| Zumbido |

Dogday abrió los ojos con sorpresa al sentir finalmente algo sólido bajo sus pies. Sin embargo, el paisaje que se reveló ante él no era para nada alentador. Todo a su alrededor estaba cubierto de estática, y el sonido que predominaba era un zumbido penetrante que llenaba sus oídos. Miró a su alrededor y vio edificios, objetos y criaturas sonrientes flotando sin un rastro de color o vida aparente.

—¿D-Dónde estamos...? —Preguntaba el can al notar que Luke estaba frente a él—

Ante la pregunta, el gato de la suerte solo pudo formar una leve sonrisa de complicación, tenía más que claro que iba a ser complicado explicarle todo a Dogday...

—Bienvenido a mi lugar de trabajo

—¿Lugar de trabajo...? —Preguntaba el perro con una notoria confusión—

—Es un tanto complicado de explicar —Comentaba el gato mientras su sonrisa nerviosa se mantenía en el rostro— Vamos a explicar todo desde el inicio para que quedé todo claro... ¿te parece bien?

—¿Aja...? —Expresaba el perro mientras asentía confundido—

—Bien, tus recuerdos serán una gran ayuda para que puedas entender todo... al menos una gran parte... En fin —Negaba el gato para poder concentrarse— Como ya sabes, Playtime Co era una compañía que disfrutaba desafiar las leyes de la naturaleza, los científicos eran monstruos, disfrutaban jugar a ser dios... —Explicaba el gato mientras materializaba un par de sillas para Dogday y para él— Antes de la iniciativa "cuerpos más grandes" hubo muchas otras ideas que se quedaron a medias... ¿Te suena de algo el número de experimento #1953? —Preguntando con curiosidad—

Dogday reflexionó un momento, intentando recordar el significado de ese número en particular. Dentro de esas instalaciones, se habían llevado a cabo numerosos experimentos, y los números asignados a ellos parecían carecer de una secuencia lógica. Nunca había logrado comprender ni descifrar el método utilizado para asignarles un número; a veces, tenía la impresión de que eran asignados al azar.

—Disculpa, pero no... no me suena de nada —Respondía el can intentando dejar en claro su intriga—

—No te preocupes —Sonriendo con tranquilidad— Ese número me lo asignaron a mi —Respondía con simpleza— Antes de que preguntes, déjame explicarlo —Se apresuraba a decir el gato al notar la expresión de curiosidad de Dogday—

Ante las palabras de Luke, un documento apareció flotando de la nada hasta una de sus patas, el gato simplemente lo sujetó para abrir la carpeta con cuidado. Dogday estaba algo sorprendido... Ese lugar parecía responder a Luke, como si pudiera controlar lo que sucedía allí. Ya estaba más que claro después de hacer aparecer las sillas para ambos, pero ahora solo se confirmaba aún más.

—Registro de experimentación #1953... "El televisor" —Comenzaba a leer el gato lo que ponía dicho documento— Aquí tenemos un nombre censurado, pero no es realmente importante —Explicaba el gato antes de continuar con su lectura— Han sido días muy complicados para todo el departamento de experimentación en los laboratorios, nuestros supervisores parecen estar esperando cualquier tipo de avance con lo que respecta a esté experimento, normalmente solo les ponen atención a los experimentos físicos... ¿Pero un experimento digital? Es simplemente inquietante —Dando vuelta a la página— El personal dentro de los laboratorios tiene como labor generar una pequeña simulación, los supervisores quieren un entorno digital maleable para poder realizar los capítulos de la serie con mucha más facilidad dentro de un televisor especial

Las palabras del gato se detenían un breve momento para poder observar a Dogday, la expresión del can parecía mostrar curiosidad e intriga por lo que estaba escuchando, así que simplemente formo una leve sonrisa para continuar con su explicación, sin leer el contenido del documento puesto que estaba censurado.

—Para simplificarlo un poco, todos están dentro del televisor que se menciona aquí —Comentaba mientras mostraba mejor la carpeta con el informe—

Ante el comentario y la explicación de Luke, Dogday bajó la mirada para reflexionar. ¿Estaban dentro de una simulación digital? ¿Era siquiera posible? Todo se sentía tan real, todos en SmileVille parecían actuar de manera natural, sus amigos parecían genuinamente felices. ¿Por qué todo se sentía tan auténtico si era falso? El perro sentía mucha curiosidad, tenía tantas preguntas, pero una pregunta resalto entre todas las demás.

—¿Cómo fue que llegamos aquí...? —Preguntaba el can mirando al gato con algo de curiosidad y confusión— Se supone que Catnap mato a mis amigos... —Pasando a mirar sus propias manos— Acaso yo... ¿no estoy muerto...?

