*Lentamente el barco se hunde
Piensan que loco estoy, pero no saben cómo se siente
Están alrededor mío
Dando vueltas como buitres
Quieren romperme y lavarme mis colores...
... Sálvame, si me convierto en
Mis demonios...*

"Hawái es uno de los países que más comercializa tequila. Algunas personas lo hacen ilegalmente para evitar pagar grandes impuestos. Mi padre es una de esas personas que se dedican a eso, fabrica y comercializa tequila ilegalmente. Cada vez que iba de vacaciones a Hawái, visitaba la fábrica de él, sin saber en ese momento que todo era ilegal..."

- Edén, ¿tú te involucraste en el negocio de tu padre?

" Tuve que hacerlo Hansel, un día por más que no quería, tuve que hacerlo..."

- Pero, ¿por qué? -volvió a preguntar Hansel para intentar entender la situación.

"Porque si no lo hacía, mi padre correría peligro, sería arrestado e iría a la quiebra..."

Edén echó la cabeza hacia atrás y cerró los ojos. Se metió en todo ese lío solo para salvar a su padre. Nunca pensé que la vida de él, incluso de todos habían sido tan díficiles. Continuó hablando.

"Mi padre tuvo problemas con las cuentas del negocio, las facturas no estaban bien. Para completar enfermó de repente y la producción bajó. Los inversionistas se quejaron y dijeron que si no ponían a un nuevo dueño, abandonarían el negocio. Yo tomé el lugar de mi padre como dueño y jefe del negocio. Como en ese momento era menor de edad, los papeles y las facturas estaban firmadas y a nombre de mi padre. Cuando tenía que volver para la escuela, me permitieron dejar a cargo a mi papá. En el verano yo dirigía las negociaciones con los compradores y mandaba en la fábrica. En poco tiempo me convertí en un mafioso, cosa de la que aún me arrepiento. Yo mandaba en todo, era temido y respetado por todos. Hasta algunas veces tuve que mandar a matar a gente de la competencia. En estos momento, aunque no lo hice yo mismo, mis manos están manchadas de sangre..."

- Hasta qué punto tuviste que llegar para ayudar a tu padre. ¿Crees qué todo eso valió la pena? -preguntó Kevin dirigiéndole la mirada a Edén.

Edén estuvo en silencio hasta que un rato después respondió:

- Me hago esa misma pregunta todos los días y aún no lo sé; pero si tuviera que hacerlo todo de nuevo creo que lo hubiera hecho.

Ahí fue cuando todos nos dimos cuenta de cuánto Edén ama a su padre. Él fue capaz de soportar todo eso para ayudarlo.

"Tiempo después pensé en una manera de parar el negocio de una vez por todas, evitando que mi padre fuera a prisión. Empecé secretamente a poner todos los documentos de la fábrica legales, hasta cambié el nombre de la fábrica. Dejé de comercializar el tequila con contrabandistas y busqué nuevos clientes de la élite, es decir, ricos y millonarios. Borré toda evidencia que nos involucrara a mí y a mi papá, también pagué a los empleados para que mantuvieran silencio. Cuando todo estaba listo hice una denuncia anónima a la policía y todos los inversionistas fueron arrestados menos nosotros. El negocio pasó a ser totalmente legal. Dejé todo en manos de mi padre y me retiré de todo eso. Aunque como ya les dije, mis manos están manchadas de sangre y por más que ha pasado mucho tiempo desde que eso ocurrió, no he podido superar todo aquello. Así que para olvidarme de momento de ese tema, me pongo a beber de vez en cuando, y ahora también creo que me he convertido en un alcohólico. Mi vida se arruinó desde ese día, por eso cuando se acabe el curso voy a ingresar en la escuela de surf en Hawái. Creo que hacer lo que realmente me gusta me ayudará asalir de esta situación, ¿no creen?."

Terminó de hablar preguntándonos alegremente, a lo que todos respondimos con un fuerte "sí". Después todos nos levantamos de nuestros asientos y lo abrazamos muy fuerte. Edén respondió al abrazo de la misma manera. Koga y yo nos ofrecimos para recoger todo y los demás se fueron a casa. Kevin y Yaisandra se fueron juntos como siempre. De camino a sus casas hicieron una parada en el parque de cerezos. Se sentaron juntos en un banco donde se podía ver el bello atardecer.

