Capitulo 12: Un reencuentro y un encuentro.
Los dos Uchihas caminaron hasta llegar a lo parecía ser un templo en la cima de una montaña, el alrededor de ese templo solo contenía árboles muertos y tierra seca, la atmósfera del lugar era de completa soledad, como su no hubiera nadie en kilómetros de distancias. Un panorama completamente árido.
"Así que aquí es donde lo voy a conocer" Inhalo y exhalo tratando de calmarse. Sentía tantas emociones que era difícil controlarse. Él sabía que algo esencial para un shinobi era mantener la calma. No debía dejarse llevar por sus emociones aunque quisiera dar saltitos y gritar de la emoción.
Se adentraron en el templo, el cual estaba completamente a oscuras sino fuera por una tenue luz que estaba en una columna en medio de la habitación.
—¿Cuánto tendremos que esperar?—Pregunto Menma al ver como su padre se sentaba en una parte algo oscura de templo.
—Con suerte solo una hora.
Menma suspiro, no esperaba tener que esperar tanto para ver a Naruto pero eso le daría tiempo para prepararse mentalmente para ese momento. Se recostó en una pared y trato de calmarse, respirando y exhalando profundamente.
La felicidad que había llenado su alma se había ido dejándole pasos a otras emociones como: Miedo, esperanza, ira y la sobrepasaba a todas era la angustia.
¿Y si no lo reconocía como hijo? ¿Y si se lo tomaba tan mal que no le permitía entrar siquiera a Konoha? ¿Y si todo iba tan bien que Naruto no le permitiría ya ir de viaje con Sasuke y no lo dejaba salir de Konoha? Y la más importante de todas...
¿Cómo lo iba a llamar?
No podía simplemente llamarlo papá como si nada, padre era muy formar, papi sonaba demasiado cariñoso e íntimo, Naruto parecía ser algo irrespetuoso tomando en cuenta que él es séptimo Hokage, y llamarlo Hokage-sama... parecía lo correcto.
Todas las personas sin excepción debían llamarle a un Kage por su respectivo título, sin importar si era un familiar o alguien cercano. Además, era extraño llamar a una persona que no conocías 'papá', o algo parecido. Lo mejor era irse por lo seguro.
Y otra cosa importante era como se iba a presentar.
"No me puedo presentar diciéndole 'Hola, Hokage-sama, soy el hijo que tiene con Sasuke que fue creado por Orochimaru y mi papá me mantuvo escondido por casi trece años. Me llamo Menma, un gusto'" Él no se consideraba la cúspide de la inteligencia humana pero tampoco tan idiota para decir algo semejante.
Saco del interior de su capa una bolsita llena de dulces. Él tenía una gran variedad de cosas en el interior de esa capa de color oscuro, desde armas hasta comida.
"Lo mejor será perder el tiempo pensando en estupideces, así el tiempo ira más rápido" Comenzó a comer las golosinas con el mayor silencio posible.
Su ojos se perdieron en la oscuridad del piso mientras su mente estaba haciendo cosas que su padre no consideraría productiva, pero solo quería darle un descanso a su mente de lo que pasaría en poco tiempo. Agradecía eternamente que esa técnica siempre funcionaba, sin importar la situación en absoluto.
No sabría con exactitud cuánto tiempo pasó cuando alguien entro jadeante al templo.
Parecía de su edad, su pelo era negro y solo le llegaba a los hombros. Sus ojos se abrieron par en par al ver como tenía el símbolo del clan Uchiha en su espalda. Su mente le dijo que algo no estaba bien y no tardo en que su iris se volviera roja y tres aspas aparecieran en ella. El ruido del ya viejo piso de madera rechino por todo el lugar alertando a la intrusa, su padre se había levantado calmadamente.
La menor parecía querer llorar—Pa...
—¿Cómo descubriste este lugar?—Su voz era fuerte y demandante, y tenía el Sharingan en su ojo visible. La azabache está paralizada en su lugar viendo fijamente al adulto.
"Yo también estaría así si estuviera en su lugar" Pensó Menma mientras vería la situación. No sentía ningún peligro proveniente de ella pero aun así no debía bajar la guardia.
—¿Eres su compañera?—Volvió a preguntar acercándose intimidante y el ruido de la katana de su padre retumbo por todos lados. Eso era una clara señal de amenaza.
La chica parecía aún más consternada que antes y parecía temblar un poco. Menma sintió pena por ella pero aun así no podía hacer nada, podía ser algún tipo de engaño hecho por una gran actriz. No era la primera vez que veía algo semejante.
Sasuke clavo su espada al lado de la cabeza. El temor se hacía más evidente, podía ver como sus piernas temblaban de miedo y como su rostro tenía una lamentable expresión que era acompañado con pequeñas lágrimas a punto de desbordarse. La mano de Sasuke soltó el manco de la katana para dirigirla a la chica.
—¡Papá! —Exclamo mientras sus lágrimas por fin caían desde su rostro.
"¿Papá? ¿Acaso oí bien?" Se preguntó con los ojos los abiertos. Dirigió su mirada a Sasuke en busca de alguna respuesta, él estaba completamente quieto con su mano solo a centímetros de la niña. Pero la otra seguía temblando de temor con los ojos cerrados.
—¿Eres tú, Sarada? —Su voz se había suavizado y pequeñas gotas de sudor se deslizaban sobre su frente. La menor, aun con los ojos llorosos, asintió. Sasuke recobro compostura. Su cara tenía una expresión afligida—Ya veo...
—Te reconocí al verte—Dijo dolida. Sus ojos volvieron a la normalidad. El mayor saco de la columna.
La puerta se volvió a abrir.
—Conque aquí estabas—Era la voz de un chico, se oía bastante vigorosa y se oía aliviado.
—Sarada, ¿por qué te fuiste sola? —Esta parecía ser la de una chica, un tanto aguda para su gusto.
—Perdona el retraso, Sasuke.
—¿Qué significa esto, Naruto? —Era él, ese era Naruto. Su mirada quedo trabada en ese hombre—¿Por qué trajiste a las niñas?
Una niña gorda le había agarrado la mano y ahora la tenía en su cabeza—Mmmm, me gustaba la idea, pero creo que era más pesada.
—¿A qué juegan? —Pregunto molesto.
Sarada apretó su puño con fuerza y decisión—Vine...vine a verte. Cuando supe que el Séptimo venía a verte, lo seguí. Pero quiero preguntarte algo...
—¿Preguntarme algo?
—Sí, yo...¿Mi mamá de verdad es mi mamá?
El lugar había quedado en silencio "Mierda...Mierda, mierda, mierda y más mierda ¿Qué demonios está pasando aquí? Maldita sea, ¿por qué a ella se le ocurrió venir justo hoy? ¿O por qué a mí se me ocurrió venir hoy?" Maldecía mentalmente, agradecía que nadie hubiera notado su presencia.
El momento ya era lo suficientemente tenso como para qué también se supiera de la existencia de él. Era tanta la tensión que lo hacía querer vomitar, sentía un pequeño nudo en su garganta y ni siquiera era él el que estaba peleando.
—¡Respóndeme! —Grito, ya harta de la indiferencia de su padre—¿Es mi verdadera mamá?
—¿Qué pasó?
Jadeo dolida ante aquella antes fruncir de nuevo el entrecejo, estaba furiosa—¿Que qué?...¡Nunca estás en casa! ¡¿Por qué nunca estás con mi mamá?! ¡¿Tan poco te importo que hasta olvidaste mi cara?! ¡¿Quién es la chica con mis mismos lentes que está a tu lado?! ¡¿Crees que le podía preguntar esa a mi mamá?!
—Esa foto...
—Esto no me gusta nada.
—Ni a mí—Murmuro.
—Mi mamá no me dice nada y tú nunca estás. Ninguno de ustedes confía en mí ¡Todo son problemas! —Grito para tomar algo de aire—¿Dónde pasas el tiempo y que haces?
—...No es de tu incumbencia.
Miro a su padre llena de tristeza y dolor por esas palabras tan frías, luego esa tristeza fue reemplazada por rabia—¡Está bien!
Menma frunció el ceño con esa respuesta. Fue lo más rápido a donde estaba su padre importándole poco que los demás lo vieran y le dio la patada más fuerte pudo.
—Para responder eso mejor agarras tu katana y clávatela en el corazón, te aseguro que esa es una mejor respuesta. Con todo el afán de ofender—Dijo completamente enfadado. No conocía a esa tal 'Sarada' pero sentía mucha pena por ella, y también sentía que estaban pasando casi lo mismo, solo que él si sabía y ella no.
Luego sintió un golpe en la nuca—A mí no me hables así.
—Ok, pero de igual manera tengo razón.
—Sasuke...¿Quién es ese niño? —Naruto era quien había preguntado aquello. Menma sintió el nerviosismo hacer estrago con su estómago en cuestión de segundos.
—Bueno...yo, yo soy...Me llamo...—Balbuceaba evitando la mirada del blondo. Trato de buscar confort o ayuda en la mirada de Sasuke. Trato de usar los 'ojos de borreguitos' que tanto había oído hablar.
El Uchiha mayor suspiro para ver a Naruto a los ojos y decirle: —Naruto, él es nuestro hijo, Menma. Menma, él es tu padre, Naruto.
—...
Y ¡Pumm! El Hokage había caído desmayado.
—Papá,eres el rey de la delicadeza.
___________________________
Hace 4 meses que no actualizo. Antes que nada, no me maten.
No tengo ninguna excusa valida aparte de que no tenía muchas ganas de escribir y cada que me ponía siempre terminaba haciendo otra cosa. No se cuando sera la próxima actualización así que no voy a prometer nada, espero que les haya gustado este capítulo y aquí tienen un Fanart que encontré hace rato y se los quería compartir.
Sin mucho más que agregar, nos leemos luego 👋👋.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro