NARRACIÓN OMNIPRESENTE

En una sala de hospital en Noruega, una mujer gritaba de dolor al dar a luz al que sería su primer y único hijo. Su esposo, un hombre alto, serio y de buen porte... esperaba con su impasible mirada en la sala de espera, no era un ser de muchas palabras pero amaba a su esposa, aunque no pareciera se moría de nervios.

Los doctores y enfermeras hacían lo posible para mejorar la situación, ya eran 10 angustiantes horas en las que la mujer no hallaba descanso. Esa joven rubia de ojos color ámbar se esforzaba al máximo, daría lo que fuera por conocer a su pequeño hijo.

Grande fue el alivio cuando el llanto del pequeño ser inundo la sala, rápidamente las enfermeras siguieron el protocolo establecido y limpiaron al recién nacido, lo revisaron y cuando todo estuvo en orden, lo envolvieron para dárselo a la emocionada mamá.

Su esposo irrumpió a paso rápido cuando el doctor le dio permiso de entrar, vio a su amada esposa sostener a su descendencia, impaciente se acercó a ver el pequeño rostro. Había heredado el cabello profundamente negro de su padre y la piel tan blanca como la de su madre.

-Míralo- Jolene abrió un poco la manta para que el orgulloso padre mirara mejor a su hijo. Sus manitas se estiraron buscando algo que sostener encontrando uno de los dedos de su padre; apenas sintió el contacto abrió los ojos que deslumbraban unas largas pestañas.

-Son iguales a los tuyos- Dijo Adrián.

Ambos, conmovidos... esperaban ansiosos el poder llevárselo a casa, donde le esperaba al recién llegado una nueva vida.

Una de las enfermeras reviso los signos vitales de la mujer, con dulce mirada contemplaba a la feliz pareja... no quería interrumpir el intimo momento, pero la curiosidad de la joven pudo más.

-Su bebe es muy lindo...- Se acercó-... ¿Cómo lo van a llamar Señores Aeva?-

La pareja se miró cómplice, como recordando alguna anécdota. Finalmente la madre rubia contesto:

-Des, se llama Des Aeva desde hoy-

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Vida observaba desde el marco de la puerta, la escena era encantadora; cuanto amaba ver una familia como esa, apenas iniciando... como anhelaba que pronto tengan más hijos; mejor para él.

Pero algo era diferente, muy ligeramente de hecho, se acercó un poco al bebe en brazos de su madre. No tenía nada de especial, era como muchos a los que bendecía con su poder, quizás lo descubriría más adelante.

Ahora tenía que retirarse, en su mente había un asunto que atender.

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ITHIS

Vida llevaba horas buscando a su contraparte, recorrió los jardines de lado a lado, busco en la Cornucopia, y en ese momento volvía de una inmensa pero superficial búsqueda en la tierra; buscarlo en su hogar no era una opción debido a que desconocía su ubicación.

Su última esperanza era buscar a Amor para ver si sabía algo de Muerte. No estaba muy cómodo con la situación, después de todo la última vez que estuvo ahí, escucho una conversación entre la diosa y su contraparte; había sido grosero pero gracias a eso entendió algo que no sabía hasta ese momento.

"Muerte amaba su trabajo" Eso lo puso nervioso pero también lo emociono; poco antes se armó de valor para hablar con él pero su cobardía no dejo que lo despertara dejando como único indicio de su presencia una flor junto al bello durmiente.

-Vida- La diosa iba de llegada cuando lo vio en las puertas de su hogar.

-¿Amor?- Se le hizo algo raro ver a la jovencita con una expresión preocupada.

-¿Qué... que haces aquí?- Pregunto.

-Bueno...- Se llevó una mano a la nuca-... quería preguntarte algo-

Amor tenía un carácter pacífico y amable, pero en ese momento algo no cuadraba con su personalidad.

