a leer tu libro de texto ahora.

Potter se encogió, pero sorprendentemente, asintió. Severus apretó la mandíbula y se giró para no revelar ningún signo de sorpresa. La poción de Weasley estaba mal hecha, al final de la clase, pero no era un peligro ambiental, y lo mismo podría decirse de Longbottom y Granger. Severus estaba seguro de que, si Granger hubiera trabajado por su cuenta, este tipo de poción cargada de instrucciones habría salido perfectamente, pero parecía que ella había pasado más tiempo tratando de prevenir cualquier crisis relacionada con Longbottom.

El resto de la clase pasó con murmullos silenciosos rápidamente apagados por la mirada de Severus. Weasley siguió murmurando para sí mismo y sus amigos, pero Potter parecía estar genuinamente concentrado en su libro de texto o completamente desconectado, y Granger solo murmuró en lo que parecía ser un tono de regaño; siempre mostró más respeto que sus rufianes amigos.

Uno por uno, los estudiantes comenzaron a traer pociones completas y a despejar sus espacios de trabajo, y cuando Severus los despidió, detuvo a Potter en la puerta.

— Señor ¡Potter! — Llamó, esperando hasta que el chico se giró para emitir su recordatorio — Mañana a las siete en punto en mi oficina. Harías bien en ser puntual.

Potter vaciló por un segundo, luego asintió y salió corriendo detrás de sus amigos antes de que Severus pudiera regañarlo por no mostrar respeto.

***

Cuando Potter llegó a su detención la noche siguiente, Severus estaba calificando trabajos de segundo año, y el chico llegó con más de media hora de retraso. Decir que Severus estaba molesto sería quedarse corto.

Cuando entró, se veía peor que en clase el día anterior.

— Lo siento, señor — dijo Potter, claramente con el objetivo de disculparse, pero su voz salió plana — Mi detención con Umbridge se retrasó.

— Profesora Umbridge, Potter — corrigió Severus bruscamente — Muy bien. Confirmaré con ella más tarde. Vas a reescribir tu tarea de verano para mi clase. Tu letra es absolutamente atroz y me niego a aceptarla en ese estado. Arréglalo — Potter no respondió, solo agarró su papel de la parte superior del escritorio donde Severus lo había dejado, y Severus se burló de él — Cinco puntos menos para Gryffindor. Responderás cuando te hablen y mostrarás respeto.

El papel revoloteó sobre el escritorio en la esquina donde Severus hizo que los estudiantes escribieran líneas. Potter no se giró hacia él cuando le dijo entre dientes un vagamente sarcástico — Sí, señor —

Severus dio un resoplido y volvió a su propia evaluación. Era mejor que Potter respondiera con su ira explosiva habitual o, con la ayuda de Merlín, que los estudiantes se quejaran de él en su presencia.

Observó al niño aquí detenido también; la tarea fue asignada a propósito, porque Potter se veía tan exhausto como antes, y Severus no podía esperar ninguna competencia de él en absoluto. Escribir líneas sería inofensivo y no pondría en riesgo ninguno de los materiales o equipos de laboratorio de Severus.

Pero las manos del niño temblaban mientras trabajaba de una manera que no era cuando entró por primera vez, y estaba extrañamente pálido. Cuando su pierna comenzó a rebotar, Severus se reclinó en su silla para observar más de cerca.

Un vendaje en la mano del niño parecía nuevo, ciertamente no había estado allí el día anterior. Su túnica estaba arrugada y el cabello no solo desordenado sino enredado, como si no lo hubiera peinado. La mano temblorosa de Potter seguramente haría que su ensayo reescrito fuera aún peor que el primero, pero obligarlo a hacerlo de nuevo solo podría empeorar su letra. Él estaba escribiendo muy lentamente, también.

Observó al chico clavarse las uñas en la rodilla con la mano libre y tomó una decisión; lo que sea que estuviera pasando con Potter en ese momento, era problema de Albus, no de Severus. Ya tenía suficiente en su plato con Draco y el regreso del Señor Oscuro. Él observaría al niño, lo mantendría alejado de tantas decisiones destructivas como pudiera, como de costumbre, y sería el que limpiaría los líos del mocoso, como siempre, pero no aceptaría esta carga. Potter era responsabilidad de quien fuera su tutor legal, y responsabilidad de Albus, y Minerva. Severus se mantendría fuera del horario de sueño de Potter, o lo que fuera que lo estaba cansando tanto.

Cuando Potter salió de la detención, habían pasado casi dos horas y media, y el ensayo era un poco más legible. Esa sería la razón por la que Potter estaba trabajando tan lentamente, entonces; estaba tratando de escribir lo mejor posible, especialmente con sus manos temblorosas. Era una pena que su escritura siguiera siendo terrible.

Severus vio el vendaje de nuevo cuando Potter se fue, sangre roja manchando la tela. ¿Qué tipo de herida sangró tanto y durante tanto tiempo? ¿No había recibido el cuidado adecuado para ello? Iba a llamar al chico, enviarlo a la enfermería, pero Potter ya se había ido y había cerrado la puerta detrás de él.

El ensayo de segundo año que estaba calificando era realmente terrible, y Severus lo hizo a un lado a cambio de notas sobre los movimientos del Señor Oscuro que sacó de su escritorio ahora que Potter se había ido. Tenía trabajo que hacer para Albus y un método para proteger a su ahijado.

Continuara ...

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