
5. Chico triste.
•──────────❥◦•
Las yemas de sus dedos acariciaban el grueso vidrio que lo separaba de su ex esposo. Sus ojos rojos e hinchados miraban con tristeza al hombre que se encontraba completamente dormido en aquella camilla blanca. Y su corazón parecía romperse cada vez que bombeaba y le recordaba las últimas palabras que Jimin le había dicho minutos atrás.
Esa mirada fría y de rechazo por parte del castaño se repetía una y otra vez en sus pensamientos, haciendo que su pecho se oprimiera ante el dolor y la tristeza.
Unas lágrimas decidieron escapar de sus ojos y rodaron por sus mejillas, dejando un camino húmedo a su paso, Jungkook no se molestó en quitarlas. Apoyó su frente en el cristal y cerró los ojos por un momento, deseaba que Jimin lo recordara, pero no quería que demorara en hacerlo. No creía poder seguir soportando el precio de su error.
-Oye - la voz de Taehyung lo hizo abrir los ojos y lo miró - Te traje algo para que bebas.
-No quiero...
-Mira pedazo de mierda mal agradecida - comenzó - Bajé a comprar esto y te lo tomas.
-Quiero que me recuerde, que sepa quién fui en su vida... - musitó bajito, mirando nuevamente a Jimin.
-¿Quieres que recuerde al hombre que lo apartó y le rompió el corazón? ¿Estás seguro, Jungkook?
-N-no...
-Porque eso es lo que puede recordar y no creo que te guste. Mira, sé que es duro, pero al menos está vivo y tienes una oportunidad de recuperarlo.
-Pero...
-Pero nada, hombre. Al menos no sabe lo idiota que fuiste cuando no llegabas temprano a casa, cuando preferías trabajar antes de estar con él, cuando dejaste de tomar tus días libres y lo dejabas solo, o como cuando olvidaste su cumpleaños y no llegaste a cenar y ni llamaste durante el día. ¿Quieres que siga?
Negó con la cabeza en un movimiento lento, mientras las lágrimas seguían corriendo por sus mejillas. Odiaba a su amigo en momentos así, pero sabía que él era el único en decirle sin rodeo cada cosa que hacía mal, quien se encargaba de recordarle sus errores y decirles sus verdades sin pena alguna. Pero no quería escucharlas, no ahora.
Porque dolía. Dolía mucho más de lo que alguna vez imaginó y ya creía haber tenido suficiente.
-N-no sigas... - musitó bajito, intentando ahogar el llanto.
-Sabes lo que no te conviene escuchar - bufó cansado e irritado. Estaba harto de la mierda de su amigo, más cuando no sabía los detalles y debía estar deduciendo todo lo que había pasado.
Jungkook quitó la humedad de su rostro con el dorso de su mano y de malas ganas, recibió el café que Taehyung le había comprado.
-Gracias.
-Hm. Entonces... ¿Qué estamos esperando? - miró a través del cristal y pudo ver como unas enfermeras acomodaban las mantas alrededor de Jimin.
-Quiero hablar con el doctor Kim, pero fue por unas cosas y ya viene.
-Vale. Luego de eso nos vamos.
-No quiero ir a ca...
-Me importa una mierda - lo interrumpió - Tengo sueño y Jimin está durmiendo. ¿Tu fiebre bajó?
-Sí - se limitó a responder, avanzando y dejándose caer en los asientos que había en el pasillo.
Taehyung sin mucha delicadeza, posó su mano en la frente de su amigo, haciendo que este arrugara el entrecejo y lo mirara de malas ganas.
-Más despacio. Me dolió - se quejó y Taehyung sonrió divertido.
-No estás caliente y eso es bueno.
-Cállate.
-Vuelve a callarme y soy yo quien te calla de un puñetazo.
-Tus amenazas me tienen sin cuidado - murmuró, mientras acercaba el vaso de plástico a sus labios y le daba un sorbo.
Taehyung no dijo nada más y se sentó a su lado, estaba demasiado cansado como para comenzar una de sus adorables discusiones infantiles y sin sentido.
Esperó a que Jungkook bebiera todo el café y luego le quitó el vaso para tirarlo al bote de basura y volver a su lado.
El dolor corporal seguía ahí y las pulsaciones en su cabeza también. No tenía fuerzas y no sabía cómo conseguía seguir despierto, pero para ser sinceros, Jungkook solo quería ir a casa y cerrar los ojos en su fría y solitaria cama.
"¡Jungkook-ah!" Jimin corría hacia él por el largo patio de la universidad, con una preciosa sonrisa dibujada en sus labios.
Jungkook apenas escuchó aquella dulce voz miró en su dirección y lo vio a lo lejos. Él también sonrió de forma instantánea. Se despidió de su pequeño grupo de amigos y avanzó, recibiendo a Jimin entre sus brazos.
"Hey... ¿Qué haces aquí, Jimin-ssi?"
"¡Tengo maravillosas noticias!" Canturrió emocionado, alejándose levemente del cuerpo de su novio para poder mirarlo y picotear rápidamente sus labios. "Y una de ellas es que tendrás que aceptarme en tu pequeño departamento."
