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Había pasado la noche. Mucho no había cambiado realmente, esa mañana luego de que Chris pasó la noche junto a Seungmin, todos se habían visto en la obligación de volver a su rutina.
Byungchan fue a trabajar junto a Minho porque ya había tenido muchas faltas y Hyunjin tuvo que encontrarse a almorzar con unos socios del extranjero. Así que solo eran Jeongin y Felix sentados en el borde de la piscina de la casa del omega menor.
Jeongin movía los pies dentro del agua mientras de reojo podía apreciar Felix hacer lo mismo, totalmente en silencio y en su mundo, sin murmurar nada de nada. Solo mirando el agua en una profunda concentración.
Y eso, aunque no sabía si debía mencionar, a Jeongin le preocupó.
Así que con suavidad movió el brazo golpeando su hombro contra la del rubio hasta hacerlo parpadear y voltear a verlo curioso. Jeongin le ofreció una diminuta y amable sonrisa.
- ¿Qué ocurre, Lixxie?, estas muy pensativo...- indagó con cuidado, y el omega mayor no pareció afectado porque también sonrió y se encogió de hombros.
- Solo...estaba recordando el día anterior, estoy sorprendido y contento de que ese omega finalmente haya despertado, todos parecían tan felices- Jeongin apretó los labios con el corazón encogido.
Oh Felix, tan dulce y lleno de empatía.
- Sí...lo extrañaban mucho- decidió responder y Felix asintió suavemente.
Volviendo la vista Jeongin volvió a mover los pies mientras escuchaba a Felix comenzar a tararear una canción con la boca cerrada. No parecía nuevamente afectado, solo estaba ahí, sonriendo de forma linda y existiendo con toda la tranquilidad.
- Hyung...¿puedo preguntarte algo?- Felix dejo de tararear para asentir hacia su dirección de forma curiosa.
Soltando aire Jeongin tuvo que seguir esa necesidad de ayudar o no estaría tranquilo por el resto del día.
- ¿Te gusta...Chris hyung?- murmuró y creyó en el mismo instante en que lo soltó que no debió haber preguntado.
Sin embargo vio las mejillas del omega encenderse, Felix no pudo sostenerle la mirada y en cambio observó algún punto de la piscina mientras su aroma comenzaba a alterarse de forma nerviosa.
Remojando los labios Jeongin se encogió ligeramente de hombros.
- No debes responder, Lix...si te resulta incómodo no debes hacerlo- el omega no respondió nuevamente, al menos no en el momento.
Segundos después lo vio jugar con sus dedos sobre su regazo, el color carmesí seguía allí pero no parecía incómodo.
- Probablemente si importe mis sentimientos...pero desde un principio, yo supe que el corazón de Chris hyung volvería a su dueño en algún momento.
Jeongin se sorprendió por la respuesta, y volteando a ver a Felix encontró su sonrisa relajada pero los ojos ligeramente empañados.
- Y estoy bien con eso, Innie.
Jeongin no pudo evitar tomar la mano del omega, acariciando su dorso mientras veía a Felix tragar el nudo de emociones mientras le ofrecía una sonrisa con las lágrimas bajando por su piel.
Tal vez había pedido mucho, y no todo sería plenamente feliz.
+
Seungmin se quejó sin aliento cuando ya pasó diez minutos y Jisung siguió asfixiándolo con sus brazos arrojado encima suyo el la cama. Pudo aguantar los primeros minutos porque el más bajo lloraba y se enterraba en pecho.
Pero en ese momento parecía que ya iba a dejarlo sin costillas de tan fuerte que apretaba.
- J-jisunggie...podemos tomarnos las manos, ¿qué te parece?- Jisung detuvo un momento su llanto para mover el brazo a ciegas hasta encontrar la mano de Seungmin extendida en las almohadas y volviendo a acomodarse en su pecho siguió llorando esta vez con las manos entrelazadas-. N-no era de esa forma...
Derrotado Seungmin se permitió aguantarlo un poco más, después de todo ahora solo lo abrazaba con un brazo y se sentía más cómodo para tolerarlo.
Luego de unos minutos más finalmente Jisung cayó a su lado mientras sus manos seguían entrelazadas y Seungmin pudo respirar como se debía. Ambos se quedaron observando el techo de la habitación por un tiempo mientras lo único que se escuchaba era a Jisung sorbiendo su nariz y a Seungmin riéndose por momentos de él.
- Te juro que pasaba un mes más e iba a invocar un espíritu para que te haga despertar- Seungmin sonrió ante la voz ligeramente ronca y baja del omega.
- Quien sabe que clase de demonio ibas a invocar- decidió bromear, escuchando a Jisung reír ante su respuesta.
- Casi moriste salvando la vida del jefe...¿Qué pensaste es ese momento, Minnie?- Seungmin se quedó por un momento en silencio pensativo.
- Que pensé...- Seungmin decidió contestar con el primer pensamiento que se le vino a la mente-. Probablemente que si el jefe moría Jeongin también, y si Jeonginnie moría yo lo haría detrás de él, sería tres muertes fatales. Así que decidí arriesgarme yo.
Jisung asintió de forma distraída para luego soltar un pequeño lloriqueo aliviado.
- Pero estas aquí, Minnie, y Juan con Innie también, así que a pesar de todo, ha salido más bien de lo que creías- Seungmin asintió de acuerdo.
Hablaron por unos minutos más, desviando del tema un poco sobre la realidad y solo metiendo conversación tribales y sin importancia.
Se detuvieron cuando alguien dio ligeros golpes a la puerta. Y cuando Seungmin dio el pase la madera se abrió y un nervioso Minho ingresó. El omega no pudo evitar sonreír en grande y aliviado, por un momento en la noche creyó que el alfa no vendría a visitarlo.
Jisung carraspeó murmurando que los dejaría solos saliendo con el mayor cuidado posible. Y mientras Seungmin se levantaba de la cama y abría los brazos.
- Vamos hyung, puede abrazarme- Minho ni siquiera pudo disimular desinterés porque literalmente corrió hasta él más alto y lo envolvió con sus brazos con un suspiro aliviado, cerrando los ojos cuando el aroma dulce y suave de Seungmin lo golpeó y sintió sus brazos rodear su cuello correspondiendo de la misma forma.
- Estas bien- Seungmin escuchó el ligero susurró y soltó un sonido afirmativo.
- Estoy perfectamente bien- Minho se apartó luego de unos segundos y tomó el rostro del omega entre sus manos, sonriendo aliviado y contento cuando Seungmin también lo hizo y lo vio acomodar sus lentes sin apartarlo.
- Te ves bonito y brillante, como siempre, omega- Seungmin soltó una ligera risa golpeando el hombro del alfa con timidez.
- Claro, ¿qué tanto cambiaría en este tiempo?- Minho tan solo le ofreció una sonrisa pequeña y suave.
Un momento después ambos estaban sentados uno a lado del otro. Seungmin apoyando la cabeza en el hombro del alfa y Minho simplemente dejándose con la mirada puesta en sus manos.
- ¿Qué tal todo, hyung?, ¿ya logró enamorar a Jisung?- Minho bufó a la defensiva.
- ¿Por qué insinúas que quiero enamorarlo?.
- ¿Por qué insinúa que no podría insinuar que lo quiere enamorar?- Minho frunció ligeramente el ceño antes de finalmente reír y asentir.
- Él es...difícil- murmuró ante la atención atenta del omega-. No se deja por nada del mundo, creo que le da miedo que le guste y que realmente termine dependiendo de mí. Ya sabes, su independencia lo consume.
- Ya veo...¿y quiere que dependa de usted?- Minho soltó un ligero sonido distraído.
- Me encantaría, pero no creo que suceda, repito, no se deja por nada del mundo, y no puedo forzarlo tampoco- Seungmin soltó un sonido entendiendo.
- Probablemente deba doblegarse ante él, ya sabe, a Jisung hyung le gusta saber que tiene el control de todo, lo hace sentir confiado- Minho hizo un mohin pensativo-. Debe hacerle saber que es usted quien realmente depende de él...no estamos muy lejos de la realidad cuando pensamos que es él único quien puede controlarlo.
Minho soltó una ligera risa antes de hablar.
- Recién despierto y ya siendo un ángel reparador de vidas- murmuró y Seungmin también río.
- Lo tomaré como un halago si usted toma mis consejos también.
- Lo tendré en cuenta.
Seungmin asintió satisfecho.
- ¿Y Chris, por qué no está aquí?.
- Fue a ducharse, dijo que le resulta vergonzoso estar a mi lado luego de haber llorado y sudado mucho desde la noche anterior- contó con una ligera diversión mientras Minho asentía lentamente-. ¿Debería ir a sorprenderlo?, tal vez me puedes ayudar a encontrarlo y de paso comienzo a ejercitar mi cuerpo, es surrealista pensar que ha estado descansando cinco meses.
Minho remojó sus labios con duda, ¿debería llevar a Seungmin en la casa que Chris comparte con el omega Felix?. Bien, todas las alarmas es su cabeza le indicaban que no y él no deseaba ignorar esas advertencias.
- Descansa un día más, y mañana nos pondremos de acuerdo para sacarte de aquí y hacerte ver el sol, ¿de acuerdo?- Seungmin hizo un mohin pero se obligó a estar de acuerdo.
- Esta bien- se resignó.
+
Seungmin observó con las mejillas apoyadas en sus manos a Chris moverse por la cocina, embelesado con su larga espalda y el ancho de sus hombros luciendo debajo de su camiseta blanca, sus brazos se flexionaban con cada movimiento tomando cubiertos o picando verduras, la mayoría del tiempo dándole la espalda.
