Mi cabello castaño ondeaba con el viento, mis brazos estaban vendados y los cardenales ocasionados por la caída, el choque y todo el accidente, ya se estaban borrando.

Estaba en el punto más alto del edificio en el que me había criado.

Miraba el atardecer con algo de nostalgia en mi interior y recordé de nuevo todo lo que había pasado, todo lo que yo había causado.

El final del colegio Deathwood y probablemente del consejo también.

El final de varios que me habían ayudado siempre, que habían confiado en mí, el final de él, quien me había dicho que me amaba antes de que el lugar explotara y se derrumbara en pedazos.

Toda la escalera de sucesos ocasionados por secretos oscuros y mortales. Cosas que sin mentir, yo tenía que ver en todas ellas.

Y a pesar de todo lo que has leído sobre mi vida, yo te lo advertí al principio, dije que no confiaras en nadie porque las personas podían traicionarte en cualquier momento.

Cometiste un error, y confiaste en mí.

Así que solo me queda decir: interesante historia, ¿verdad?

¿Ahora te cuento lo que en realidad sucedió?