—Pues... —Decía el gato para atraer la atención del perro— En realidad, todos si están muertos... al menos físicamente hablando

La explicación del felino, solo logro aumentar la curiosidad e intriga del perro... ¿Qué trataba de decir?

—No entiendo a que te refieres... —Expresaba el can igual o más confundido que antes—

—Voy a explicar lo mejor que pueda —Respondía el gato luego de un momento de silencio para reflexionar como explicárselo— Se suponía que las criaturas sonrientes serían solo una serie animada, serían personajes dentro de la simulación que usarían para mantener a los niños entretenidos, pero algo cambio... —Expresaba el gato mientras suspiraba con cansancio— La idea de implementar una guardería en las instalaciones hizo que muchas cosas tuvieran que cambiar, llegaron a la conclusión de que el televisor no sería realmente útil y al final me desecharon... no iban a desperdiciar ideas así que cuando aprobaron usar la imagen de las criaturas sonrientes para la iniciativa "cuerpos más grandes" se les ocurrió la idea de usar los archivos del programa para que todas los personajes tuvieran la personalidad ya establecida en el programa...

—¿Por qué harían algo así...? —Preguntaba el perro confundido—

—Querían mantener a sus monstruos bajo control —Comentaba el gato con una sonrisa de dolor— De alguna forma utilizaron el código de los personajes para establecerles a todos una personalidad base, ocasionando que no puedan recordar nada de cuando eran humanos... de cuando eran niños... —Explicaba el gato con cuidado en sus palabras— Siete criaturas sonrientes lograron pasar las pruebas de los laboratorios, todos se adaptaron rápidamente a la guardería porque los hicieron de tal modo que pudieran encajar con los niños... sin embargo, algo sucedió...

—... ¿Qué paso...? —Preguntaba el perro con curiosidad e interés—

—Los supervisores estaban planeando introducir un octavo miembro en el elenco de las criaturas sonrientes...

—Catnap... —Deducía el perro al entender a lo que se refería—

—Si... se supone que tardarían mucho en implementar al gato de las siestas, pero hubo un incidente con un niño... Theodore, Theo mantenía una conexión cercana con el prototipo, una noche recibió instrucciones del experimento #1006, le dijo a Theo que si abría la puerta del almacén lograría liberar a todos los niños de la guardería, no estaba haciendo otra cosa más que mentirle, pero el niño no vio sus verdaderas intenciones, al final... el niño quedo malherido de gravedad gracias a que estaba usando un GrabPack defectuoso en la zona de embarque, el niño fue llevado por el prototipo a los laboratorios para que fuera atendido arriesgando así su propia libertad en el proceso al revelar que había escapado...

—... ¿Qué paso...? —Repetía su pregunta nuevamente, pero esta vez refiriéndose a otra cosa— ¿Qué paso con el niño...?

—La amistad que tenía con el experimento #1006 era peligrosa así que los científicos lo pusieron bajo custodia... estaba tan herido que la única solución que tuvieron para evitar que muriera fue experimentar con él, ese niño al final se terminó convirtiendo en Catnap —Explicaba finalmente el gato— No tuvieron el tiempo suficiente para verificar los archivos del personaje correctamente así que tuvieron que improvisar un poco, el Catnap de la iniciativa de cuerpos más grandes era diferente al resto de criaturas sonrientes, recordaba perfectamente su vida como humano, seguía sintiendo una admiración por el prototipo y peor aún... empezó a considerarlo un dios, aquellos pensamientos fueron usados por el prototipo para controlarlo sin que él se diera cuenta de lo que realmente estaba sucediendo.

—Fue así que Catnap termino haciendo esa masacre... —Deducía nuevamente el perro al entender la explicación—

—Luego de la incorporación de Catnap a la guardería... bueno... sucedió lo que ya sabes, la hora de la alegría... —Comentaba el gato mientras suspiraba un poco— Mientras todos vivían sus vidas normalmente, el "televisor" se quedo olvidado en una habitación aparentemente olvidada con el paso de los años, poco a poco comencé a tomar consciencia de mi mismo y bueno, digamos que la simulación termino haciendo una inteligencia artificial lo suficientemente consciente para ser lo que ves ahora —Explicaba mientras se señalaba a si mismo—

—... Entonces... ¿No eres real...?

—La respuesta científica sería un no... pero si te doy una respuesta "digital" pues digamos que si soy real, no le des demasiada importancia, ya estamos llegando a lo que te interesa saber —Haciendo que se concentré nuevamente en otro tema— No tengo realmente un "cómo", pero cuando tus amigos y tu murieron, logre reunir sus consciencias y es por eso que todos están "vivos" —Realizando unas comillas en esa última palabra— Claro que tuve que hacer algunas modificaciones, tuve que poner sus mentes dentro del cuerpo de sus versiones de la serie animada

Ante la explicación Dogday se quedó en silencio aparentemente reflexionando sobre lo que esa "entidad" le estaba contando... Miro nuevamente sus manos por reflejo, todo era una ilusión, estaba muerto, pero estaba viviendo... era como estar soñando. Luke no pudo evitar sentir preocupación con respecto al perro, sabía que su reacción no sería simple, seguro le tomaría algo de tiempo procesarlo.

—No lo entiendo... —Susurraba el perro con confusión, levantando su mirada hacia el gato— ¿Por qué todo esto se siente como si fuera normal...? —Preguntaba el can— Me siento sorprendido, pero a la vez siento que todo esto ya lo sabía... ¿Por qué soy el único que parece recordar todo lo que sucedió en la guardería? Los otros parecen ignorarlo

—Bueno... —Comentaba el gato con un poco de dificultad— No tengo una respuesta clara para eso, tal vez el televisor no reinicio adecuadamente tu mente, eso explicaría porque no recuerdas nada de la primera versión, pero si recuerdas lo sucedido en el mundo real

¿Primer versión? Aquello hizo formar una expresión de curiosidad en Dogday.

—¿A qué te refieres con "primera versión"?

—... Oh, claro, tengo que contarte acerca de eso también... —Dándose cuenta de que le falto algo importante— Tus recuerdos dicen que despertaste en SmileVille luego de morir en el mundo real, pero la verdad es que no es así —Explicaba mientras trataba de mantener un tono tranquilo— SmileVille no fue más que la repercusión de un reinicio al código fuente original, en realidad todos ustedes vivieron durante un tiempo en otra versión de su mundo...

—¿O-Otra versión...? —Preguntando con curiosidad y confusión—

—Si, en esa versión solo estaban ustedes ocho, Bubba, Hoppy, Kickin, Piggy, Bobby, Crafty, Catnap y tú... bueno, en realidad Catnap fue el último en llegar... eso no importa, la cosa es que todos recordaban perfectamente todo lo que sucedió en el mundo real, sabían que Catnap era un monstruo, el gatito llego a esa versión y empezó a pasar tiempo con ustedes, empezó a llevarse bien con todos, pero las cosas no terminaron tan bien... Hubo una falla y el televisor se reinició, es por eso que ahora todo es distinto, SmileVille y sus habitantes son solo una simulación en la que ustedes viven

—Entonces... solo nosotros ocho somos reales... —Concluía el perro al entender lo que Luke le contaba—

Ante lo dicho, Luke simplemente pudo asentir con lentitud, ahora Dogday sabía toda la verdad. El can simplemente pudo quedarse sentado en su lugar mientras pensaba, era mucho que procesar, no era tan abrumador, pero si era complicado de entender... 

—¿Los otros van a recuperar sus recuerdos...? —Preguntaba el can con curiosidad y preocupación—

—Existe la posibilidad de que todos puedan desbloquear sus recuerdos, podría tratar de hacer algo al respecto, también quiero que sepan la verdad, pero he tenido tiempo para reflexionar y pensar que tal vez las cosas están mejor como están...

—¿Estás loco? —Preguntaba Dogday confundido— Todos merecen saber la verdad

—Dogday... —Intervenía el gato mirando al perro con preocupación— Perdieron su humanidad, les quitaron sus vidas para ser manipulados por los altos mandos de un infierno mientras mantenían una sonrisa de falsa esperanza...

—Sé que puedo hablar con ellos, podría tratar de aligerar la carga de esos recuerdos... —Insistiendo ante la idea—

—¿Y cómo piensas decirles? —Preguntaba el gato tomando otro tipo de postura, negándose ante la idea del perro— ¿Hola amigos, vengo a decirles que todos estamos muertos, Catnap nos mato, nuestro mundo no es real y toda SmileVille no es más que una ilusión? Dogday, los he estado viendo interactuar entre ustedes, las cosas ahora son mejores en comparación a como lo fueron cuando vivían en la guardería... Además, no todos van a reaccionar bien ante los recuerdos del pasado...

Ante las palabras de Luke, Dogday se sumió en un silencio reflexivo. Los argumentos de Luke sobre la falta de memoria de sus amigos parecían sólidos, pero el perro sentía una responsabilidad más profunda como líder. Sabía que debía protegerlos, pero también comprendía la importancia de la verdad y la transparencia en su relación con todos y cada uno de los integrantes de las criaturas sonrientes. Aunque revelar la verdad pudiera afectarlos, sentía la obligación moral de compartir lo que había descubierto.

—Lo siento Luke... pero voy a decirles la verdad —Expresaba Dogday con un tono serio— No sé de que manera, pero se las voy a decir, no les voy a ocultar nada

—...

Luke esbozó una leve mueca de disgusto, pero optó por no decir nada más. El gato de la suerte comenzaba a resignarse a que Dogday no comprendería sus motivos. Aunque se sintiera un tanto molesto, al final entendía la postura del perro. Sabía que Dogday era obstinado y que no valía la pena intentar convencerlo de lo contrario.

—Será tu propio riesgo contarle a los demás sobre su vida pasada... —Comentaba Luke, dejando en claro que no iba a interferir— Solo trata de pensar bien las cosas, no todos se lo van a tomar tan bien

—Los conozco lo suficiente para saber cómo es que van a reaccionar —Decía Dogday con un tono de seguridad— Bubba estará confundido, Kickin se molestará un poco, Hoppy puede estar confundida a la par que molesta, Bobby tratará de ver el lado positivo, Crafty se asustará, Piggy seguramente empiece a perder el apetito, cuando le afecta siempre sucede... Descuida, lo tengo todo previsto

—¿Y Catnap? Él también merece saber la verdad —intervino Luke, señalando al gato—

Dogday abrió ligeramente los ojos. No había considerado a Catnap en la revelación. El gato en la guardería era muy reservado y solo se llevaba bien con Dogday, sin hablar mucho con los demás miembros del grupo de las criaturas sonrientes. Luke tenía razón; el gato merecía saber la verdad. Sin embargo, el líder no sabía cómo reaccionaría. ¿Se molestaría? ¿Se arrepentiría? No tenía ni idea de cómo iba a responder Catnap.

—No lo sé... —Respondía el perro con dificultad— Voy a decirle la verdad, pero voy a tener que pensar en como abordar el tema con él...

El gato de la suerte observaba cómo el perro parecía tambalearse en sus propias palabras. Luke sabía que abordar ese tema con Catnap sería complicado, sobre todo ahora que el gato de las siestas no recordaba lo sucedido; explicarle que todo había sido directamente su culpa sería todo un desafío. Luke había considerado varios escenarios posibles, pero no estaba seguro de cuántos de ellos podrían realmente ocurrir. Notó la mirada preocupada de Dogday y pensó que cambiar de tema podría ayudarlo a reflexionar.

—Si te hace sentir mejor, tal vez pueda ayudar... —intervino Luke, tratando de tranquilizar al perro— Quizás sería bueno concentrarnos en cómo abordar el tema con Catnap de la manera menos impactante posible, tal vez su "primo" pueda ayudar con eso. Podríamos idear un plan juntos para asegurarnos de que Catnap comprende la situación sin causar un gran revuelo emocional.

Dogday asintió, agradecido por la sugerencia de Luke.

—No quiero que esto cause más problemas de los necesarios —respondió Dogday, pensativo— Necesitamos encontrar la forma más adecuada de contarle a Catnap lo que pasó sin hacerle daño.

—Claro... podemos hablarlo, pero por el momento creo que es mejor explicarte para que te traje a esté lugar —Comentaba el gato indicándole a Dogday que era momento de explicarle por qué necesitaba su ayuda—

Dogday estaba a punto de decir algo, pero al notar que la expresión del gato cambiaba a una mucho más seria, simplemente se quedo callado para ponerle toda la atención posible.

—La simulación en la que están es mucho más compleja de lo que era la versión en donde solo estaban ustedes ocho, la simulación no es del todo estable, el televisor no puede procesar tanta información, SmileVille requiere mucha capacidad de procesamiento y para nuestra mala suerte... el televisor no la tiene implementada...

—¿A qué te refieres con que SmileVille requiere mucha capacidad de procesamiento...?

El gato simplemente suspiro, tenía que dejar las cosas mucho más simples y claras para que Dogday pudiera entender todo. Fue ahí cuando tuvo una idea.

—Imagina que el televisor es una hoja de papel muy delgada... Ahora imagina que SmileVille, los ciudadanos, los objetos, las situaciones e inclusive ustedes son un par de gotas de agua que están en la superficie de la hoja de papel —Explicaba el gato en un intento de hacer entender a Dogday el problema— ¿Qué piensas que puede pasar si el televisor sigue sosteniendo la simulación sin que hagamos algo al respecto?

—... La hoja de papel empezará a disolverse por toda el agua que tiene encima... —Respondía el perro logrando entender la gravedad de la situación—

—Exactamente, si no hacemos algo al respecto, el televisor reiniciará la simulación una y otra vez hasta que no pueda más y termine dañándose

Las palabras de Luke resonaban de manera contundente y directa en la mente de Dogday, quien ahora se sentía preocupado por la gravedad de la situación. Aunque entendía el nivel de riesgo del problema, todavía había algo que no le quedaba claro del todo.

—Dijiste que necesitabas mi ayuda... —Comentaba el perro al recordar sus palabras anteriores— ¿Qué puedo hacer yo para ayudar en todo ese problema...?

Luke se tomó un momento para pensar sus palabras, tenía que explicarle que rol tendría para poder ayudar a mejorar la capacidad de procesamiento del televisor.

—Intente arreglar el problema por mi mismo, pero hay algunas cuantas reglas impuestas que no puedo romper, estoy programado de esa forma... pero estoy seguro de que tú no tendrás problemas en resolver el problema, las reglas parecen que no aplicar de la misma forma para ti —Explicando su idea de forma ambigua— Vas a tener que salir del televisor

—¿Eh? —Exclamaba confundido y tomado por sorpresa— ¿Quieres que yo salga del televisor...?

—Déjame terminar Dogday... Vas a tener que salir del televisor y dirigirte hacia la sala de servidores que esta situada al final del pasillo que estará frente a la habitación en donde vas a aparecer, vas a entrar en la sala y tendrás que buscar un botón que ponga "mantenimiento", al presionarlo el televisor tendrá una ligera falla y la simulación estará en un estado de pausa

—¿Qué pasará con todos cuando eso suceda...? —Preguntaba el perro con preocupación interrumpiendo las indicaciones— ¿Estarán a salvo?

—No les sucederá nada, la simulación se detendrá por completo. Para ellos, será como si el tiempo se detuviera

—De acuerdo... no suena tan complicado...

—Todavía no termino —Comentaba el gato mientras continuaba con las indicaciones— Ahora si viene la parte difícil y peligrosa, en la sala de servidores vas a poder conseguir un GrabPack, eso te ayudará encontrar una forma de llegar hasta las instalaciones de la guardería y entrar hogar dulce hogar, vas a tener que explorar el lugar hasta encontrar otra sala de servidores, son cosas generales relacionadas a la guardería, solo concéntrate en buscar la etiqueta uno, nueve, cinco, tres —Explicaba detalladamente— Vas a tener que bajar una palanca de color rojo, eso activará los servidores de respaldo para el televisor, aumentará la capacidad de procesamiento y con eso estaremos bien, después de eso vas a tener que regresar y oprimir nuevamente el botón de mantenimiento para que la simulación vuelva a la normalidad

—...

Aunque la incertidumbre se apoderaba de Dogday ante la complejidad del plan, no permitió que la inseguridad lo detuviera. La idea de llegar hasta la guardería y realizar las acciones necesarias parecía una tarea monumental, pero entendía la importancia de cada paso para restaurar la normalidad en la simulación. Con determinación en sus ojos, decidió confiar en sí mismo y en la posibilidad de que todo saliera bien. Sabía que retirarse no era una opción; el futuro del televisor y la estabilidad de todos dependían de su éxito en esta misión.

—De acuerdo... Voy a hacer lo mejor que pueda —Respondía el can mientras se levantaba de su asiento—

. . .

—¿Seguro que sabes lo que tienes que hacer? —Preguntaba el gato nuevamente para evitar que se olvidase del plan—

—Ir por el pasillo, entrar en la sala de servidores y presionar el botón que diga mantenimiento, tomar uno de los GrabPacks dirigirme a la guardería, entrar en hogar dulce hogar y luego buscar la sala de servidores de ese lugar para activar los servidores de respaldo activando una palanca de color rojo, regresar presionar nuevamente el botón y entrar en el televisor... fácil y sencillo jeje —Respondía el can mientras recordaba el plan y se reía de forma nerviosa—

El gato solo pudo sonreír un poco ante lo que Dogday dijo al final. El gato no hizo más que indicarle que podía cruzar el portal entre el televisor y el mundo real.

—Ten mucho cuidado ahí fuera, no sabemos si otro experimento se adueñó del territorio de Catnap cuando murió, podría ser peligroso caminar por la guardería de forma distraída

—Tendré cuidado —Expresaba mientras miraba al gato con una sonrisa de confianza—

—Buena suerte Dogday

.

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[ . . . ]

El televisor se retorcía en una danza de estática y colores distorsionados antes de que una figura canina emergiera de la pantalla. El cuerpo de Dogday, inicialmente formado por píxeles y ruido visual, rápidamente cobraba su color y forma habitual. Al abrir los ojos lentamente, observó la habitación detenidamente.

El lugar lucía desgastado, como si el paso del tiempo hubiera sido implacable con esa estancia deteriorada. Dogday examinó su entorno y notó varios objetos esparcidos por el suelo, la mayoría eran escombros provenientes de una pared aparentemente derribada en la entrada.

El perro se movió con rapidez por la habitación, llegando al pasillo y asomando la cabeza con precaución para asegurarse de que estaba seguro. No quería llamar la atención de algún experimento que pudiera estar acechando en el lugar. Satisfecho de que todo parecía en orden, Dogday se aventuró a caminar por el pasillo con determinación, sin querer perder tiempo en la misión que Luke le había encomendado.

—Debería de estar por aquí...

Siguiendo las claras indicaciones de Luke, el perro logró llegar sin mayores complicaciones hasta la puerta de la sala de servidores. La entrada estaba claramente marcada con la palabra "Servidores" y un tag numérico "1953". Dogday abrió la puerta con cautela y entró lentamente en la habitación. Al hacerlo, observó la sala de servidores, iluminada solo por un par de luces en barra que arrojaban una luz tenue. La oscuridad predominaba, evidenciada por el polvo acumulado que indicaba que nadie había entrado allí en años.

Sin dudarlo demasiado, Dogday comenzó a buscar el botón que Luke le había mencionado, dedicando varios minutos a explorar hasta que finalmente lo encontró.

—Solo espero que no pase nada malo...

Teniendo unas cuantas dudas al respecto, Dogday finalmente apretó el botón. Al hacerlo una leve luz indicadora de color naranja se hizo presente en el panel de control en donde estaba situado ese botón, titilando levemente haciéndole saber a Dogday que la simulación se había pausado.

—Bien, primer paso listo, ahora solo tengo que buscar ese GrabPack que menciono Luke...

Dogday examinó la habitación con mayor detenimiento, concentrándose en cada detalle. No pasó mucho tiempo antes de que sus ojos se posaran en un contenedor de metal, similar a una gaveta de documentos, que tenía una etiqueta con la palabra "Emergencia" escrita en ella. El perro se acercó y revisó cuidadosamente, encontrando finalmente el GrabPack entre los objetos almacenados dentro del contenedor.

Para fortuna de Dogday el GrabPack era la versión 2.0, la versión indicada para abrirse paso a través de la guardería, el único detalle que tenía era que el propulsor parecía estar dañado.

—Nota mental, no caer desde lugares tan altos... —Susurraba para sí mismo el can mientras se colocaba el GrabPack—

Dogday tuvo unos cuantos problemas para equiparse el GrabPack, al final tuvo que quitarle los propulsores dañados para lograr colocárselo sin problemas. Una vez que ya tenía el GrabPack consigo, el perro simplemente salió de la sala de servidores para seguir avanzando por el pasillo.

.

.

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—Maldición... —Insultaba el perro al notar el obstáculo frente a él—

La exploración de Dogday por las instalaciones había sido tranquila pero prolongada. No encontraba una forma directa de descender hasta la guardería, por lo que tuvo que improvisar para llegar a la estación de juegos. Decidió seguir las vías como guía hacia la parada de la guardería. Durante su camino, el perro se sorprendió al no encontrarse con ningún tipo de experimentos, como Mommy Long Legs, Bunzo Bunny, PJ Pug-A-Pilar o los mini Huggys, de los cuales recordaba que habitaban en la estación. Al principio estaba temeroso de cruzarse con ellos, pero su ausencia le provocó un sentimiento de alivio.

Sin embargo, su suerte cambió cuando se topó con un problema. El túnel que llevaba hasta la entrada de la guardería estaba colapsado, evidenciado por una parte del tren atrapada entre los escombros. Parecía que el tren se había descarrilado, provocando el derrumbe del túnel. Dogday se dio cuenta de que no podía avanzar por el camino directo hacia la guardería.

—Voy a tener que buscar otro camino... —Suspirando con cansancio— ... —Escuchando un zumbido— (Ya estoy harto de ese zumbido...) —Pensaba el can con molestia, mirando a sus espaldas—

Durante su recorrido por la estación de juegos, Dogday se vio tenso por un zumbido peculiar que no lograba identificar. Mientras resolvía algunos puzles para abrirse camino hacia la guardería, ese zumbido se infiltraba en sus oídos, inicialmente pensó que provenía del GrabPack, pero pronto se dio cuenta de que no era así. A medida que avanzaba por el lobby de la estación, el zumbido parecía moverse en diferentes direcciones, lo que lo hizo temer que fuera PJ Pug-A-Pilar. Sin embargo, al explorar la estación principal, se dio cuenta de que no había nada que pudiera generar ese sonido.

