Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 4 : Manos atadas

Caminaba por las oscuras calles de la ciudad, sintiendo cada vez más el peso de la preocupación y el miedo en mi mente. Había sido descubierto por un grupo peligroso que buscaba venganza, y sabía que mi vida estaba en peligro inminente. Corría sin rumbo fijo, tratando desesperadamente de encontrar un lugar seguro donde pudiera ocultarme de mis perseguidores, pero el tiempo parecía agotarse rápidamente.

En medio de la angustia y la sensación de ser acorralado, un ruido detrás de mí me hizo girar bruscamente. Con horror, vi a los hombres del grupo acercándose rápidamente, sus rostros contorsionados por la ira y una sed de sangre que me erizó la piel. Y yo que pensaba que el pasado no podía volver a morderte más de una vez. De hecho, parecía que mi vida iba a estar siempre en riesgo. Anuqué tenía amigos, también tenía enemigos.

Estos, por ejemplo, habían perdido a su líder, condenado a prisión, con pruebas contundentes en su contra. Obviamente, descubiertas y presentadas por mí cuando pertenecía a la policía.

Mi corazón comenzó a palpitar con fuerza y supe en ese momento que ya no tenía más opción que huir.

Antes de que pudiera moverme, una figura familiar se materializó frente a mis ojos. Era Taehyung, mi Taehyung.

Bueno, solo Taehyung.

El caso es que por segunda vez, me estaba salvando. Toda su aura desprendiendo una determinación feroz reflejada. Su mirada penetrante. Sin pronunciar una sola palabra, Taehyung tomó firmemente mi mano y me arrastró hacia un callejón cercano. En ese momento pude sentir el latido de su corazón, tan intenso como el mío propio, mientras corríamos juntos por las estrechas calles en busca desesperada de algún refugio seguro.

El miedo seguía haciendo estragos en mi interior, pero el simple hecho de sentir la calidez de la mano de Taehyung aferrada a la mía me proporcionaba un atisbo de esperanza. Me daba fuerzas para seguir adelante, para no rendirme en medio de la adversidad. Taehyung era mi roca, mi apoyo incondicional en estos momentos oscuros y peligrosos.

Corrimos sin aliento, guiados por el instinto de supervivencia y el amor que nos unía. Cada paso que dábamos era una carrera contrarreloj, pero Taehyung no flaqueaba. Su determinación se reflejaba en cada uno de sus movimientos, en cada mirada que lanzaba hacia atrás para asegurarse de que estábamos a salvo.

Finalmente, llegamos a un edificio abandonado y Taehyung me empujó adentro. Cerramos la puerta tras de nosotros y nos sumimos en un silencio tenso, tratando de controlar nuestra agitada respiración. Era en momentos como estos cuando me sentía afortunado de tener a Taehyung a mi lado, enfrentando los peligros junto a mí, sin importar el costo que eso implicara.

Nuestros ojos se encontraron y, aunque yo estaba lleno de gratitud y admiración por él, las palabras me fallaban. No sabía cómo expresar adecuadamente lo que sentía en ese momento.

-Taehyung... gracias. -logré decir finalmente, mi voz temblorosa reflejando la turbulencia emocional que experimentaba. -No sé qué habría hecho sin ti.

Taehyung me dedicó una sonrisa llena de determinación en respuesta. -No tienes que agradecerme. -respondió con suavidad. –Lo haría una y otra vez.

Con eso, mi mente viajó, ni siquiera sabía de qué estábamos hablando.

Esas palabras resonaron en el aire, llenándome de una ternura y un amor indescriptibles. Sentí un nudo en la garganta mientras seguía contemplando a Taehyung. Nunca antes había conocido a alguien tan valiente y desinteresado como él. Sabía que estaba poniendo en riesgo su propia vida al ayudarme, pero eso no parecía importarle. Solo quería mantenerme a salvo, sin importar el costo.

Nos quedamos escondidos en aquel edificio abandonado, y allí Taehyung me explicó cómo había descubierto mi situación. Había estado investigando por su cuenta, siguiendo pistas y conversando con personas que podrían tener información sobre los hombres que me perseguían.

Finalmente, había encontrado la ubicación de donde se encontraban y se había apresurado a salvarme.

Escuché atentamente sus palabras, sintiendo una mezcla abrumadora de gratitud y culpa. Me responsabilizaba por haber puesto a Taehyung en peligro, pero también sabía que no podría sobrevivir sin su ayuda.

Mientras esperábamos en silencio, sentí la necesidad de expresar todo hacia Taehyung. Quería contarle cuánto significaba para mí, cuánto lo deseaba, pero las palabras parecían quedarse atascadas en mi garganta. En su lugar, tomé su mano y la apreté suavemente, transmitiéndole así todo lo que sentía en mi corazón. Lo miré con ojos llenos de amor y gratitud, tratando de transmitirle cuán agradecido estaba por tenerlo a mi lado en momentos tan difíciles.

Pasaron horas mientras permanecíamos en aquel lugar oscuro y silencioso, esperando pacientemente a que los hombres finalmente se marcharan. Cada segundo parecía eterno, pero finalmente el peligro pareció disiparse. Taehyung tomó mi mano y me condujo fuera del edificio, guiándome por las calles desiertas en busca de la seguridad que tanto anhelábamos.

Cuando finalmente llegamos a un lugar seguro, nos detuvimos y nos miramos el uno al otro con determinación. Me sentía obligado a tomar una decisión difícil, una que implicaba proteger a Taehyung incluso si eso significaba separarnos. Con voz firme, le dije: -No puedo permitir que sigas arriesgando tu vida por mí. Es demasiado peligroso. Debes irte, lejos de aquí.

Taehyung negó con la cabeza, mostrando su propia determinación. –No puedo dejarte solo. Mi misión es protegerte a toda costa y eso haré. Aunque no quieras.

Sus ojos reflejaban mucho de lo que sentía, por mí. Más allá de la confesión de su misión, su revelación. La certeza de que no iba abandonarme jamás.

Yo suspiré, sintiendo una mezcla de adhesión y preocupación. Sabía que no podía obligarlo a irse, pero tampoco podía soportar la idea de ponerlo en peligro nuevamente. Teníamos que encontrar una solución, una forma de mantenernos juntos sin correr riesgos innecesarios.

Con determinación, decidí plantear mi propuesta. -Entonces, debemos marcharnos antes de que nos encuentren. -dije con convicción mientras apretaba su mano con fuerza.

Sentí el corazón latiendo fuerte en mi pecho, sabiendo que esta decisión podía tener consecuencias importantes. Pero también sentía que no podía vivir sin Taehyung a mi lado. Juntos encontraríamos la forma de mantenernos seguros, apoyándonos mutuamente en cada paso del camino.

Nos miramos profundamente, compartiendo ese entendimiento silencioso que solo los amantesverdaderos pueden experimentar. Unidos por la pasión y la osadía, estábamoslistos para enfrentar cualquier desafío que se nos presentara. Juntos,avanzaríamos hacia un futuro incierto, pero siempre con la seguridad de queestaríamos juntos.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro