CAPÍTULO V : Noche De Sangre
Agnes después de una larga platica con Elea salió de la casa agradecida por la amable hospitalidad que le dio Elea, con una suave sonrisa y un enorme abrazo se despidió de Elea y entonces Jean interrumpió :
-¿Entonces te iras de la aldea Agnes? - preguntó con una gran voz -
Agnes miró fijamente a Jean y contestó:
-Sí, así es pero sólo será por un tiempo preciosa.
Elea con una mirada fija ordenó a Jean volver a su cuarto y exclamó :
-¿Qué te he dicho de no escuchar platicas de adultos? - exclamó con una gran cara molesta -
Jean abrazó fuertemente a su madre y pidió disculpas sin nada más que decir.
Pronto Elea con una voz demasiada rápida preguntó a Agnes :
-Agnes, antes de que te marches ¿Tracy se fue a jugar con Leo cierto?
Agnes de pensar en la mudanza se había olvidado de eso, así que contestó :
-Por supuesto, antes de venirme a tu casa Tracy fue a jugar con Leo - exclamó mientras tenía una media sonrisa -
Elea contestó :
-¡Muchas gracias! Tracy me pidió permiso desde hace varios días para ir a visitar a Leo, es extraño por que me lo pide desde que me contó que llevó a Leo a casa, el día que Leo estaba pedido.
Agnes con una mirada de duda y de incertidumbre respondió :
-Tracy es una niña muy lista, le doy gracias por haber traído a mi hermano a casa.
Elea llevó hasta la puerta a Agnes, después de un agradecimiento.
Agnes se despidió de Jean y cerró la puerta para irse a empacar sus pocas pertenencias, ya que pronto tenía que irse a la aldea del Roble.
Cuando Agnes llegó a su cabaña, cerró su puño y con grandes golpes hacia la puerta con una voz fuerte gritó :
-¡ABRE LEO! ¡SOY AGNES!
Enseguida unos pequeños pasos se acercaban hacia la puerta y la tranquilidad de Agnes era mucho mayor al saber que estaba bien su hermano.
De pronto Tracy abre la puerta y contesta :
-Leo está bien Agnes, lo he cuidado de Blackmoon - exclamó con una voz seria -
Agnes al escuchar aquella exclamacion de Tracy, le dijo :
-Gracias pequeña- contestó mientras la hizo a un lado y entró a su cabaña para mirar que Leo estaba bien y todo estaba en orden.
-¡Hermanita! YA LLEGASTE - exclamó Leo mientras iba corriendo hacia las piernas de su hermana mayor -
Agnes al tenerlo de frente lo abrazó fuertemente y le dijo :
-empaca tus maletas que nos vamos a mudar Leo.
La mirada de Leo cambió de gusto a disgusto y pronto Tracy interrumpió :
-Es lo mejor Agnes, que cuides de él, por que acá hay peligro mucho peligro diría yo.
Agnes puso una cara de asombro al escuchar las palabras tan frías que escuchaba salir de la boca de la hija de Elea, lo cual contestó :
-Sí, lo sé ¿Irás con tu mami?
Tracy movió su cabeza de arriba hacia abajo y se fue sin decir alguna palabra dejando a Agnes y Leo sobre la puerta. La cara de Agnes estaba desconcertada de tal expresión de la niña por lo que cerró la puerta y nuevamente habló con Leo acerca de su mudanza.
-Leo, debes de aportar en esto, se que eres muy pequeño pero es por nuestro bien ¿Quieres? - exclamó Agnes mientras miraba sus ojos -
Leo reaccionó con una cara sombría y de tristeza pero sabía que debía de apoyar a su hermana en la situación, debería de dejar a sus amigas Tracy y Jean para apoyar a su hermana.
***
-(rápidamente) ¿Empacaste todo Leo? - preguntó Agnes mientras sacaba de la cabaña todas las maletas fuera de la casa -
Leo contestó :
-Sí hermanita, sólo me falta empacar algunas cosas más y ya.
Agnes con una voz demasiada alta contestó:
-¡Te espero afuera, trata de no tardar por que el camino es largo y no quiero que nos llegue el anochecer!
De lejos, Agnes podía notar que Elea venía junto con sus dos hijas gemelas lo cual rápidamente se acercó a ellas y Elea exclamó :
-Me duele tanto que te vayas a ir Agnes, pero es la mejor decisión ten mucho cuidado y por favor no te olvides de cuidar a Leo.
Tracy y Jean corriendo fueron hacia adentro de la cabaña para poder despedirse de Leo mientras empacaba sus maletas.
Agnes después de escuchar las palabras de Elea contestó :
-(disgustada) Gracias Elea, creo que es lo mejor, aunque no me gustaría quedarme mucho tiempo, no me gusta subestimarme de más, en estos últimos días no le ha pasado nada a Leo así que pienso que pude haber exagerado las cosas y...
Elea interrumpió a Agnes tras escuchar sus reclamos y contestó :
-¿Qué dices? ¡AGNES! DEBES DE ESTAR EN TÚ MISMA POSTURA.
Agnes exclamó :
-Claro, lo lamento creo que es por que voy a extrañar esta linda casa.
-¡listo hermanita! Tengo mis maletas hechas y todo listo - exclamó Leo -
Agnes cerró la puerta de su cabaña y con un beso en ella se despidió con los ojos llenos en el borde de una catarata sin final, Elea abrazó fuertemente a Agnes y exclamó :
-Buen viaje Agnes, te deseo lo mejor.
Agnes y Leo se despidieron de Elea y las gemelas, todos estaban tristes pero Agnes sabía que lo hacía por un bien, lo hacía para evitar una maldición con aquella mujer del pueblo.
Agnes y Leo caminaban y caminaban hasta alejarse poco a poco de su cabaña, del hermoso lugar que los vio crecer.
***
-¿Falta mucho para llegar? - exclamó Leo con cansancio -
-Estamos justo llegando a nuestra nueva cabaña Leo - contestó Leo enfrente de una cabaña demasido vieja, Agnes sacó de su bolsillo una llave bastante polvorienta y abrió la casa.
-Está demasiado fea - exclamó con una mirada de disgusto Leo -
Agnes notó que la casa en realidad era demasido chica, pero que se adaptarían ambos a su nuevo hogar.
Agnes tardó horas para poder limpiar el polvo que había en ella, cuando la noche se acercaba Leo exclamó :
-Tengo sueño Agnes.
Agnes tomó su pequeño cuerpo y lo dejó sobre la única cama vieja que estaba en la cabaña y con un tierno beso lo despidió.
Agnes salió fuera de la casa para tomar aire fresco, estaba tan cansada de su viaje que quería sentir la brisa fresca de la nueva aldea.
-No puedo creer que he llegado hasta aquí, pero sé que estaremos más seguros Leo y yo, se que estoy haciendo lo correcto - exclamó Agnes mientras sentía la suave brisa.
Agnes después de un lapso de tiempo, entró a la cabaña nueva, cambió su ropa y se acostó sobre el frío piso hasta caer completamente dormida en los eternos sueños.
***
-¡AGNES! ¡AGNES! - gritó con desesperación Leo -
Agnes al escuchar los gritos de su hermano se levantó con mucha rapidez y no podía ver lo que estaba viendo.
-LEOOOO ¿QUÉ TE PASÓ? - gritó Agnes mientras veía sangre escurrir sobre las piernas de Leo y enormes moretones negros en los brazos de su pobre hermano.
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