XXIX ⸺ Debisteis dejarme marchar
Las saqué a ambas de la plaza lo más rápido que pude, y las traje a casa para apartarlas de la gente y el cuchicheo que se había formado tras mi enfrentamiento con aquel hombre.
Abrí la puerta abruptamente y me eché a un lado para dejarlas paso.
Rolan ya había vuelto de la herrería.
━¿Vanya?━ se puso en pie apartando la silla que había junto a la mesa, dejando la taza que tenía en las manos, y se acercó a nosotras━ ¿Qué está pasando? ¿Quiénes son?
Suspiré.
━¿Por qué no vais a la habitación y descansáis un rato?━ me volví hacia la mujer y esta asintió ligeramente para después tomar la mano de su hija e ingresar en el cuarto, cerrando la puerta tras ellas.
El moreno se cruzó de brazos frente a mi, esperando una explicación.
Tomé asiento en la silla que hacía unos minutos había ocupado Rolan y le conté todo lo sucedido.
La primera vez que me topé con la niña en el mercado y lo que había pasado en la plaza hacía unos instantes.
━Debiste golpearle más━ inquirió Rolan finalmente con desprecio hacia aquel hombre.
Podía ver incluso como sus puños se tensaban.
━No es que me faltaran ganas, pero ya tengo mala reputación.
━¿Tendrás problemas por esto? ¿Acudirá ante el rey?━ el cazador parecía preocupado.
Y a decir verdad, su desasosiego no era injustificado.
Teniendo en cuenta que acabé con la vida de Aredian frente a todo el reino, y mi acusación de brujería, aunque Merlín y Arturo demostraran mi inocencia aquel día, era consciente de que algunas de las gentes de la ciudad no habían olvidado mi rostro, y sus miradas acusatorias se clavaban en mi espalda como puñales cada vez que caminaba por las calles.
━No lo sé...━ respondí━ Pero, ¿qué podía hacer? No iba a quedarme de brazos cruzados mientras ese malnacido maltrataba a su mujer y su hija.
━Hiciste lo correcto, niña━ dijo colocando su mano sobre mi pierna que hacía rato que tamborileaba el suelo debido a mi nerviosismo.
Esbocé una fugaz sonrisa.
Me puse en pie y me dirigí a la habitación. Llamé un par de veces a la puerta y después abrí despacio.
Ambas estaban sentadas en mi cama, la morena abrazaba a la pequeña mientras le acariciaba el cabello para tranquilizarla.
Suspiré.
Me acerqué a ambas y me arrodillé ligeramente para quedarme a su misma altura.
━Soy Vanya━ le tendí la mano.
Esta me sonrió.
━Liliana━ respondió estrechándola con suavidad━ Ella es mi hija, Orett.
La chiquilla mantenía los ojos en el suelo.
━Un placer volver a verte, Orett.
Levantó la cabeza lentamente hasta que sus orbes encontraron los míos.
Le sonreí, y el temor en la mirada de la pequeña pareció disiparse levemente.
Me erguí.
━Liliana, sé que esto te sonará raro, no me conoces de nada y bueno...sé la reputación que tengo, y el numerito que acabo de montar. Pero me quedaría mucho más tranquila si ambas pasarais la noche aquí.
Sabía que aquel malnacido no iba a rendirse solo por haberle dado un par de puñetazos, y que volvería a por ellas. Nuestra única ventaja era que no volvieran a casa, ya que ese hombre no conocía mi hogar, y ambas estarían más seguras en él, al menos hasta que pudiéramos pensar algo mejor.
━Vanya, eres la única persona que nos ha ayudado, me da igual lo que crea la gente de ti. Nos has salvado a ambas, y nunca podré agradecértelo lo suficiente━ respondió la morena━ Pero no queremos causarte problemas...
━Los problemas me los he causado yo, y afrontaré las consecuencias si las hay. Vosotras no tenéis que preocuparos de nada. Podéis dormir hoy en el otro cuarto, la cama es más grande.
Esta asintió con la cabeza.
━No sé como darte las gracias, de verdad...
Escuché entonces como llamaban a la puerta.
Orett dio un respingo y vi como se agarraba con fuerza al brazo de su madre.
━Esperad aquí━ miré a la morena y esta envolvió a la pequeña entre sus brazos.
Salí de la habitación a paso ligero y me encaminé a abrir.
