(Penúltimo capítulo)

Ya había pasado 8 meses desde que Milk estaba en su casa junto a su familia, meses durante los cuales ella junto a sus seres amados, personal especializado y amigos, habían luchado día a día para ella pueda ir poco a poco recuperando el movimiento de sus extremidades y poder finalmente abandonar la cama sin necesidad de tener algún apoyo.

La experiencia que había pasado había fortalecido más el amor que ella sentía por su esposo y así como el amor que él sentía por ella.

Milk caminaba con el apoyo de un andador aún, pero al menos ya no estaba postrada en una cama y ello le hacía sentirse feliz pues podría compartir más momentos con sus hijos, y amigos que venían a visitarla cada semana y a quienes ella ya no recibía en su habitación postrada en su cama, sino en su sala o jardín.

Gokú por su parte hace un mes que había vuelto a retomar sus ocupaciones tanto del gimnasio como de la empresa, claro por horas, pues lo que menos quería era descuidar a su familia, compartir momentos con ellos, con su bebé, con su hijo mayor, con su esposa. Gokú imaginaba el momento en que su esposa deje de usar el andador, entonces ese día él lo haría aún más especial pues ambos aún tenían algo pendiente, algo que los volvería a unir frente a los hombres y a la sociedad como una pareja, pues ante los ojos de Dios ellos aún seguían unidos.

Gimnasio Son –Ox:

Un grupo de hombres platicaban en una oficina, mientras miraban unos documentos.

Creo que ya terminamos, decía Gokú, cerrando la carpeta de documentos que sostenía.

Sí, respondió Vegueta, cerrando la suya.

¡Gracias amigos¡ sin ustedes no hubiera podido mantener operativo el gimnasio, decía Gokú mirando a su grupo de amigos.

No hay nada que agradecer Gokú, para eso estamos los amigos, respondió un calvo.

Cierto, dijeron otros jóvenes.

Además no fuimos los únicos que te apoyamos, también lo hizo tú padre, tú suegro...., decía Piccolo, siendo interrumpido por un hombre de cabello alborotado.

Si, lo sé, ellos me apoyaron mucho con la empresa, incluso Vegueta, acoto Gokú mirando al hombre cabello de flama.

Lo hice gustoso amigo, dijo Vegueta.

¡Gracias amigo¡ y ¡gracias a Bulma¡ por soportar que te muchas veces te haga venir de tu casa para apoyarme, siempre pensé que ella me detestaba cada vez que te llamaba para que me cubras, añadió Gokú con una ligera sonrisa en su rostro, mirando al hombre cabello de flama, que sonrió.

Bulma es muy comprensiva, además es amiga de Milk, dijo Vegueta.

Lo sé, ella, Dieciocho, siempre han estado pendientes de Milk, incluso Marón cuando supo de la gravedad de la enfermedad de Milk, no había día que no dejara de ir al hospital, respondió Gokú.

Cierto, ella iba a darte apoyo a ti y a mi cuñadito, dijo Krilín sonriendo.

Tú cuñado, Diecisiete Android, siempre le estaré agradecido, él sufrió mucho todo el proceso de la enfermedad de mi muñeca caprichosa, él la cuidó, la acompañó, además sigue pendiente de ella, cada fin de semana va a verla a nuestra casa, acoto Gokú.

¿Y va solo o acompañado?, dijo Yamcha sonriendo.

¿Qué?, respondió Gokú intrigado.

Es que en más de una oportunidad me lo he encontrado con Marón, decía Yamcha sonriendo.

Algunas veces van juntos, respondió Gokú.

¿Tienen algo?, dijo Ten sonriendo.

No lo sé, no se los he preguntado, pero si tuvieran algo, me daría mucha alegría, ambos merecen ser felices, respondió Gokú.

Cierto, dijo Vegueta.

Muchos nos han apoyado, hasta las chicas del gimnasio, la verdad Milk y yo estamos muy agradecidos con todos, respondió Gokú.

¿Y para cuándo la boda?, decía Ten.

¿La boda?, dijeron Piccolo y Yamcha.

Si, nuestro amigo se divorció de Milk, ¿no?, al menos el civil, me imagino que volverán a casarse nuevamente, ¿no?, respondió Ten.

Si, nos volveremos a casar, pero aún no hay fecha, yo quiero que mi muñeca bella pueda estar completamente restablecida para que disfrute de la gran fiesta que pienso armar para nuestra boda, dijo Gokú sonriendo.

En tanto: "Casa Ox"

Una pelinegra platicaba con un hombre de cabello negro lacio, mientras su hijo mayor a unos metros suyos hacia jugar a su hermanito que estaba sentado en una alfombra, con unas sonajas.

Me alegra mucho oír ello Milk, decía feliz Diecisiete, haciendo una pausa para acotar: ¿Cuándo piensas decírselo?

Este fin de semana, será un regalo de aniversario, respondió Milk.

¿Aniversario?, pero si tu boda con Son fue....., decía Diecisiete siendo interrumpido por la pelinegra.

Se cumple un año más de habernos conocido, una fecha como esa yo y él nos conocimos en la el aula, respondió Milk sonriendo.

Claro, dijo Diecisiete.

Y cambiando de tema, ¿tú cuando piensas decirle a Marón que te gusta?, y no me lo niegues, sé que te gusta, y no sabes lo feliz que me hace saber que también serás feliz, dijo Milk sonriendo.

No sé si ella me corresponda Milk, respondió Diecisiete con calma.

Eres muy apuesto, y gran ser humano, además las veces que han venido juntos he notado que hay química entre los dos, decía Milk.

Sí, es cierto, nunca imaginé que me llegaría a llevar también con Marón, tal vez sea porque no la trate mucho durante nuestra época de estudiantes, respondió Diecisiete.

Si, por ello debe ser, yo tampoco la trate mucho, es más me caía muy mal, hasta la apode "La plástica", en mi dolor,,...., decía Milk sonriendo.

Como no, era tú rival de amor, aunque no quieras aceptarlo, acoto Diecisiete sonriendo.

Cierto, pero no cambies el tema, anímate a declarártele, decía Milk mirando fijamente a los ojos a su amigo.

Bien, lo haré, la próxima vez que nos veamos, respondió Diecisiete.

Como que la próxima vez, tienes que llamarla, invitala a algun lado, decía Milk.

Está bien, la invitare a salir, y allí le hablaré de mis sentimientos, respondió Diecisiete.

Qué bueno, espero que la próxima vez que me visites vengan juntos y me traigas la noticia de que ya se hicieron novios, dijo Milk sonriendo.

Así será, acoto el joven de cabello negro lacio.

Mami, dijo de repente Gohan.

¿Dime hijo?, respondió Milk.

Goten, ya quiere comer, dijo Gohan, haciendo una pausa para decir: Ya se quiere comer la sonaja.

Mi niño, pobre, discúlpame Diecisiete, pero tengo que prepararle la papilla a mi bebé, decía Milk, mientras se ponía de pie con ayuda del andador.

Ni tus hijos aún lo saben, dijo Diecisiete sonriendo.

No, quiero que sea una sorpresa para todos, añadió la pelinegra.

Fin semana: "Casa Son – Ox"

Gokú y Milk estaban en el jardín de su casa junto a sus hijos platicando.}

¿Una sorpresa?, decía Gokú.

¿Qué sorpresa mami?, acotaba Gohan, mientras el pequeño Goten sonreía que estaba sentado sobre el regazo de su madre sonreía.

Algo que me hace muy feliz y sé que a ustedes también les pondrá muy, muy felices, decía Milk con dulzura, haciendo silencio por unos segundos mientras posaba su mirada sobre el hombre de cabello alborotado.

Dinos muñeca bella, ¿cuál es la sorpresa?, respondió Gokú con dulzura.

¿Me sostienes a Goten?, dijo Milk.

Bien, respondió Gokú, mientras tomaba con sus manos a su hijo menor.

Luego de algunos minutos Gokú, Gohan e incluso el pequeño Goten miraban sorprendidos a Milk ponerse de pie y empezar a dar pasitos sola sin ayuda del andador.

¡Mami estás caminando¡ decía con lágrimas en los ojos Gohan, mientras Goten aplaudía con sus manitos.

¿Desde cuándo puedes hacerlo?, dijo con una amplia sonrisa en su rostro Gokú.

Desde hace un par de semanas, pero quise guardar esta sorpresa para hoy, que es una fecha especial para los dos, respondió Milk con una dulce sonrisa en su rostro.

¡Gracias por tan bella sorpresa¡ dijo Gokú con dulzura.

Sí, es una gran sorpresa, acoto Gohan, haciendo una pausa para decir: ¿qué celebran hoy papis?

