07| ¿Amor/Dolor?
Que mal me siento... Después de lo de ayer no pude dormí mucho, incluso el hambre se fue; lo único que pude hacer fue hablarles por vídeo llamada a Oliver y Cam para contarles, creía que podría contarles si soltar una lágrima... Vaya mentira me hice creer. Con toda la pereza acumulada en mi cuerpo me puse de pie y me vi en el espejo, estás ojeras no las podría ocultar ni con maquillaje; sin más que hacer solo tome mi teléfono para ver la hora, 6:00am, bastante temprano, mejor me doy una ducha para poder despertarme bien.
Ni el agua fría fue capaz de quitarme el cansancio y el malestar, hoy sería un día jodidamente largo. Me vestí con lo más simple que encontré, una simple camisa totalmente blanca y un pantalón negro junto a unos zapatos deportivos negros; salí de mi cuarto esperando encontrarme a mí padre dormido en el sillón, pero no fue así, la casa está sola, vaya sorpresa, ¿No?. Sentí un pequeño nudo en la garganta y como las lágrimas se esforzaban por salir... No, hoy no. Sacudí mi cabeza de forma brusca y fui a prepararme un sándwich junto a una taza con café, en la cocina vi una nota con la letra de mi padre, una simple nota que decía "Volveré temprano", ¿Se supone qué crea esa mentira?. Con mi comida lista me senté en el sillón y encendí la televisión, lo único que vale la pena ver a esta hora son las noticias. La presentadora apareció, vistiendo un elegante traje con falda de color negro, poseyendo unos ojos verde esmeralda y cabello corto hasta sus hombros negros; vaya mujer más elegante.
—Y en otras noticias hubo un raro avistamiento cerca de la "Compañía Lobekarye". Nuestros informantes pudieron ver a un hombre que recorría los alrededores de la compañía, y para sorpresa de los mismos... El hombre llevaba una especie de máscara de vaca junto a un delantal y una hoz ensangrentada. En seguida las imágenes que fueron tomadas.—después de esa información unas imagines aparecieron, se veían algo borrosas y una silueta se podía ver en ellas... Pero sin duda alguna es el "Minotauro", es imposible no reconocerlo.—Puede que este psicópata sea el responsable de la masacre en la casa abandonada y el asesinato del guardia del cementerio, agradeceremos a nuestras televidentes cualquier información y avistamiento de esta persona, además de pedirle a todos, cuídense mucho, no salgan en la noche, tengan el mayor cuidado que puedan... No se arriesguen.—finalizó su informe y de nuevo pasaron a las imágenes del "Minotauro", se puede detallar a medias su máscara, armas, y vestimenta... Definitivamente es él, ¿Por qué esta tan cerca de la "Compañía Lobekarye"?.
Después de ver esas noticias no pude darle otro mordisco al sandwich, el hambre se había espantado. El tiempo pasó rápido hasta que se hicieron las 7:00am, ya estaba listo para irme, solo debo tomar mi bolso.
—¡Mierda!.—grite en soledad y tome mi cabeza.
Dios, ¡Como duele!. Duele demasiado, por la mierda, ¡Duele demasiado!.
Cerré mis ojos con fuerzas y luego los abrí, sigo en casa... Al menos está vez no hubo una oscuridad interminables, que suerte. Mi cuerpo se movió por sí solo, tome mi bolso y sin más salí de casa asegurándome de cerrar bien; grata fue mi sorpresa al ver que Cam yacía en la cera, ¿Venía a mi casa?. Vaya.
—Dan.—me llamo con cierta preocupación en su voz.
—Estoy bien.—solté de forma automática y me acerqué a ella.
—¿Seguro?.—me pregunto con más preocupación.
—Por favor... No quiero seguir con ese tema.—le respondí mientras sentía una punzada en el corazón. Duele.
—Bien...—soltó algo desanimada.
Sin más ambos nos dispusimos a caminar al instituto, no es como si pudiéramos hacer alguna otra cosa; el ambiente se sentía algo tenso, ninguno de los dos hablaba, solo caminábamos. La verdad es bastante raro cuando nos quedamos en silencios como estos, hasta para ser una "visión" es bastante raro.
—O-oye Dan.—me llamo de forma tímida.
—¿Si?.—le respondí a secas.