El zumbido continuó durante su trayecto por el túnel, manifestándose repetidamente y llegando a un punto en el que Dogday, aunque ya no se asustaba, se sentía cada vez más molesto por la persistencia del ruido. No saber qué lo causaba era algo que lo inquietaba, añadiendo una capa de intriga a su misión en la estación de juegos.

—(Algo debe estar siguiéndome...) —Mirando a los alrededores, cambiando la mano verde por la mano naranja de su GrabPack— (Espero no estar haciendo una estupidez)

El perro empezaba a sospechar que algún experimento lo estaba siguiendo, pero notaba que no mostraba intenciones de atacarlo. Si fuera así, se habría lanzado contra él sin dudarlo. Dogday, con cautela, disparó una bengala hacia el techo para iluminar parcialmente la zona donde se encontraba. La luz de la bengala reveló una figura que intentaba esquivar la iluminación, confirmando las sospechas del perro. Aquella sombra parecía poder volar ya que estaba flotando en el aire a la par que el zumbido se hizo ligeramente más intenso por el susto.

—¡No vas a escapar! —Exclamaba el perro en un grito mientras utilizaba la mano izquierda de su GrabPack para tratar de atrapar a la sombra desconocida—

La maniobra de Dogday tuvo un efecto sorprendente. Aunque la mano azul del GrabPack no pudo sujetar directamente a la sombra que lo seguía, logró golpear su cuerpo, lo que desestabilizó su vuelo y la hizo caer al suelo con fuerza. Sin perder tiempo, Dogday cambió a la mano naranja con la intención de iluminar el área y confrontar directamente al experimento que lo había estado siguiendo.

Al iluminar la zona con la bengala, la misteriosa sombra finalmente se reveló, revelando qué era exactamente lo que había estado persiguiendo a Dogday durante su travesía hacia la guardería.

En cuanto Dogday vio a su seguidor, se quedó sorprendido, a la par que confundido...

—¿Cat-bee? —Preguntaba el perro con sorpresa y confusión, aunque cambiando su semblante a uno mucho más serio— ¿Por qué me estas siguiendo? —Apuntándole con la mano naranja—

Parecía que el experimento que había estado siguiendo a Dogday no era otro que uno de los tantos juguetes Cat-bee que se encontraban dispersos por la fábrica. Esto resultó extraño, ya que, durante su tiempo en el PlayHouse como prisionero, Catnap le había contado que la mayoría de esos juguetes habían muerto a manos de otros experimentos que los cazaban. La facilidad con la que Dogday atrapó al juguete contrastaba con la imagen que Catnap le había pintado de ellos, incluso llegando a decir que eran curiosamente deliciosos durante esos días de hambruna que experimentaron cuando la falta de alimento se presentó.

—¡E-Espera! —Gritaba en pánico aquella gata-abeja mientras intentaba alejarse sin tener tanto éxito por el miedo que sentía al ser descubierta— N-No dispares, por favor... mi cuerpo es altamente inflamable...

El perro se sorprendió un poco al escuchar la voz, parecía ser una voz femenina... Nunca había escuchado a un Cat-Bee hablar directamente, así que estaba confundido. Dogday simplemente retrocedió un poco para permitir que la gata-abeja se pudiera incorporar, aunque no dejo de apuntarle directamente con la mano naranja a modo de defenderse si era necesario.

—Responde ¿Por qué me estabas siguiendo...? —Preguntaba nuevamente el perro sin omitir su tono serio—

—C-Creí que eras... el trabajador que entro hace unos días... —Respondía la pregunta en un tono nervioso al notar que el perro no dejaba de apuntarle con la mano naranja— E-Escuche los sonidos del GrabPack y sentí curiosidad así que trate de vigilarte desde una distancia segura, pero luego me di cuenta de que eras el perro que entretenía a los niños en la guardería... —Explicaba mientras trataba de tranquilizarse— ¿D-Dogdad...?

—Dogday —Corrigiendo la falla de su nombre—

—E-Ese mismo —Respondiendo con una sonrisa nerviosa— Te seguí porque tenía curiosidad, quise regresar a mi escondite, pero antes de darme cuenta ya estábamos en la estación de juegos y no quise quedarme sola así que te estuve siguiendo por eso...