De nuevo, nunca creyó ver a Chris cocinarle el almuerzo alguna vez.
- ¿Solo te quedaras mirando?- la voz divertida del alfa hizo a Seungmin parpadear espabilando mientras sentía sus mejillas arder.
- ¿Q-quiere que lo ayude?- Chris se volteó a mirarlo luego de asegurar la olla con agua hirviendo, y sonriendo ligeramente sin mostrar los dientes el mayor se acercó apoyándose en la mesa.
- No, debe ser aburrido solo estar mirando, digo que podrías ir a ver televisión o algo así, solo para que no te aburras, Minnie.
Seungmin se encogió de hombros, tímido por la presencia del alfa apoyado en la mesa frente suyo e inclinándose hacia su rostro. Jugueteando con sus dedos trató de ignorar la mirada expectante del alfa, sus ojos cálidos y curiosos se veían tan brillantes cerca suyo que causó un leve revoltijo en su interior.
- E-esta bien...me gusta mirarlo cocinar, así que estoy bien, no se preocupe.
Chris sonrió levemente, levantando su mano acaricio el cabello castaño y lacio del omega, deslizando los mechones lejos de su frente hasta poder apreciar mejor sus ojos grandes y expresivos. Dejando el cabello lacio lejos de su rostro finalmente bajo la mano, todo ante la atenta y brillante mirada del menor.
- Entonces esta bien.
Seungmin se preguntó que pasaba por la cabeza del mayor en ese momento, su corazón golpeó contra sus oídos con fuerza cuando Chris no se alejó de él y en cambio siguió observándolo, con los ojos brillantes y la curiosidad reflejada en su mirada. Sus dedos se apoyaron en su regazo inquietas cuando la sombra del alfa terminó por cubrirlo y pudo apreciar su rostro más cerca de lo usual.
No entendió aquella atmósfera, lo único que podía pensar era en lo peligroso que latía su corazón y en ese explosivo momento en donde vio los ojos del alfa deslizarse hasta sus labios y hubo un reflejo de duda en su mirada.
¿De qué dudaba?, ¡¿de qué dudaba?!. Bueno, Chris siempre había sido el tipo de alfa que pedía permiso antes de hacer algo con él, pero Seungmin en ese momento no tenia voz para decirle que se acercará, que podía besarlo, que tenía el permiso e incluso el único con el derecho de hacerlo.
Pero antes de poder abrir la boca y decir algo, su mirada se desvío por un momento detrás del alfa, y tuvo que apretar sus labios con timidez y pena antes de hablar.
- Alfa...su agua esta humeando mucho- susurró, y observó a a Chris parpadear antes de finalmente alejarse de golpe con una expresión desorientada.
Se permitió reír un poco cuando Chris comenzó a soltar sonidos de pánico mientras arrojaba los fideos dentro de la olla. Volviendo a su posición inicial donde lo observaba acomodar los videos en la olla. Gracias a la ventana de la cocina y el reflejo del sol ingresando por esta, Seungmin podía apreciar bien su cabello lacio y algo ondulado en la punta brillar y la piel pálida verse igual a una porcelana desde su posición, suave y limpia.
El australiano no había cambiado nada, a excepción del cabello ahora castaño, parecía estar totalmente igual como la primera vez que lo vio, guapo y extremadamente irreal, como un muñeco o un maniquí teniendo su propia vida.
Media hora después ambos estaban sentados degustando su comida. Y Seungmin realmente lo deboraba como si no hubiera comido hace una eternidad, y es que el omega realmente sentía que había pasado mucho desde que había comido algo tan delicioso como esa pasta.
Incluso no podía sentirse avergonzado de la mirada divertida y enternecida del alfa encima suyo, quien a comparación de él, comía lento y en calma.
- Woah hyung, esto está...- levantó ambas manos juntando el dedo índice con el pulgar-. Delicioso- Chris soltó una leve risa.
- Me alegra escuchar que te guste, creí que terminaría echando a perder algo, pero creo que ha salido bien- Seungmin asintió de acuerdo mientras daba otro bocado a la carne.
- ¿Donde aprendió a cocinar?, no recuerdo que lo hacía antes- el alfa giró de forma distraída el tenedor por sus fideos, una leve sonrisa de boca cerrada apareció en su rostro antes de dar un bocado a su comida.
- Solo...por ahí, viendo recetas, es fácil cuando le das practica- contestó y para Seungmin fue suficiente, siguió comiendo decidiendo el silencio por los últimos minutos para poder dejar al alfa comer en paz.
Chris terminó de comer pensativo, su mirada puesta en su plato pero la mente indagando en que si tal vez Felix ya habrá almorzado, en la casa ambos decidieron encargarse de la limpieza y la comida, una rutina para no tener sirvientes merodeando y además al omega le había parecido justo al ser este el mayor causante del desastre en la casa, ya sea en la cocina o en la sala de estar.
Y justamente, quien se encargaba de preparar el desayuno y almuerzo era él. Así que se preguntaba que estará comiendo Felix ahora que no pudo hacer más que dejarle el desayuno esa mañana antes de volver a la casa de Seungmin a pasar el tiempo con él.
¿Habrá pedido algo por delivery?. No recuerda haber escuchado del omega que supiera cocinar, tal vez ya que se le da bien los postres también lo hace bien en la cocina.
Y si no...definitivamente pidió algo a domicilio, ¿cierto?.
Chris sintió su corazón encogerse de la preocupación, observando de reojo a Seungmin lo encontró abriendo el frigorífico mientras tomaba su cajita de jugo de manzana y una lata de soda de cola.
Apretando los labios se puso de pie.
- Minnie...¿podrías esperarme un momento?, hay algo que debo hacer en mi casa- Seungmin lo observó con un pequeño puchero mientras sus ojos brillaban de la curiosidad.
- ¿Sí?, debe ser exhausto ir y venir nuevamente- el alfa sonrió ligeramente cuando el omega le extendió la soda.
- No es para tanto...- intentó aligerar sus palabras, pero de un momento a otro los ojos de Seungmin brillaron y pareció entusiasta con una nueva idea.
- ¿Y si vive conmigo?- Chris parpadeó, observó las mejillas del omega enrojecer mientras una risa tímida escapaba de su parte-. Anteriormente lo hacíamos, no veo porque no, alfa.
Chris abrió y cerró la boca, sin respuesta, sin palabras. Su mente se quedó nublada, aunque quiso tener algo automático que responder, su cabeza solo podía dejar que la pregunta se deslice por su mente una y otra vez hasta que un solo pensamiento lo lleno.
Si vivía con Seungmin...dejaría solo a Felix.
Pero Felix debería estar bien...ya que él solo era su aprendiz, e incluso ha estado la mayor parte del tiempo lejos suyo de forma independiente, él habrá sido el primer alfa con quien convivió de forma pacífica así que de seguro sabe como vivir y mantenerse solo.
Felix solo era su aprendiz a quien conoció hace cinco meses, un omega que prepara deliciosos brownies y tiene una personalidad brillante y traviesa, una totalmente contagiosa y empalagosa.
Solo era eso...mientras Seungmin era la persona que le gustaba, y quien más que todos necesita su compañía.
Sonriendo ligeramente Chris se encogió de hombros.
- ¿Debería?- el alfa se convenció que era la respuesta correcta, debía serlo cuando vio los ojos del omega brillar y su rostro enrojecer mientras reía ilusionado y contento.
Claro que debía ser la respuesta correcta.
Terminó saliendo momento después, corriendo por los pasillos lo más rápido posible para poder llegar a la casa donde el omega rubio se suponía estaba esperándolo. Corrió hasta que cruzó el pequeño patio y cayó frente al marco de la puerta con la respiración acelerada y algo cansada.
Carraspeando y tomando aire colocó los códigos con el dedo índice algo tembloroso y luego abrió la puerta.
Apenas ingreso un ligero humo opaco lo recibió, y junto a eso un aroma a quemado. Alarmado corrió hacia el comedor siguiendo el rastro de humo.
- ¡¿Felix?!- llamó y apenas ingreso a la cocina se tomó un momento para toser y sacudir la mano intentando alejar el humo tóxico de él.
- ¡Oh hyung, espere!, es que no logro abrir la ventana- Chris pudo hallar a Felix sobre la encimera frente a las ventanas del lado trasero de la cocina.
Soltó aire aliviado mientras se acercaba al omega peleando con la palanca de la ventana mientras tosía ligeramente. Llegando hasta él apartó con suavidad sus manos, Felix pareció exaltarse por un momento pero no digo nada cuando fue el alfa quien estiró la palanca hacia dentro y luego hacia afuera para finalmente empujar la ventana hasta que esta se extendió frente a ellos dejando ingresar el aire natural y agradable del patio.
- Hacia dentro y afuera, Lix- explicó ante la mirada atónita del omega.
- Oh~- negando divertido Chris se aseguró de que el humo ya no tenía una fuente donde seguía saliendo para que este se evapore completamente con el aire.
Observando a Felix sentarse en la encimera se acercó a ayudarlo.
- Permiteme- el omega se sorprendió ligeramente cuando los brazos del alfa rodearon su cintura, sosteniéndose tímidamente de sus hombros dejó que lo sostenga cuando dejó de sentir el mármol debajo suyo y luego sus manos lo dejaron caer finalmente al suelo.
- G-gracias- el alfa se alejó sutilmente y le ofreció una leve sonrisa tranquila antes de desviar su atención de él.