"¿Quieres quedarte hoy?"
"No, tonto." Soltó una risita divertida. "Logré comprar el taller que te mencioné antes y uhm... Me quedé sin dinero, por lo que me cancelaron el contrato de arriendo y no tengo donde vivir ahora."
"Oh. ¿Lo compraste?"
"Lo compré." Afirmó, sin perder aquella emoción en su voz.
"Oh, dios." Sonrió y besó los labios de Jimin una vez más. "Felicidades, amor."
"Gracias, bebé. Ahora, ¿Vas a dejar que viva contigo o no? Si no tendré que acomodarme en el taller, pero es muy frio y creo que..."
"Por supuesto que sí, amor." Lo interrumpió. "¿Cómo piensas que no voy a querer? Me encanta la idea de saber que te tendré para mí día y noche en casa." Sonrió feliz y enamorado, haciendo que sus mejillas se tiñeran de color rosa.
"Vale, pero ahora quiero ir a celebrar. ¿terminaron tus clases, bebé?"
"Hm. No, pero vamos."
"Uy, que rebelde." Bromeó y Jungkook volvió a picotear sus labios, sin dejar de sonreírle.
"Solo espera un momento, amor. Iré a decirle a Tae que luego me pase los apuntes y nos vamos."
"Bueno." Jungkook se giró en dirección del grupo de amigos para comenzar a avanzar, pero la mano de Jimin sobre la suya lo detuvo y se volvió para mirarlo. "Jungkook-ah."
"¿Sí?" La mirada llena de amor que Jimin le dio en ese momento, le hizo entender que se sentían de la misma manera. Como si todo el mundo alrededor no importase cuando se trataban de ellos.
"Te amo." Le susurró bajito, pero Jungkook logró comprender aquellas palabras sin siquiera haber tenido que escucharlas con claridad.
"Te amo más, amor."
-Bien. Lo que presenta Park, es amnesia - Ya se encontraban en el despacho del doctor Kim, sentados frente a él y escuchando muy atentos lo que pasaba con Jimin - Debemos realizarle una serie de exámenes para saber que tipo de amnesia presenta. Esto suele suceder cuando sufren algún tipo de traumatismo, falta de vitaminas o estrés, pero en este caso, es por la lesión que sufrió el paciente.
-¿Eso quiere decir...? - Taehyung se aventuró a preguntar.
-Es amnesia, señor Kim. No sabemos cuando puede durar, por eso necesito hacerle un chequeo.
-¡No se acuerda de mí! - se levantó de la silla con furia, agarrando sus cabellos en modo de desesperación.
-Jungkook, calma - intervino Taehyung rápidamente y lo tomó del brazo, obligándolo a sentarse nuevamente.
-Su memoria debería ir mejorando con el tiempo.
-¿Y si no pasa? - no quería siquiera imaginar que eso pasaría, pero lo hizo y su corazón dolió.
-No puedo asegurarle nada por ahora, pero debe integrarse con normalidad a su rutina diaria y ver si con eso consigue traer de vuelta aquellos recuerdos que se bloquearon - Jungkook frotó su rostro con ambas manos. El doctor no sabía qué más decir ante aquella situación, no cuando no tenía un diagnóstico claro - Por ahora, necesito que él descanse y usted igual, señor Jeon.
-No necesito descansar, estoy bien - mintió. Se sentía a punto de colapsar.
-Vaya a casa y descanse. Cuando se sienta mejor, necesitaremos que le traiga cosas al señor Park para que se sienta más cómodo ya que su estadía aquí se prolongará por una semana, para evaluar su progreso.
-Bien.
-Yo me encargo de que no salga de la cama. Gracias doc.- Taehyung habló, mientras se ponían de pie y estiró su mano para estrecharla con el doctor Kim.
-Los llamaré en caso de que algo pase.
-Vale, gracias - se despidió Jungkook.
Salieron de la pequeña oficina del doctor y caminaron hacia los elevadores en completo silencio. Cuando subieron al auto, Taehyung lo miró por unos segundos sin decir nada.
-¿Qué? - preguntó Jungkook, sonando irritado y cansado.
-Me quedaré contigo esta noche y dormiremos juntos - soltó, como si aquello fuera algo común entre ellos dos.
-¿Es broma? - preguntó incrédulo - Vete a tu casa.
-Nunca bromeo, idiota - bufó ofendido - Y ya hablé con Naye, asique sabe que me quedaré contigo esta noche.
-Pero yo no quiero. Vete a cas...
-Si siguen insistiendo con que me vaya a casa, es que te vuelo los diente de un puñetazo, idiota.
Jungkook rodó los ojos.
-Te abrazaré como un maldito pulpo - advirtió y Taehyung frunció el ceño en rechazo.
-Hm, ya. Como lo hagas, te ahogo con la almohada, hijo de puta.
Jungkook soltó una risita baja, mientras giraba su rostro y clavaba sus ojos en el cristal de la ventana.
***
Una vez acostados, Jungkook giró su rostro hacia su amigo, quien estaba tumbado de espaldas y en completo silencio.
-Tae... - musitó bajito y el mencionado giró el rostro, como si intentara verlo entre la oscuridad.