-Lo siento, ahora no tengo tiempo- De la nada una actitud tajante disloco al confundido de Vida.

-¿Eh?- Acaso escucho bien... lo que sea que fuera que molestara a la diosa, debía ser tan grave como para hacer que ella actuar así -Es importante- Dijo en un intento de llamar la atención de la susodicha quien fue seguida hasta dentro de los jardines mientras buscaba algo fervientemente.

-Sera después Vida, ahora mismo tengo que hablar con Vanidad- De alguna parte, saco un papel de mediano tamaño con lo que parecía un mini mapa de Ithis que señalaba los hogares de los dioses.

"Eso podría servirme" Pensó el hombre estrella- ¿Qué es tan grave para que no puedas responderme una simple pregunta?-

Amor volteo enfadada, su humor era terrible y la cosa no mejoraba al tener en frente al causante indirecto de su enojo- Sabes que... tu...- Se detuvo, no podía hablar... lo había prometido.

-Amor ¿Qué sucede?- Tomo un tono serio.

"No puedo" Suspiro- Ya te enteraras- Dicho eso, salió casi corriendo con el mapa en sus manos.

Vida solo la vio esfumarse por la salida- Diablos... ¿Ahora como sabré donde vive Muerte?-

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Los siguientes días, Vida se dedicó a sus labores usuales, dentro de sí tenía la esperanza de que en algún momento su contraparte se topara con él... como usualmente era.

Pero... los días pasaban, y varias preguntas azotaban la mente del creador. ¿Dónde está? ¿Se está ocultando? ¿Finalmente me odia?

Los días se convirtieron en semanas, Vida... ya preocupado tomo una medida drástica. Literalmente, se sentó al pie de la cama de un enfermo terminal, su muerte era próxima, con todo el dolor de su alma vio la agonía de su creación... pero lo soportaría, tenía que hablar con Muerte.

Sentado, aquella noche vio como la familia del enfermo se despedía; el momento estaba cerca, pero ¿Dónde estaba Muerte?

Los segundos pasaban, y la ansiedad de Vida iba en aumento; llego a un punto crítico que ocasionaba un fuerte ventarrón fuera del hospital.

"¡¿Dónde diablos esta?!"

El pitido continuo de la maquina anuncio el desenlace final; la familia lloro, los médicos marcaron la hora de muerte, incluso aquella persona se materializo en espíritu que esperaba su juicio al pie de la cama. Cuando aquello ocurrió, Vida estaba perplejo; aquella alma pregunto por su identidad, se daba cuenta de su muerte y ansiaba el llamado "descanso eterno"

El joven ya no supo que hacer... algo dentro de su pecho le decía que la situación era más grave de lo que aparentaba.

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-...a-

-...ida-

-¡Vida!- El dios reacciono de golpe, Sabiduría y los demás dioses lo observaban.

-¿Qué ocurre?-

-Has estado distraído toda la reunión- Aseguro Locura.

-Lo siento- Se disculpó.

Sabiduría puso los ojos en blanco, no era nada nuevo el usual comportamiento del dios creador-Bueno, ahora responde... ¿No has visto a Muerte estos días?-

-¡¿Eh?!- Justo en el clavo, él tenía la intención de mencionarlo en la reunión... pero tal parecía que sus pensamientos lo hundieron en un cuenco de posibilidades.

-¡¿Qué va a saber?! ¡Si es un despistado!- La voz molesta de Amor sorprendió a todos, esta miraba con enojo y brazos cruzados al benefactor, desde aquel día en los jardines la actitud de la diosa no cambiaba con él.

-No hagan escandalo...-Sabiduría se ajustó los lentes-... esto es un asunto serio, me han llegado reportes de que varias almas no han sido juzgadas... la más antigua data de algunas semanas atrás...- Dejo ver un pequeño montón de hojas-... ahora vagan como almas en pena alrededor del mundo- Puso el reporte sobre la mesa.