Cam no me dijo alguna otra cosa, solo detuvo su andar y tomó mis manos; yo solo me detuve algo confuso. Cam llevo mis manos a su cintura y luego me abrazo por el cuello, la vi más confuso que antes mientras sentía mis mejillas arder y el rubor crecer, ella no me veía a los ojos, parecía avergonzada, y sin más empezó a acercarse a mi con los ojos cerrados. No me quedan dudas, Cam va a besarme. Mi mejor amiga está a punto de besarme, ¿Es raro que yo quiera recibir ese beso?. Solo deseo dejarme llevar—no, no puedo, si lo hago...
—¡Mierda!.—solté repentinamente y di un parpadeo.
¿Por qué dolió más esta vez?. Dolió más cuando terminó que cuando empezó, ¿Por qué?... ¿Por qué no puedo besar a Cam?. Ese último pensamiento, esa negación repentina, eso irrumpió mi cabeza, eso no lo pensé yo, ¿De dónde salió esa idea?. Mierda, debo considerar empezar a llevar pastillas para el dolor conmigo, deberían aplacar un poco estos dolores. Un golpe en la puerta, según lo que vi. ¿Será Cam?. Con pasos lentos me acerque a la puerta y sin más la abrí, en efecto, del otro lado estaba Cam, con una expresión de preocupación, llevando una camisa blanca sencilla y una falda negra junto a zapatillas del mismo color, vamos combinados, y se ve realmente hermosa...
—Vaya, eso no lo ocultas ni con maquillaje.—soltó con una sonrisa de lado para animarme.
—Si. Lo mismo pensé yo.—le respondí un poco más animado.
—Dan.—me llamo con preocupación.
—Estaré bien.—solté con seriedad.
—Pe-pero ahora.—señaló más preocupada.
—Deberé afrontarlo. Por hoy quiero dejar este tema de lado.—le dije desanimado pero con calma... Solo recordarlo me provoca algo de dolor.
—Esta bien.—me dijo desanimada.
—Vamos a clases.—señale con calma y emprendimos camino.
Caminamos de forma lenta por la desolada ciudad, a esta hora no habían muchas personas alrededor. El silencio entre nosotros volvía el ambiente tenso, normalmente nunca permanecemos en silencio, siempre hablamos, siempre hay un tema del que hablar, pero con todo lo que pasó ayer, con lo vulnerable que fui ante Cam y Oliver... Dios, que vergüenza; de seguro ahora me ven como un llorón, odio haberme dejado llevar por mí tristeza. Mierda.
—O-oye Dan.—me llamo de forma tímida.
—¿Si?.—le respondí de forma automática.
Ella no me dijo ninguna otra cosa, solo detuvo su andar, tomó mis manos y las dejo en sus caderas y luego me abrazo del cuello... Esta pasando, de nuevo. Sentí como mi rostro se calentaba y me sonrojaba, mientras que Cam se acercaba a mi rostro con sus ojos cerrados. ¿Por qué me negaría a esto?, Es algo que simplemente debe pasar. Quiero que pase. Pude sentir como sus cálidos labios se tocaron con los míos, como me abrazo con un poco más de fuerza y busco contacto con mi lengua; Cam deshizo el beso y me vio, un gran tono carmesí invadía toda su rostro mientras nuestras respiraciones chocaban; sus labios son dulces.
—Dante.—me llamo con más timidez que antes.
—Esto me ayuda. Gracias Cam.—le señale sonriente y de forma aventurera le robe otro beso.
Sin más ambos nos separamos, Cam seguía en estado de shock con el tono carmesí dominando su rostro, yo... Realmente nunca imaginé besar a Cam, nunca imaginé que podría salir con ella; pero, fue algo necesario, después de este beso me siento un poco más animado. El beso de mi mejor amiga me hizo recuperarme un poco, raro.
—Oye tomate, vamos al instituto.—le dije con un poco de burla a Cam.
—¿Co-como me llamaste Dante?.—me gritó con una mezcla de molestía y vergüenza.
—Tomate.—le repetí con una pequeña sonrisa y tome su mano.—Vamos.
Pude sentir como Cam apretó mi mano, luego me vio y esbozo una gran sonrisa; esa hermosa sonrisa junto a su sonrojo alegran un poco mi corazón. Mi cuerpo reaccionó por sí solo y también le mostré una sonrisa a Cam... Tal vez no será un día tan malo después de todo.