- ¿Qué estabas intentando hacer?- avergonzado Felix señaló la paila en la cocina.
- S-se supone que unos huevos revueltos, pero por error salpique agua al aceite cuando este ya estaba hirviendo...y me aterre por el aceite salpicando con fuerza y el fuego y cuando me di cuenta ya estaba saliendo humo de ahí...- relató mientras recibía una mirada ligeramente divertida y expectante.
- Pobre Felix...- el omega se avergonzó aún más cuando recibió una caricia en su cabeza.
- ¡Es vergonzoso!...más que nada- murmuró al final pero no pudo pensarlo mucho cuando escuchó al alfa reír y vio aquellos hoyuelos pequeños y bonitos aparecer en sus mejillas.
- ¿Aún quieres comerlos?, puedo hacerlo por ti en unos minutos- el menor hizo una mueca dudosa.
- ¿Esta seguro?, ¿y que hace aquí, alfa?, ¿no está ocupado?- Chris remojó sus labios encogiéndose de hombros.
- No realmente, solo tomará unos minutos- volvió a insistir.
Y Felix ya no tuvo que refutar cuando Chris comenzó a movilizarse por la cocina, su mirada no se apartó maravillado del alfa limpiando la paila sucia y usada, cuidando de que ya no haya rastro de aceite y agua para luego volver a poner aceite nuevo y limpio. Prendió el fuego y puso a calentar el aceite antes de ir hacia el frigorífico y sacar dos huevos y comenzar a romperlos contra la paila.
Sentándose en una de las butacas de la cocina Felix jugueteo con sus dedos antes de preguntar.
- ¿Cómo está el omega?, ¿está bien de salud?- murmuró lo más casual posible, y Chris ni siquiera volteó mientras asentía lentamente.
- Él está bien, tiene algunos problemas con la vista pero ya se mandó ver y esta usando lentes, además de eso esta perfecto...como si nada hubiera sucedido- Felix asintió comprendiendo.
- Es un alivio, debe estar contento, alfa- el omega observó a Chris derramar el aceite sobre el huevo con una cuchara repetidas veces solo concentrado en como se cocinaba.
- Todos lo estamos, así es- sonriendo suavemente Felix se decidió por dejar de hablar.
Minutos después los huevos revueltos estaban en la encimera. Felix estaba sacando dos rodajas de pan de una bolsa y colocándola en la encimera comenzó a colocar mayonesa y tomates, todo ante la atenta mirada del alfa.
- Muchas gracias...por ayudarme, podre almorzar bien ahora- murmuró en un momento de silencio mientras cerraba uno de sus sándwiches-. Usted puede hacer lo que venía a hacer, estaré viendo televisión y si quiere puedo esperarlo para cuando vuelva...-
- Me mudare- Felix apenas parpadeó, perplejo, sus manos se quedaron quietas sobre su plato con ambos sándwiches esperando-. Seungmin quiere que me mude con él...yo me mudaré así que no debes esperarme.
Chris espero una reacción, observó al omega bajar la cabeza y el cabello rubio y lacio cayó a sus costados cubriendo sus ojos, y eso por alguna razón lo desesperó. Su cuerpo tenso se removió incómodo cuando segundos después Felix volvió a la acción de acomodar su comida y luego tomar su plato.
- Eso suena bien- su voz salió normal, tranquila y animada-. ¿Desea que lo ayude a empacar?- cuando volteó a mirarlo solo había un destello curioso departe del omega.
Y eso era el problema, Chris no sabía porque en su mirada ya no había el brillo animado de hace un momento.
Apenas pudo esbozar una sonrisa para el omega antes de negar.
- No, esta bien, Lix- el menor asintió y se encogió de hombros antes de señalarle el plato.
- Gracias por la comida, Chris hyung.
El alfa pudo escuchar su propia respiración contra su oído, sintió su garganta secarse y por alguna razón las fuerzas para aquella mudanza se desvanecieron, observando con el corazón en la garganta a Felix darle la espalda y alejarse de él para salir de la cocina, su mano tembló levemente mientras intentaba pisar tierra, entender sus decisiones.
Y cuando quiso darse cuenta su mano se aferraba a la ropa del omega, deteniéndolo.
Exhaló casi sin aliento, como si sus nervios fueran producto de la corrida de un maratón. Vio a Felix voltear y observarlo curioso y con algo de nervios, sus manos bajaron lentamente el plato mientras se giraba totalmente hacia él y lo miraba expectante.
- ¿Quiere decirme algo?- indagó y Chris apenas pudo escucharlo, siguió concentrado en su corazón eufórico, en el aroma dulce del omega y el propio suyo mezclándose en el aire, como una combinación nueva y atractiva.
Intentó decir algo pero nada salía de su boca. Y es que, ¿qué diría?, ni siquiera él mismo sabía porque lo detuvo, porque se aferraba a su ropa con tanto desespero, solo tenía en mente que necesitaba que aquellos ojos vuelvan a brillar y lo hagan de la manera en que siempre lo hacían cuando ellos dos estaban juntos.
Y eso de nuevo le causó una batalla interna dentro suyo, ¿por qué seguía preocupándose de esa forma por Felix?, ¿verdaderamente solo era por cariño?. En esos meses en que había estado con el omega, no podía negar que había sentido una gran conexión con él, podían entenderse de muchas maneras por sus raíces, Felix era un principiante en Corea y a Chris le había gustado ayudarlo siempre, le había encantado ver los ojos tímidos y brillantes del omega lucirse por aprender algo nuevo que él le había enseñado.
Y en ese tiempo, por alguna razón sintió que todo lo que hacía era acompañado del omega, o siempre terminaba contándoselo a él, cada parte secreta de su trabajo, de alguna forma, terminó confesándolo todo al omega, parte de su vida pasada Felix lo sabía, y en sus peores momentos el omega también estuvo. Y al mismo tiempo, todo aquello también sucedió con él.
Por ejemplo, Chris sabía que al omega no veía películas de terror porque se asusta fácilmente, que anteriormente se rascaba el rostro intentando quitarse sus pecas porque no le gustaban, que no puede comer comida picante, que le gusta tanto el afecto que había días en que lo encontraba dormido a su lado abrazándose a su brazo y eso hasta aquel día, a Chris nunca le había disgustado o incomodado.
¿Cómo es que ellos habían compartido tanto en tan poco tiempo?. No entendía como no hubo un solo momento en donde se hubiera sentido incómodo con Felix, se sentía que de alguna manera cuando lo conoció...solo debía pasar, como si su cuerpo y mente ya lo esperaba adaptado a la personalidad del omega.
Felix siguió esperando algún indicio, y se preguntó preocupado que tenía tan tenso al alfa al ver su mirada decaída y su mano aferrándose con más fuerza a su camiseta. Así que decidiendo acercarse se inclinó un poco más cerca.
- ¿Alfa?.
- Lo siento- Felix levantó ambas cejas sorprendido, vio a Chris mover los ojos por todo su torso pero no pareció dispuesto a mirarlo, o no parecía tener las fuerzas-...Lo siento, Lix.
Dudoso y preocupado Felix se inclinó un poco más, intentando buscar la mirada del alfa.
- ¿Hyung?, ¿por qué lo siente?, ¿ocurre algo, cierto?- murmuró lo más suave posible, su mano dejo descansar el plato en la otra y con la libre lo acercó al hombro del alfa hasta finalmente dar un apretón y poder llamar la atención de este.
Sonrió ligeramente cuando los ojos de Chris finalmente cayeron sobre los suyos.
- Hyung, ¿por qué se disculpa?, sabe que puede decirme, no hay manera de que...-
La voz de Felix murió en ese instante, en aquel momento sintió su cuerpo entero aflojarse, como si el alma se le hubiera escapado, su cuerpo entero se quedo congelado y sus ojos se abrieron grandes, confundidos y desorientados.
Todo pareció no responder, a excepción de sus labios las cuales ardían al tacto de los labios de Chris sobre este, suaves y húmedos, calientes y algo bruscos, como si no estuvieran dispuestos a dejarlos ir.
Incluso debía ser así, porque cuando el cuerpo de Felix retrocedió por inercia, se sorprendió al sentir las manos de Chris tomar con firmeza sus mejillas y su cuerpo se calentó de pies a cabeza cuando los labios gruesos se apretaron con más fuerza a los suyos. Sintió sus brazos caer a sus lados y la comida caer al suelo junto al plato, pero ni siquiera el ruido del choque pudo hacerlo reaccionar.
Parpadeó como un tonto, observando como los ojos de Chris se cerraban, viendo de cerca aquel fuerte sonrojo en la piel del alfa luciendo en sus orejas y pómulos. Y cuando los labios del mayor se movieron pudo jurar que una bodega de fuegos artificiales explotaron en su estómago, al sentir la carne inferior moverse contra el suyo, de forma cálida, con un toque lento y los labios entre abriéndose de forma lenta como si estuviera pidiendo permiso.
¿Permiso?, ¿permiso para que?. Felix se alarmó, ¡¿lo quería besar más profundo?!.
Intentó decir algo, de nuevo amago por alejarse pero su corazón saltó de forma eufórica cuando las manos del alfa pasaron a sostenerlo de la nuca, y todo su ser se derritió cuando lo atrajo con más firmeza, sin escapatoria, sintiendo que la proximidad lo estaba obligando a abrir los labios.
Y finalmente Felix se rindió, soltándose lentamente sus ojos fueron cerrándose, sintió sus pestañas acariciar la piel del alfa y un cosquilleo se extendió por sus mejillas hasta sus labios. Y con los ojos temblorosos y el calor abrazando su cuerpo abrió levemente los labios, lento y dudoso, tan suave como si tuviera miedo a estar equivocado.
