Todo se sentía diferente en la escuela. Había un aura diferente. O tal vez era solamente el cambio de actitud de su mejor amigo.

Beomgyu miraba a Soobin desde el otro extremo del pasillo, recién acaba de llegar, felizmente temprano esta vez.

Soobin sacaba sus cosas de su casillero, totalmente normal, pero había algo diferente ese día. Quizás era su mirada o la sonrisa relajada que llevaba pintada en el rostro.

Beomgyu estaba seguro de no haber visto esa expresión tan calma en su mejor amigo desde hace meses. No sabía a qué se debía, pero estaba feliz por ya no tener que ver la misma cara abatida a la que se estaba acostumbrado.

Sin quitar la sonrisa de su rostro, el ahora pelinegro, se acercó a saludar a su mejor amigo.

Beomgyu tocó los cascos de sus audífonos con el dedo índice para que se percatara de su presencia.

Soobin abrió más los ojos, y cuando se dio cuenta de que era Beomgyu, le sonrió, quitándole lo audífonos.

——Buenos días, solecito ——saludó el pelinegro.

Soobin se quedó observando su cambio de look.

——Se ve mucho mejor que en fotos ——halagó Soobin ——. Definiuvamente el negro es tu color.

Como toda una diva, Beomgyu peinó su cabello para atrás, luciéndonlo.

——A los guapos nos queda todo, querido.

Soobin se le quedó viendo como si estuviera loco y luego rió.

Más allá de la broma, Beomgyu se enfocó en la sonrisa abierta y sincera de Soobin.

Se dio cuenta que había extrañado a alguien a quien había estado viendo todos los días. ¿Cómo eso era posible?

——¿Soy yo o te picó la abejita de la felicidad?

Con la misma radiante sonrisa ahora de labios cerrados, respondió.

——Digamos que sí.

——¿Y no piensas contarle a tu mejor amigo la razón?

Soobin arrugó la nariz y negó tiernamente con la cabeza. Le pegó suavemente a Beomgyu en el hombro y se alejó dando saltitos.

——Nop, vamos a clase para que copies mi tarea. Esta vez sí hice todas.

Beomgyu le frunció el ceño a la imagen de la espalda de su mejor amigo, alejarse.

——¿Quién eres tú y que le hiciste a Soobin? ——Pretendía sonar extrañado, pero el alivio cariñoso se coló un poco en su tono de voz.

Soobin volteó con esa sonrisa encantadora tan característica suya, llevándose varias miradas de personas que nunca lo habían notado antes.

——Justo aquí, amigo, justo aquí.

En la hora el almuerzo, fue todavía más extraño.

Apenas salieron de clases, Soobin parecía buscar a alguien con la mirada, ya no le prestaba atención a Beomgyu.

——Oh, vamos ——Entornó los ojos alejando su bandeja ——¿A quién estás buscando? Ya me hartaste.

——Creí que no querías saber nada del tema ——le recordó Soobin sin cesar su búsqueda visual.

Beomgyu exhaló sonoramente.

——Supongo que no me va a matar saber un día. Hoy fue un buen día.

Justo cuando terminó de hablar, fue que lo vio.

Yeonjun entrando en la cafetería seguido de sus dos mejores amigos.

De alguna forma, Yeonjun miró a Soobin, o lo sintió, porque Beomgyu no entendió como lo encontró tan rápido entre tanta gente.

Soobin se levantó un poco emocionado de su silla, con timidez alzó la mano y saludó en su dirección, con una sonrisa tímida.

Yeonjun solía hacer un gesto simple para saludarlo de vuelta, pero esa mañana fue diferente, y ahora Beomgyu entendía un poco más la actitud nueva y renovada de Soobin, porque Yeonjun esta vez le respondió de la misma forma, con la misma sonrisa grande, como si estuviera genuinamente feliz. Pero eso no fue lo más raro de todo, sino que se le quedó mirando, así, a metros de distancia.

De verdad como si fuera una estúpida película adolescente.

——¡Yeonjun! ——Alguien lo llamó de una mesa cercana. Pero no se movió. Esa persona lo intentó de nuevo ——¡¡Yeonjun!!

Fue al segundo llamado que el peliazul por fin reaccionó, y con una sonrisa tímida, desvió su mirada hacia la mesa donde estaban sus amigos.

A su costado escuchó a Soobin suspirar.

¿Qué diablos? Por poco se rió por lo raro que había sido eso. Negó con la cabeza y empezó a comer junto a un Soobin coloradito.

——Ok, ¿qué carajos pasó con Yeonjun?

En su tercer y último receso de la jornada escolar, Beomgyu se había sentado junto a Soobin, cerca de las mesas del segundo patio.

El castaño había salido más temprano como siempre y estaba esperándolo con un rostro impasible, con una manzana roja brillante en la mano.

——¿Hmm? ——Tan perdido y distraído que no parecía ser el mismo de siempre, subió la mirada de la manzana a su mejor amigo.

——Claro ——se burló el pelinegro sentándose ——. Es muy obvio que algo pasó y no te dejaré irte hasta que me digas qué demonios fue. Juro que casi escupo el agua cuando Sunoo me contó que Yeonjun lo había defendido de Jaehyun.

Sin poder creer que había escuchado lo que había escuchado, se detuvo un segundo a procesar.

——¿Qué?

——Tal como lo escuchas, Sunoo me contó durante la clase de geografía que Yeonjun lo defendió de su amiguito Jaehyun. Esto no es normal, definitivamente hay algo detrás, o tan solo le picó una araña radioactiva.

¿Por qué Soobin ahora estaba sonriendo como tonto de la nada? Ni siquiera podía disimularlo ¡Tampoco le estaba diciendo nada!

——¿Eso no lo convertiría en Spiderman?

——Huh ——bufó con burla ——, lo único que tiene en común con el gran Peter Parker es su bonita Mary Jane.

——¿Su Mary Jane? ——Una ceja suspicaz se alzó en el rostro de Soobin.

Beomgyu tuvo que apretar los labios para no reírse: Un Soobin celoso jamás dejaría de ser lindo.

——Sí, su tonta pelirroja pero versión castaña de 1,85 cm que babea por el tipo.

Una vez entendido el mal chiste, Soobin dejó dicha expresión seria atrás para sonreír de a poquito con alivio y diversión.

——Ni siquiera te has visto la película.

——Escuchar a mi mejor amigo hacerlo cada bendito año, es suficiente.

Se miraron a los ojos un momento y rieron. Ambos sabían lo fanático que SooBin podía ser.

——Bueno, ya ——dijo Beomgyu ——. Necesito que me expliques qué fue todo eso.

——Hmm, ¿qué pasó exactamente?

——Sunoo se sentó conmigo, y bueno, sabes que somos buenos amigos; me contó que en el segundo recreo, Yeonjun se le había acercado y que obviamente se tensó por eso, pero que todo cambió cuando le devolvió los lentes que Jaehyun le había quitado hace semanas.

——¿Los negros?

——Exactamente ——Asintió ——. El idiota de Jaehyun sigue molestándolo todo el tiempo. Ugh, como lo odio. Si no fuera por las conexiones de su padre, ese idiota y todo su grupito abusivo de descerebrados hubieran sido expulsados hace años.

SooBin asintío en corcondancia, eran unos desgraciados.

——Me alegra que tuviera de vuelta sus lentes, es corto de vista, ¿pero cuál es el punto?

——¿Cuál es? Que Yeonjun se los devolvió y se disculpó en nombre de sus amiguitos, lo cual es jodidamente extraño. Aunque... Pensándolo bien, no tanto. De seguro tiene algún plan maquiavélico en esa cabeza azul. De seguro quiere ganarse su confianza para luego manipularlo con palabras "lindas". No sería la primera que lo hace. Pero hay algo que no me convence...

La última parte era lo que más le desagradaba a SooBin, porque era cierto.

——No creo que sea eso ——terminó diciendo ——, Jaehyun y Yeonjun son amigos. ¿Por qué se ganaría problemas con su amigo tan solo para defender a Sunoo?

——No lo sé, los bravucones se entienden entre ellos

——Beom... ——El tono de SooBin era amenazante.