-Si me dices que quieres que te abrace, te golpeo - bromeó como solía hacerlo, pero un pequeño sollozo lo hizo arrepentirse de sus palabras - Hombre, no era en serio.
Se movió y buscó a ciegas el cuerpo de su amigo para envolverlo en sus brazos. Cuando se trataba de Jungkook, nunca se avergonzaba de demostrar cariño si este lo necesitaba y verlo así; tan frágil y roto, era algo que no podía dejar pasar.
Deseaba con todas sus fuerzas que este Jungkook marchitado y herido se fuera, para que le devolvieran a ese Jungkook alegre y seguro de sí mismo.
Jungkook se dejó hacer, enterrando su cara en el pecho de su amigo, mientras los brazos de éste lo envolvían y le daban esa seguridad que necesitaba.
-No estás solo, Jungkook. ¿Lo sabes, verdad?
-Sí.
-Todos cometemos errores. Es normal, somos humanos. Tú ya aprendiste de ellos y ahora debes remediar todo, luchar por ti y por quien amas.
-Sí.
-No te guardes las cosas, no más - movio sus manos de forma inconciente, dejando sutiles caricia sen la espalda de Jungkook - No te guardes los problemas, idiota. Soy tu jodido mejor amigo y, aunque no es obligación tuya contarme todo, te obligo a que lo hagas, pedazo de idiota.
-Vale.
-No soy un puto adivino. Si yo no sé lo que te pasa, no puedo ayudarte. Si no puedo ayudarte, me colmas la paciencia y solo quiero molerte a puñetazos.
-Tae...
-Sí, bueno, me desvié ¿Y qué? Es que no sé como dejarte esto en claro. Jungkook, quiero ayudarte. Maldición, voy a parecer un amariconado pegajoso, pero ya qué.
-Ya, mejor cállate.
-Cállate mi polla, idiota - bufó, sonando nuevamente irritado - Estoy intentando ser cariñoso y me callas, pedazo de mierda.
-Vale, lo siento - sorbió su congestionada nariz.
-Oye, no me dejes lleno de mocos.
-No lo haré.
-Ya.
-¿Entonces? - salió de su pecho, alzando la cabeza e intentando descifrar su rostro en la oscuridad.
-Entonces nada. Ya lo sabes y es mucho - su voz sonaba ligeramente avergonzada.
-Lo sé - concedió - Gracias por eso. Por todo en realidad.
-Vale.
-Te quiero, Tae.
-Ya, basta de esta mariconería y a dormir.
-Bien.
-Si despiertas con una erección, es que te corto la polla.
-Tae...
-Ya, nada más advierto.
-¿Puedo quedarme así?
-Hm. Vale.
-Mañana iré a ver a Jimin...
-Vale. Antes de eso, debes comer y tomar medicina o no irás.
-Bueno.
Aspirando el fuerte olor del perfume en el pecho de su amigo, Jungkook cerró los ojos y dejó que su cuerpo finalmente se relajara.
"Quiero que me hagas el amor, Jungkook." La juguetona voz de Jimin le erizó cada vello en su cuerpo.
"S-sí." Logró balbucear, mientras humedecía sus labios con la punta de su lengua.
"Pero quiero ahora." Jungkook pareció volver a tierra y percatarse de las palabras de su novio.
"¿Ahora? Bebé, estamos en un baño público..."
"¿Y? Hazlo. Te necesito ahora." Jungkook tragó grueso y luego sonrió descaradamente.
"Joder, ¿Qué as hecho conmigo?" Lo metió a uno de los cubículos y cerró con seguro. "Ven aquí, amor." Lo tomó por la cintura y lo acercó a él para alcanzar sus labios y besarlo.
-Jungkook... - la voz preocupada de Taehyung pareció taladrar sus oídos.
-¿Mmm? - tarareó. Su cuerpo se sentía pesado y sin fuerzas.
-Mierda, pensé que habías muerto - soltó, en un vago intento por ocultar su preocupación - Tienes fiebre y estás todo mojado, hombre.
-Lo siento... - se acurrucó entre las mantas.
-¿Por qué te disculpas? - encendió las luces y buscó la medicina que anteriormente el doctor le había dado - Tomaras esto y te cambiaré la puta ropa. Maldición, ¿Por qué tengo que cuidarte siempre?
-E-eres mi mejor amigo... - murmuró, sin ser capaz de mantener los ojos abiertos.
-Ahora lo recuerda, eh.
-Siempre lo hago...
Taehyung no dijo nada más, en cambio, lo ayudó a cambiarse de ropa y se aseguró de que se tragara la pastilla, además de cambiar las sábanas. Tardó en realizar todo aquello, pero finalmente lo logró y acostó nuevamente a Jungkook.
...
¡Llegamos a 1K! 🤭🎉 Muchas gracias por eso. Por leerme y seguirme ♡
Dato ramdom del día : esto iba a ser una historia de 1 solo cap, pero no pude meter todo en uno, por lo que hice 2 y al final ya voy en 5. Akdnsnd
Ya saben como soy, no esperen mucho unu skjdskdkd los amo ♡
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro