—¿Que haces?— preguntó Sukuna a su novio, desde que llegó al salón de clases Megumi no dejaba de escribir en esa libreta

—Hago una lista de las cosas que quiero— mira a su novio —¿tú no querías ropa nueva?, pues te daré ropa nueva y de marca—

—¿Desde cuando eres mi Shuggar Daddy?— soltó una carcajada y alzó una ceja confundido —no me quejo pero quiero saber—

—A partir de hoy soy tu shuggar Daddy porque pronto podremos vivir en un apartamento lujoso y iremos a la mejor universidad del planeta— mira a los lados, le hizo un gesto de que se acercara y eso hizo —mi papá tiene sexo con su jefe multimillonario— le susurra

—Con la crisis que hay no me sorprendo— besa la mejilla de Megumi y se sienta a su lado —¿ya te dije que te quiero mucho?—

—¿Me quieres de verdad o por interés?— ahora fue Megumi quien alzó una ceja dudoso

—Depende, ¿puedes agregar a la lista unos cuantos pares de zapatos?, siempre quise unas botas y Yuuji unos converse—

[ . . . ]

—¿Que donde está papá?— miró su casa desde la acera de esta —se fue ahora mismo a comprar la cena... no mamá el intentó cocinar, pero se le quemó el agua y preferimos no arriesgarnos a quedarnos sin casa—

Recién había llegado su "padrastro" se salió por la ventana según el para no quitar el ambiente «sexual»

Esperaba que ese apartamento valiera la pena, porque pasa tener el culo adolorido «y no de la manera que le gusta» y tener hambre tenían que decirle que valdría la pena

Por eso dejó la lista en el cuarto de su papá, si o si su jefe multimillonario debía verlo, ¿sonoba interesado y desesperado?, si, ¿le importaba?, para nada

Si le compraba cosas a su papá también a el, ambos venían en el mismo paquete, eran como las ofertas del supermercado, un maravilloso 2×1

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—Mira adentro— su padre le lanzó una bolsa que casi se le cae de las manos

Confundido miró dentro de la bolsa negra, casi se le salieron los ojos

Un teléfono, audífonos inalámbricos y un reloj inteligente, obviamente todo era último modelo y se veía demasiado costoso, incluso la bolsa debía costar más que todo lo que llevaba puesto

Casi se le salían los ojos

Padre e hijo se miraron a la cara, minutos después empezaron a soltar grandes carcajadas y se abrazaron

—¡Eres una maldita rata asusta!— Toji revolvió los cabellos de su hijo con su puño —así lograras grandes cosas Megumi—

—Te dije que funcionaría, solo es esperar al que ese apartamento de lujo venga a nosotros—

—Hablando de apartamento— su padre sacó de su bolsillo una llave —el apartamento sigue siendo suyo legalmente pero podemos irnos a vivir allí, mañana a primera hora nos mudamos, ya llamé al directo de tu escuela para justificar tu ausencia—

—No puede ser— susurró tan impresionado que juraba que se iba a desmayar

—Pues si puede ser Megumi— se puso frente a su hijo y lo sujetó de los hombros —aunque no quería estudiar economía de empresas lo hice y gracias a eso tenemos lo que mi jefe nos da por yo meterle la verga— soltó el aire retenido de sus pulmones —lo que quiero decir es que aunque no te guste una buena carrera sigue estudiando para que trabajes en una empresa millonaria y folles con tu jefe millonario—

Ya se veía estudiando una excelente carrera y follando con su jefe multimillonario, el trabajaría y Sukuna sería el amo de casa

«Porque seguramente si Megumi no lo hacía sería Sukuna quien lo haría»

—Eso o puedes conseguirte un novio de ochenta años, que tenga problemas cardiacos y mucho dinerito en la cuenta—

—Papá no haré eso— hizo una mueca con asco

—Tu madre hacia eso a tu edad y mirala, la muy zorra tiene dinero, negocios y cosas de lujo— suelta un suspiro nostálgico —aún recuerdo cuando la conocí y en ese momento supe que ella tenia que ser mi mujer—

Tenía veinte años y estaba en un funeral de un tío que ni conocía, pero según su mamá era un tío que nunca conoció pero era su tío

Por respetos se acercó a la esposa para darle el pésame, grande fue su sorpresa cuando en vez de ver a una vieja vio a una joven y que hermosa joven era, como pendejo se quedó mirándola, mientras su familia quería asesinarla a ella por ser una caza fortuna y quedarse con toda la herencia, Toji ya pensaba en toda una vida con ella

Le había dicho que quería ser como ella, quería tener dinero aún si eso implicaba tener sexo con viejos, ella sonriendole accedió y le enseñó tal arte

Ahí fue cuando se enamoraron, poco después se casaron y tuvieron a Megumi

Toji recordaba eso como si fuera ayer, fue gracias a ella que aunque su jefe sea hasta más joven que el, tenía dinero

—Wakala viejo— hizo una mueca de asco —no tenias que decirme eso—

—Te falta mucho por aprender Megumi—

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—Adoro la buena vida—

—Salud por nosotros y por mi jefe que le gusta mi verga—

—Salud—

Padre e hijo chocaron copas

Ambos estaban recostados sobre un flotador en la piscina, tenían lentes oscuros y bebían, Toji bebía Ron y Megumi refresco pero ambos del caro, no del resfresco de naranja que sabe a limón pero es de piña

—¡Pancho, sirve más ron y con mucho hielo!— ordenó Toji alzando su vaso

—Soy Juan señor Toji— dijo el mayordomo sirviendo la bebida

—Si si, como sea José—

Megumi se sentía en el cielo

Un apartamento caro, teléfono de ultimo modelo y un mayordomo en disposición

—Megumi-...—

¿Así se sentía vivir una buena vida?

—Hey Megumi-...—

Que bien se sentía dejar de ser un probeton humilde

—Megumi despierta-...—

El flotador se movió y cayó al agua

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—¡Me ahogo!— gritó levantándose con la respiración acelerada de la cama

Su padre le miró confundido pero más confundido estaba el

¿Por qué dormía en una sala sobre un catre?, ¿por qué su casa estaba casi vacía?

—¿Y el penthouse?, ¿y el mayordomo , ¿donde está mi aifon?, ¿papá donde estamos?— miraba a los lados de manera rápida y después miró a su padre buscando explicaciones

—¿Que rayos estabas soñando?— Toji alzó una ceja confundido

—¿Co-como que soñando?—

—Si— afirmó —decías puras boberías sobre un apartamento de lujo, cosas caras, finanzas, tu mamá y viejos con dinero—

—¿Entonces no tienes sexo con tu multimillonario jefe y mamá tampoco tiene dinero?—

—Trabajo en una pollería, mi jefe es un tacaño, nos colamos en la casa que nos embargaron y tu mamá murió hace tiempo— chasqueo sus dedos acordándose de algo —por cierto, a tu novio el malandro lo volvieron a meter preso por vender droga—

Miró un punto fijo en el suelo analizando toda su vida que era una mierda

—Matenme— susurró volviéndose a acostar en el catre

—Hey no te vuelvas a dormir que tenemos que irnos a buscar a tu novio que por ahora es la única fuente de dinero que tenemos—