Claro que no lo estuvo, y estaba lejos de ser correspondido con la misma suavidad.
Su cuerpo se estremeció, sorprendido y eufórico, un suspiro escapó de sus labios chocando contra la boca del alfa, pero no pudo evitarlo, se le fue imposible cuando sintió la lengua del alfa adentrarse a su cavidad y todo dentro suyo cosquilleó, intentando contener los quejidos, los sonidos de satisfacción y las ganas de exigir aire.
Ese era en definitiva su primer beso con lengua, y sentía que sería el mejor de cualquier otra que vendría.
Sus manos tuvieron que sostenerse a la camiseta del alfa, su espalda tuvo una descarga lleno de calor y cosquilleo cuando una mano del alfa se deslizó por la extremidad hasta rodear su cintura. Y finalmente dejó escapar un gemido, bajito y sorprendido cuando Chris lo apretó con más fuerza a su cuerpo y sintió los labios succionar su labio inferior hasta hacerlo jadear.
De la sorpresa, de la estupefacción, del placer, de las sensaciones cosquilleantes y calientes recorriendo sus labios y del querer más y de nuevo de la sorpresa.
Nada se detuvo, Chris no se detuvo hasta deslizar su lengua hasta el último espacio, hasta que sus labios se hayan acariciado en cada ángulo y sus dientes mordido su carne las veces suficientes hasta alejarse con un último estirón, donde sus labios calientes y húmedos estiraron del suyo y lo hicieron jadear por la falta de aire y las sensaciones electrizantes recorriendo su piel.
Felix parpadeó mareado, sintió su rostro arder como un horno, sus manos temblorosas terminaron apoyadas al torso del alfa y su cabeza levemente inclinada hacia arriba se encontraron con el rostro de Chris, sereno, igual o más rojo que él y con los ojos aún cerrados. Sintió su respiración chocar contra sus labios mientras sus pechos se rozaban en cada bocanada.
El omega tragó cuando Chris separo los labios para hablar.
- Dije lo siento...pero ahora realmente no lo hago.
Encogiéndose Felix solo pudo cubrirse el rostro, avergonzado hasta los humos.
Y por mientras, Chris ya se estaba preguntando en qué forma se mataría ahora que confirmaba lo que sentía.
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Seungmin observó en cuclillas a los gatos de Minho olisquear el pasillo con curiosidad, había salido de su casa aburrido por la tardanza de Chris y los halló cruzando el pequeño patio paseando cerca de las paredes de vidrio olisqueando sin sentido.
Con suavidad acarició el lomo de Dori, quien con la atención no dudo en levantar más el trasero hasta hacer reír a Seungmin.
- Tierno, ¿tu padrastro no te da tanta atención, cierto?- preguntó refiriéndose si Jisung recibiendo sólo ronroneos como respuesta-. Eso creía.
Siguió acariciándolo mientras subía la mirada hasta las fueras de la casa, en el patio los guardias parecían tan ensimismados en lo que hacían, aveces hablaban en su woki toki y otras solo se paseaban con las manos entrelazadas detrás de la espalda y mirando las plantas o en lo alto de las murallas.
Ha de ser aburrido, pero deben cobrar tanto dinero que Seungmin se plantearía ese trabajo si tuviera la oportunidad, claro, si Hyunjin permitiera guardias omegas para proteger su casa...probablemente no.
Terminó sentado en el suelo minutos después, se sentía tímido por levantarse e ir en busca de algún otro conocido, incluso podía decir que sentía que ese no era su lugar para estar merodeando como el quisiera. Tonto si se ponía a pensar que vivía allí. Pero no conocía absolutamente nada pasando de ese pasillo, solo podía ver a metros suyo luego de un extenso pasillo, la entrada principal y más alejado otro largo pasillo que debía llevar a otra casa como la suya.
Pero él no se levantó en ningún momento a ir a mironear, simplemente esperó a Chris con paciencia sentado frente al cristal.
Y para cuando el alfa apareció los gatos de Minho ya estaban dormidos, uno entre sus piernas y los otros dos encima del otro apoyados en el cristal. Seungmin daba pequeñas caricias a la cabecita oscura de Dori mientras escuchaba a Chris venir a su costado y pudo apreciar su aroma nervioso y dulce filtrarse en su olfato.
- ¿Qué haces sentado aquí, omega?- Seungmin volteó a mirarlo para ofrecerle una sonrisa relajada antes de volver su mirada a las afueras de la casa.
- Solo mirando el panorama- respondió, observando de reojo a Chris ponerse en cuclillas a su lado-. ¿Ya solucionó lo que tenía pendiente, alfa?.
Chris soltó una risa nerviosa, observando sus manos por unos largos segundos mientras asentía lentamente.
- Sí...lo hice- Seungmin asintió lentamente.
Se quedaron en un largo silencio, asfixiante para Chris y tranquilo para Seungmin. El alfa mordisqueó su labio inferior con insistencia, y él corazón golpeaba contra su pecho con fuerza con cada momento en que los pensamientos de lo que debía decir llegaban a su mente.
- Seungmin...- murmuró, sin darse cuenta, en un momento donde los nervios le estaban pasando factura.
- ¿Sí?- Chris pasó saliva, de un momento a otro sintió sus ojos humedecerse, observó de reojo a Seungmin observando con ternura al gato dormido en sus piernas, su cabello castaño lacio caía sobre su frente dándole un aspecto tierno, como un niño puro y perfecto.
Eso lo afectó de sobre manera...no podrá hacerlo, lastimar a Seungmin cuando para él hace tan solo una semana Chris le estaba jurando amor eterno, para el omega sería un choque, un golpe o igual que una bofetada.
Chris sintió su corazón encogerse, ¿por qué tuvo que ser de esa manera?, ¿por qué su corazón tuvo que elegir otro rumbo?, ¿no debería ser él quien decida a quien quería dárselo?. De todos modos, incluso si tuviera esa opción el alfa estaba seguro que nunca podría decidirse por quien entregar el suyo, y es que tenía tanto miedo al amor en ese momento.
Tenía tanto miedo de herir de manera irremediable que hubiera deseado ser él quien desde un principio y por cosas del pasado haya tenido el corazón roto y reacio a amar.
Pasó saliva de forma forzosa, su corazón parecía ya apunto de escaparse en arcoiris de su garganta, vio la actitud tranquila y pacífica del omega y sintió nauseas, mareos y unas ganas tremendas de darse un golpe contra el suelo y desaparecer de una vez de ese mundo.
Él era tan débil y apenas se estaba dando cuenta.
Y para cuando su respiración comenzó a alterarse lo escuchó.
- Le gusta alguien más, ¿cierto?- Chris parpadeó, volteó a ver al omega de forma violenta.
Creyó haber escuchado mal, tenía que ser así, Seungmin no tenía alguna mueca que demostrará lo contrario, seguía tranquilo y sus dedos aún acariciaba al gato en sus piernas. El alfa tembló aterrado, ¿en serio escuchó mal?, ¿se estaba volviendo loco?...sin embargo sonó tan real.
- ¿Es así?, parece serlo por su expresión- el alfa finalmente sintió el alma escapar de su cuerpo.
Un nudo se instaló en su garganta cuando la mirada cálida y tranquila de Seungmin cayó sobre él, una leve sonrisa se le fue ofrecida e incluso lo escuchó reír levemente cuando él comenzó a sudar frío.
- ¿Q-qué?- su voz tembló, sus labios lo hicieron, y sintió sus ojos empañarse sin esfuerzo alguno.
Y es que de alguna forma, la sonrisa cálida y los ojos reconfortantes lo estaban lastimando.
- Le gusta alguien más, ¿es eso lo que quiere decirme?- Chris sintió un frío desolador, y su mirada se apartó de golpe, el aire le faltó por un momento, sintió sus oídos taparse y no tuvo voz para responder.
Y lentamente las lágrimas comenzaron a abandonar sus ojos, Chris los cubrió al momento, sintiéndose del asco, ¿en qué manera se había equivocado?, ¿cómo dejó que el omega se diera cuenta antes de que él se lo dijera?.
- ¿C-cómo lo sabías?- Seungmin suspiró y se encogió de hombros.
- Ayer al verme usted lloró hasta casi el amanecer pidiendo perdón con tanto sentimiento, no fue lo más raro...pero hoy desapareció y volvió luego del desayuno, no desayunó conmigo, tampoco sonríe de la misma forma que antes, me mira con aires culpables y cansados y piensa todo el tiempo en que esta a mi lado- enumeró y Chris ya no podía seguir escuchando, las lágrimas siguieron cayendo como cascadas y sintió que el nudo asfixiante terminaría por matarlo-. Hace un rato pareció que iba a besarme...pero no por que quisiera, usted se veía dudoso incluso en probarlo.
- L-lo siento...lo siento, lo siento tanto, M-minnie.
- Y además...ahora huele diferente- Chris se tensó, y finalmente comenzó a sollozar, cubriendo su rostro mientras lloraba y pedía perdón, sus manos temblaron contra su rostro y pareció que las lágrimas no pararían de salir, como una canilla abierta o una catarata sin fin-. Cuando ya no hay una conexión...eso rápidamente se ve, al menos desde la perspectiva de la persona que espera que la otra mitad reaccione.
Seungmin lo dejó ser, lo escucho llorar y pedir perdón, el nudo siguió creciendo en su garganta y con eso su sonrisa. Tomando con suavidad al gato en medio de sus piernas lo dejó con cuidado a su lado, para dignamente deslizarse cerca del alfa.
Con cariño rodeó su cuerpo con sus brazos, apretando a Chris contra su torso aceptando cada uno de sus sollozos, de sus disculpas y del temblor de su cuerpo.
- No entiendo por que se disculpa- murmuró, Chris subió la mirada y Seungmin le sonrió al ver los ojos rojos e hinchados de cerca, tan brillantes por las lagrimas y a la vez opacos de sentimientos-. ¿Acaso usted cree que puede controlar los movimientos del corazón?.
Seungmin frotó repetidas veces el hombro del alfa, y cuando vio nuevas lágrimas bajar por su mejilla se encargó de acercar su pulgar y retirarlo con cuidado y afecto. Sonriendo una vez más como si nada.
- ¿Como podría culparlo?, sé que para mí solo fueron unos días, pero no deje que eso le mortifique, cinco meses en velas debió ser cansador para su corazón, y simplemente buscó un nuevo hueco disponible y cálido en donde posarse, ¿no cree que eso fue lo que pasó?- Chris negó hipando, conteniendo su llanto porque sabía que era quien menos debía estar haciendo escándalo cuando el omega quien se supone le estaba rompiendo el corazón ahora lo estaba consolando.
- L-lo siento...no desee que f-fuera de esta manera, lo lamento- Seungmin asintió comprendiendo.
- ¿Cuando se enteró que le gustaba?, esa persona...- el alfa titiritó antes de hablar.
- Hoy, s-solo hace un momento- el omega asintió y su sonrisa creció.
- Solo hace un momento y viniste a decírmelo ya...no dejaste que mi corazón se siga ilusionado, gracias hyung- Chris negó, no entendía como es que estaba recibiendo un gracias, y su llanto se intensificó cuando la cabeza del omega cayó sobre su hombro-. Gracias por todo, gracias por quererme como ningún otro en su momento y cuidarme de la forma más preciosa, siempre siempre le estaré agradecido, no necesita darme su corazón para cumplir conmigo...usted ya lo hizo desde el momento en que me hizo ver como lo que realmente valía, y eso no se lo puedo regresar con nada.
Chris finalmente deslizó sus brazos por el torso del omega, correspondiendo su abrazo mientras hundía el rostro en su cuello, aspirando de su aroma, del dulce y acogedor aroma del omega quien en su tiempo había sido a quien veía al dormir y luego al despertar. Cerró los ojos húmedos que aún dejaba escapar lágrimas antes de hablar.
- En algún momento...alguien menos idiota que yo vendrá, Minnie, y esa persona verá todo lo que eres y aprenderá a valorarte y amarte, o yo lo matare si no lo hace.
Seungmin soltó una pequeña risa, suspirando y cerrando los ojos con fuerza conteniendo las lágrimas, dejando que el último abrazó con el alfa se grabe en su recuerdos antes de dejarlo ir, a él junto a sus sentimientos que con tanto esmero se había dedicado a juntar.
- No diga eso, alfa, no puedo estar más orgulloso de alguna vez haberle confiado mis sentimientos a usted.
- ¿Pero para terminar así?- Chris murmuró con la voz rota y Seungmin se quejó contra su oído.
- Le estoy diciendo que no es su culpa, hyung tonto- Chris soltó una pequeña risa/llanto. Volviendo a cerrar los ojos solo para seguir participando en ese abrazo.
Para abrazarse al omega tal vez una última vez antes de que de alguna forma, todo entre ellos se vuelva distante.
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Jeongin observaba preocupado a Seungmin meter una nueva cuchara con una bola grande helado en su boca mientras las lágrimas se mezclaban en su rostro y se deslizaba hasta sus labios, un puchero aterradoramente tierno se encontraba en sus labios mientras saboreaba del dulce helado arrojado en su cama.
- Minnie...no creo que sea sano comer helado con el frío de esta noche- intentó tomar el pote de las manos del omega pero se exaltó cuando Seungmin lo hizo a un lado con brusquedad y soltó un gruñido.
- No me importa, tú tonto- Jeongin no se mostró afectado, observando como Seungmin le daba la espalda abrazando el pote contra su pecho y volviendo a enterrar la cuchara dentro del chocolate quitando otra porción.
Suspirando el menor no tuvo alternativa, retirándose sus chanclas ingreso a la cama junto a el omega mayor y colocándose de costado paso el brazo por su cintura y lo abrazó contra su pecho con cariño, escuchando a Seungmin sollozar y sintiéndolo temblar mientras el aroma de tristeza y soledad llenaba la habitación.
- Esta bien, Minnie, llora si te hace bien, llorar a veces hace bien a muchas personas- divagó dejando suaves caricias en el vientre del omega, lo escuchó tragar antes de que su voz se vuelva a filtrar a través de los sollozos.
- ¿Tú sabias?, ¿qué ya no le gustaba a Chris hyung?- Jeongin se tenso aterrado mientras remojaba sus labios.
- N-no estaba seguro, Minnie...no quería afirmar nada y lastimarte, por favor no me odies- se apresuró a decir aferrando su agarre a su alrededor con más fuerza.
Sin embargo Seungmin solo suspiro sorbiendo su nariz.
- Esta bien...después de todo no cambiaría nada- volvió a la tarea de saborear el helado mientras Jeongin soltaba un suspiro aliviado.
Estuvieron así por minutos, Jeongin permitiendo al omega seguir comiendo y llorando a la par, y él simplemente estando ahí, entregándole caricias a su vientre y dejando en momentos pequeños besos besos su hombro como consuelo. Y momento después, Seungmin se volteaba en la cama hasta quedarse mirando el techo.
Jeongin observó con tristeza las lágrimas secas en su rostro y las nuevas caer por su pómulo brillando gracias a la oscuridad de la noche, la cual gracias a la luz del exterior filtrándose por las ventanas se podía apreciar.
Seungmin se mantuvo varios minutos en silencio, solo dejando escapar pequeñas lágrimas antes de hablar.
- ¿Cómo es él?- Jeongin parpadeó, claro que entendió la pregunta al instante, y la preocupación le revolvió por dentro.
- Seungmin, por favor...-
- Dime, estoy pidiendo saber así que dime- Jeongin suspiró resignado y volvió a sus caricias al vientre el mayor al sentir su mano caer sobre el suyo.
- Es...dulce, tierno...es amigable y extrovertido, pero aveces tímido cuando lo halagas- divagó, observando las reacciones del omega mayor, sin embargo este siguió inmutable, sereno y callado-. En un poco bajito y tiene pecas, y a pesar de su personalidad alegre y dulce tiene una voz muy profunda y atractiva, como un alfa o un beta maduro...es lindo- finalizó, y de nuevo dejó pensativo a Seungmin, con la mirada analizando el techo oscuro mientras su pecho subía y bajaba en una lenta respiración.
- Es un alivio...si le gustaba un tonto rebelde alguien iba a juzgar sus gustos- Jeongin sonrió ligeramente.
- ¿Cómo Chris hyung va a tener gustos feos si le gustaste tú?- Seungmin también sonrió, pequeño y tembloroso mientras cerraba los ojos y soltaba un último suspiro.
- Cierto...yo le gusté, de alguna manera, el que ya le haya gustado, me hace sentir orgulloso, ¿eso esta bien?.
- Hyung no es una mala persona...él sin dudar intentó hacer las cosas bien hasta el final, entonces estar orgulloso no es una mala forma de iniciar un después de la separación, Minnie- Jeongin no pudo reaccionar cuando Seungmin comenzó a sollozar de nuevo mientras se cubría el rostro.
- N-no digas separación porque no puedo para de llorar...
- Oh Minnie- Jeongin lo envolvió con ambos brazos y aceptó que esa noche y tal vez semana y mes, seria absolutamente larga, y él se encargaría de estar en cada segundo del tiempo al lado del mayor.
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Cuatro mañanas después y para Jeongin todo pareció mejorar, es decir, Seungmin seguía llorando en momentos y estando triste en otros, pero a pesar de eso comía bien e intentaba salir de la habitación para pararse frente al vidrio del pasillo y charlar o mimar a los gatos de Minho.
Absolutamente todos habían venido a ver a Seungmin nuevamente. E incluso Minho le ofreció al omega matar a Chris de forma silenciosa si este lo deseaba, fue el primero que logró hacer reír a Seungmin hasta las carcajadas, el segundo fue Jisung quien golpeó a Minho por estar diciendo según él estupideces.
El alfa hablaba totalmente en serio pero Seungmin tuvo que rechazar el favor diciendo que estaba bien y relajado.
En cambio, Hyunjin también ofreció mandar a Chris a vivir otro lado por el momento, pero nuevamente Seungmin lo rechazó y nadie más volvió a insistir con ideas malvadas o retorcidas.
Ese día, Seungmin se levantó con ganas de progresar en la vida. Y es por eso que tomó una ducha, se colocó ropa cómoda, tomó su lentes y una cajita de jugo y salió rumbo más allá de los pasillos, donde podría ver que más se extendía en ese lugar para poder distraerse y conocer para mantener ocupado su mente.
Caminó por el largo pasillo maravillado, observando la inmensidad de las paredes y los techos. Al llegar a la entrada vio a los lejos los pasillos largos que esperaban por él pero se decidió por comenzar por afuera, él ya sabía que eso se dividía en cinco mansiones como el suyo, así se lo había explicado Jeongin días atrás.
Salió de la casa y un cálido y fresco viendo revolvió su cabello, su pecho se infló mientras aspiraba aire y sentía el ligero y cálido sol chocar contra su rostro mientras él cerraba ligeramente los ojos. Primavera...él recuerda haber estado en invierno hace solo dos semanas.
Caminó por el costado del alto terreno, decidiendo por no acercarse a los guardias por el momento. Llegando al costado de la residencia halló allí un camino de pasto bien podado y verde, se extendía de forma tan grande que fácilmente podría ser una cancha de fútbol, llegando hasta la muralla donde otras copas de árboles y flores descansaban.
Seungmin se acercó al muro, en medio de dos árboles se hallaba un banco de metal y a un lado una mesita redonda del mismo material y color dorado. Acercándose al banco Seungmin finalmente se dejó caer con un suspiro relajado y tranquilo dejando descansar su jugo sobre la mesita, observando hacia arriba las hojas de los árboles meciéndose y el viento mover su cabello hasta cosquillear sobre su piel.
Cerró los ojos, por un momento solo disfrutando de la sombra, del viento apresurado y las hojas chocando entre sí hasta acariciar sus oídos, respiró el fresco aroma a aire natural y plantas y disfrutó de la comodidad de aquel banco.
Todo eso hasta que escuchó un carraspeó nervioso.
Abrió un ojo, y luego otro, y bajando la cabeza se encontró con una cabellera rubia y pecas.
Pecas...
- H-hola...te vi sentado aquí solo...y me pregunte si podía hacerte compañía- Seungmin pudo haber entrado en un bucle.
¿Podía existir seres como ese omega frente suyo?, Seungmin ni siquiera tenía cabeza para compararse, ¡ese omega no tenía comparación!. El rostro del omega frente suyo era sin duda un retrato en movimiento, con las adorables pecas decorando su nariz y mejillas y el rojo abrazando sus orejas como una manta.
Aquel omega era sin dudas quien creía que era y Seungmin ya se estaba golpeando mentalmente al comenzar a sentirme mal e inferior.
- S-sí no deseas esta bien, lamento tanto incomodarte...-
- No...- su voz salió apenas un susurró así que tuvo que carraspear-. Digo no, no, e-esta bien, puedes sentarte, claro- Seungmin recibió una sonrisa grande totalmente aliviado mientras que para él fue como presenciar el reflejo de un rayo de sol.
Sí, eso era...él omega parecía el mismísimo sol de tanto que su aura brillaba.
Observó de reojo al omega más bajito tomar asiento a su lado. Y no pufo evitar girarse totalmente a ver su perfil, su nariz se veía adorablemente pequeña de costado y sus labios abultados completamente rosados, el cabello tan lacio cayendo rubio casi dorado por su nuca y cuello y sobre sus orejas.
Seungmin no pudo evitarlo.
- Eres muy bonito- lo dijo, tuvo que hacerlo o no podría respirar de la misma forma de nuevo.
El omega se exaltó hacia su lado, volteó a verlo sorprendido y luego su rostro se lleno de un color carmesí fuerte y tierno que deslumbró y embelesó a Seungmin. Observando al omega llevar su cabello rubio hacia atrás y comenzar a reír con timidez.
- Tú también...e-eres tan bonito- Seungmin se encogió cuando las manos del omega lo señalaron por completo-...tienes un rostro tierno y bonito, como un cachorro...digo, no quise llamarte de esa forma, lo siento.
Seungmin también río, tímido y divertido por parte.
- Como un perro grande, lo sé, me lo suelen decir con frecuencia- contestó de forma tranquila y se enterneció cuando el rubio asintió de forma frenética de acuerdo-. Tú te ves con un pollito, incluso con las mejillas rojas.
Seungmin escuchó su agradable risa y segundos después lo vio negar divertido.
- Soy Lee Felix...¿cómo te llamas tú?- Seungmin sonrió ligeramente y volvió la mirada hacia el frente.
- Soy Kim Seungmin, un gusto Lee Felix- el rubio asintió lentamente.
- Un gusto Kim Seungmin- respondió de la misma manera casual y luego un silencio largo y ligeramente incómodo se extendió, donde ambos se quedaron observando algún punto en el cielo con algunas nubes blancas y brillantes, admirando en silencio sin mucho más que decir.
- De hecho...él consciente de tu situación estos meses- Seungmin volvió a prestarle atención cuando comenzó a murmurar-. Es genial que estés despierto de nuevo Kim Seungmin, ¿cómo te sientes?, ¿estas bien de salud?- el omega castaño no pudo evitar removerse conmocionado, sin entender como Felix podía preocuparse por la salud de alguien que apenas conocía.
- Estoy bien...como ves debo usar lentes por el momento, pero no me resultan incómodos y están bien. Y aparte de eso me siento perfecto y capaz de correr hasta una maratón- Felix soltó una risita por sus palabras y asintió lentamente.
- Es bueno, de escucharlo digo- Seungmin remojó sus labios antes de preguntar.
- Disculpa, ¿pero por qué bueno?, uhm...no me conoces- indagó lo más suave posible, sin querer sonar brusco o grosero.
Y Felix no pareció afectado, sonrió genuinamente mientras volteaba a mirarlo con una expresión de obviedad.
- ¿Por qué no seria bueno que estés bien de salud, Kim Seungmin?, sobre todo cuando todos estaban esperando porque despiertes y además sano y capaz, es como una dosis de alivio y felicidad- el castaño se sonrojo lentamente, sintiéndose un poco tonto y a la vez con falta de empatía, soltando un sonido aborchonado asintió lentamente.
- Ya veo...- Felix asintió.
El sonido musical de una alarma los saco de un posible silencio, Seungmin volteó a ver con curiosidad a Felix retirar su teléfono del bolsillo de su pantalón y apagar la alarma sin miramientos.
- Me tengo que ir, es puesto a hornear algo y creo que ya esta terminado- Felix se levantó y se agitó la mano-. Un gusto, Kim Seungmin- el castaño asintió suavemente.
- Un gusto, Felix- el rubio sonrió y volteando se alejó algunos pasos saltando.
Y de nuevo volteó a mirarlo, con un brillo curioso y tímido.
- ¿Pobrarías mis brownies si te lo acercó a tu casa?- Seungmin ladeó la cabeza sorprendido e ilusionado, su corazón se removió ligeramente conmovido, realmente conmovido.
- Claro, me gustaría- Felix sonrió más aliviado y contento.
- ¡Bien!, espérame esta tarde, iré, Kim Seungmin.
Seungmin lo observó salir corriendo por el lado trasero de la residencia, vio su pequeño cuerpo desaparecer detrás de las paredes hasta el último momento. Y cuando el silencio volvió a reinar a su alrededor no pudo evitar bajar la cabeza y soltar una risita baja y silenciosa.
Era un alivio, Chris estaba en mejores manos de lo que había pensado.
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Jeongin entre cerró con más tensión sus ojos, sintió en primer sudor frío resbalar por su cuello mientras escuchaba al propio ritmo de su respiración golpear contra su oído, de forma alta y pausada. Y cuando sintió la mano de Hyunjin soltar su cadera finalmente movió el dedo índice tembloroso.
Con su última exhalación apretó el gatillo hasta que la bala salió disparada y golpeó la botella a metros suyo estallando en pedazos.
Chilló alto y emocionado mientras saltaba y volteando golpeó el hombro del alfa riendo.
- ¡Es mi quinta botella!- festejó mientras el alfa reía asintiendo orgulloso.
- Lo haces bien, ángel. Pronto podrás hacerlo de seguido sin dudarlo tanto- Jeongin asintió con firmeza mientras dejaba descansar el arma en la mano de Hyunjin de forma segura.
Minho fue quien abrió el cargador y dejó caer la balas al suelo para comenzar a guardarlos en las fundas. Jeongin se volteó hacia Jisung quien pasaba lentamente la pintura negra por sus uñas, ladeando la cabeza la curiosidad lo asaltó.
- Jisung hyung, ¿tú no quieres aprender a disparar?.
Jisung no levantó la cabeza pero negó lentamente.
- ¿Para qué?, no me sirve en la vida cotidiana que llevo.
- Bueno, puede necesitar alguna vez las habilidades si se encuentra en peligro- Jisung sopló sus uñas completamente pintadas mientras cerraba lentamente su esmalte.
- Para eso tengo a Minho- él mencionado rodó los ojos guardando cada objeto con la ayuda de Hyunjin sobre la mesa.
- No estaré pegado a tu trasero toda la vida, Jisung. Lo necesitarás en todo caso.
- Tú no estarás pegado a mi trasero pero yo si al tuyo, y no me quejo- Jisung bromeó causando una risa a Jeongin y un bufido al alfa.
- No, estoy hablando en serio, no estaré ahí siempre.
- ¿Qué?, ¿cómo que no?, mira que eres mi sugar, un sugar nunca deja a su bebé solo por nada del mundo- Jeongin volvió a reír, y es que era tan divertido como con cada palabra Jisung podía alterar más y más a Minho.
- Que no soy tu sugar.
- Me das dinero, eres mi sugar- Minho se rindió finalmente soltando un largo suspiro.
- Bien, Jisung, soy tu jodido sugar- Jisung comenzó a reír saltando de la mesa en que estaba sentado.
- Muy bien, Honey, cuando eres obediente me gustas más- bueno, Jeongin ya sintió eso más íntimo.
Así que dejando a ambos "pelear", se acercó a Hyunjin quien aún practicaba con su arma, solo que disparaba a una distancia más lejos y con objetos más pequeños. Como justo en ese momento en que llegaba a su lado y su dedo apretó el gatillo, la bala logró rozar la botella colgada en uno de los árboles pero solo sacó un ligero pedazo al vidrio, Hyunjin soltó un suspiro exhausto a su lado pero volvió a apuntar.
- Hyung, ha pasado un tiempo de que todo está tranquilo- indagó, sabía que Hyunjin lo escuchaba atentamente-. ¿Sabe por qué?.
Hyunjin dio otro disparo la cual esta vez si hizo caer los pedazos de vidrio de lo que era una botella, finalmente bajó su arma para voltear y prestar total atención a su omega.
- No lo sé, han de estar por ahí craneando algo- se encogió de hombros mientras Jeongin asentía lentamente-. ¿Por qué?, ¿te preocupa, ángel?.
- No realmente, creo que hyung me esta preparando bien- soltó una ligera risa a sus palabras y Hyunjin también sonrió, más orgulloso que nada.
- Después de todo pronto estaremos volando a otro país, y se quedarán con las ganas, no lo pienses mucho- Jeongin estuvo de acuerdo.
- ¿Cuando iremos, hyung?, estoy realmente ansioso- Hyunjin remojó sus labios.
- Podemos ir mañana si así lo deseas- sintiendo sus mejillas enrojecer Jeongin negó lentamente.
- Vamos cuando usted crea que es el mejor momento- el alfa asintió, esperaba esa respuesta.
- Pronto, iremos pronto, yo solo te avisaré y saldremos sin mirar atrás...-
- ¿A donde iremos?- la voz a sus espaldas hizo exaltar a Jeongin quien volteando se encontró con la mirada curiosa de Jisung.
- Quete- respondió Hyunjin y Jeongin río al instante.
- Jeonginnnie, ¿a donde iremos?- Jeongin se encogió cuando la pregunta fue referida hacia él.
- Oh...hyung y yo visitaremos Francia pronto- murmuró tímido, algo aliviado de que Hyunjin no pareció molesto por estar divulgando y en cambio infló su pecho con orgullo y altanería.
- ¿Francia?- los ojos de Jisung brillaron mientras se volteaba de golpe hacia Minho- Minho quiero ir a Francia.
- No, no hay nada que hacer ahí- Jisung saltó hasta Minho y se aferró a su brazo.
- ¡Claro que lo hay!, es el pais de la pizza- chilló y Minho negó incrédulo.
- Ese es Italia, ardilla hueca- Jisung ladeó la cabeza.
- Como sea, quiero ir a Francia- exigió con voz quejosa comenzando a estironear del brazo del alfa quien estaba colocando los ojos en blanco- Llévame a Francia, Minho, nuca he salido del país- lloriqueó y Minho volvió a negar.
- No tengo nada que hacer ahí, Jisung, entonces no voy a perder mi tiempo- el omega comenzó a fruncir el ceño.
- ¡Es vacaciones, Honey!, vamos di que sí, llévame a Francia- chilló y Minho ya solo se calló para no alargar la pelea-. Haré lo que me pidas, ¡pero llévame a Francia!- murmuró cayendo al suelo dramáticamente mientras fingía perder el aliento.
Minho mientras tanto enarcaba su ceja interesado con la propuesta, observó a Jisung lloriquear en el suelo y una sonrisa lenta y ladeada apareció en su rostro.
- Bien- murmuró, Jisung soltó un chillido contento y se puso de pie dispuesto a saltar sobre él a abrazarlo.
Pero antes de que llegue a tocarlo colocó su dedo índice en su pecho recibiendo una mirada confundida, y la sonrisa de Minho se ensachó mientras deslizaba el dedo por todo su piel sobre la ropa hasta su clavícula, Jisung pareció tensarse antes de que él alfa vuelva a hablar.
- Pero ya dijiste lo que sea, ardillita, abstente a las consecuencias- Jisung sintió la emoción caer de sus hombros y sus brazos bajaron comenzando a caer en cuenta.
¿En que se había metido?.
- Sí...- respondió desconfiado y fue peor cuando la satisfacción brilló en los ojos del alfa y terminó asintiendo también.
- Bien, Hwang entonces iremos con ustedes.
Hyunjin colocó los ojos en blanco mientras Jeongin y Jisung aplaudían emocionados comenzando a saltar alrededor de los alfas festejando.
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Seungmin terminó de colocarse su sudadera, estaba más que nervioso, sus palmas sudaban mientras se preparaba para una cena entre todos los habitantes de esa casa. No había visto a Christopher desde hace una semana desde lo ocurrido, y no sabía siquiera como iba a reaccionar al encontrarse con el alfa y además este acompañado de Lee Felix.
Felix...recuerda que el día anterior vino como lo prometió con una bandeja de brownie, y se quedó a merendar junto a él donde ambos lograron hablar horas y horas de la vida del australiano antes de llegar a ese mundo y la vida de Seungmin en su antigua casa como un omega pobre. Hablaron tanto que para cuando ambos se dieron cuenta casi terminaron revelándose el secreto de la cangreburger.
El omega rubio era sin dudas el omega más dulce y divertido que había conocido, escuchaba con atención y respondía cada parte de su relato dándole toda la atención e importancia a sus palabras. Era como un ángel y Seungmin ya le estaba tomando un tonto cariño.
Terminó por tomar un largo y tenso respiro antes de finalmente mirarse por el espejo de su habitación y luego voltear y salir con pasos casi de pinguinos del cuarto, apretando las mangas de su abrigo y bajando las escaleras lentamente.
Salió de su casa en silencio, y caminó por los pasillos de la misma forma, toda la residencia estaba silencioso, sin ningún alma pasando por los pasillos gracias a que ese día era domingo y la falta de personal era común.
Llegando a la puerta principal tomó el pomo con una exhalación lenta y lo abrió.
Y cuando la puerta se abrió frente suyo, halló ahí todos, haciendo un alboroto mientras arreglaban la mesa para comer, Minho parecía charlar tranquilamente con Chris, Felix cortaba su nuevo postre, Hyunjin peleaba con Jisung para que no coma y espere y Jeongin colocaba los últimos platos en orden.
Apenas la puerta sonó detrás suyo, todos voltearon a mirarlo, generando un temblor nervioso y en pánico a Seungmin.
Se dijo que no debía preocuparse, no había por que. Jeongin le ofreció una sonrisa contento y emocionado y corrió hasta él para tomarlo de la mano, y todos lo saludaron animados, se sintió cada vez más relajado cuando Minho y Jisung pelearon por quien se sentaría a su lado y Jeongin le dijo que podía ignorarlos si lo incomodaban.
Todos actuaban normal y amables, y él se sentía absurdamente agradecido.
Tomó asiento en medio de Jisung y Jeongin finalmente, y Jeongin comenzó a extenderle los cuencos con comida para que se sirva de todo un poco, y Seungmin lo aceptó tímidamente.
Y cuando levantó la mirada se dio cuenta que había tomado asiento frente a Chris, y cuando sus miradas cruzaron Seungmin sintió su corazón acelerarse cuando una sonrisa amable y de boca cerrada se le fue ofrecida.
No lo estaba ignorando, no estaban en malos términos.
Él también sonrió, suave y tímido para luego volver a apartar su mirada. Comieron de esa forma, en pláticas y peleas que solo aveces él participaba. En medio de todo eso Jisung se propuso a dar unas palabras por el primer almuerzo junto a Kim pero terminó llorando ni bien comenzó y luego le siguió Jeongin, y Seungmin solo pudo reír conteniendo las lágrimas mientras dejaba que ambos amigos se abracen a su cuerpo y lloren.
- Oh chicos, independientemente del tiempo, yo también los extrañe mucho- murmuró conmocionado, y eso solo aumento el llanto de Jisung pero no se preocupó-. Gracias por esperar por mí y seguir teniendo esperanzas.
- Ouh- Seungmin comenzó a reír cuando vio a Felix comenzar a llorar, y se obligó a sonreír a pesar de que las lágrimas también lo querían ganar.
Y pensar, solo pensar que por un momento pudo no volver a ver a esos chicos frente a él. Quienes lloraban por su presencia y se aferraban a su cuerpo por qué lo querían.
Estaba tan agradecido que creyó que por eso no podía soltar ninguna lágrima, no tenía por que, estaba ahí y le quedaba mucho por delante. Aún tenía el corazón algo disgustado, pero tenía a Jeongin, a su mejor amigo quien estaba vivo gracias a su sacrificio, a Hyunjin quien cuidaba de él también, Minho y Jisung quienes peleaban por su amor y Felix, su nuevo amigo.
Y siempre tendría tendría Christopher, su primer amor quien lo trató de la manera que nadie nunca lo hizo.
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Seungmin volvía a beber de su jugo sentado en el mismo banco, observando desde su lugar a Minho y Jisung pelear mientras se empujaban cerca del sistema de riego en el suelo a un extremo, la cual en ese momento estaba haciendo su trabajo y derramando una tormenta de agua. Se empujaban cerca del agua y reían porque a pesar de que no entraban por completo ambos ya estaban completamente empapados.
En realidad, todos estaban en ese juego, Seungmin aún estaba "vulnerable", por eso había decidido no incluirse, claro que era más invento porque no tenía muchas ganas de tomar un resfriado.
De un momento a otro se quedo observando a Chris y Felix, el alfa reía, con sus hoyuelos marcandose y aquellas bonitas arrugas formándose al costado de sus ojos mientras se encargaba de apartar el cabello húmedo del rostro de Felix y el omega se limpiaba los ojos húmedos mientras también reía.
Ambos reían...sonreían y se veían a gusto uno al lado del otro. Haciendo algo básico como jugar con el agua y corretear como niños.
Seungmin bufó interiormente, debería quitarse los lentes y hacer la vista ciega, porque él sólito se lastimaba.
Pero por alguna razón no pudo apartar la mirada, los siguió mirando dándose empujones y luego Felix saltando sobre la espalda del alfa mientras todos se unían a un solo juego.
E iba a seguir torturándose si no fuera por un repentino rostro posándose frente a sus ojos.
No pudo evitar exaltarse, fue un poco hacia atrás y abrió un poco más los ojos sorprendido por la nueva presencia. Inhaló y su olfato se lleno del aroma de alfa, y cuando se dio cuenta recibía una sonrisa amplia donde unos grandes hoyuelos lo hicieron ladear la cabeza curioso.
- ¡Hola!, debes ser Kim Seungmin, no puedo creer que aún no hayamos tenido el placer de conocernos- Seungmin parpadeó ante la voz agradable, y un segundo después una mano se le fue extendida-. Estoy aquí desde hace seis meses o más y no he logrado dar contigo, eh. Eres muy escurridizo, soy Choi Byungchan, podría decirse que el mejor amigo de Jisung y Jinnie, pero no le digas al jefe porque aun lo niega con frecuencia, es un total gusto, lindo.
Seungmin abrió y cerró la boca, ¿seis meses?, ¿ese alfa estuvo seis meses en su mismo círculo y él no lo vio?. Bueno, al menos sabía que cinco de esos meses era claro que no lo iba a registrar.
Tomó la mano con torpeza, y se sintió algo desorientado cuando el alfa lo agitó totalmente animado y la suavidad de su palma lo hizo mirar ambas manos entrelazadas. Y segundos después el alfa tomó asiento a su lado con un suspiro cansado.
- ¿Son muy infantiles, cierto?, jugar con el agua como unos niños, claro, yo también lo haría, pero como no me invitaron digo que son muy infantiles- Seungmin sonrió ligeramente confundido y divertido-. ¿A ti también te gusta jugar con el agua?, porque si es así olvida todo lo que dije, a excepción de la parte en que a mí también me gusta.
- N-no...no me gusta, me enfermo con facilidad- decidió contestar, en un momento en que el alfa tomó aire.
- Ya veo, entonces si puedes pensar que a mi tampoco me gusta, pero si alguna vez me ves jugando de la misma forma, no soy yo, es mi gemelo perdido- Seungmin soltó una risa, ligera y suave mientras volteaba a ver al alfa y recibía una sonrisa donde nuevamente aquellos hoyuelos se marcaban, grandes y absurdamente adorables.
Nuevamente se encogió con timidez cuando las manos del alfa tomaron sus lentes.
- ¿Me permites?- asintiendo lentamente finalmente lo terminó de retirar y luego se lo colocó con cuidado, una exclamación sorprendida escapó de sus labios mientras volteaba a ver cualquier punto en la casa, como si estuviera en un juego de realidad virtual-. Nunca me he puesto unos lentes de visión...lastiman- lloriqueó y finalmente se lo volvió a retirar volviendo a colocárselo a su dueño quien no pudo refutar algo-. No entiendo como puedes, esa cosa casi me quita una lágrima, pero bien, al menos a ti te queda adorable.
Seungmin apenas pudo parpadear, procesando las acciones y palabras de Choi Byungchan.
- ¿Eres un guardia?- decidió preguntar, con timidez, y no pudo evitar reír cuando el alfa jadeo indignado y negó frenéticamente.
- Me ofendes, yo soy el asistente personal de Lee Minho- Byungchan soltó un suspiro lamentable-. El trabajo más terrorífico y horroroso del mundo, ¿Crees que es normal que un jefe haga limpiar las cajas de arena de sus gatos?, porque definitivamente no creo que sea algo común de ver para un empleado de la mafia, ¿sabes?. De todas formas no me quejo por que luego me paga y me da una paleta de regalo...ahora me siento como su perro obediente, pero no me quejo; las paletas son deliciosas.
Byungchan metió la mano en su bolsillo y retiró dos paletas pequeñas de color morado y rojo, y una se le fue extendida al omega quien se encogió tímidamente ante el ofrecimiento.
- ¿Quieres?, puedes tomarlo- dando un pequeño asentimiento como agradecimiento tomó la paleta morada y lo atrajo hacia su pecho.
Bien, ahora tenía un regalo.
Byungchan se tomó el momento de sacar el envoltorio de su dulce y luego lo llevó directo a su boca comenzando a degustar el sabor, por primera vez en silencio mientras Seungmin lo observaba de reojo y se preguntaba sobre su actitud extraña y extrovertida, muy extrovertida.
También imitó su acción, sacó el envoltorio con suavidad y timidez y lo dejo a un lado junto a la cajita de jugo para finalmente deslizar la paleta por sus labios y comenzar a disfrutarlo.
- Me pregunto de donde salen personas tan lindas- Seungmin se sorprendió por sus palabras-. La primera vez que vi a Hwang...woah, era como un idol, y luego Jeongin me golpeó con su rostro de bebé, y luego conocí a Minho, Christopher, Jisung- Byungchan enumeró y su voz perdió el aliento al final-. Y luego Lixxie y tú...woah, no tengo palabras, ¿es que somos cómo la banda de mafiosos pop?- Seungmin comenzó a reír, más fuerte mientras negaba ante la expresión incrédula de Byungchan.
Tomando aire Seungmin lo señaló tímidamente.
- Junto a ti...creo que junto a ti definitivamente parecemos idols- bromeó, y la sonrisa de Byungchan creció y su pecho se infló de un orgullo que divirtió aún más a Seungmin.
- ¿Tú crees?, ya decía yo, todos en la cárcel me deseaban, lastima que eran unos marranos, sin duda Hyunjin fue a salvarme o me ahogaría en la desgracia- mientras Byungchan se lamentaba Seungmin ladeaba la cabeza curioso y confundido.
- ¿Cárcel?- Byungchan asintió tranquilo.
Y desde ahí comenzó a explicarle como había conocido a Hyunjin y llegado hasta aquí, Seungmin lo escuchó atento, sorprendido en parte y en otra ya algo consciente, Chris ya le había dicho una vez que Hyunjin había ido a la cárcel por un problema personal, y parecía estar todo conectado.
Le comentó de principio a fin, y cuando la conversación nuevamente se comenzó a extender a la vida del alfa luego de salir de la cárcel no pudo avanzar cuando Jeongin llegó corriendo hasta ellos y se lanzó al lado del omega lloriqueando.
- Muero de frío, Minnie, abrázame- se quejó y Seungmin también lo hizo cuando los brazos helados de Jeongin se abrazaron al suyo y su cabello húmedo se hundió en su hombro junto a su cabeza.
Hyunjin también llegó hasta ellos y no tardo en mirar a Byungchan con los ojos entre cerrados.
- ¿No viniste a asustarlo, cierto?- el alfa jadeo una vez más indignado mientras ambos omegas reían.
- Le estoy haciendo platica a mi nuevo mejor amigo- enfatizó y Hyunjin solo colocó los ojos en blanco.
- Eres muy rencoroso- Byungchan se cruzó de brazos e hizo un mohin.
- Admite que soy tu mejor amigo y no habrá otro, Jinnie- dramatizó y Hyunjin hizo una mueca.
- No lo eres- Byungchan soltó aire fingiendo tener un ataque de tristeza y Hyunjin lo ignoró deshaciéndose en el suelo lamentando su vida-. Vamos, ángel, o tendrás un resfriado, entremos a darnos una ducha.
Jeongin lloriqueó pero se obligó a obedecer, colocándose de pie y despidiéndose con la mano de Seungmin y un dramático Byungchan y se fue corriendo jalando de la mano a Hyunjin.
- Bien, ya veo que Jinnie sigue reacio a mis sentimientos- Byungchan volvió a acomodarse en su sitio y luego volteó hacia el omega mirándolo ilusionado-. ¿Quieres ir a un evento de atracción, Kim Seungmin?, iba a ir con Jisung pero ya no me animo a hablarle cuando ese monstruo esta merodeando cerca.
Seungmin ladeó la cabeza sorprendido con la propuesta, y cuando intento decir algo una voz lo interrumpió.
- ¿A quien llamas monstruo?- Byungchan saltó en su asiento y soltó un chillido al ver a Minho plantado a su costado mirándolo fulminante.
Volteando a ver en pánico al omega se puso de pie.
- ¿S-si quieres?- Seungmin tuvo que compadecerse.
- Claro, puede ir adelantándose y correr afuera, yo le alcanzo- Byungchan sonrió emocionado y le grito un gracias rápido antes de comenzar a correr con Minho siguiéndolo de cerca.
Seungmin terminó riendo al ver a Lee resbalar varias veces en el pasto y Byungchan carcajearse y luego echarse a correr de nuevo. Suspirando también se puso de pie cuando finalmente lo vio salir de la residencia y correr lejos mientras el portón se cerraba frente a Minho.
Bien, Byungchan era un alfa divertido, y era el mejor amigo de Hyunjin. Así que no tenía de que preocuparse, ya había pasado un tiempo en que había salido a divertirse y olvidar por un momento la forma en que estaba viviendo.
Si, definitivamente era mejor salir de esas cuatros paredes, y quien sabe, hacer una gran amistad con Choi Byungchan.
Luego de este publique el Epílogo, recuerden refrescar la aplicación si no les sale o abrir y cerrar sesión <3.
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