¡SOLO TÚ, TÚ, Y TÚ TAMBIÉN!
«Even though you don't mean to hurt me, you keep tearing me apart. Would you please have mercy on me?
— "Mercy" Shawn Mendes
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— Es hoy Emma — Dijo Draco entrando a mi habitación mientras me cambiaba.
Terminé de ponerme los pantalones la color vino y la camisa gris con las zapatillas.
Tomé el bolso que había preparado anoche. Era un bolso pequeño con un hechizo de extensión indetectable. Tenía dinero tanto muggle como mágico, ropa para bastantes días, algunas meriendas, y otras cosas que a ustedes no les deben importar.
— ¿Qué llevas ahí?
Draco no sabía que había soñado con lo que pasaría el día de hoy así que sonreí y negué con la cabeza.
— Solo... son cosas de chicas.
"Como ser una excelente mentirosa, escrito por Emma Potter"
La verdadera razón por la que tengo el bolso es que se que tendré que huir, alejarme de todos.
Si Harry me ve me delatará con todos, no me permitirán entrar a el cuartel general de la Orden, en la Madriguera no me querrán ni ver y si voy donde Draco... me matarán.
Draco asintió y nos dirigimos hacia la sala de los Menesteres.
(...)
— Será mejor que me vaya, te veo en la torre de astronomía — Dije sabiendo que la hora de acercaba — No queremos que me maten a mí también.
El asintió y yo, a paso rápido, me dirigí hasta la torre de astronomía.
Fue algo difícil ya que Harry había mandado a los chicos a revisar que nada pasara mientras él no estaba.
Entre a la torre de astronomía y me escondí entre las sombras, justo unos minutos después empezó a caer una tormenta y un estruendo se escuchó seguido de una gran explosión y la risa de nada más ni nada menos que Bellatrix Lestrange.
Luego de unos minutos donde tenía mi varita en mano dispuesta en atacar a cualquier persona que se me acercara, llegaron Dumbledore y... Harry.
Todo pasó demasiado rápido, Severus llegó, Dumbledore congeló a Harry bajó la capa y yo seguía escondida. Hasta que llegó Draco.
Le quité la capa a Harry y le indiqué que hiciera silencio. Snape se sorprendió al verme pero pasó de mi y se acercó hasta Draco.
Dejé que varias lágrimas cayeran antes de hablarle a mi hermano
— Lo siento mucho Harry, me odiarás después de esto. Pero tengo que hacerlo.
Le di un último abrazo al tieso de mi hermano y caminé hasta Draco
Frente a mi tenía a Dumbledore, Draco a mi lado tomaba mi mano y le apuntaba con su varita. La risa escandalosa de Bellatrix estaba presente exactamente igual a mi visión.
Apunté a Dumbledore mientras el me miraba con ojos de súplica, pero no para vivir, si no, ojos de súplica para que lo matara.
Tenía las palabras en mi boca, pero no podía, no era capaz de hacerlo.?Respiré hondo y me preparé para el hechizo.
Snape se había puesto a mi lado y también le apuntaba al Director con su varita.
— Severus... por favor.
Snape no dudó mucho en lanzar la maldición la cual le dio exactamente en el pecho al director.
Quise gritar, y lanzar una maldición a Snape, pero solo podía llorar y aferrarme más a Draco que lloraba conmigo. Ya pasó, está muerto...
Vi como el cuerpo de Dumbledore caía por la baranda y me separé de Draco. Él tendría que irse.
— Te amo, no lo olvides — Le dije en un susurro depositando un beso en sus labios y dejando que se fuera.
Corrí antes de Harry saliera bajó el hechizo. Las chicas al verme trataron de acercarse pero las empujé y corrí hasta el inerte cuerpo del profesor.
Miraba a lo lejos las llamas que lanzaban los Mortífagos, y la risa escandalosa de Bellatrix.
Harry corrió por todos lados, hasta que llegó al cuerpo de Dumbledore.
Harry dejaba que varias lágrimas cayeran por sus mejillas mientras era consolado por Alison.
Me acerqué y traté de poner mi mano sobre el hombro de Harry, pero al verme me apartó.
— Harry yo...
El me miró directamente a los ojos, idénticos a los míos. Pero la gran diferencia es que los suyos expresaban odio, y los míos, tristeza y rencor.
— ¡Aléjate! — Me gritó empujándome trayendo la mirada de todos hasta nosotros — ¡Tú estabas ahí! ¡Tú tú... ¡TÚ PUDISTE AYUDARLO! ¡ERES UNA ASQUEROSA TRAIDORA!
Al estar en el suelo y los gritos me hicieron viajar a mis peores memorias. Jack... él era ese niño y por un momento lo vi a él, en vez que a Harry.
Lágrimas caían por mis mejillas mientras traía mis piernas contra mi pecho. Todos me van a odiar... se los dije. Harry me odia...
— ¡Te lo dije! ¡Te dije que iba a estar ahí esta noche! ¿¡No te acuerdas!? ¡Te lo dije en la enfermería!
El dejó de gritar para dirigirme una mirada de disgusto.
— ¿Crees que yo quería? ¡Hay muchas cosas que no entiendes Harry! ¡Yo puedo ver a la gente morir en sueños! ¡Harry él me lo pidió! ¡Me pidió que estuviera ahí esta noche! ¡Yo lo vi morir a él! ¡Escribí la fecha de muerte de muchas personas! ¡Junto a la de él! ¡INCLUSO MI MALDITA MUERTE HARRY POTTER! ¡DEJA DE HACERTE LA MALDITA VÍCTIMA POR QUÉ HAY COSAS QUE AÚN NO COMPRENDES! ¡HAY GENTE QUE LO TIENE PEOR QUE TÚ PERO IGUALMENTE NO TE DAS CUENTA! ¡SOLO TÚ, TÚ, Y TÚ TAMBIÉN! — Respiré profundamente antes de decir lo siguiente — Y antes de que alguien más te lo diga, Te vigilé todo este maldito año, Snape es el príncipe Mestizo y además de todo eso descubrí que teníamos dos hermanas Alessandra y Barbara.
Harry se quedó callado, viéndome inexpresivo. Negué dejando que más lágrimas cayeran por mis mejillas y tomé el pergamino sin los tachones en el y se lo entregué a Harry.
— Al menos intenta salvarlos.
Y así fue como bajo la atenta mirada de todos corrí hacia el bosque, corrí y corrí hasta tropezar.
Y ahí es cuando me desaparecí, en el lugar menos esperado.
En la casa de mis padres.
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Bueno... iba a publicar mañana pero la inspiración surgió y aquí nos leemos de nuevo.
Y aquí es cuando las cosas se ponen feas, besos queridas personitas. Por favor no quieran matarme
"Aunque no quieras herirme, sigues rompiéndome en pedazos. ¿Podrías tener un poco de piedad en mi?"
Recuerden que estoy haciendo una segunda parte al especial de preguntas, si quieren hacer alguna solo escríbanme en privado o déjenlo aquí en los comentarios. Responderé todas sus preguntas.
Ahora sí...
¡Besos!
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