——¿Qué? ——soltó Beomgyu a la defensiva ——. Es verdad, dime con quién te juntas y te diré quién eres, ¿no?

——Ellos no son tan amigos, están en grupos diferentes y se juntan con gente diferente.

——Sí, tu Yeonjun se junta con todos, y lo más gracioso es que en realidad esa linda ovejita no pertenece a ningún rebaño ——No había una pizca de burla en lo que dijo, sino seriedad ——. Lo de Jaehyu-

——Sabes perfectamente que no son del mismo tipo ——defendió SooBin no muy agradable.

Si bien era cierto que Yeonjun era espeluznantemente calculador y manipulador con las personas, él jamás molestaba directamente a nadie. Era más como si se aprovechará de la gente. A expensas de ellos con tal de alcanzar algo.

——No me interrumpas. No terminé de contarte lo que me dijo Sunoo ——Soobin entonces le prestó atención total ——. Bien, el punto es que Sunoo me dijo eso, y como no es tonto, sabe que es extraño que Yeonjun actuara así de repente. Pero lo que me hace cuestionarme mi teoría, la que te acabo de decir, es lo que me dijo al final...

Claro que tenía que dejar de hablar. Beomgyu no era Beomgyu si no se hacía el interesante.

——¿Qué te dijo?

——Se disculpó y le prometió que ya nadie lo molestaría a él ni a sus amigos. ¿Cómo puede prometer algo así?

SooBin sintió algo en la panza.

O era hambre, o eran las mariposas; o ambas.

Entonces lo pensó. ¿Podría ser? ¿Podría ser cierto?

——Luego escuché a los menores decir que Yeonjun había discutido con Jaehyun y no sé que tantos, ya sabes, el chisme nunca muere.

SooBin sonrió, de aquellas sonrisas únicas en el globo.

🔙

——Creo que he estado viviendo como un cobarde todo el tiempo. Lo he hecho, ¿verdad? Quiero cambiar eso, te prometo que voy a cambiar eso.

——Mostrar debilidad no es ser débil, hyung ——Se giró sobre sus talones, para verlo a la cara después de llegar al pórtico del mayor. La puerta estaba ya abierta y un fino y frío viento corría hacia el interior de la casa ——, te hace humano.

——Humano...—— dijo sonriendo apenas, mirando sus pies, balanceándose en estos ——Qué bonito suena eso.

A SooBin le pareció ver color en sus mejillas, pero le había parecido, o eso pensó.

Con una sonrisa ladina lo observó, tan solo pensando en que podría ser la cosita más linda del planeta.

——No todos son demonios, pero eso tampoco quiere decir que todos son ángeles, hyung.

«Pero tú lo eres».

Quizás lo bonito de ser seres racionales e imperfectos, es que dejamos lugar al error, en consecuencia, existe lugar para la evolución y la mejora.

Y no hay mejor sensación en el mundo que la de superación: Cuando te das cuenta que eres un poco mejor que ayer.

El propósito de que estar con vida, es vivirla, ¿verdad?

Yeonjun en ningún momento subió la mirada, eso desalentó a SooBin un poco, pero entendía de donde provenía ese nerviosismo y debate moral.

Nadie quiere humano en un mundo donde serlo, significa ser débil.

Nadie quiere ser débil en un mundo que te obliga a ser fuerte.

Nadie quiere, pero no es nuestra elección, ¿O sí?

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——¡Llamando Tierra a SooBin! ¡Maldita sea, hombre! Has estado tan raro hoy que hasta estoy asustado ——La expresión de Beomgyu cambió de estar irritada a consternada ——  Oye... ——Su voz tembló con desconfianza ——La sugerencia de la marihuana era broma. Dime por favor que no estás drogado. No ¡Ah, deja de sonreír así!

SooBin escuchaba y entendía al pelinegro, pero se sentía tan lejano...

Sonrió y suspiró: La verdad quizás sí estaba drogado, de la mejor forma posible.

——Yeonjun está cambiando, Beom.

El ceño fruncido del pelinegro era como esos de los cómics.

——Y no podría estar más feliz con ser la razón de ello.

Linda semana ♥