[———————]
Al llegar al instituto todo seguía con su aura lúgubre, realmente nada había cambiado ni un poco... Tal vez si había empeorado. Cam soltó mi mano al entrar a nuestra aula e ir a nuestros asientos, aunque ya era algo tarde, todos nos habían visto tomados de manos, de seguro ya deben haber unos miles de rumores rondando. Akira parecía algo molesta, tenía una mueca de disgusto dominando su rostro, esta así desde que nos vio llegar a Cam y a mi. Con pasos lentos fui hasta mi sitio y me senté, choque puños con Oliver para saludarlo y luego espere el inicio de mi clase, pude ver de reojo a Akira y Cam, la primera seguía con su expresión de disgusto puro, mientras que Cam sonreía de forma victoriosa... ¿Qué ocurre con esas dos?.
—Rompe corazones.—soltó Oliver con burla.
—¿Qué?.—le pregunté confuso.
—Que despistado eres Dan.—me señaló con una sonrisa y luego su expresión se volvió seria.—Mi padre me creyó, no tenemos problemas legales por ahora... Viste las noticias, ¿Cierto?. El "minotauro".
—Si, cerca de la Compañía "Lobekarye".—señale con seriedad.
—Puede ser una coincidía.—opino el pelirrojo.
—Y puede que no... Debemos investigar a "Lobekarye".—le dije con determinación y él asintió.
Nuestra charla fue interrumpida por la llegada de nuestro profesor, y sin más la dejamos hasta ahí por ahora, debemos seguir con nuestras vidas normales...
Las horas pasaron, quedaban solo unos pocos minutos para que nuestras clases acabarán y podamos volver a nuestras casas; a casa, ¿Papá enserio estará en casa?. No, de seguro aún trabaja, como siempre solo trabajando... ¡Mierda!. ¡No-no ahora!, De forma disimulada dejé mi rostro contra la mesa de mi escritorio y tome uno de los lados de mi cabeza, ¿Por qué debe ser justo ahora? ¡Mierda duele demasiado!. ¡Quiero gritar!. ¡DUELE!.
Oscuridad, un simple parpadeo y ya todo se había iluminado. Sigo en mi aula, todo esta como antes. Por mero instinto mi mirada viajo a Cam, quien tenía una mueca de pocos amigos... ¿Por qué estará molesta?.
—Chicos, volveré en unos momentos, no formen alboroto.—dijo repentinamente nuestro profesor y sin más salió del aula.
Apenas nuestro profesor se fue todos mis compañeros se pusieron de pie para estirar un poco las piernas, vi como varios se unieron en pequeños grupos para charlar entre sí; al menos no es un alboroto. Akira se acercó a mí puesto, y pude ver como Cam centro su mirada en la chica, parecía que no tenía la intención de moverse, pero si las vistas mataran, Akira ya estaría muerta y bajo tierra.
—Hola Dan.—me saluda algo coqueta. Cuando actúa así me da más miedo. Pero en el fondo siento que es adorable—¿Qué mierda?.
—¿Qué hay?.—la saludé algo desanimado.
—Cam me dijo que peleaste con tu padre, lo lamento.—me dijo triste. Vaya, otra persona que lo sabe, genial.
—Claro.—solté con menos ánimos.
—¿Sabes?, Yo estaré aquí para ti, para lo que sea.—me señaló sonriente.
Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, ¿De qué demonios está hablando esta chica?.
—¿A sí?.—solté de forma automática...¿De qué demonios estoy hablando yo?.
—¿Quieres una prueba?.—me pregunto con una sonrisa coqueta.
Sin esperar a alguna respuesta Akira se acercó a mi rostro con velocidad. Va a besarme, rechace a Cam por esto y está a punto de pasar—¿Rechace a Cam?—Yo... ¿Dé dónde salió ese pensamiento?. ¿En qué momento rechace a Cam?. ¡Pero que mierda!. El escalofrío que recorrió todo mi cuerpo se transformó en punzadas, todo mi cuerpo se llenaba de espasmo dolorosos mientras que mis instintos me pedían a gritos que huyera, lo intente, mi cuerpo no responde, no puedo moverme, permanezco inmóvil mientras Akira se acerca para besarme, ¡Maldición!. ¡Cada vez duele más!. ¡Que pare, por favor!.