- ¿No es hermoso el cielo, ese bello cielo lleno de vida?

- Sí es hermoso, pero no es más hermoso que tus ojos. -respondió Kevin volteando hacia ella.

Yaisandra se ruborizó y se empezó a acercarse a él.

- Kevin yo..., tú....

Él le cogió la mano y dijo:

- Tu también me gustas mucho Yaisandra. En estos momentos eres la persona más importante para mí.

Kevin la abrazó y luego la besó en los labios cariñosamente. Yaisandra aceptó el beso y lo devolvió. Así estuvieron un rato mientras la luna empezaba a salir. Cuando sus labios se soltaron, Kevin se paró y se puso de rodillas.

- Yaisandra, ¿quieres ser mi novia? -le preguntó con una hermosa sonrisa.

Ella dijo que sí y se volvieron a besar, para luego ir a casa juntos, tomados de la mano.

Mientras en la casa abandonada, Koga y yo ya habíamos terminado de arreglar todo y nos íbamos a casa juntos. Nadie se había atrevido a decir nada hasta que él rompió ese silencio.

- Alexa, te debo una disculpa y una explicación.

- No me debes nada, por más que te hayas equivocado y mucho. -le dije algo molesta.

- Claro que te debo una explicación. -dijo poniéndose frente a mí- Eres la persona más importante para mí y en ningún momento quise hacerte daño.

Sus palabras hicieron que me sonrojarse y a la misma vez me pusiera a llorar. Él secó mis lágrimas y me abrazó.

- He sentido esto por tí desde que éramos niños y aunque no sientas lo que yo siento, estaré siempre para tí y te cuidaré más que a mí mismo. Nunca olvides eso.

Esas palabras solo me hicieron llorar más, quería hacer algo para disculparme. Ahí fué cuando se me ocurrió algo de lo que después me arrepentí. Me aparté de su cuerpo lentamente y lo besé amorosamente. Al principio él quedó sorprendido pero después se incorporó al beso. Colocó sus manos en mis caderas y yo puse las mías alrededor de su cuello. Estuvimos así hasta que yo me despegué de él. Me puse muy nerviosa, ¡¿como se me ocurrió besarle?!

- Koga disculpa, yo...

- No pasa nada, olvídate de lo que pasó, ¿sí?

Dijo eso y se fue corriendo. Estaba triste, creo que lastimé aún más sus sentimientos; sin embargo besarlo se sintió tan bien, sus labios eran tan suaves y el olor de su cuerpo tan cálido que hubiese querido quedarme pegada a él para siempre.
Me dí con la mano en la cabeza, (que como saben se a vuelto un hábito para mí), y seguí caminando a casa, pero sola. Esa noche no pude dormir bien pensando en aquel beso. ¡Rayos! ¿Por qué me gustó tanto?
Al día siguiente me levanté temprano para ir a la escuela como siempre lo hago. No pude dormir y por eso estaba cansada. Mi mamá se dió cuenta de mi extraño comportamiento, se acercó a mí y me preguntó:

- ¿Pasa algo, mi niña?

No sabía que decirle, yo misma estaba confundida. De repente se formuló una pregunta en mi tonta cabeza y de tonta sin darme cuenta le hice esa pregunta a mi madre.

- Madre, ¿te puede gustar una persona sin tú saberlo?

Ella me miró fijamente, al parecer le extrañó el porqué de mi pregunta y con razón; pero me sonrió y me respondió:

- No lo sé, pero a veces sabemos que una persona nos gusta y lo negamos ante los demás y a nosotros mismos.

Las palabras de mi madre resonaron por toda mi cabeza. ¿En realidad, me gusta Koga y siempre me gustó? De repente las palabras de mi madre me hicieron reaccionar:

- Alexa, cariño, se te va a hacer tarde.

Y era verdad, si no me daba prisa no podré alcanzar a los chicos. Cogí mi mochila, le dí un beso en la mejilla a mi mamá y me fuí. En el momento en que salía Koga estaba pasando frente por mi casa.