-Es un inútil - La voz de Vanidad hizo a todos girar.

-¿A qué te refieres?- Pregunto Vida.

La elegante dama se levantó y con una pose típica de ella se dirigió al benefactor ignorando las miradas acusadoras rogando que tuviera cuidado de sus palabras.

-Dejo a la deriva varias almas que van en aumento... seguro dejo de importarle, o se cansó de su trabajo- Aseguro la mujer.

Vida lo medito, eso no era posible... simplemente no podía.

-¡Eso no es verdad!...- Amor exploto-... ¡No puede ser! Lleva semanas desaparecido, y solo se dan cuenta cuando hay consecuencias, no entiendo cómo es que son tan insensibles-

-Locura, sácala de aquí...- Sabiduría tomaría medidas para evitar algún desastre.

-¡Deja de gritar chaparrita!- Protesto Vanidad.

Locura la tomo del brazo y con cuidado saco a la todavía molesta diosa. Las puertas fueron cerradas y la tensión del aire rebajo un poco. Sabiduría se llevó la mano a las sienes mientras que la elegante dama soltó un mordaz comentario:

-Por Ithis... actúa como si estuviera enamorada o algo así-

Y algo hizo click en la mente de Vida... pero lo analizaría después, ahora debía tratar un tema más importante.

-Es verdad lo que dice Amor...- Hablo Vida-...lleva desaparecido varias semanas-

-¿Qué haremos?- Pregunto Musa expresando la duda colectiva.

-Por ahora dedicarnos a buscarlo, esperemos que no haya pasado nada grave- Ordeno el rubio.

El benefactor tenía una ligera ansia de poner la búsqueda en marcha, una ligera esperanza de que su contraparte estuviera en su hogar, el único lugar al que no logro llegar debido a su ignorancia.

Médico, quien había permanecido como espectadora se levantó soltando un soplido exasperada- ¿Y si no lo encontramos?-

Un tenso silencio se hizo, Sabiduría sabía lo que pasaría.

-Si la situación se complica más, buscaremos a Tiempo... si no nos ayuda (lo que es muy probable) le corresponde a Vida hablar con Ithis-

El mencionado esperaba no tener que llegar a aquello, ya que significaba que el problema era realmente grave.

ººººººººººººººººº

Un día, dos, tres...

Una semana.

Vida dejo de lado su trabajo para buscar fervientemente a Muerte; algo dentro de él le decía que debía encontrarlo como fuere. La preocupación empezó a afectar a los otros dioses, no por Muerte... si no por las consecuencias.

Aquella noche la situación empezaba a volverse caótica, el mundo humano clamaba por un extraño fenómeno; si de por si los casos de fantasmas eran usuales ahora aumentaban exponencialmente, alrededor del mundo la gente se asustaba de los usuales síntomas de una "casa embrujada" almas en pena en busca de un juicio que no llegaba. Las almas de la Cornucopia se agotaban, una razón más por la que Vida paro casi por completo su labor, los efectos colaterales en mujeres que ya debían dar a luz y no lo hacían desconcertaban a los doctores. En un intento por reducir las muertes, Amor y Fortuna trabajaban el doble; evitando accidentes y motivando a la gente a vivir; pero esta acción tenia doble filo ya que el humano repetía una y otra vez las acciones peligrosas por la simple razón de "la última vez tuve suerte".

Estas situaciones derivarían a más consecuencias en el futuro, lo que por ende provocaría el desequilibrio tan fatal que nadie esperaba hasta que empezó a suscitarse frente a sus ojos. Muerte era esencial para el orden de las cosas, por eso estaba a la par de Vida.

El benefactor tenía un cumulo de emociones tensas que no ayudaba para nada al clima terrestre manteniendo ciertos lugares en una oscura capa de nubes; en última estancia fue a visitar a Amor de nuevo, estaba agobiado por saber si ella tenía noticias de Muerte.

Los ayudantes de la diosa lo recibieron y anunciaron su llegada.

-¿Vida?- La mujer lo miro extrañada.

-Sí, tengo que hablar contigo- Fue directo al grano.

La diosa se cruzó de brazos y medito un momento si sería bueno hablar con él, aún estaba molesta pero no era rencorosa- Esta bien, siéntate- Ambos fueron hasta una mesa donde usualmente Amor recibía a sus invitados, pero no le ofreció te.

-¿Tienes alguna noticia de Muerte?-

La pregunta toco el corazón de la señorita, ella estaba muy preocupada por su querido amigo.

-No...- Su mirada se suavizo-... ¿Y tú?-

-Tampoco...- "¿De verdad soy tan inútil como para no poder hacer algo más?" Ese pensamiento hizo que por fin liberara algo de tensión, se dejó caer sobre la mesa sobresaltando a Amor-... por Ithis, esto no está pasando-

Amor lo vio desconcertada, su radar se encendió; por instinto se levantó de su silla y se paró junto a Vida, levanto su rostro para verlo a los ojos, tenía que confirmar lo que estaba pensando. El benefactor se intimido un poco por la acción algo brusca pero su tormenta interior era más pesada que su incomodidad por la fija mirada de la chica.

-Vida... estas preocupado- Amor le creyó sinceramente esta vez, ahora se compadecía por el ser frente a ella.

-Amor ¿Cuándo fue la última vez que viste a Muerte?-

-Pues...-

FLASH BACK

-Estas muy callado Muerte ¿Pasa algo?- Inquirió la mujercita.

-No ocurre nada... no te preocupes- Dirigió su vista a su taza.

-Muerte, al menos mírame como es debido, no evites contacto visual- Se quejó con angustia.

-Es que... puedes leer el corazón de las personas a través de sus ojos como si fuese un libro abierto...- Miro a un lado-... no creo que sea algo muy inteligente de hacer-

Amor puso su mano en el rostro del contrario para obligarlo a verla.

-No tienes remedio... oh Muerte-

FIN FLASH BACK

-... hable con él hace varias semanas, vino a tomar él te- Dijo mientras los recuerdos de aquel día le venían a la mente.

-Recuerdo ese día- Vida se llevó una mano a la nuca algo nervioso.

-¿Cómo que lo recuerdas? Tu no estabas aquí...- Dijo la diosa, hasta que sospecho-... ¡Estabas espiando!-

-No...-

FLASH BACK

Vida caminaba perdido en sus pensamientos, las ayudantes de Amor quisieron anunciarlo pero el insistió en que encontraría solo a la diosa, hasta que escucho unas voces.

-¡Vida ha sido muy malo contigo!-

¿Estaban hablando de él?

-Nosotros tenemos una historia juntos, y... amo su trabajo-

FIN FLASH BACK

-... por supuesto que no-

Amor lo tomo del cuello de su camisa- ¿Qué tanto escuchaste?-

-So... solo la última parte- Dijo algo nervioso.

-Mmmm...- Lo soltó, la chica recordó las últimas palabras que compartieron antes de despedirse-... entonces, tu sabes que a él le gusta lo que haces-

-Si... de hecho, por eso vine aquí unos días después-

-¿Aquí?-

-Sí, es que cuando tuve la oportunidad no hable con él así que al volver a buscarlo no lo encontré, te vine a buscar para que me dijeras donde vivía pero por algún motivo estabas muy molesta-

-Sí, se me había olvidado-

-Por cierto ¿Por qué tenías que hablar con Vanidad aquel día?- Esa pregunta le había rondado la cabeza durante un tiempo desde aquel día.

-¡Esa mujer es una insensible, no sabe medirse cuando...!- Se tapó la boca antes de decir algo comprometedor.

-¿Peleaste con ella?-

-Si- Amor se cruzó de brazos pero cuando iba a seguir hablando, uno de los cupidos interrumpió anunciando que se los citaba a todos los dioses a una reunión de emergencia.

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-Bien...- Sabiduría tiro el grueso informe sobre la mesa haciendo que todos callaran sus parloteos para prestarle atención-...el problema se está haciendo cada vez más grave; los reportes de mis ayudantes dicen que los humanos están perdiendo el sentido común de las cosas, esto de los "fantasmas" los está alterando-

-¿No hay noticias de Muerte?- Pregunto Medico impasible.

-No, a menos que alguno haya visto algo- Sabiduría estiro los brazos aludiendo a que alguno hablara, nadie lo hizo.

De pronto Locura se paró-Esto no es posible, no puede haber desaparecido así como así... ¡Diablos! El sujeto mide más de dos metros ¿Cómo lo perdimos de vista?-

-Bueno...- Todos voltearon a ver a Fortuna-... yo lo vi cerca del bosque de Ithis después de...-

-¡Fortuna!- Interrumpió Amor-... ¿Por qué no mencionaste eso antes?- Dijo entre dientes señalando al ignorante Vida con la mirada advirtiendo su presencia.

-Pues no se me paso por la mente- Dijo con simpleza.

-Amor tiene razón...- Hablo Sabiduría-... debiste comentarlo antes, hubiéramos empezado la búsqueda por ahí-

-Asumí que quería estar solo- Dio un soplo a su pipa.

Vida analizaba lo que escuchaba "Siento que me estoy perdiendo de algo"- Como sea, debemos seguir buscando- Se levantó de su asiento y camino hacia la salida.

-Vida- Sabiduría trato de detenerlo.

-Debe estar escondido en alguna parte de ese bosque- Argumento en su paseo a la puerta.

-Vida-

-Mandare a mis aves a buscar y...-

-¡Vida!...- Finalmente el rubio logro su objetivo-... suspendimos la búsqueda, esta reunión es para decidir qué medidas tomaremos-

Eso era lo que más temía el benefactor, ahora estaba de frente con la realidad.

-Entonces...-

-Tú y yo iremos a buscar a Tiempo-

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EN LA TIERRA

La familia de Jolene se reunía alrededor de la preciosa cuna que lideraba la decoración del cuarto de su hijo; hastiados de ternura, veían como el pequeño bebe dormía tan inocente cubierto por suaves mantas.

Murmuros como: "Es tan lindo" "Quisiera llevármelo" "Se parece a Adrián" se escuchaban entre los invitados.

-Déjenle espacio por favor- La madre se hizo espacio para alcanzar la cuna.

-Hija...- La abuela se acercó-... estoy tan orgullosa, mi nieto es precioso-

-Gracias mamá, yo también lo adoro- Lo acuno en sus brazos provocando que el infante despertara.

-Aww... es tan pequeñito- Uno de los primos más pequeños hablo.

-Thomas no hables tan fuerte- Dijo una de las tías. De pronto el pequeño Des empezó a llorar.

-Oh no... por favor alguien tráigame el biberón- Dijo Jolene.

-Ya voy, acompáñame Thomas- Dijo la abuela tomando de la mano al niño.

La mejor amiga de la mamá se acercó-Cuida muy bien a tu hijo Jolene, uno de estos días te lo robo- bromeo.

-Ten tus propios hijos Valka- Dijo con saña y media burla.

Así era recibido el pequeño ser, con admiración a su temprana ternura... amado por su familia.

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ITHIS

-No-

Vida y Sabiduría casi se caen de espaldas ante la profunda negativa de Tiempo.

-Por favor... tú debes saber dónde está, las cosas se saldrán de control si no lo encontramos- Argumento el rubio.

-Yo no puedo intervenir en el curso de las cosas- Dijo con severa mirada.

Vida empezó a desesperarse- Te lo suplico, al menos alguna pista-

Tiempo lo observo unos segundos pensativo- Lo siento, no puedo ayudarlos-

El alto ser era imponente con su imagen, su largo mando combinaba perfecto con su también largo pelo plateado... y contrastaba con su piel celeste. Se dio la vuelta dispuesto a volver a su trabajo.

-¡Espera!...- Vida no se resignaría-... Se... sé que sabes dónde está, incluso se...- se mostró algo avergonzado-... que tú sabes del asunto pendiente que tengo con él...- Sabiduría lo miro curioso-... por eso te suplico de nuevo que nos ayudes-

Tiempo se volteó frente al creador- Sabes que disculparte no arreglara nada ¿Verdad?- Dijo con rencor algo que asombro de sobremanera al rubio que miraba desde atrás.

-¡Sé que estaba equivocado! ¡Pero quiero arreglarlo!- Grito.

El salón quedo en un sepulcral silencio, Tiempo obtuvo la respuesta que necesitaba- No puedo decirles nada, pero puedo mostrarles la última vez que fue visto por uno de los dioses. Sabiduría entro en pánico, pero trato con todas sus fuerzas de disimularlo.

-Síganme...- Los guio hasta una puerta dorada, muy alta y magnifica. Al ser abierta se vio un salón con varios espejos adornados de diferentes y coloridas formas-... estos espejos me muestran la vida de cada uno de los dioses-Vida vio que estos estaban ordenados en una especie de pirámide que clasificaba a sus compañeros por orden de importancia, es decir... en el primer escaño, estaban solo dos espejos. Uno lo reconoció como suyo debido a los bordes verdes llenos de plantas y flores; y el otro era de un marfil negro con adornos al estilo gótico, ese era el de Muerte.

Sabiduría sudaba la gota gorda cuando estuvieron frente al tétrico espejo, se estaba preparando mentalmente para lo que vendría.

Tiempo toco el espejo con su báculo y la imagen de un bosque en la tierra se hizo visible.

-¿Un bosque?- El rubio se relajó.

-Shh- Ordeno el benefactor. De pronto la imagen se enfocó en un dormido Muerte, este estaba sobre el césped acurrucado y tranquilo. Después Vida se vio a si mismo acercándose nervioso. Ahora reconocía la escena, esa fue la última vez que lo vio y la oportunidad que no tomo debido a su cobardía. La escena termino con él dejando la magnolia a su lado y marchándose por donde vino, el espejo se opacó de nuevo.

-Vida, no habías mencionado que fuiste tú quien lo vio por última vez- Dijo Sabiduría con los brazos cruzados.

-Esto...- El benefactor estaba algo avergonzado.

-Eso es en todo lo que puedo ayudar- Dijo Tiempo.

-Gracias...-Dijo el rubio-...pero ¿No podrías ayudar con algo más?-

-¿Qué será?-

-Necesitamos una audiencia con Ithis...- Volteo su mirada a Vida con expresión seria-... mi querido amigo debe comunicarle lo que está pasando-

Tiempo no se negó, y les dijo que vinieran al anochecer para hablar con el máximo creador.

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Después de que los dos dioses se fueran, Tiempo salió del palacio en dirección a la torre más alta de Ithis, ahí donde el creador moraba... en el camino pensaba y repetía las palabras de Vida.

"-¡Sé que estaba equivocado! ¡Pero quiero arreglarlo!-"

Ese cambio fue más rápido de lo que pensó, también algo de culpa lo embargo... ya que, les había mentido a los dioses. No fue Vida quien lo vio por última vez, fue él mismo, y no a través de sus espejos.

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El anochecer llego, Vida estaba en las puertas del palacio de Tiempo esperando a ser recibido... pensaba en su mente las palabras que utilizaría para hablar con su "Padre"; ya que Ithis era para él eso, su padre... aunque no lo hubiera visto ya por muchos siglos.

Las puertas eran abiertas, entro con calma buscando el salón principal donde Tiempo le dijo que su padre lo esperaría. A unos metros algo lo detuvo, una sensación pesada y oscura, lo reconoció de inmediato "Esencia del Nim"

Estaba demasiado emocionado como para notar que ese poder era mucho más fuerte y en mayor cantidad de lo que su contraparte expedía con su presencia.

Abrió las puertas de golpe para toparse con la decepcionante visión de su padre, Tiempo y Nim... el mismísimo señor de la oscuridad. "Entonces era eso" pensó.

-Creí que te alegrarías de verme- Dijo Ithis con sarcasmo al ver la decepción en su benefactor.

-Si lo estoy... es solo que-

-Vida...- Interrumpió Tiempo-... lamento no haberte avisado pero siendo Muerte hijo de Nim esto también le incumbe-

Ambos seres celestiales habían tomado una forma "humana" pero con sus mantos cubriendo su rostro.

-No hay problema- Vida recobro la compostura, se dirigió hacia sus superiores.

-Bien, Vida... dinos que sucede- Dijo Ithis.

-Muerte ha desaparecido- Dijo sin rodeos, esperando la reacción de Nim. Hubo un momento de silencio, hasta que el oscuro se le acerco descubriendo su rostro, de piel pálida rozando lo gris, cabello oscuro semi largo que le caía elegantemente en el rostro y unos ojos profundamente ámbar que le había heredado a su benefactor. Su enojo era palpable.

-No estarás hablando enserio- Dijo con sorna.

-Nim ni te atrevas a hacerle algo- Amenazo Ithis descubriendo su rostro, gracias a su apariencia fácilmente podría ser confundido con un ángel. Pelo cobrizo casi rojizo, ojos verdes y piel clara.

-No es mentira, hace varias semanas que nadie lo ha visto- Respondió el pequeño creador.

-¿Cómo quieres que no le haga nada? Si lo que dice es cierto, tus querido hijos son los principales culpables, en especial este- Señalo a Vida que se veía un poco confundido, solo un poco ya que él creía que se refería a su rechazo constante a Muerte.

-Escuchemos todo lo que tiene que decir- Ordeno el puro.

Nim volvió a tomar su postura fría y formal, siempre se salía de sus casillas cuando estaba frente a Ithis... odiaba eso con todos su ser.

-Bueno... lo hemos estado buscando durante mucho tiempo y las cosas han empezado a desequilibrarse en la tierra- Evitaba el contacto visual con su padre, ya que recibiría el usual "te lo dije" en su mirada... tantas veces en el pasado que le advirtieron del preciado equilibrio, pero como todo hijo caprichoso, jamás escucho; solo siguió evitando a Muerte por sus necedades.

-Eso explica porque escuchamos tantas quejas- Ithis se pasó la mano por el pelo; desde lo alto ambos seres escuchaban debes en cuando los clamores de la humanidad, en última instancia aunque Vida no les hubiera dicho nada Ithis y Nim hubieran tomado cartas en el asunto al ser esta queja demasiado fuerte.

-Vida...- Tiempo le llamo la atención-... sal un momento por favor, tu padre y Nim deben hablar para resolver este asunto-

El benefactor asintió, sabía que ahora todo estaba en manos de sus superiores; tendría que acatar lo que dijeran aunque no le gustara, pero dentro de sí... la preocupación no desaparecía ¿Les diría Tiempo donde estaba Muerte? Si sería así... ¿Sería correcto espiar?

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Nim, Ithis y Tiempo se quedaron callados hasta que la puerta del salón se cerró. El ser de pelo plateado conocía a Vida, era probable que quisiera espiarlos, por suerte sus paredes y puertas eran insonoras.

-Bueno...- Hablo el oscuro-... Tiempo gano la apuesta-

-¡Pero hizo trampa!- Alego Ithis en un tono algo infantil.