Un año más de llegar a la vida del otro, dijeron a la vez Gokú y Milk, al tiempo que sonrieron.

No comprendo, dijo Gohan, mientras Goten sonreía de manera balbuceante.

Un día como hoy, hace muchos años atrás, mami llego a la escuela donde yo estudiaba, y se convirtió en una alumna más de mi clase, y para mi ella se convirtió en la chica de mis sueños, respondió Gokú sonriéndole con dulzura a la pelinegra.

Así es, un día como hoy, yo conocí al chico de mis sueños, dijo Milk con dulzura.

Gokú, dejó a Goten sentado sobre una silla, y le pidió a Gohan que mire a su hermanito, pues necesitaba decirle algo a su madre.

Bien papi, respondió Gohan, mientras miraba a su hermanito.

Milk, dijo Gokú de repente.

Sí, respondió la pelinegra.

Primero que nada, quiero que aquí frente a nuestros dos hijos, producto de nuestro amor, hagamos una nueva promesa, una promesa que esta vez ambos debemos de cumplir, decia Gokú mientras tomaba las manos de su amada.

Claro cariño, respondió Milk.

Ya no más mentiras corazón, somos una familia y como tal no debe haber mentiras entre nosotros, cualquier problema que tengamos lo superaremos como familia, como la familia que somos, dijo Gokú con dulzura mirando fijamente a la pelinegra.

Ya no más mentiras, lo prometo, respondió Milk, mientras Gohan y el pequeño Goten sonreían.

Gokú beso las manos de Milk, y luego dijo posando su mirada en ella: Tenemos una promesa pendiente aún.

¿Una promesa?, respondió Milk sonriendo.

Ya la olvidaste, te la hice cuando estabas hospitalizada, dijo Gokú con nostalgia.

No, no la he olvidado cariño, claro que la recuerdo, aunque estaba aparentemente dormida yo escuchaba todo lo que me decías y no sabes cómo sueño con volver a pasar por un momento así, pues esta vez será distinto a la primera vez, aunque tú y yo aún seguimos casados, y por la ley más importante para mí, respondió Milk.

Y para mí también, pero bien sabemos que tenemos que volver hacerlo ante los ojos de los hombres, por ello, aquí frente a nuestros dos hijos, quiero pedirte que nos volvamos a casar por lo civil, decía Gokú con dulzura.

Goten, papi y mami se volverán a casar, decía el niño de rostro tierno mirando a su pequeño hermanito, que solo sonreía.

Sí, dijo Milk, al tiempo que Gokú la tomó de la cintura y giro con ella, haciéndola sonreír.

Eso es lo que quiero, nunca dejar de escuchar tu risa, tu voz, siempre tener tu compañía, te amo Milk Ox, te amo, respondió Gokú.

Yo también te amo, dijo Milk.

Y nosotros los amamos, acoto Gohan, mientras se acercaba con Goten en sus brazos a sus padres. Al llegar junto a ellos, se fundieron en un fuerte abrazo.

Nota:

Aquí les dejo el penúltimo capítulo de "Mentiroso Corazón – Segunda Temporada", espero y el mismo sea de su agrado.

¡Gracias de antemano a cada persona que leen esta historia y todas mis demás historias en proceso y las concluidas¡¡gracias por sus vistos, votos y comentarios¡

Hasta el lunes, Dios mediante con el capítulo final de esta historia.

Ahora si me despido de ustedes, no sin antes pedirles que se cuiden mucho (practiquen medidas preventivas para evitar el covid-19 como uso de mascarilla, lavado de manos y aislamiento social) ya que así estarán cuidando ustedes y a sus seres queridos, y de esta manera estarán contribuyendo a detener el avance de la propagación de la pandemia que estamos viviendo en nuestros países y que lamentablemente cada día infecta a más personas y cobra más vidas, como está sucediendo en mi amado país, sobre todo en mi región, siendo mi provincia la que en esta semana ha presentado un incremento de casos que me llena de nostalgia y preocupa, pues según lo que dicen por la radio y televisión, mi provincia está en alza de crecimiento de infectados y muertes por Covid – 19 y ello pues tensiona la verdad, y mi único escape para esta tensión es escribir, por ello mientras Dios me permita hacerlo lo haré y estaré compartiendo mis historias a través de esta plataforma con la persona que guste leer mis escritos.

Con mucho cariño.

PrincesaLirio.