Capítulo 5.
[Advertencia: este capítulo puede contener temas que afecten la sensibilidad del lector (trastornos alimenticios). Se recomienda discreción]
— Inko-san, ¿Alguna vez pensó en el porqué Izuku-kun ama tanto a los héroes?
—...—ante la pregunta de Sorato-san, Inko abrió la boca para inmediatamente después cerrarla al darse cuenta que... no sabía la respuesta— No lo sé —admitió, desviando la mirada.
Sorato suspiró— ¿Alguna vez Hisashi-san le mostró los héroes en televisión a Izuku-kun...? —reformuló su pregunta.
— Bueno, ahora que lo dice...
Cada vez que Hisashi volvía del trabajo, Izuku y él jugaban y veían el programa de los héroes en la televisión.
— Pero él sólo tenía un año en ese entonces... ¿O dos...? —dudó, sin poder recordar bien. Habían pasado más de diez años, era normal no poder recordar.
Sorato levantó su mirada de sus apuntes para verla— Inko-san, es probable que Izuku-kun haya creado una especie de vínculo mental entre "la figura paterna" y "los héroes".
—...—Inko no respondió, en su lugar apretó la tela de su falda con sus manos, sin atreverse a levantar su mirada para así ver al psicólogo de su hijo.
Al notar la reacción de la mujer, Sorato decidió seguir hablando— Aunque insista en que la ausencia de su padre no le afecta, Izuku-kun no ha tenido una figura paterna presente en casi toda su vida, y ante la situación de no saber cómo pedir la atención de su padre y no poder desahogar su frustración ante su ausencia, él reemplazó a esa figura con los héroes que veía en la televisión. Los héroes nunca fallaban y siempre estaban para él.
— Eso significa...
Sorato se quitó sus lentes, masajeándose el puente de la nariz— Es probable que el fanatismo de Izuku-kun hacía All Might es porque hubo un momento en que él pensó "quisiera que papá sea como él" y, con el pasar del tiempo, él comenzara a vincular a la figura del héroe All Might con la de una figura paterna protectora, alguien a quien imitar, alguien a quien seguir. Es posible que esa sea razón por la que ha elegido la senda de "ser un héroe" incluso sin un quirk, él está tratando de emular a su padre —se volvió a colocar los lentes— O al menos a lo que él siente que es un padre.
Ante estas palabras Inko se quedó sin palabras, completamente congelada en su lugar. Eso... explicaba muchas cosas...
— P-Pero, Izuku...
— Es un vínculo hecho de manera inconsciente. Izuku-kun no es consciente de esto... del todo —suspiró, mirando a la mujer— Inko-san, ¿Por qué sigue casada con Hisashi-san?
—...—Inko bajó la mirada, evitando la mirada dorada del hombre— Yo... No quiero ser una madre soltera...—admitió con un hilo de voz.
— Pero, Inko-san, ¿No es exactamente eso lo que lleva siendo desde hace más de 10 años...?
— Sí, pero...
La interrumpió— Independientemente del estigma social que causa un divorcio, Inko-san, usted ha idealizado demasiado a su esposo, aferrándose a los recuerdos del pasado y a lo que alguna vez fue un matrimonio feliz, y ahora que ve que no puede contar con él, siente que su mundo se tambalea. Esta situación no sólo la hiere a usted sino a Izuku-kun también.
No pudo decir nada, pues era verdad. Ella seguía con la esperanza de que Hisashi volviera y pudieran ser una vez más la familia que fueron alguna vez...
— Sin embargo, ¿Usted está segura de que él realmente siente lo mismo? —interrumpió su hilo mental— La falta de interés en hablar con Izuku-kun, la falta de interés en contactar con ustedes, su ausencia sin importar la época del año, sin siquiera una visita al año. No creo que la empresa en la que está trabajando le impida a Hisashi-san tener vacaciones o una reubicación si trabaja tan duro como para estar ocupado todos los días del año.
— N-No es eso. Él...—su voz comenzó a ser más débil con cada palabra.
— ¿Él...? —la instó a seguir.
—...—Inko tuvo miedo de seguir hablando, pues se sentía desnuda ante la mirada del psicólogo. Sabía que él sabía que diría una excusa, una mentira blanca como la que ella le dio a Izuku cada vez que preguntaba por su padre, una mentira como la que Hisashi le daba cuando la llamaba...
Una mentira.
— ¿Realmente cree que esto es lo mejor para usted? —cuestionó el hombre de cabello azul, quitándose los lentes una vez más— Inko-san, usted pronto cumplirá los 40 años y sigue atada a un hombre que no ha pisado Japón en más de doce años. ¿Usted siquiera tiene la seguridad de que Hisashi-san está solo allá-?
— Es suficiente —la mujer se levantó bruscamente, consciente de las implicaciones de sus palabras.
Hisashi nunca la engañaría.
— El Hisashi que usted conoce nunca la engañaría —declaró Sorato, mirándola a los ojos, permitiéndose leer su mente.
Un psicólogo que lee mentes...
— Pero, ese Hisashi y el Hisashi real... ¿Son lo mismo?
Inko tragó duro, sintiendo su boca seca como el infierno— Tengo que irme. Pronto empezará mi turno en la tienda...
Sorato sonrió con amabilidad, cerrando sus ojos antes de volver a colocarse los lentes— Como usted quiera, Inko-san. Fue un placer hablar con usted sobre los avances que está teniendo Izuku-kun —dijo con tranquilidad mientras veía a la mujer huir de su mirada y de lo que él representaba.
— El placer fue mío —se despidió de manera seca, siendo corroída por los pensamientos que había en su interior.
Hisashi... él no... él no la estaba engañando, ¿Verdad...? Pero... ya eran doce años...
Hisashi ni siquiera había venido de visita ni una sola vez desde que se transfirió. Tal y como dijo Sorato-san, él jamás volvió a pisar Japón desde ese día y tampoco le dejó ir a ella cuando le planteó la idea de visitarlo...
Izuku... ¿Él realmente pensaba en los héroes como su ejemplo ante su ausencia...?
— Mamá, ya hablamos de esto...—suspiró Izuku, viéndola comer una bolsa de papas fritas cuando llegó de la escuela. Fue entonces que el chico tomó una de las bolsas de basura para luego acercarse a ella— Mamá, mételos en la bolsa —exigió, abriendo la bolsa.
— ¡Pero son mis favoritos...!
— Mamá...
Al ver el rostro de Izuku, tan serio mientras extendía la bolsa, Inko se congeló en el sofá.
— Midoriya-san, creo que Izuku-kun está llevando un gran peso en sus hombros. Ambos se sienten culpables y responsables por el otro, y eso no es sano para él ni para usted.
—...—apretó la bolsa de papas en sus manos.
— No es bueno que un hijo sienta que debe hacerse cargo de un padre, así como no es bueno para Izuku-kun verla llorar junto al teléfono después de una llamada de su esposo.
Sin decir nada, Inko extendió su mano al basurero, soltando la bolsa en sus manos.
— ¿Tienes más...? —el chico entrecerró los ojos.
Ella...
Realmente Izuku...
— No...—admitió ella, desviando la mirada. Ahora mismo se sentía incapaz de mirar el rostro de su hijo— Las compré hoy en el trabajo...
Izuku suspiró— Mamá, el doctor ya dijo que no debes comerlos. Son malos para tu salud, además, has hecho un gran avance bajando de peso estos tres meses —agregó, intentando animarla al verla tan... sombría. Ella ni siquiera había cedido a la tentación de los dulces de Halloween ¿Por qué ahora...?
— Lo sé...
Las gaseosas, los dulces, las frituras, todo eso era fácil, más fácil que aceptar la realidad en que vivía...
— Sabes que puedes comerlas de vez en cuando, pero compraste dos bolsas —suspiró Izuku, cerrando la bolsa para evitar que ella quisiera recuperarlos.
— Lo lamento...
No le gustaba este sentimiento.
No le gustaba sentir que era una carga para su hijo. No quería que él sintiera que era responsable de su felicidad porque su padre no estaba, ella no quería eso. Ella era su madre, ella se suponía que debía encargarse de que Izuku fuera feliz, no al revés. No se suponía que él se preocupara de ella como si debiera protegerla...
Quizás... ¿Es por esto que él no le dijo nada de lo que pasaba en su anterior escuela? Él... ¿No quería que ella se preocupara...?
Ante este pensamiento su corazón dolió. Sólo... ¿Qué había hecho como madre todo este tiempo...?
Inko extendió su mano hacia su hijo.
— ¿Mamá...?
— Izuku, lo siento...
Izuku no pudo entender porque su madre lucía tan destrozada cuando pronunció esa disculpa. ¿Quizás fue muy lejos en regañarla por comprar frituras...?
‹Lo siento por ser una mala madre›
[Reminder for Buddy: Badi, give me my stars, you didn't give them to me in the previous chapter >:'c]
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