Pude sentir como sus labios se posaron sobre los míos repentinamente, un beso muerto. Sus labios fríos cual hielo estaban sobre los míos, sin más su lengua invadió mis adentros y busco contacto, su lengua rasposa recorrió mi alrededor hasta encontrar la mía... ¡Mierda, es horrible!. ¡Quiero que pare!. Y sin oír a mi cerebro mi cuerpo reaccionó por sí solo, correspondió ese beso, sentía su lengua raspar el interior de mi boca mientras que mis labios empezaba a doler por el frío tacto; las punzadas en mi cuerpo se hicieron cada vez peor, cada vez dolía más, obligando a mis dedos a retorcerse. Esto está mal, mi cerebro e instintos me lo gritan, esto está jodidamente mal, por eso duele, porque debo detenerlo, mi cerebro me pide a gritos que detenga este beso, que Akira me bese está mal y así me lo reclama mi mente... ¡Maldición!, Mi cuerpo no responde, no me puedo apartar de ella a pesar del dolor, mierda, mierda, duele mucho, por favor... Ya no quiero más dolor, ¡Mierda ya no quiero más!. ¡No lo soporto!.
—¡Para!.—grité repentinamente y arrastre mis uñas por todo el costado de mi rostro.
Maldición. ¿Ya volví?. Sentí un ardor por el sitio donde arrastre mis uñas, luego me vi las mismas, esas diminutas líneas carmesí... ¿Es sangre?. Sin mucho disimulo vi mi alrededor, todos están viéndome, sin excepción alguna; casi todos me ven con sorpresa, unos pocos parecen preocupados por mi, Oliver parece estar asustado y en shock por mi reacción, Cam se ve algo aterrada mientras me ve, y Akira, parece estar en shock. ¡Mierda!. Tome de nuevo mi cabeza, todo, todo me está doliendo de nuevo, de nuevo ese dolor que me hizo gritar, ¡Mierda duele!. ¡Maldición!.
Sin decir nada solo tome mi bolso y salí corriendo del aula, oí a mi profesor gritar mi nombre; pero no puedo detenerme, duele, duele, duele, duele demasiado, el rostro me arde, siento como algo se desliza del rasguño que me hice, las punzadas pasaron a ser un dolor que dominaba todo mi cuerpo, ¡Mierda!. Sin pensarlo me metí al baño; y de nuevo estaba dejando todo salir, estaba vomitando en el lavamanos.
—Dan-te.—me llamo mi profesor. Así que me había seguido, genial.
No pude soltar alguna palabra para contestarle, solo vomité otro poco y luego me aparte, sin equilibrio alguno tropecé y caí de espalda contra la puerta de uno de los baños, mierda... Realmente me siento mal, no dormí casi anoche, no he comido, y ahora el dolor de esa visión me hizo vomitar lo todo, como duele todo esto, es realmente un asco... Que sueño, ¿Puedo dormir un poco?. Solo un poco... Tengo sueño... Mucho sueño.
—¡Dante!.—gritó mi profesor con cierto eco... Simplemente déjeme dormir...
[———————]
¿Don-dónde estoy?. Estoy acostado... Siento la espalda fría, estoy acostado sobre algo frío. Con pereza abrí mis ojos y vi mi alrededor, estoy sobre una camilla, tengo una intravenosa puesta, las cortinas que me rodean no me dejan ver bien mi alrededor. ¿Acaso estoy en la enfermería?. Aún con pereza me senté sobre la camilla y corrí la cortina... ¿¡Papá!?. Delante de mí estaba mi padre, con una expresión de preocupación pura, al verme se abalanzó sobre mi sin pensarlo mucho, yo acepté el abrazo algo dudoso y vi más allá de su hombro, esta... Esta no es la enfermería de la escuela, ¡Y ya es de noche!.
—N-no tienes ni idea de lo preocupado que estaba. Cuando iba a casa recibí la llamada, te habías desmayado, tuve que traerte al hospital. Tenía miedo de que no abrirás más los ojos... De perderte.—soltó mi padre con un tono entrecortado.
¿Me desmaye?... Cierto, solo quería dormir. Toque el costado de mi cabeza y me encontré con un pequeño pedazo de algodón, a si que logré sacarme sangre con ese rasguño. ¿Qué habrán dichos los doctores de mi estado?.
—¿Cu-cuánto dormí?.—pregunté de forma torpe. Incluso tengo migraña.
—Seis horas.—me respondió a secas.—Dante. ¿Qué ocurrió?. Estabas deshidratado y con el estómago vacío, ni siquiera habías dormido.—añadió preocupado.
—No pude dormir, y no tenía hambre.—respondí a secas.
—Llevaste tu cuerpo al límite, y ese desmayo fue la solución sana al sobreesfuerzo. Dante, ¿Has sentido dolores fuerte últimamente?.—pregunto con preocupación.