-Paguen- Tiempo alargo su mano frente a sus contrincantes. Ithis y Nim sacaron de sus mantos una pequeña botella que contenía una minúscula cantidad pura de la esencia de cada uno; dichos elementos le darían a Tiempo la habilidad de dejar su trabajo durante algunos años, ya ansiaba sus bien merecidas vacaciones de una eternidad enfrascado en su trabajo. Pero no los usaría en ese momento, lo tenía guardado para un momento en específico.

-No es justo...- Alego Ithis.

-Yo me comprometí a no ver los espejos hasta que vinieran a buscarlos, y así lo hice... Vida fue quien vino, yo gane- Defendió Tiempo mientras guardaba sus "preciosos" bajo su manto.

-Yo creí que sería Sabiduría quien daría la cara- Hablo el puro.

-Yo creí que tendríamos que bajar nosotros mismos- Dijo Nim.

-Bueno, de todas maneras es momento de darles esto- Tiempo saco el colgante que tenía guardado en su manga. Este tenía una piedra ámbar que brillaba ligeramente.

-Tienes razón-

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AL DIA SIGUIENTE

Vida esperaba sentado en la sala de reuniones, pronto llegarían los otros dioses buscando una respuesta en base a su visita al creador máximo.

Sabiduría terminaba de preparar los documentos que necesitarían para explicar la solución que el benefactor trajo consigo.

El hombre estrella estaba ido, definitivamente no le gustaba lo que haría de ahora en adelante.

Cuando todos llegaron Vida procedió a explicarles lo sucedido, Ithis y Nim le dijeron que Tiempo ya les había comunicado donde estaba su contraparte.

Muerte por algún motivo estaba en Nim, el oscuro lo buscaría y lo haría dormir durante algún tiempo; por ende, ahora les correspondía a sus "hermanos" encargarse de su trabajo. Tiempo le entrego un colgante cuya función era la misma que la del opuesto de vida, cada dios tendría que turnarse para recorrer la tierra en busca de almas; al no poseer el juicio necesario para enviar las almas a su lugar correspondiente; el colgante se encargaría de todo. Vida casi se desmaya al ser declarado "el primero" en utilizar dicho poder, lo que significaba que el mismo le daría fin a sus creaciones; entro en depresión esa noche, estuvo a punto de olvidarse de todo y tirar el colgante al mar, pero se lo debía a Muerte... esa sería su manera de redimir un poco la culpa de haberlo rechazado por tanto tiempo.

Un año, cada dios se encargaría durante un año de la recolección de almas. Quieran o no, eran las ordenes de Ithis... y Nim. Hasta que el señor oscuro se decidiera a despertar de nuevo a Muerte.

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Terminada la reunión, y ya decidida la solución; Vida se quedó mirando a la tierra durante algunas horas... si tan solo hubiera hablado con él aquel día, si tan solo lo hubiera despertado... quizás hubiera evitado que Muerte fuera a Nim, y todo esto se habría evitado... quiso odiarlo, pero no podía; sabía que fuera cual fuera el motivo por que cual su contraparte se hubiera ido, estaba bien justificado.

-Vida- Amor se le acercó al ver que no respondía.

-¿Es... estas bien?- Ella sabía cuánto le dolía al benefactor que sus creaciones muriera, como para que ahora él mismo tenga que "matarlas". Él definitivamente necesitaría apoyo y comprensión.

Vida suspiro, y volteo cambiando de expresión- Si, solo que tomara un tiempo acostumbrarme- Trato con toda su fuerza de no demostrar su dolor.

-No tienes remedio... oh Vida-

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Este es un nuevo proyecto con el cual estoy muy feliz, llevo bastante tiempo pensando en esto y finalmente tengo lo que quería; tratare de que los capítulos sean largos sin ser pesados; en fin...

La historia va a tratar de ser lo más relacionada posible al cómic ya que este todavía sigue en emisión, espero les guste.

Comenten si les parece y gracias por leer.

Adiós: 3