- ¡Koga! -le grité para que se parara e irnos juntos a la escuela, pero no sé detuvo.

Lo volví a llamar pero no me hizo caso, eso no era normal en él. Ahí fue cuando me acordé de lo que había pasado anoche, lo había olvidado por un momento. Tuve que irme a la escuela sola. De camino iba pensando en Koga y principalmente en aquel beso.

- Por qué hice eso, por qué. -iba gritando al viento.- Pero lo peor, porqué me tuvo que gustar.

En ese momento tropecé con una piedra y caí al piso, que también besaba de vez en cuando. Me senté en el suelo para revisar si todo estaba bien; solo me había lastimado la rodilla izquierda. Me dolía un poco pero en ese momento lo que más me dolía fue la manera en que Koga me trató, ni siquiera fué capaz de mirarme a la cara. Empecé a llorar sin importar que estaba en medio de la calle.

- ¡Eres un idiota, un gran idiota pelirrojo! -grité fuertemente aún llorando.

En eso sentí que alguien tocaba mi hombro. Me viré hacia esa dirección y pude ver la cara de Yaisandra junto a Kevin a su lado.

- ¿Estás bien? -preguntó ayudándome a levantarme.

Me sacudí la ropa, sequé mis lágrimas y le respondí:

- Si, estoy bien gracias.

- Si se puede saber, ¿Quién es ese idiota pelirrojo que gritabas?¿Te refieres a Koga? -preguntó Kevin con una sonrisa.

Miré hacia abajo y recogí mi mochila del piso.

- No tienes que responderme, tú cara lo dice todo. ¿Ustedes discutieron, verdad? Él iba de camino a la escuela un poco decaído y ahora te veo a tí en estas condiciones, me da a pensar eso.

- Kevin basta, no es asunto nuestro. -regañó Yaisandra a su novio jalándole una oreja.

Eso hizo que riera un poco y seguimos caminando hacía la escuela. Me contaron lo que pasó anoche y me emocioné tanto que no podía dejar de gritar.

- Felicidades por su relación. Se tardaron un poco para no decir bastante.

Los dos se empezaron a reír. Antes de entrar al aula Yaisandra se detuvo y le dijo a Kevin que fuera entrando. Ella se puso frente a mí y me dijo:

- Alexa ya basta de mentirte a ti misma; a tí te gusta Koga, no lo niegues. Ármate de valor y dícelo de una vez.

Sus palabras me impactaron de tal forma que no pude moverme.

- Vivías aconsejandome sobre Kevin y ahora hago lo mismo contigo sobre Koga. Confío en que harás lo correcto.

Dijo eso y entró al aula. Detrás de ella lo hice yo. Cuando me fuí a sentar en mi puesto encontré el trabajo práctico final de Física. En él estaba escrito el nombre de Koga y el mío. No podía creer que lo había hecho todo él solo. Revisé el trabajo rápidamente y estaba completo, solo faltaban las conclusiones, él nunca aprendió a hacerlas bien; decía que para que era necesario hacer un resumen después de haber hecho una investigación detallada, solo una persona sin cerebro no lo entendería. Eso hizo que de momento me empezará a reír. Volví a casa sola, tal como me fuí. Hoy había sido un día horrible para mí, ver cómo Koga huía de mí me rompió aún más el corazón. Fueron pasando los días, esos días se convirtieron en dos semanas, y todo seguía igual entre Koga y yo. Voy de camino a la reunión en la casa abandonada con Yaisandra y Kevin, la más hermosa pareja del momento. Cuando llegué todos ya estaban ahí, hasta Koga. Nos acomodamos y metí la mano en la caja de los nombres. Saqué un papel y el nombre que tenía era:

Koga

Lo leí en voz alta para que todos escucharan. Koga suspiró y me miró. Su mirada era tenía un pequeño tono triste, sus ojos se veían como café amargo.

- Por más que no me guste, voy a tener que contar este horrible secreto...

Hola queridos lectores. Espero que les haya gustado el cap. No lo olviden, comenten y voten. Bye