Dogday frunció el ceño ante la respuesta, no estaba del todo convencido así que acerco la mano hacia la abeja con la intensión de presionarla otro poco.

—¿Cómo sé que no me estas mintiendo? —Preguntando directamente su duda—

—¡P-Por qué no quiero hacerte daño! —Respondía rápidamente ante los nervios— ¡S-Solo no quiero e-estar sola en está zona de la fábrica! S-Soy presa fácil para cualquier experimento...

Dogday examinó con detenimiento la apariencia de la abeja. Notó que estaba nerviosa y asustada, lo que se reflejaba en su cuerpo y en algunas cicatrices visibles. Al observarla más detenidamente, se dio cuenta de que le faltaba una parte importante de su cola. A diferencia de los otros juguetes Cat-Bee, esta abeja no tenía un aguijón oculto.

—... —Suspirando en resignación para dejar de apuntarla con la mano naranja— Deberías de volver a tu escondite, estoy tratando de bajar a la guardería así que si me sigues solo vas a terminar alejándote más de tu espacio seguro. Es peligroso estar solo en las instalaciones

Dogday ni siquiera dejo que la gato-abeja pudiera responder porque sin tomarle mucha importancia empezó a caminar de regreso a la estación por las vías del tren. El perro pensó que ese juguete de Cat-bee se quedaría ahí, pero para su sorpresa el zumbido de sus alas lo hizo darse la vuelta para notar que la abeja lo seguía a una distancia algo corta.

—... —Volteando a ver a la gato-abeja—

—... —Mirando a Dogday mientras vuela a unos cuantos metros de él—

—... ¿Por qué me estas siguiendo todavía...? —Preguntaba el can con una ceja alzada—

—Y-Ya te lo dije... no quiero quedarme sola... —Respondía la abejorro con preocupación— Tu lo dijiste, ir solo es peligroso...

—Pero... aahh... —Suspirando con cansancio— Escucha, no tengo tiempo para hablar —Retomando su camino, escuchando que el zumbido de las alas de Cat-bee seguía sonando a sus espaldas— Tengo que llegar a la guardería con urgencia, estoy en mitad de una misión importante y no puedo distraerme, no me puedes acompañar

—P-Puedo ser de ayuda —Exclamaba la abeja en un intento de convencer al perro por quedarse a su lado— Puedo volar y llegar a zonas altas de las instalaciones, tal vez podría ayudarte con unos cuantos puzles, s-solo no me quiero quedar sola... y-ya no soporto ser la única que queda... 

—...

Dogday se detuvo al escuchar las últimas palabras de Cat-bee. Su voz sonaba al borde del quiebre, e incluso detectó un leve sollozo proveniente de atrás suyo. Estaba claro que Cat-bee había pasado por algo que la había afectado profundamente. Dogday estaba tratando de mantenerse insensible para no retrasarse en su aventura, pero esas palabras resonaron en su mente de manera inesperada: "La única que queda...". El perro no pudo evitar sentir una leve identificación con ella en ese momento.

Recordó la revelación impactante de Catnap sobre haber asesinado a sus amigos. Durante tantos años en su celda del Playhouse, Dogday había cargado con el peso de la culpa y el deseo de la muerte. No quería ser el último de las criaturas sonrientes, no se sentía merecedor de ser el único que seguía con vida. La conexión con las palabras de Cat-bee le recordó lo profundo de su propio dolor y las sombras de su pasado.

A pesar de su determinación por avanzar sin mirar atrás, aquel breve momento de reflexión lo llevó a sentir empatía y compasión hacia Cat-bee... además de empezar a notar que estaba actuando mal... ¿En serio estaba pensando abandonarla en un lugar de pesadilla? No era algo que él haría...

—... —Suspirando lentamente, regresando su mirada a Cat-Bee— Puedes acompañarme, pero te advierto que puede ser peligroso...

—¡G-Gracias! ¡Gracias! ¡Gracias! —Exclamaba la abeja con felicidad mientras se acercaba para abrazarlo— P-Prometo que no te vas a arrepentir, te ayudaré en todo lo que pueda, gracias...

Dogday no se esperaba esa reacción tan repentina y genuina, esperaba que la gata-abeja le agradeciera, pero no de esa forma, parecía que Cat-bee realmente necesitaba la compañía de alguien luego de quien sabe cuánto tiempo de soledad...

Sin duda alguna, sería el inicio de una amistad algo curiosa.

Nota del auto: Esté fue el ultimo capítulo de la maratón, con suspenso de la introducción de un personaje que tenía ganas de escribir, Cat-bee, así que nos vemos en unos 2-5 días con esta historia, dependerá, nos leemos luego c.c/