—Namjoon hyung...

Jungkook tenía su cabeza en el cristal del café donde se encontraba con Namjoon, esperando a Hoseok, movía la pajilla de su merengada en círculos descargando su frustración.

—Jungkook, ¿tanto por eso?

—¡Es que no sé que decirle!

—¿Lo amas?

—Claro.

—¿Quieres una vida junto a él?

—Por supuesto.

—¿Y entonces por qué coño no te vas y vives con él?

—Porque es algo complicado, duh.

—¿Qué tiene de complicado tomar tus pertenencias e irte con él?

—Es que... Tengo miedo de vivir con él.

—¿Por qué?

—¿Y si todo cambia?

—¿Eso te preocupa? No, Jungkook, casi nada cambiará, solo el hecho de que ahora se verán todo el día.

—¿No es eso sofocante?

—Si te gusta, no deberías sentir eso. Jin y yo tenemos 3 años viviendo juntos, y aún amo poder verle todas las mañanas y antes de irme a dormir.

—Es que solo tenemos once meses...

—Jin me arrastró, no, no me dejo opinar, ME ARRASTRÓ, a vivir con él a los cinco meses de relación.

—Jin hyung da miedo.

—A veces, pero así lo amo.

—Pero igual, antes ya tenían sus años de conocerse, Yoongi y yo apenas teníamos año y medio antes de pedirle que fuera mi novio.

—Si tanto te preocupan las cosas, dile que no.

—Pero es que quiero...

—No pareciera.

—El próximo mes es nuestro aniversario, no quiero que se moleste si le digo que no.

—Decide bien, pequeño. —Revolvió su cabello y este le sonrió. —Ahora come que no me hiciste comprarte tres brownies para nada, ¿ok?

—Sale y vale.