━¿Merlín?━ dije sorprendida de ver al ayudante del galeno.
Este me miró apenado.
━Me manda Arturo━ rehuyó mi mirada durante unos instantes━ Quiere verte. Ahora.
Suspiré mientras me echaba el pelo hacia detrás.
━Está bien...
━No dejaré que vayas sola━ Rolan me agarró el antebrazo antes de que pudiera dar un paso fuera.
━No te preocupes, no va a pasar nada━ deposité una leve caricia sobre su mano━ Quédate con ellas, volveré enseguida.
El cazador me miró con desazón, pero yo ya había conseguido zafarme de su agarre y me dirigí a palacio acompañada de Merlín.
━¿Se puede saber en qué lío te has metido ahora?━ musitó el moreno mientras caminábamos.
━Yo no he hecho nada━ me limité a responder.
Continuamos en silencio hasta la puerta de los aposentos del heredero, donde el muchacho me dejó.
Cogí una bocanada de aire y llamé a la puerta armándome de valor, para segundos después ingresar en la estancia y cerrar tras de mí.
Alcé la vista unos instantes para ver al rubio sentado a su mesa, con gesto de desagrado, para luego agachar la cabeza nuevamente y acercarme a pasos lentos hacia su posición.
━¿Me habéis llamado?━ dije casi en un susurro.
━Así es━ respondió severo━ ¿Sabes por qué?
━Puedo imaginarlo...
━¿Vas a contarme qué demonios ha pasado?━ interrumpió con brusquedad━ Porque necesito una buena razón para entender que hacía una de las sirvientas de palacio metiéndose en peleas por ahí.
━Oí los gritos, y fui a ver qué sucedía. Cuando llegué, vi a una mujer en el suelo, con la mejilla enrojecida y llorando, y aquel hombre acercándose a ella. La ayudé, él me atacó y yo me defendí. Es todo.
━¿Ah, si?━ el príncipe se puso en pie━ Es bastante diferente a la versión que el panadero contó, y a ti no se te ve un solo rasguño.
━No es culpa mía que elija mal la gente a la que quiere agredir━ me limité a decir aún con la mirada gacha.
━Dijo que te vio robando de su puesto, y al enfrentarte, le agrediste.
━¿¡Robando!?━ alcé la cabeza con brusquedad hasta chocar con los orbes azules del heredero━ ¡No he robado nada en mi vida!
━Cuida ese tono.
Tragué saliva mientras notaba el vello de mis brazos erizarse.
━Os estoy diciendo la verdad, sire, ese hombre miente.
━Aunque así fuera, no tienes la mejor de las reputaciones, Vanya. No puedes ir por ahí causando problemas frente a todo Camelot con una acusación de brujería sobre tus hombros.
Noté entonces una punzada en el pecho.
━Así que ese era el problema... Mi acusación━ dije de mala gana━ No os era desconocida cuando vos mismo me ofrecisteis quedarme. Si tantos problemas iba a causaros que me condenaran falsamente, debisteis dejarme marchar.
Este me miró en silencio.
━Si vais a castigarme, hacedlo. Pero si no queréis nada más, aún tengo trabajo que terminar━ dicho esto giré sobre mis talones para marcharme.
━¡No me des la espalda, Vanya!
Me detuve en seco para volverme lentamente hacia él.
━¡Maldita sea! ¿Y tus modales? ¡Parece qué no has servido a nadie en tu vida!
━¡No, nunca he servido a nadie, y ojalá no hubiera tenido que hacerlo, porque si toda la gente que hay que servir es igual que t...!
Pestañeé un par de veces al darme cuenta que aquellas palabras habían escapado de mis labios casi de manera instintiva, sin yo poder hacer nada para evitarlo.
━Sigue━ dijo Arturo acortando la distancia que había entre ambos━ ¿Igual que yo?
━Perdonadme, sire━ musité con la voz rota, clavando los ojos en el suelo.
El heredero chistó de mala gana.
Aún notaba sus ojos fijos en mí, aunque no tenía valor para mirarle, así que me limité a mantener la cabeza gacha.
Le escuché suspirar, y segundos después se alejó de mí.
━Vete. Puedes irte.
Asentí con la cabeza y salí de los aposentos del príncipe lo más rápido que pude al mismo tiempo que notaba como mis ojos comenzaban a humedecerse.
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