Jungwon no lo pensó dos veces, necesitaba el dinero para seguir sus estudios. Y era notorio que Jay también necesitaba de su ayuda. ¿Qué más podría perder? Talvez su dignidad, pero ¿importaba acaso? ¡Era mucho dinero a cambio!

—Está bien.— dijo.

—¿En serio?— preguntó sorprendido.

—¿Por qué te sorprende? Vos necesitás de mi ayuda y yo necesito tu dinero. Ambos salimos ganando acá.— contestó simple, le parecía lógico.

—Tenés razón.— admitió. —Bueno, supongo que nos queda ponernos de acuerdo con todo esto entonces.

—Claro, ¿qué tengo que hacer?— preguntó tomando un sorbo de su café.

—Pues... no pensé llegar tan lejos.— dijo mirando su taza de té casi vacía.

—Mmm, supongo que podemos comenzar con conocernos un poco, así tambien podemos crear una historia creíble.— sugirió.

—¡Sí!— aceptó el mayor. —Bueno, ya sabes mi nombre. Tengo veintidós, estudio derecho en la universidad de Seúl. Nací en Estados Unidos y me mudé acá cuando tenía catorce. Oh, me gusta mucho el choclo.

—¿El choclo?— Jungwon no pudo evitar reírse un poco, le pareció una presentación rara pero divertida.

—Es lo mejor.

—Bien. Yo soy Yang Jungwon, tengo dieciocho y estoy en mi último año del colegio.

—¡Sos un bebé! Boludo, no. ¿Qué hice?— Jay se espantó. —¡Pensé que eras mayor!

—¡Ya soy mayor!— se quejó. —Además solo sos mayor por unos cuatro años.— rodó los ojos. —Como sea. Me gustaría estudiar medicina, para eso voy a usar tu dinero.— admitió.

—Oh, wow. Espero logres ingresar.

—Gracias.

—¿Qué hay de tu familia? ¿Tenés hermanos? Yo soy hijo único.— dijo el mayor, desconociendo el peso que aquella pregunta podría tener en el chico.

—No, vivo solo. Aunque mis amigos son como mi familia.— se encogió de hombros, fingiendo que no le afectaba. Si Jay lo notó, no dijo nada y agradeció aquello.

—Ya veo. Yo aún vivo con mis papás, pero me gustaría mudarme a mi propio departamento pronto. Ellos no me dejan adoptar un gato, muero por uno. Aunque eso sería bastante literal, ya que soy alérgico.

—Ahh, ¿no te va a hacer mal tener uno?

—Meh, de algo me tengo que morir.— sonrió. Jungwon negó la cabeza.

—Entonces, ¿cómo nos conocimos?

—Te compré.

—Me refiero a nuestra "relación".— dijo haciendo comillas en el aire.

—Ah. No sé.

—Talvez visitaste mi lugar de trabajo. Entonces te atendí y quedaste encandilado con mi belleza. Yo te dí una bolsa de pan y vos me diste tu corazón. Suena lindo, ¿no?— dijo aguantando las ganas de reírse.

—¿Sos panadero?— preguntó sorprendido.

—¿Es lo único que sacaste de lo que dije? Solo trabajo en la caja, a veces ayudo en la cocina, pero más es con la limpieza. Cocinar no es mi fuerte.

—¡Oh! Te conocí en la panadería y comencé a ir más seguido a comprar panes solo para verte. Vos te diste cuenta y me diste tu número cuando te pedí. Hablamos un poco y yo seguía yendo a verte, luego te invité a salir. Al final, te enamoraste de mi cuando te cociné tu comida favorita. ¿Cuál es tu comida favorita?

—Curry.

—Te hice el mejor curry que probaste en tu vida y aceptaste ser mi novio.

—¿Hace cuánto?

—Un mes o talvez dos.

—Dos y cumplimos tres dentro de dos semanas.

—Perfecto. ¿Qué más hacen las parejas? Nunca tuve una.

—Uhm, yo sí tuve una. Solíamos salir a comer o ver películas en mi casa, aunque salíamos en secreto, así que solo hacíamos cosas que parecían normales entre amigos. También teníamos momentos románticos cuando no había nadie. Pero no creo que sea el caso con nosotros porque solo vamos a fingir.

—Bueno, podemos tener citas. Y tenemos que sacarnos muchas fotos para ponerlas en mis redes. Si hago que mis amigos se lo crean va a ser pan comido con mis padres.

—¿Les vas a mentir a tus amigos sobre esto?

—Talvez les diga después.

—Yo en definitiva debo decirles a los míos, saben del negocio, así que van a sospechar. De todos modos no van a decir nada a nadie, no tenemos otros amigos.

—Bueno. ¿Te parece si sacó una foto ahora? Para subir a una historia.

—Sí, sí. ¿Qué hago?— preguntó, refieriendose a cómo debía posar.

—Solo dame tu mano.— Jay tomó la mano de Jungwon entre la suya, entrelazando sus dedos. Las dejó reposando sobre la mesa y acomodó un poco los platos con su mano libre. Luego tomó su teléfono y le sacó una foto a sus manos. —Voy a empezar a subir cosas más discretas primero.— le dijo.

Jungwon se quedó en silencio. Observó su mano siendo envueltas por completo por la de Jay, mucho más grande que la suya. Era cálida y suave, se sentía extraño, pero de una buena manera.

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me re olvidé que estaba escribiendo esto con "vos" y en el cap anterior es todo "tú"😭😭😭