—Migrañas.—solté con rapidez.
Mi padre soltó un sonoro suspiro y luego desvío su mirada.
—Que terrible padre soy, ¿No?, Dante. Me mato trabajando día y noche. Casi no nos vemos ni hablamos, y por mis decisiones creíste que era tu responsabilidad ganar dinero. Querías ganar dinero para que dejara de trabajar.—soltó mi padre de forma decaída.
Solo permanecí en silencio. No era un padre terrible, no era para tanto, era malo que no estuviera en casa, pero entiendo... Solo un poco, necesitamos el dinero, por eso yo.
—Siempre creí que debía ganar más dinero que los demás, sentía que tú debías poder tener lo que quisieras, quería que fueras capaz de tener una vida plena, sin preocupaciones... Porque al fin y al cabo no pude darte lo que todos tenían, una familia, una madre, pero al querer darte esa vida... También te arrebate a tu padre, soy terrible, ¿No?.—me dijo con un tono roto.
En ese mismo momento pude oír algo, lo juro... Escuche como mi corazón se partió en dos, sentí una punzada directo al corazón, ¿Qué clase de hijo soy?. Nunca intente hablar de esto con él, solo me guardaba un rencor contra él, un rencor sin derecho a existir. Yo vendía drogas para poder recuperar a mi padre, para que dejara de trabajar; y él trabajaba sin descanso para poder darme todos los lujos del mundo, para darme la mejor vida que podría tener... Ambos estábamos realmente mal.
Con las pocas fuerzas de mi cuerpo me puse de pie y me abalanza a abrazar a mi padre con fuerza, pude sentir como las lágrimas salieron luego de ese abrazo... Durante toda la mañana trate de detenerlas, pero ahora es imposible; no fui un buen hijo, él no fue el mejor padre del mundo, ambos nos habíamos equivocado, pero nunca es tarde para volver a empezar.
—No eres un padre terrible. Eres el mejor padre que podría tener. No lo había entendido hasta ahora... Pero ahora se que serás capaz de hacer cualquier cosa por mi.—le dije tragando me el nudo que había en mi garganta.
—¿No estás molesto?.—me pregunto sin deshacer el abrazo.
—Lo estaba... Pero ya se porque lo hacías.—le respondí intentando parar el sollozo.—No fue la mejor idea del mundo, pero al final todo fue por mi; aunque me alejabas de ti, todo seguía siendo por mí y mi futuro.—añadí y no aguante más, necesitaba dejarlo salir.
Mi padre no dijo ninguna otra palabra, se dedicó simplemente a abrazarme y consolarme en silencio; aunque intente ocultarlo lo se, está llorando... A final de cuentas ninguno de los dos es muy bueno siendo padre e hijo, pero podemos mejorar, lo se. Alrededor de las 8:00pm salimos del hospital, me dijeron que descansará por los siguientes días, gracias a Dios que es fin de semana. Me preguntó que ocurrirá el lunes, todo me vieron huir de clases y luego no supieron más nada de mi; tal vez el lunes los ánimos estén por el suelo, el lunes se cumplirá una semana desde el entierro de Frank, y el viernes se cumplirán dos semanas desde que murió... Hoy se cumplió la primera semana. Será una semana bastante lúgubre.
—Dan, prométeme que no volverás a vender drogas ni alcohol.—me pidió mi padre con seriedad cuando ya estábamos en el auto.
—Lo prometo.—dije decidido, no lo volveré a hacer, definitivamente.
—Esta bien hijo... Yo prometo retomar de nuevo mi trabajo normal.—me informo sonriendo, y sin esconder mi sorpresa lo vi.—Así es Dan, volveré al trabajo normal, ir a las 7am y volver a las 4pm, como una persona normal. No como hasta ahora, así que nos veremos más seguido.—me dijo sonriendo.
Y de nuevo lo sentí, las lágrimas caían... Lágrimas de felicidad, al menos está parte de mi vida está volviendo a la normalidad.
—¿Vamos por pizza para cenar?.—me pregunto sonriente.
—¡Si!.—le respondí sonriente.
Recupere a mi padre, dejara de trabajar casi todo el día y sin descanso... Al fin recupere a mi padre.
Continuará...
———————————————
Espero les haya gustado el cap, estrellita y compartir ayuda mucho amigos, y se los agradecería de todo corazón; y sin más hasta otra.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro