Había un olor fuerte a productos de limpieza. El alfa solo pudo percibir eso entre tanto silencio y tranquilidad, cada vez que intentaba abrir los ojos una luz cegante lastimaba sus ojos, por lo que se permitió seguir descansándolos hasta poder acostumbrarse.

No supo cuanto pasó, en el tiempo en que esperó divagó en su mente intentando recordar algo, era una gran frustración cuando la mente aún estaba dormida y creaba escenarios que nunca ocurrieron confundiéndolo.

Lentamente comenzó a abrir los ojos, parpadeando y sintiendo su visión hacer su trabajo. Se encontró con un techo meramente blanco, una luz en forma de círculo golpeaba directo a su rostro mientras comenzaba a girar su cabeza hacia abajo.

Y luego todo fue una revelación increíble. Primero, parecía estar en una habitación de hospital, recostado en una camilla traía la típica y común ropa de hospital. Lo segundo era la sorprendente y desconcertante venda que rodeaba su brazo la cual tenía el sostén de un cabestrillo. Había heridas cubiertos por vendas y hematomas al descubierto por casi toda su piel, y en su muñeca del lado izquierdo dos sondas que suponía él le transmitía suero.

Parpadeando Minho volvió la vista hasta su brazo y finalmente comprendió.

Era la herida de una bala. Bala que había recibido cuando intentaba escapar con Hyunjin y Jeongin. ¿Qué había ocurrido?, ¿cómo era que estaba ahí siendo tratado cuando pareció que en su última inconsciencia estaba muriendo?. Minho realmente se espero despertar ya en otra vida, una mejor y menos complicada.

La respuesta llegó más rápido de lo planeado. Apenas pestañeo mientras veía a Christopher ingresar a la habitación con pasos silencioso, no pareció esperar encontrarlo despierto, porque su expresión lo delató todo.

Minho no espero ver a alguien pálido más pálido de lo normal. De por si Christopher ya era tez pálida en todo su cuerpo, siempre poseía sonrojos en alguna parte de su piel.

En ese momento, en el único lugar que rodeaba un rojo fuerte era alrededor de sus ojos. Una clara señal que llorar era lo que más había hecho en su soledad.

Sus facciones se suavizaron apenas encontró a un muy despierto Minho. Y algo forzoso una sonrisa se le fue ofrecida a Minho quien por más que deseaba decirle a Christopher que no debía fingir, sabía que sería en vano.

- Como siempre, eres bastante sorprendente. Han pasado apenas horas y ya estas consciente- Minho ladeó la cabeza.

- ¿Qué ocurrió?- vio a Chris acercarse a la camilla, al igual que él un cabestrillo sostenía su brazo la cual muy seguro estaba fracturada. Con un pequeño delis se dejó caer en la única silla al lado suyo.

Él pareció tomarse unos segundos antes de sonreír ligeramente.

- No mucho, llegamos junto en el momento que los vimos escapar en el auto, si no lo hubiéramos hecho...realmente hubieras muerto desangrado, o de hipotermia- Minho observó sus dedos sobre su estómago, sus ojos analizaron las sondas sin estar realmente conectado con su alrededor-. Es un alivio.

- No des vueltas- murmuró de forma cortante, sin atreverse a mirar al mayor-. ¿Hyunjin?, ¿donde está él?.

Chris se mantuvo en silencio, y cuando este se extendió bastante Minho comenzó a sentir el nudo en su garganta.

Subiendo la mirada se encontró con la expresión nerviosa del mayor.

- ¿Puedes dejar de actuar como si yo fuera un maldito mocoso?- Chris negó rápidamente.

- No es eso. Simplemente no sabría como decirlo...él aún no ha despertado- Minho apenas se inmutó.

- ¿En que habitación está?.

- En la siguiente, acabo de pasar a verlo....eh, ¿qué estas haciendo?- Chris se alarmó mientras veía a Minho retirar las sábanas sobre su cuerpo y darle la espalda para sentarse en la camilla.

Se levantó preocupado cuando un gruñido escapó de sus labios a causa del esfuerzo y el dolor.

- Minho, aun no te han checado y acabas de despertar, podrías colapsar...-

- Te fracturaré el otro brazo si vuelves a tratarme como un invalido, ya cállate- Chris apretó los labios sin palabras.

Minho era realmente aterrador cuando insinuaban que era débil.

Lo siguió con preocupación mientras el alfa avanzaba a pequeños pasos con las bolsas de suero colgando de su hombro. Seria una imagen tierna si sus ojos no estuvieran chispeantes de la irritación.

Minho escuchó su corazón golpear contra su oído por cada paso que daba para llegar hasta la habitación siguiente. Ya imaginaba como estaría Hyunjin, con el cuerpo lleno de hematomas, tal vez algún hueso roto y completamente demacrado.

Y al llegar e ingresar estuvo en lo correcto.

Fue un pequeño segundo en que el alma se le escapó antes de que vuelva a regresar y su expresión espantada se reemplace por una sorprendida.

Avanzando dentro de la habitación vio de reojo a Chris colocarse a un lado suyo.

Y finalmente una lenta sonrisa comenzó a hacerse presente en su rostro mientras dejaba escapar aire. Volteando hacia Chris golpeó su hombro con algo de debilidad mientras recibía una mueca confundida.

- ¿En que jodida parte esto te preocupa?- Chris abrió y cerró la boca confundido.

- Bueno...no despierta aún y es alarmante- rodando los ojos Minho se encogió de hombros.

- Perdió un litro de sangre, lo golpearon como 10 veces, clavaron a su omega en todo el cuerpo y lo golpearon también. ¿Esperas que esté consciente y riéndose del pasado?- Christopher chasqueó la lengua segundos después.

- Tampoco me hagas ver tan ridículo.

Riendo Minho finalmente dejo que el peso se vaya de sus hombros. Sus ojos observaron aliviados a Hyunjin completamente dormido mientras sus brazos sostenían a Jeongin cerca suyo, ambos compartiendo misma camilla y completamente acurrucados con sus respectivas sondas y heridas, pero completos.

- ¿Cómo es que están juntos?, ¿no dijiste que aún no ha despertado?- Chris sonrió ligeramente.

- El jefe no, pero Jeonginnie lo hizo, no sabes el escándalo que armó, derritió a medio hospital cuando comenzó a llorar exigiendo estar junto a Hyunjin y haciendo pucheros a las enfermeras hasta que lo cambiaron de habitación, yo ni siquiera tuve que mover un dedo- Minho volvió a soltar una pequeña risa-. Fue una imagen...-

- Tierna...- completó y asintió lentamente observando al omega aferrarse al torso de Hyunjin e incluso desde su posición podía escuchar el pequeño ronroneo relajado y cómodo-. Sí, claro que lo es.

Minho finalmente aceptó salir de la habitación cuando se aseguró de ver a Hyunjin respirar de forma correcta y sus heridas siendo bien tratadas. Volviendo a su habitación no pudo seguir resolviendo sus dudas cuando una enfermera alarmada lo recibió y comenzó a regañarlo por levantarse de su camilla.

Tuvo que tolerar todo un chequeo para que se aseguren de que su cuerpo y mente iba en orden mientras Chris esperaba sentado en el sofá. Minho lo observaba por momentos y no había más que una expresión vacía en su rostro, sus ojos estaban tan apagados como nunca antes y se perdían en algún punto en el suelo.

Minho sabía, entendía la razón, pero él tampoco podía aceptarlo. Así que no quería preguntar, no podía ni siquiera compadecerse y preguntar al australiano si estaba bien porque sabía que él también se rompería si llegaban a iniciar ese tema.

Así que simplemente se mantuvo callado.

Cuando la habitación volvió a vaciarse de enfermeras Minho terminó apoyado en respaldar y comiendo la merienda del día, era yogurt de chocolate y gelatina, por lo que casi lo hubiera devoró en diez segundos si el brazo herido no se lo hubiera complicado tanto.

- ¿Jisung?- preguntó aún sacándole resto de gelatina a su pote.

- Lo encerré junto a ese tal Byungchan, son como Tom y Jerry, a los segundos están armando la tercera guerra mundial y golpeándose- Minho sonrió levemente observando aún el pote vacío-. Aproveché que se quedaron exhaustos luego de buscarlos por horas y los llavee en el auto con comida, deben estar por romper el cristal en este momento.

Negando divertido Minho apartó la bandeja con los potes y soltó un suspiro largo.

- No puedo estar aquí ahora, hay mucho que hacer, ¿qué sabes de Riki?- Chris pareció echar chispas por los ojos de la irritación con la sola mención, su mandíbula se tenso y apartó la mirada pareciendo contar para no dejarse llevar por sus emociones.

- Estuvo por escapar, nuestros hombres lograron acorralarlo y lo llevaron a uno de los edificios cercanos, se volvió loco, incluso hirió a unos cuantos. No parece dispuesto a morir, hace un momento antes de venir aquí recibí una llamada y esta por romper la puerta del sótano, es como un jodido animal- Minho escuchó atentamente y negó a los segundos.

- Hay algo que me preocupa- murmuró y recibió una mirada curiosa del mayor.

A Minho en serio le preocupaba. Incluso en ese lugar, viendo como maltrataban a Jeongin y luego golpeaban a Hyunjin con revelaciones que el jamás había escuchado. Estaba seguro que mucho había cambiado en unas cuantas horas. Cuando más le echas sal a la herida, más arderá.

Y eso, Minho no sabia si era bueno o malo.

- He visto a Hyunjin desde sus comienzos- murmuró, su mente divagó en sus recuerdos-. La primera vez que torturó a una persona...no soportó ni diez minutos y colapsó, vomitó y estuvo enfermo por varios días- Minho recibió una mirada sorprendida, incrédula-. Sí, te debes preguntar como alguien de su jerarquía puede tener las emociones tan deplorables. Eso es importante, te confirma que nunca debes guiarte por la fuerza mental de una jerarquía cuando fácilmente está se puede quebrar.

Los dedos de Minho chocaron levemente en un pequeño juego distractivo.

- Comenzó a avanzar...ya no vomitaba tanto, aguantaba más tiempo; solía colapsar solo cuando sobre pasaba los límites. En ese tiempo lo analice, quise saber en que forma había cambiado para poder lograr su objetivo y no verse tan vulnerable, por que a pesar del maltrato de su madre él parecía ser más fuerte con el pasar del tiempo- los ojos de Minho se encogieron melancólico-. No pude pillarlo por mi mismo...pero más tarde Hyunjin me lo confesó. Las amenazas de Jinah para que lo haga bien, resultaron ser que si seguía errando ella me mataría a mi y a Changbin. Dijo que eso lo volvió loco, lo aterró, me dijo que nosotros dos éramos lo único bueno que tenía y no podía permitir que lo dejemos.

Soltó aire por las nariz.

- Luego de ese momento comenzó a llevar sus torturas a otro nivel, él ya no parpadeaba, estaba horas y horas en una habitación lastimando y quebrando a sus víctimas. Y en un solo parpadeo, volvía a sorprender con sus acciones.

Minho tuvo un ligero estremecimiento, cada vez que se ponía a analizar esa situación no podía evitar sentir aquel miedo por su menor.

- Luego llegó Jeongin...cuando apenas comenzó a importarle mató a tu hermano, ¿lo recuerdas, cierto?- Chris asintió con una expresión pensativa-. Luego ocasionó que Jeongin asesine a su madre, yo nunca creí que se atrevería, él tenía un odio enfermizo hacia ella, sí. Pero es difícil soltar a lo que siempre te ataste por dependencia. Pero lo hizo en un segundo por que ella estaba por lastimar a Jeongin. Volvió a torturar de una forma más demencial a Dawon, por que lastimó a Jeongin y mató a su mejor amigo, tú lo viste, ese día él ni siquiera parpadeó y tolero el calor de su ciclo de celo simplemente para poder ver de comienzo a fin como ese hombre sufría.

Minho pasó saliva con un ligero temblor en sus dedos.

- Sin darse cuenta, él vuelve a ocasionar algo grande y más inhumano por sus emociones- Chris pareció ligeramente impresionado e incómodo con aquellas deducciones-. Y hace unas horas, en ese lugar...torturaron a su omega frente suyo, vio a Yeji tracionarlo y escuchó distintas palabras crueles y rencorosas que por más que no lo demostró, pareció importarle más de lo que aparentaba. ¿Tú puedes comprender a lo que estoy llegando?.

Chris pasó saliva cuando la mirada del menor cayó sobre él, y lentamente asintió, con duda pero creía entender.

Y Minho lo confirmó.

- No sé...que está dispuesto hacer una vez que despierte...por qué Jeongin también lo hará, despertará y él...- el menor pasó saliva ante la mirada atenta de Chris, y no se atrevió a mirarlo así que regreso la vista a sus dedos-. Recordará a Seungmin, y Hyunjin lo sentirá...él no tolera que Jeongin sufra, y volverá a guiarse por las emociones. Es por eso que estoy preocupado, de que pueda hacer cosas de las cuales luego se arrepentirá, donde quedara en su consciencia que sus manos estas más sucias de lo que cree y eso podría afectarle en un futuro.

Chris pareció no responder a sus palabras. Sin nada que acotar ambos se sumieron en un silencio incómodo, analizando; dejando que sus preguntas se contesten solas en sus mentes mientras se tomaban su tiempo.

- Por el momento no debemos concentrarnos tanto en esto, por que el jefe lo notará- Chris finalmente habló, como siempre, había un tono severo y tranquilo en su voz que difícilmente se alteraba-. Cuando despierte evitaremos hablar rápido del trabajo, de lo que ocurre fuera de este hospital, debemos hacerle saber que lo primero es que comience a sanar su cuerpo y a recuperar energías, él seguro lo comprenderá.

Minho asintió lentamente de acuerdo.

- De seguro funcionará.

+

Hyunjin no sabe como llegó a esa posición pero quería quedarse así por siempre. Su rostro se hundía en la cabellera de su ángel, y por el aroma parecía ser que se había dado una baño, el fuerte aroma a shampoo lo hizo hasta inhalar con fuerza entre tanta somnolencia. Y mientras, sus brazos se aferraban al cálido y suave cuerpo contra su pecho.

Todo eso fue por un momento, hasta que escuchó su voz.

- Hyung, esta bien que le guste olfatear, pero en cambio usted no huele muy bien.

Hyunjin nunca estuvo más despierto.

Alejándose sin ser brusco apartó los brazos lo suficiente para que Jeongin se aleje de su pecho y finalmente se encuentre con su rostro. Hyunjin hasta olvidó que hace un momento su omega le dijo que olía mal cuando encontró sus ojos pequeños y brillantes, en sus sonrojadas mejillas había pequeñas tiras blancas que cubrían sus heridas, tenía ojeras y el rostro delgado, pero a pesar de eso. Jeongin se veía jodidamente tierno y brillante.

- Joder...- murmuró y Jeongin pareció comprender porque comenzó a sonreír.

- Sí...joder por qué estamos vivos, hyung- Hyunjin apenas parpadeó.

Recién caía en cuenta...

Jeongin no pudo borrar su sonrisa, y se convirtió en risas cuando Hyunjin comenzó a llorar, sus sollozos llenaron la habitación mientras se aferraba a él. Jeongin no refutó ni por un momento, aceptando a su alfa enterrarse en su cuello y llorar, sintió las lágrimas mojar su piel pero él no pudo estar más cómodo, tranquilo, dejando que Hyunjin lo estruje contra él y se descargue.

Se dijo que fue suficiente cuando en medio del llanto Hyunjin volvía a pedirle perdón. A Jeongin no le agradaba, para nada, ¿por qué Hyunjin no entendía que él también sufrió?. No había alguien más que debía pedir perdón que ese alfa llamado Riki y Yeji. No Hyunjin, él no tenía la culpa de nada.

- Hyung tonto..- murmuró, y Hyunjin detuvo por un momento los lamentos para alejarse y mirarlo con los ojos empañados, todo el rostro mojado por las lagrimas y tan sonrojado como un tomate, sus ojos brillantes y tristes casi hicieron llorar al omega también-. Cada vez que hyung pida perdón se convierte más tonto.

Jeongin levantó sus manos y con suavidad limpio el rostro del alfa con sus pulgares.

Hyunjin lo miró desde arriba, aún sosteniendo su cabeza debajo con el brazo, el otro se aferraba a su espalda y Jeongin estaba seguro que aún no era consciente de que estaba presionando en la zona donde le habían vendado por las heridas.

Pero no dijo nada, siguió sacando con cuidado las lágrimas procurando no ser brusco e irritar su piel. Y luego encerró las mejillas del alfa entre sus manos sonriendo ligeramente por la expresión atenta y tierna del alfa mientras lo dejaba tocarlo.

- ¿Lo entiende, cierto?. No tiene sentido que pida perdón, no cuando no es su culpa. Y sí sigue haciéndolo alfa será un tonto toda la vida- Hyunjin parpadeó ligeramente antes de que nuevas lágrimas se deslicen fuera de sus ojos y Jeongin sintió su corazón saltar aterrado-. N-no, no será tonto toda la vida, t-tal vez la mitad de ella...¡pero no es malo!...

- T-tierno- Jeongin cerró la boca escuchando al alfa en medio de sus sollozos-. Apenas estoy despierto y ya te tengo en mis brazos siendo tierno, ¿qué haré contigo?.

Jeongin parpadeó...él en serio estaba llorando por que era tierno.

Bueno, ¿eso es mejor que llorar por ser un tonto, cierto?.

Lentamente se sintió sonrojarse, no dijo nada cuando Hyunjin apenas pudo retener su llanto y volvió a acurrucarse en su cuello. Su mano acaricio con lentitud su espalda unos segundos después, conteniendo su llanto para que no terminen separándolos por ser una pareja inestable. Simplemente escuchó y aceptó el llanto del alfa en silencio, totalmente enternecido con cada pausa del alfa para dejar un beso en su cuello y luego volver a lloriquear.

Hyunjin estaba demasiado sensible, y estaba bien. Por qué si no era ahora, él volvería a guardarse el llanto y la culpa dentro suyo como si fuera correcto.

Así que se mantuvieron así, hasta que las enfermeras vinieron y obligaron al alfa a darse un baño para una buena higiene. A Hyunjin casi se le escapó el alma del cuerpo al saber que Jeongin se había bañado antes de que él despierte, y además de eso, con ayuda de otras enfermeras.

A Jeongin le pareció divertido, y mucho más al ver al alfa portar una mueca irritada cada vez que lo recordaba mientras él, aprovechando que no tenía la pierna herida, ayudaba a Hyunjin a transportarse, por que una vez más, no quiso pedir ayuda a las enfermeras por rencor.

En ese momento, y luego de que Jeongin hubiera ofrecido un pequeño puchero, de nuevo las enfermeras le dejaron quedarse en la habitación de Hyunjin, y cuando el omega le contó el como tuvo que convencerlas la primera vez, Hyunjin medio río y medio se lamento por no haberlo visto por si mismo.

En ese transcurso de tiempo Chris había pasado por la habitación y había avisado que Minho ya estaba despierto. Jeongin quiso detenerlo por un momento, preguntarle, él aún no estaba enterado de nada.

Pero pareció un chiste, por que el alfa mayor ni siquiera le dedico una mirada y huyó fuera de la habitación sin mirar atrás. Eso claramente instaló un nudo en su garganta, se quedó pensativo observando los cuencos de sopa frente suyo mientras lo revolvía con su cuchara.

Más que estar pensativo, se desconectó por un momento de su mente, solo quedándose observando sin ninguna emoción aquella sopa sin sal sin poder reaccionar, sin pensar, sin intentar recordar. Intentó con todas sus fuerzas distraer su mente de lo que había sucedido antes de haber despertado en ese hospital.

No quería recordar, no quería aceptarlo. Por un momento incluso sintió que ya era injusto, ya no resultaba creíble estar pasando por tanto dolor, el saber que aún no se detendría. Que cuando salga de esas cuatros paredes volvería a la realidad y se quebraría.

Jeongin ya podía sentirse exhausto del llanto que se avecinaba. Se preguntó si podía digerir pastillas para no sentir nada, para no preocupar a Hyunjin, para no afectar a su alfa con su corazón tan roto. Otra cosa injusta, el estar cargando el pecho del mayor con sus emociones.

Él no quería que el corazón de Hyunjin se sienta más pesado, por que al igual que él, su alfa también tenía el corazón roto desde hace un tiempo.

Jeongin volvió al presente cuando sintió un suave tacto en su mejilla.

Parpadeando apenas pudo notar que pequeñas lágrimas se escapaban de sus ojos, su labio inferior temblaba ligeramente cuando volteó y encontró la expresión afable y preocupada de Hyunjin. Los dedos del alfa retiraron lentamente otra lágrima que rodó por su piel mientras le ofrecía una ligera mueca.

- Estamos muy rotos, ¿cierto?- bajando la cabeza Jeongin finalmente apoyó su rostro en sus manos rompiéndose en sollozos.

Su cuerpo tembló con espamos mientras permitía a Hyunjin envolverlo con sus brazos, a pesar de sus heridas pudo apoyarse sobre su torso, escondiendo el rostro en su pecho y llorando, llorando con fuerza hasta que su llanto se vio mezclado por la tristeza y el dolor de sus heridas. Escuchó en algún momento a Hyunjin suplicarle que pare por que se hacia daño, pero él no pudo detenerse, aunque dolía físicamente, su pecho se sentía peor, asfixiante, con un gran peso que no parecía listo para irse.

La principal razón de sus sollozos era por simplemente era un cobarde, de que no podía aceptarlo, y estaba seguro que nunca lo haría. Por qué Seungmin no podía ya no estar, no podía ser cierto, él no, debía ser una pesadilla, uno que pasó en un parpadeó pero dolió como el infierno. No importaba si lo vio, incluso si todo parecía apuntar.

No era cierto. Su mejor amigo no pudo haberlo dejado.

No, ¿cierto?. No cuando él aún estaba ahí, no cuando Jeongin le prometió que podía ser igual o más feliz que él. Jeongin le había prometido protegerlo de todo y todos, por que estarían juntos.

¿Por qué ahora ya no está?. Jeongin estaba seguro que era por su culpa, por que no lo protegió como debía, porque a su amigo le ocurrió lo peor por que él permitió que esté desprotegido.

El llanto no se detuvo, y no tenía pensado hacerlo si no hubiera sentido un pinchazo en su hombro. Sintió los brazos de Hyunjin apretarlo contra su torso con fuerza, su cuerpo comenzó a aligerar los temblores y sus sollozos bajaron de volumen mientras parpadeaba, sintió sus ojos empañados y luego su mente comenzó a nublarse de una neblina negra, dejó de sentir el dolor asfixiante de su corazón y el ardor de las heridas por todo su cuerpo.

Hyunjin pasó saliva mientras sentía el cuerpo de su ángel dejar de titiritar hasta que sus sollozos pararon y lo sintió vulnerable encima suyo. La enfermera le ofreció una mirada llena de compresión mientras dejaba de lado la jeringa vacía.

Y aunque no quiso se obligó a soltar a Jeongin, sintiendo el frío en su pecho a causa de las lágrimas que mojaron su camisa, su corazón se encogió asfixiante cuando se encontró con el rostro bañado de lágrimas, y más abajo en su abdomen, la camisa del omega se manchaba con un ligero líquido rojo.

Levantándose de la cama retrocedió unos pasos mientras veía con tensión a varias enfermeras entrar, trayendo un carrito consigo y comenzando a desvestir a su omega.

Su cuerpo tembló en contra, mordió su lengua con fuerza para no impedir nada, para dejar que curen su herida. Se contuvo para no gruñir, para no acercarse y apartar de un empujon a la misma enfermera que lo sedo quien ahora comenzaba a deslizar una cortina encerrando a Jeongin dentro.

Simplemente aguanto el nudo lleno de frustración y ansiedad dentro de su garganta mientras era guiado por otra enfermera a una habitación diferente, donde finalmente lo instalaron. Colocaron su suero en sus respectivos ganchos y lo dejaron solo, pensativo, con el corazón acelerado del miedo mientras se preguntaba si no hubiera sido mejor aceptar que también lo seden a él.

Se miró las manos por unos segundos, y tuvo un escalofrío al ver la sangre de Jeongin en las yemas de sus dedos, oscuro y ya casi seco. Apartando la mirada tomó la jarra de agua en la mesita a su lado y echo un poco en cada mano, no le importó mojar las sábanas, simplemente quiso limpiarse de una vez, hacerlo desaparecer de su piel.

Cuando las sábanas estuvieron con un hueco húmedo finalmente Hyunjin encontró estabilidad al ver que la mancha roja ya no existía.

Parpadeando observó la humedad en silencio, sin saber que hacer, simplemente su mente no respondía.

- ¿Te hiciste pipí?- Hyunjin sintió su cuello doler con la rapidez en que subió la cabeza.

Por un momento, un pequeño momento, por segunda vez sintió el peso caer de sus hombros.

Sus hombros bajaron dejando de sentirse tenso mientras observaba a Minho ingresar en la habitación, sin rastro de sangre pero si traía tiritas en el rostro y hematomas en su cuello, su cabello oscuro caía lacio por su nuca y frente y ya tenía puesto unos jeans y camiseta negra con una chaqueta encima, el brazo metido en una manga y la otra manga cayendo sobre su hombro gracias a que un cabestrillo impedía colocárselo.

Minho no sonrió, sin embargo aquel brillo peculiar en sus ojos le confirmó que estaba pensando lo mismo que él.

- Tienes suerte de no estar muerto, si lo estuvieras iría a invocarte en el cementerio y volvería a revivirte, solo para matarte yo mismo- la comisura del labio del mayor se elevó y una burlona y agradable sonrisa se le fue ofrecida a Hyunjin.

No dijeron nada, Hyunjin no parpadeó cuando el mayor se acercó e inclinándose paso el brazo por su espalda hasta atraerlo a su cuerpo. Su cuerpo se tensó ligeramente por un momento, no recuerda cuando fue la última vez que abrazó a Minho de esa forma.

Apoyando el mentón en su hombro deslizó el brazo por su espalda y dio ligeras palmadas, correspondiendo con eso la acción. Y ambos la valoraron aunque no sea un abrazo frenético y lleno de calor, tal vez un poco cálido.

Lo dejo ir segundos después, y no se sintió incomodo, simplemente Hyunjin sintió un calor en su pecho y algo de alivio antes de volver a hablar.

- ¿Y qué rayos haces vestido?, estas herido- Minho se encogió de hombros.

- Debo ir a poner orden por ti, la organización debe estar quemándose en este momento- Hyunjin enarcó una ceja.

- ¿Y yo te di la orden, cuando?- el mayor puso los ojos en blanco.

- Debo hacerlo, tú no puedes salir aún de aquí.

Soltando un ligero bufido negó.

- Más te vale ir a pedir una nueva habitación e instalarte hasta que el último de tus células se estabilice, esa es mi orden- el mayor hasta pareció indignado.

- Estoy perfectamente bien, puedo hacerlo yo- atacó y Hyunjin se encogió de hombros.

- No lo dudo, y eso no es el problema, simplemente yo no te lo pedí- Minho ya pareció irritado-. Las cosas de organización los arreglaré yo, ¿qué no sabes que existe la tec-no-lo-gía?- acotó fingiendo lentitud para que lo entienda. Minho bufó a su lado.

- Y tú no sabes que perdiste tu te-lé-fo-no.

- No me im-por-ta- murmuró para luego reír de lo ridículo que estaban sonando, y Minho también lo hizo segundos después-. Me las arreglaré, ve y descansa en una habitación, espera a que Jisung llegue como el cascarrabias que es y te dé de comer mientras te insulta, ¿no te parece un plan envidiable?.

Hyunjin acotó lo último como broma, pero le causó incredulidad cuando vio a Minho portar una expresión pensativa.

Segundos después ya estaba deteniendo a una enfermera fuera de la habitación pidiendo una habitación vacía.

- Bueno, simplemente dile que no sea tan ruidoso- pidió ahora irritado mientras Minho asentía tranquilo.

- No creo que venga pronto ya que Chris se está asegurando de los alrededores para que todo esté seguro y no está dejando a Jisung salir. A ese idiota de Byungchan tampoco- Hyunjin enarcó una ceja burlón.

- ¿Idiota por qué?- el mayor se encogió de hombros.

- Solo lo es.

- Bueno, Jisung también es un idiota, pero no lo llamo así a la ligera- atacó, y vio como lentamente el ceño de Minho se fruncía pero no respondió-. Debería llamar a Jisung así también, ya que lo describe.

El mayor se encogió de hombros.

- Cada uno con sus criterios- apretando los labios asintió.

- ¿No crees que Jisung es idiota?- Minho estaba mirando cualquier punto menos a él.

- No lo es.

- ¿Pero Byungchan sí?.

- Claro.

- ¿Por qué?- finalmente Minho soltó un gruñido demostrando su irritación.

- Porque se me canta el culo- comenzando a reír Hyunjin se sostuvo el estómago intentando que sus heridas no duelan mientras veía la expresión malhumorada de Minho, simplemente para reír más.

- Dios, Jisung es un idiota porque es tan ciego- murmuró luego de unas cuentas risitas mientras Minho lo observaba confundido.

- Yo creo que él ve muy bien- Hyunjin dejó de reír para colocar los ojos en blanco.

- Sí, lo siento, creí que le faltaba lentes- respondió y por la expresión del mayor captó que cada vez entendía menos por lo que se decidió dejar de molestar-. Ya vete y consigue un suero antes de que te deshidrates.

Minho olvidó el momento en un instante mientras asentía y volteaba a mirar las sábanas.

- ¿En serio te orinaste?- haciendo una mueca Hyunjin negó.

- Creo que son los efectos del suero- Minho le ofreció una última mirada extrañada antes de salir de la habitación con un asentimiento.

Hyunjin fue pasando la tarde a solas, en silencio absoluto a excepción del ajetreo de afuera, las enfermeras pasaban, le daban el visto bueno, se iban. Algunos de sus hombres se colocaron a cada lado de su puerta, de la de Jeongin y Minho, y estuvieron también en silencio.

Por la ventana de la habitación pudo apreciar la neblina de la oscuridad, la ventana empañada y el frío abrazaba las paredes hasta congelar sus manos. Hyunjin no aceptó abrigos por que eso implicaba sacarse las sondas y aceptar que se lo vuelvan a clavar y él definitivamente no iba a volver a pasar por eso.

Así que se aseguró que sus hombres le entreguen ropa abrigada a las enfermeras y estás le confirmaron que Jeongin ya estaba con un abrigo de algodón puesto y bien arropado en su camilla.

Fue en definitiva, la noche más larga de su vida. Donde no pudo pegar un ojo, donde pensó hasta quemar todas sus neuronas y también se desahogo en la oscuridad de la noche, él ya no entendía muy bien por qué lloraba, por todo y nada a la vez, sintió que solo tenia que hacerlo, que había mucho que tenía cargado dentro, necesitaba echarlo todo, desquitarse hasta del último llanto.

Lloró por Yeji, porque aunque nunca lo imaginó; termino siendo el mismo quien mató a su propia hermana.

Lloró por Minho, simplemente por todo, porque Minho no tenía una vida normal por su culpa, por que estaba completamente destruido y aún así él estuvo de pie en tal solo unas horas para hacer el trabajo, herido, adolorido y cansado. Pero él lo haría simplemente para ahorrarle las molestias.

Lloró por todo lo que había vivido, por su madre omega, por su madre alfa, por haber nacido de aquellas dos personas, que aunque aparentaban ser el modelo a seguir de familia. Terminaron destruyéndole cada segundo de su vida, de su niñez, infancia, adolescencia e incluso hasta la actualidad.

Pero sobre todo, y como era de esperarse. Lloró por un ángel quien estaba tan caído y roto, y se preguntó si Jeongin era de esa forma por su culpa, si estaba tan corrompido gracias al camino en que lo había llevado.

Solo aveces, pocas veces, es bueno ser egoísta. Solo que cuando Hyunjin quiso serlo le salió muy mal la jugada.

¿Lo peor?, lo volvería hacer. Por qué seguiría siendo egoísta, posesivo, no le gustaba y jamas aceptaría pensar en una vida futura y pasada donde Jeongin no estuviera con él, siendo solo de él, mirándolo solo a él. Lo necesitaba para respirar, para pisar tierra y a la vez, sentirse en el jodido cielo para tener algo de luz en lo podrido de su vida.

Y no sabía porque, pero estaba seguro que su omega pensaba lo mismo. Estaba seguro que Jeongin era certero con sus sentimientos y deseos, y que aunque el sea lo contrario a egoísta, Jeongin seguiría prefiriéndolo a él, y eso al contrario de darle señal de alerta; lo aliviaba en niveles preocupantes.

Se durmió de esa manera cuando la luz del día aún nublada se hizo presente, apenas una hora antes de que una enfermera lo despierte para desayunar. Juró que si estaba un poco más dormido mandaría a la mierda a cualquier persona del hospital.

Pero no lo hizo, fue a lavarse en rostro en el baño de la habitación y casi rompió el espejo al verse reflejado en ella, con la cara pálida como un fantasma, los ojos hinchados como dos pelotas de béisbol y completamente rojos como la sangre.

Bueno, tal vez exageraba un poco. Pero si estaba horrible.

Dejo escapar aire resignado y malhumorado y finalmente salió de la habitación luego de lavarse repetidas veces el rostro con agua fría. Ajusto su cabello con una liga que le habían acercado y se colocó mechones de cabello azabache detrás de su oreja sin permitirse frustrarse por la incomodidad.

En el momento en que terminó de acomodarse en la cama vio de reojo algo negro pasar frente suyo fuera de la habitación con velocidad.

Y segundos después lo escuchó.

- ¡Lee Minho, maldito animal!- soltando aire Hyunjin cerró los ojos escuchando a Jisung comenzar su escándalo en la habitación siguiente.

Minho apenas pudo hacer a un lado su brazo cuando Jisung aterrizó encima suyo. Recién comenzando a despertar soltó un quejido adormilado mientras el omega lo tomaba del hombro sacudiendo su cuerpo para despertarlo.

- ¡¿Cómo te atreves a ignorarme?!, ¡¿quieres que te deje sin otro brazo?!- abriendo ligeramente los ojos Minho encontró el rostro de Jisung cerca, su cabello desordenado y de un rosa pálido cubría ligeramente sus ojos pero sin así logró encontrar el destello ansioso y nervioso en ellos.

Estaba seguro que si estuviera más despierto hubiera reído cuando Jisung volvió a sacudirlo mientras chilllaba para despertarlo.

- ¡¿Sabes lo horrible que es dormir con otra persona?!. ¡Byungchan ronca mucho y patea!, ¡yo era el que pateaba!.

Mientras el menor comenzaba a quejarse Minho se apoyó en su brazo sano y se impulsó hasta quedarse apoyado en el respaldar de la camilla. Apenas fue consciente que Jisung estaba encima suyo sentado sobre su regazo. Y al terminar de acomodarse las manos del omega dejaron ir sus hombros para finalmente cruzarse de brazos y mirarlo enfadado sin moverse de su puesto.

- ¿Cuál es tu defensa, uh?- Minho finalmente pudo sonreír un poco, tan divertido en la actitud defensiva del omega cuando sus ojos hinchados y rojos delataban todo menos que estaba enfadado.

Pero bueno, quien era él para no seguirle el juego.

- Debiste patearlo más fuerte- respondió tranquilo.

Jisung lo observó varios segundos, no pareció comprender por momento sus palabras porque se lo quedó observando, su cuerpo se agitaba ligeramente por la reciente adrenalina y como punto final su aroma comenzaba a estabilizarse, tan dulce como lo recordaba.

Lo vio voltear la mirada y pareció pasar saliva antes de hablar seguido de un carraspeo.

- Ese idiota tiene piernas largas, casi me rompió una costilla- soltó un gruñido tan solo con recordarlo-. Como sea...- volvió a mirarlo y lo apuntó con el dedo chocando contra su pecho-. Más te vale no mover un dedo hasta que te recuperes o lo próximo que tendrás en el brazo será una muleta porque te romperé la pierna.

Enarcando una ceja Minho finalmente movió sus piernas haciendo saltar el cuerpo del omega, sonrió cuando una expresión espantada y sorprendida apareció en su rostro.

- No estas lejos de romperme las piernas- murmuró, y eso fue suficiente para que Jisung se mueva encima suyo cayendo en cuenta de su posición.

Sin embargo el alfa no lo dejo bajar, abriendo las piernas hizo caer al omega en el medio y lo apretó con firmeza. Sonrió burlón cuando Jisung luchó por salir y bajar mientras soltaba quejidos del esfuerzo.

- Joder, suéltame que en serio te reventaré un testículo- Minho lo ignoró, mientras más se avergonzaba más a la defensiva se colocaba y eso era la atracción preferida del alfa. Observando como sus mejillas enrojecían, sus ojos huían de los suyos y su cuerpo comenzaba a temblar vulnerable.

- No dije que te bajes- murmuró relajado y eso lo enfadó más.

Soltó una ligera risa cuando Jisung apretó los puños y sin ninguna brusquedad comenzó a ensestarle golpes a su estómago. Era como una ardillita apretando los puños de la rabia.

Pero a pesar de verse jodidamente adorable. Minho se sorprendió a ver pequeñas lágrimas resbalar por sus mejillas, sus ojos siguieron las gotas sin palabras, y cayó en cuenta del temblor de su cuerpo aumentando, los golpes sin fuerza no se detuvieron y Jisung siguió huyendo de su mirada mientras se removía histérico por que lo deje ir.

Estirando su mano de un movimiento detuvo una de sus manos sosteniendo su muñeca. Jisung de nuevo estiró el brazo intentando zafarse pero se rindió totalmente cuando el agarre no cedió ni un poco.

- ¿Por qué lloras?- incluso Minho se sorprendió por el tono tan suave en que lo preguntó, pero aún así Jisung no pareció darse cuenta.

Lo escuchó sorber la nariz y con el puño cerrado Jisung frotó su rostro intentando limpiar las lágrimas ante la atenta mirada de Minho.

- ¿N-no es obvio, idiota?. Es porque olvide el número de tu cuenta bancaria y no pude comprar nada en tu ausencia- Minho contuvo una sonrisa mientras asentía lentamente.

- Ya veo, por un momento creí que llorabas porque extrañabas que te moleste.

Jisung se tensó encima suyo pero aun así no se contuvo y estrelló su puño contra el estómago del alfa, Minho jadeo fingiendo perder el aire mientras recibía una mirada irritada. Solo que el mayor no podía tomarlo en serio por las sonrojadas mejillas y los ojos hinchados.

- Ya te dije que no te pases de listo conmigo- soltando una ligera risa entre dientes Minho no refutó.

Por un momento Minho analizó sus posiciones, era extraño si se ponía a pensar. Si no estuviera en cama y herido probablemente nunca tendría a Jisung sentado encima suyo y además llorando, por una cuenta bancaria, claro. Lo veía frente suyo y por alguna razón se sentía bien, cómodo, el omega apenas debía pesar sus 50 kilos por que era como una plumita descansando en sus piernas, y a pesar de que lo golpeó y seguía insultándolo, el omega parecía estar cómodo también.

A su manera parecía estarlo.

- Creí que solo era el brazo- Minho apenas parpadeó cuando los dedos del menor tomaron su mentón y lo obligó a subir la cabeza.

Sintió un leve cosquilleo y el ligero ardor cuando los suaves dedos pasaron sobre la cinta en su cuello, era la herida del cuchillo que había pasado Riki por su piel. Apenas lo estaba sintiendo ahora.

- Todo mi cuerpo tiene heridas- avisó.

Jisung alejó la mano, el alfa se preguntó que pasaba por su cabeza cuando lo miró pensativo mientras dejaba caer sus manos a cada lado de su estómago.

- ¿Todo el cuerpo?- el alfa asintió cauteloso.

Y en un segundo terminó exaltándose cuando las manos del menor se deslizaron dentro de la camisa del hospital.

- Wow wow wow, quieto- Jisung enarcó una ceja cuando la mano del alfa fue a parar encima suyo impidiendo subir la prenda-. Te ofrecí mis servicios una vez, y lo rechazaste.

- Solo quiero ver tus heridas, animal- el alfa entrecerró los ojos cauteloso mientras Jisung soltaba aire impaciente-. Aparta.

Minho no refutó más, observando atento al omega subir la prenda hasta un poco abajo de su pecho. Se concentró en la expresión de Jisung, lo vio parpadear concentrando mientras sus dedos se apoyaron sobre un parche que cubría una herida en el lado izquierdo de su estómago.

Inevitablemente sintió su piel cosquillear al sentir los dedos acariciar sutilmente sobre la tela, su mirada siguió la mano del omega hasta que este se apoyó sobre su abdomen, en el sitio donde las hematomas violáceos y verdes estaban más que presentes.

Un ligero calor se acentuó en su interior cuando sintió al omega removerse nervioso encima suyo. Los dedos del menor se vieron delicados sobre su abdomen marcado y definido, Minho solía odiar retirarse la camisa por las distintas cicatrices en su piel, pero en definitiva no se sentía arrepentido en ese momento por la atención del omega puesta en él.

Y al subir la mirada casi se burló al encontrar sus mejillas rojas, había un ligero brillo avergonzado y expectante en sus ojos mientras sentía lo dedos comenzar a temblar contra su piel. Y cuando un ligero golpe dulzón chocó contra su nariz se atrevió a tomar la muñeca del omega haciéndolo exaltar y por fin llamar su atención.

Enarcó una ceja burlón cuando los ojos de Jisung cayeron sobre los suyos.

- ¿De verdad estas viendo mis heridas?. Porque pareces estar pensando en otra cosa.

Jisung apenas pudo parpadear antes de volver a apartar la mirada y clavar su dedo en una de las hematomas sacándole un siséo de dolor al alfa.

- Estoy mirando, especialmente aquí- Minho frunció el ceño ligeramente mientras recibía una sonrisa falsamente encantadora.

- Eres malo, tienes suerte que no te tire al suelo- Jisung no pareció afectado mientras volvía la mirada a su piel descubierta.

El alfa no replicó nada cuando los dedos del omega subieron más de la prenda, se concentró con los ojos de Jisung agrandándose y en el brillo curioso bailando en su mirada. El alfa no quiso aceptar que su cuerpo terminó estremeciéndose cuando el dedo cálido y suave del menor cayó en medio de su torso, y con lentitud comenzó a delinear la cicatriz que cruzaba toda su piel hasta un poco arriba de su pecho.

- Este...- él alfa apenas parpadeó, consciente de la conmoción de Jisung-. No es de ahora...¿Qué te paso aquí?.

Minho observó con ligero desdén aquella marca, era más bien concentrado en su vientre pero a medida que fue creciendo se extendió de forma un poco desagradable para él. Aún así evitó que el omega vea su rechazo ante aquella novedad y terminó encogiéndose de hombros.

- Me hice una cirugía de niño, y simplemente se extendió. No surgió de forma mala, así que...- Jisung asintió lentamente y Minho se sintió ansioso cuando sus dedos siguieron delineando la marca pálida y larga, pareció una eternidad cuando el omega finalmente dejo escapar aire con una expresión extraña.

- Es...- lo vio fruncir el ceño para luego hacer un gesto ligeramente nervioso-....Atractivo, de alguna manera.

El alfa apenas pestañeó, se quedó simplemente disfrutando en la expresión avergonzada y nerviosa del omega. Claro, se había emocionado, su corazón saltó y sintió aquel irritante cosquilleo el cual sentía que sería frecuente cada vez que veía a Jisung. Incluso tuvo el deseo de decirle que podía seguir tocando si le gustaba.

Pero claro, debía mantener la fachada seria y calmada. Y al contrario de responder simplemente se quedó observando al omega, entretenido con sus mejillas grandes y sonrojadas y como parecía desesperarse con la falta de respuesta.

Eso hasta que un carraspeó en la puerta lo distrajo.

- ¿Interrumpo?- Minho observó sin alterarse a Chris plantado en el marco de la puerta.

Bueno, mucho no interrumpía. Pero fácilmente se podía confundir con Jisung sentado en sus piernas, mientras el alfa mostraba su torso y Jisung lo tocaba justo en el centro del pecho. Probablemente estaban demostrando lo contrario.

Esta vez no hubo quien pare al omega. Jisung saltó fuera de la cama avergonzado dejando a un semi descubierto alfa. Minho apenas había bajado su camisa cuando el omega ya desapareció como rayo fuera de la habitación, incluso Chris parpadeó sin entender lo que había ocurrido.

- ¿Interrumpí, cierto?- poniendo los ojos en blanco Minho se enderezó.

- No, ¿qué ocurre?- Chris terminó de ingresar en la habitación.

Minho lo observó hasta que llego a su lado y tomó asiento en la silla. No parecía estar mejor ese día, su cabello castaño estaba hecho un desastre, ni siquiera unos dedos habían pasado por encima para disimular lo desaliñado, su piel parecía cada vez más pálida y los labios que el menor lo recordaba rosas y brillantes ahora estaban rotos y pálidos, con una ligera hinchazón roja en la comisura que Minho no tardó en captar que se trataba de una herida, de seguro de tanto mordisquear su carne.

- Lo siento si interrumpí, pero el jefe no parece estar de humor para escucharme- Minho asintió levemente.

- Dime, ¿que ocurre?.

Minho espantó cada burbuja con el nombre "Ardilla", que flotaba por su mente para prestar total atención al mayor. Quien a juzgar por su expresión, iba a hablar de un tema totalmente serio.

+

Hyunjin pasó la yema del dedo por las gotas que se deslizaban en el banco, sentado en la terraza del hospital ni siquiera un alma merodeaba en un lugar tan frío a excepción de él. Observó en silencio la gota deslizarse por su dedo ya rosado de tantas veces que había metido las manos en la fuente que se hallaba en un rincón.

Ambas extremidades se encontraban heladas y rosados como nunca. En la otra mano sostenía con tensión su arma, sentía que en cualquier momento no podría sostenerlo más y terminaría con la mano congelada.

Soltando un lento suspiro dejó que el vaho escape de sus labios mientras escuchaba la puerta detrás suyo abrirse. Unos cuantos pasos en sincronía y Minho ya se había puesto frente suyo, con algunos guardias detrás que él no prestó atención.

- Quieren hablar conmigo pero dejan que me congele esperándolos- murmuró relajado, en realidad incluso con el aire helado, Hyunjin sentía que había necesitado tanto tomar aquel respiro y no quedarse en las penumbras de una habitación de hospital.

- Lo siento, ellos tardaron en llegar.

Finalmente Hyunjin subió la mirada ante sus palabras. No hizo ni un solo gesto al ver a un lado de sus guardias a los dos hombres de Riki que lo habían ayudado, ambos estaban temblando sin disimulo, Hyunjin no supo interpretar si era del miedo o el frío. Tal vez ambas razones porque se abrazaban a sí mismos y no subían la cabeza.

- Los encontraron tratando de huir en otra camioneta, ¿qué hacemos con ellos?- Hyunjin observó a Minho por unos segundos, a diferencia de él, el mayor si cargaba con una chaqueta grande de algodón sobre su camisa de hospital.

Levantándose Hyunjin soltó un ligero bufido al dolor que se extendió por su cuerpo al estar exponiéndose a tanto frío. Frotando su nuca ajustó su arma en la otra mano y avanzó frente a Minho, se detuvo frente a sus guardias quienes hicieron una leve inclinación y dieron dos pasos hacia atrás, dejándolo a él solo frente a ambos betas quienes parecían apunto de caer de los temblores.

- Les preguntaré una sola cosa, solo una. No necesito que den rodeos, solo respondan de forma correcta y no mientan, porque me daré cuenta que lo hacen y será peor- ambos se tensaron de pies a cabeza pero asintieron frenéticamente.

Jugando con el gatillo de su arma Hyunjin ladeó la cabeza, lentamente su pulgar retiró del seguro hasta que este hizo un ligero click que hizo tiritar a los contrarios.

- Mi omega...el único omega que se hallaba en la habitación ese día- Hyunjin remojó sus labios, su garganta se seco asfixiante con el solo recuerdo que asalto en su mente al iniciar ese tema-. Yo aún estaba inconsciente y aprovecharon para torturarlo...

La palabra rodó en su lengua y sintió que quemó, por un momento no se creyó capaz de hacer la pregunta sin explotar de la rabia y matarlos a todos. Incluso su aroma comenzó a alterarse, furioso e irritado, sintió una ligera tensión en su mano que le advirtió que debía controlarse y evitar dispararse el pie sin darse cuenta.

Apretando el hierro dejó una leve caricia al gatillo para finalmente preguntar.

- Díganme si ustedes participaron o no en esa tortura- ambos no parecieron reaccionar al instante, se quedaron congelados y pareció que sus ojos se ampliaron-. Simplemente necesito saber, ¿uno de ustedes tocó o no a mi omega?.

Hyunjin analizó sus reacciones, ambos pasaron de estar congelados a ser un manojo de nervios, y sus manos temblaron a cada lado de su cuerpo hasta que se tuvieron que sostener el pantalón para poder disimular. Hyunjin se inclinó un poco y notó a ambos mirarse de reojo, y cuando uno amago en abrir la boca fue cuestión de segundos para que lo vuelva a cerrar apretando con fuerza.

Presionando la lengua contra el interior de su mejilla Hyunjin finalmente levantó su arma.

- Bien, no esperare todo el jodido día si no piensan cooperar- apuntando la frente del beta más bajo Hyunjin finalmente lo escuchó dejar de respirar mientras se encogia y cerraba los ojos con fuerza.

Un pequeño instante antes de apretar el gatillo y Hyunjin escuchó el sollozo.

- ¡E-espere!- volteando hacia el otro beta Hyunjin no bajó el arma, simplemente observó sin parpadear al beta observarlo con las lágrimas mojando sus mejillas, lo vio apretar las puños con impotencia mientras su compañero dejaba escapar aire agitado.

Ladeando la cabeza Hyunjin esperó que hable.

El beta pareció a punto de perder la consciencia mientras sollozaba y tomaba bocanadas de aire para poder hablar.

- Y-yo si...yo si toque al omega- Hyunjin lo vio juntar las manos de golpe mientras sollozaba-. L-lo golpee, ¡pero fue por órdenes...!-

La voz murió en segundos gracias a la bala incrustándose en su frente. Hyunjin apenas sintió un leve cosquilleo mientras ignoraba al otro beta chillar aterrado y cubrirse el rostro comenzando a llorar. Observó el cuerpo caer al suelo sobre una ligera capa de nieve mientras la sangre comenzaba a escapar de la herida.

Volteando hacia el otro beta soltó aire con hastío y tomó una de sus muñecas obligándolo a apartar las manos de su rostro. Apuntó el arma contra su frente observando las lágrimas caer por su rostro mientras seguía sollozando y tiritando.

- Una vez más, ¿lo tocaste o no?- el contrario negó frenéticamente, lo escuchó suplicar en susurros pero Hyunjin no prestó atención-. Dime.

- N-no...no lo hice, p-por favor...n-no quiero morir, por favor, por favor- las súplicas siguieron y Hyunjin se sintió irritado.

Deslizando el arma por su rostro apretó el cañón contra su mejilla, la respiración del beta se atascó y soltó un quejido suplicante. Hyunjin frunció el ceño acercándose más a su rostro y pareció que el más bajo estuvo en su último aliento cuando lo vio cerca.

Siguió moviendo su arma hasta que el cañón se apretó en su mentón, y con brusquedad lo apretó hasta obligarlo a subir la cabeza. Hyunjin lo observó de cerca y notó varias novedades en su rostro, las cuales se iban revelando mientras más lágrimas caían por su piel.

Inclinándose el alfa acercó su rostro al cuello descubierto del contrario, y a pesar de que se encogió y tembló sollozando porque lo deje ir, Hyunjin pudo olisquear un poco.

Relajando ligeramente su agarre Hyunjin se alejó para encontrarse con la mirada empañada del más bajo.

- Omega...eres omega- los ojos del guardia se agrandaron aterrados y Hyunjin tuvo que volver a apretar su agarre impidiendo que se aparte, ignoró sus sollozos y pataleos mientras ladeaba la cabeza-. ¿Cómo mierda un omega puede trabajar en este campo?.

El omega apenas le prestó atención, Hyunjin lo vio caer al suelo con quejidos rasposos y pareció rendirse a huir porque su brazo se volvió ligero, simplemente era su llanto la cual aún se escuchaba suplicando por que lo dejé ir en susurros. Hyunjin lo vio cabecear e intentar respirar mientras perdía el volumen de sus sollozos.

Finalmente cayó en cuenta de que el supresor que había estado consumiendo estaba pasando el efecto, su aroma comenzó a llenar la terraza, un aroma dulzón delatando como una cachetada cual era su jerarquía. Y junto a eso, Hyunjin cayó en cuenta que el omega estaba colapsando porque él lo estaba asustado y técnicamente castigando.

Así que algo exaltado dejo ir su brazo y retrocedió unos pasos viendo al omega caer al suelo y cerrar los ojos inconsciente.

Se lo quedó observando por unos segundos. Minho también avanzó unos pasos para colocarse a su lado y analizar al omega.

- Bueno...ahora ya sabemos que no mintió con su respuesta- Hyunjin asintió lentamente de acuerdo.

- Llevenlo en la organización y asegúrense de su salud y que no escape.

Uno de sus guardias fue el primero en que se movió, acercándose al omega en el suelo lo cargó entre sus brazos hasta que estuvo a la altura de Hyunjin. El alfa pudo notar maquillaje corriendose por su rostro a causa de las lágrimas.

Y antes de que el guardia se lo lleve pudo apreciar de manera casi imperceptible pequeñas pecas decorando sus mejillas y su nariz.

Finalmente lo vio salir de la azotea con el omega en brazos. Volteando hacia el beta en el suelo observó a los dos guardias restantes comenzar a limpiar la sangre con las prenda del ya fallecido. Apenas le dio un repaso y reconoció al beta que le había entregado la llave desde un principio.

Traicionó a su jefe para vivir y estuvo a punto de dejar que su compañero muera para no decir la verdad, vaya.

Y él que lo agradeció matándolo sin tortura.

- ¿Eso es todo?- murmuró volteando hacia Minho, quien al igual que él se hallaba con la atención perdida en el cuerpo.

No contestó de inmediato, lo vio apretar los labios y Hyunjin ya supo que definitivamente no era todo. Minho deslizó las manos dentro de su pantalón y le devolvió la mirada, el menor rápidamente pudo captar un deje nervioso en sus orbes, brillaron expectantes, no parecía saber como decir lo que rondaba su cabeza.

Y cuando sus labios se abrieron y cerraron sin modular nada el jefe se sintió ansioso.

- Minho, solo dilo- el mayor hizo un ligero gesto exhausto y luego le dio la espalda.

- Te mostraré.

Hyunjin tuvo que resignarse a seguirlo, después de todo ya no tenía las molestas sondas porque él exigió quitárselas. Así que podía ir de un lado a otro, débil pero podía.

Así que en silencio, siguió a su amigo curioso por tanta tensión abrazando el ambiente.

+

Jeongin supo que definitivamente ese hospital era una de las tantas bajo al liderazgo de khangpae. Porque de otra forma, las enfermeras no le hubieran traído más de cinco almohadas, tres frazadas, almuerzo de restaurante y dos guardias resguardando su habitación.

Sumando a que nadie dijo ni pío cuando un disparo se escuchó por todo el edificio y minutos después uno de los hombres (que Jeongin no tenía que preguntar para saber que era de Khangpae) cruzó frente a su puerta con una persona en brazos como si nada. Y dos minutos más otro guardia lo hizo pero con una camilla donde un cuerpo se hallaba cubierto con una larga manta.

Jeongin no se alteró ni un poco, al parecer ya estaba comenzando a comprender que en el mundo de su alfa; los disparos y la muerte era como la comida del día.

Además de eso que no sentía ninguna alteración en las emociones de Hyunjin y como cereza al pastel el sedante parecía aún recorrer sus venas dejándole apenas mantener los ojos abiertos. Simplemente observaba en silencio a Jisung deborar la comida restante que él no había podido terminar.

- ¿Donde está Byungchan?- fue un milagro que el mayor lo haya entendido ya que su voz fue apenas un murmullo cansado.

Jisung infló las mejillas las cuales gracias a la comida almacenada se veían más grandes.

- Ese poste irritante no quiso venir porque creyó que Juan estaba muriendo y se rehúsa a verlo en mal estado. Si supiera que ya anda caminando por el hospital matando gente- inevitablemente Jeongin sonrió pequeño y débil.

Jisung dejó a un lado su bandeja para soltar un suspiro exhausto, sus brazos se apoyaron en la camilla y luego descanso su mentón encima en un posición donde prestó total atención a un cansado Jeongin. Un pequeño puchero se hizo presente en sus labios.

- ¿A ti porque te sedaron?- los ojos del mayor brillaron curiosos-. ¿También saltaste sobre el jefe y le gritaste como yo?.

Jeongin ladeó la cabeza confundido.

- ¿Le gritó a Hyunjin hyung?- Jisung soltó una pequeña risa.

- No, Innie. Le grité a Minho, si le hubiera gritado al jefe probablemente ya tendría la boca cocida- Jeongin asintió entendiendo-. De todos modos, ¿sí le gritaste al jefe?.

- No fue así- negó ligeramente divertido para luego mirar sus manos sobre su regazo-. C-creo que fue porque comencé a armar un escándalo y llorar, se me abrió la herida así que supongo que por eso debieron sedarme-. Jisung hizo una mueca apenada.

- Ya veo...¿te sientes mejor ahora?- segundos después Jisung se arrepintió de su pregunta, ¿cómo le iba a preguntar eso si su mejor amigo había muerto?, era claro que Jeongin no iba a responder con todos los ánimos.

Pero el menor no le reclamó nada ni lo miró hastiado, simplemente sonrió ligero y apuntó la punta de la camilla.

- No siento mis pies aún- fue lo único que respondió, y Jisung sintió una inevitable ternura y pena mientras que el menor parecía intentar mover los dedos del pie.

Así que no se contuvo, y con algo de cautela levantó el brazo y lo dejó caer sobre el cabello lacio del omega, peinando levemente para luego darle tiernas palmadas, Jisung se enterneció aún más cuando Jeongin simplemente se encogio avergonzado y una sonrisa tímida bailo en sus labios sin subir la mirada.

Y lo que lo dejaba más vulnerable y bonito eran las cintas blancas que decoraban su piel a causa de las heridas.

- Probablemente el efecto pase rápido, así que no te preocupes- Jeongin no contestó pero terminó asintiendo convencido.

- ¿Sabe cuanto tiempo lleva hyung fuera de la cama?.

- Probablemente ya una hora- Jeongin formó una mueca inconforme.

- ¿Y no está abrigado?- el mayor se encogió de hombros.

- Parece no afectarle, de todas formas Minho intentó lograr que se abrigue pero él no parece escuchar- lentamente Jeongin comenzó a asentir.

Claro que a él si lo va a escuchar, o sería la primera vez que va a estirar de la oreja a alguien.

- ¿Puede pasarme ese abrigo que esta allí?- Jisung volteó hacia el sofá donde menor señalaba, hallando allí una sudadera negro.

Le hizo el favor sin refutar y lo dejó descansar en su regazo, observando entretenido como Jeongin comenzaba a jugar con las mangas en un acto distraído.

Jisung tuvo un ligero pensamiento curioso, y mientras veía a su menor se preguntó si debía preguntar. Tampoco deseaba regresar recuerdos al menor que él no deseaba tener. Pero estaba tan ansioso por saber.

- Ahm, por si acaso tú...¿no te sorprendes por este instante?- sí, no fue la pregunta más clara, y lo supo cuanto Jeongin giro a verlo y se mostró confundido-. Bien, como decirlo...junto a Byungchan y Chris fuimos los que los encontramos, se veían fatales, y cuando Chris hyung los traslado al auto dijo que te encontró casi...muerto- Jeongin apenas parpadeó, y al mayor le recorrió un escalofrío-. Y el jefe ya había llegado al lugar con una herida la cual siguió abierta y sangrando por horas, e incluso así él estuvo consciente hasta el último momento.

Jisung carraspeó y se acomodó en su asiento.

- ¿No te sorprende...que no estén muertos?- Jisung hizo una ligera mueca cuando Jeongin pareció aún no entender-. Quiero decir...ustedes deberían estar muertos si nos guiamos en la perspectiva real...e incluso si no es muertos, aún inconscientes o en cama, pero tú...con tantas puñaladas y golpes pareces más sano de lo que esperábamos.

Jeongin finalmente pareció comprender, su mirada se vio desorientada por un momento e incluso recién caía en cuenta de la realidad. Volteó a ver la sudadera en manos y su cabeza se ladeó pensativo. Jisung lo observó en todo momento, lo vio pensar y perderse en sus pensamientos, y pareció escabar tanto en su mente porque cuando reaccionó un ligero jadeo sorprendido escapó de sus labios.

- ¿Qué?, ¿en qué tanto piensas?, ¡me pones ansioso!- Jisung chilló mientras recibía una mirada conmovida y ligeramente sorprendida.

- Y-yo...no sé muy bien la respuesta a su duda, hyung. Pero aunque no me comprenda mucho, siento que tal vez hyung y yo estamos vivos porque aun hay pedazos rotos entre nosotros- Jisung apenas parpadeó mientras veía al menor descender la mirada con timidez-. Probablemente la vida está siendo menos mierda y se ha dado cuenta que anhelamos restaurarnos completamente antes de partir...probablemente por eso estamos vivos.

Un ligero silencio se extendió, donde Jeongin jugó con sus manos y mordisqueó ansioso su labio inferior cuando no recibió respuesta. Y cuando subió la mirada se encontró con los ojos brillantes y sorprendidos del mayor.

- ¿Q-qué ocurre?- Jeongin parpadeó cuando Jisung lo hizo.

- ¿Acabas de decir mierda?- Jeongin volvió a parpadear, y desviando la mirada hizo memoria.

En segundos sus ojos se ampliaron.

- Creo que lo hice- Jisung comenzó a sonreír observando las orejas del menor colocarse rojas de la vergüenza y Jeongin lo notó-. P-pero no fue intencional, no estaba pensando...

- Acabas de decirle mierda a la vida- Jisung comenzó a reír aplaudiendo divertido mientras la expresión de Jeongin cambiaba a una de total lamento y vergüenza-. Oh Jeonginnie, no es malo decir de vez en cuando que la vida es una mierda, siempre y cuando recuerdes que en esa mierda está lo bonito de las personas que te rodean.

Jeongin lo observó unos segundos y lentamente comenzó a sonreír, por un momento sus ojos parecieron brillar luego de tanto tiempo tenerlos opacos.

- Yo insulte, y hyung acaba de decir palabras bonitas por primera vez desde que lo conocí- Jisung hizo una mueca asqueada cayendo en cuenta de sus palabras, y el menor soltó una ligera risa algo débil-. Tal vez tengo razón y la vida realmente comenzará dando cosas buenas desde ahora, ¿lo cree hyung?.

- Ha de ser, no puede haber otra razón por la que esas asquerosas palabras hayan escapado de mi boca- Jeongin y Jisung asintieron convencidos-. Por un 2022 donde la vida no sea tan mierda, ¿estamos de acuerdo?.

- Estamos de acuerdo, hyung.

Jisung asintió conforme para luego cambiar de tema un poco. Se apoyó en la cama y se inclinó cerca del menor con confidencialidad.

- Oye y tú sabes...¿si el jefe y Minho hacen ejercicio?- Jeongin ladeó la cabeza confundido por la pregunta, pero pronto supo que era algo más halla de la curiosidad cuando vio el rostro de Jisung calentarse-. E-es que le toque el torso a Minho y estaba más duro que pan del mes pasado.

Jeongin comenzó a reír, no pudo evitarlo, principalmente porque Jisung parecía decirlo tímido pero sus palabras eran lo contrario. Sosteniéndose el vientre soltó pequeños quejidos por el dolor de sus heridas mientras intentaba contener las risas.

- Oh hyung...usted es tan tonto- Jisung pareció entre indignado y avergonzado mientras volvía a su postura inicial esperando por la respuesta.

Suspirando Jeongin finalmente negó.

- Estoy seguro que Hyunjin hyung no hace ejercicios, probablemente Minho hyung sí, y si ese no es el caso debe estar bien trabajado porque siempre anda ejercitando su cuerpo con peleas y corridas- Jisung hizo una mueca pensativa mientras asentía lentamente comprendiendo.

- Como sea el caso...debe hacer más de esa rutina- asintió convencido mientras Jeongin lo observaba divertido-. En fin, iré a buscarlo ahora, ya va mucho tiempo de pie...y ya sabes, si colapsa y muere será una pena porque aun no lo he visto hacer su testamento dejando sus riquezas a mi nombre.

Jisung bajó de un salto de su silla y se despidió saliendo de la habitación con pasos relajados. Jeongin no dejó de soltar pequeñas risas sin poder contenerse, de alguna forma Jisung siempre lograba generar el lado divertido en todo lo malo que ocurría en su alrededor.

Jeongin tuvo tiempo de descansar un rato más su cuerpo y esperar que sus extremidades respondan antes de comenzar a cuestionarse la presencia de Hyunjin fuera de la habitación. Podía sentir sus emociones y se encontraban tan tranquilas que eso le generó más ansias, incluso creía que ya no lo sentía porque Hyunjin parecía neutro.

Pero aun así no aparecía en su habitación.

¿Y si se sentía culpable por su reacción el día anterior?, ¿y si no deseaba verlo por que creía que no lo aceptaría?. Jeongin había visto muchas veces aquella reacción de temor en Hyunjin, siempre dudando cada vez que ocurría algo malo y él esperaba que Jeongin lo rechace o aleje. El alfa nunca comprendía que cada vez que la tormenta pasaba, el omega lo necesitaba a su lado para tener sol.

Ni siquiera de eso Hyunjin aun estaba consciente.

Había mucho...mucho que sanar y restaurar.

A Jeongin ya se le había ocurrido la magnífica idea de levantarse de la cama e ir a buscar al mayor por su propia cuenta. Sabía que no sería una buena idea cuando él de los dos era el que más débil y cansado estaba. Pero se estaba por volver loco y si no veía a Hyunjin iba a comenzar a llorar de nuevo y él ya no quería ser sedado, lloraría peor una vez despierte.

Pero para su suerte, y total alivio, Hyunjin apareció en su puerta tan solo un minuto después de que la idea rondo por su cabeza.

Bueno, tal vez Jeongin hubiera llorado si no lo veía, pero se olvidó mencionar que también iba a llorar cuando lo veía.

Un puchero tembloroso se genero en su rostro mientras sus ojos se empañaban. Hyunjin tan solo lo miró, ladeando la cabeza sutilmente y deslizando las manos dentro de los bolsillos de su pantalón, y cuando Jeongin soltó un lloriqueo triste se permitió ingresar al cuarto cerrando la puerta detrás de él.

Apenas intento tocarlo Jeongin levantó la palma de su mano poniéndole un alto. Hyunjin pareció sorprendido e incluso retrocedió un paso observando al menor soltar un pequeño hipido y limpiar su rostro.

Y segundos después levantó una sudadera frente suyo arrojándolo sobre su cabeza desorientando a Hyunjin.

- H-hyung no va a tocarme si no se coloca un abrigo- Hyunjin estiró la prenda de su cabeza y cuando se encontró con la mirada del menor su corazón se apretujó al verlo cruzado de brazos reacio a que lo toque.

Y bueno, como podría desobedecer cuando literalmente iba a llorar una eternidad si no tocaba a su ángel al menos cinco veces a la hora, claramente.

A regañadientes se colocó la prenda ante la atenta mirada del menor, estirando la tela hasta el final extendió los brazos una vez finalizado.

- ¿Contento?- Jeongin asintió frenéticamente y moviéndose mas lejos palmó el lugar vacío a su lado.

Hyunjin echo un último vistazo a la puerta asegurándose que ninguna enfermera venía para finalmente lanzarse junto al menor y atraerlo sobre su pecho hasta casi estrujarlo. Claro que se aseguró de no lastimarlo de ningún modo, y en cuestión de segundos ambos estaban uno frente al otro apenas separados por la distancia de sus cabezas, decidiendo por mirarse en silencio, casi sin parpadear.

Jeongin seguía llorando, solo que en silencio, las lágrimas bajaban sin aviso ni interrupciones y eran eliminadas por el pulgar de Hyunjin, acariciando su mejilla y atajándolo contra su pecho con el otro brazo. El omega sintió la sensación cálida en su pecho, caliente y acogedor, por un momento olvidó sus posiciones, el lugar o la situación, probablemente solo sería por un momento.

Pero ese momento, simplemente en ese momento quería disfrutar del silencio y la compañía, del aroma encantador de su alfa y las caricias en su piel, de sus respiraciones chocando y los brazos sosteniéndolo con firmeza. Disfrutar de que estaban vivos, que como dijo Jisung, ver que en esa mierda de vida estaba lo bonito que lo rodeaba.

Y ese en definitiva era Hyunjin. Solo él.

Jeongin también se atrevió a tocar el rostro del mayor, sus dedos recorrieron toda la piel cálida y suave, desde su mentón hasta su frente, su dedo índice pasó sobre las oscuras ojeras y disfruto ver a Hyunjin cerrar los ojos y relajarse. Con timidez delineó sus labios, rojos y ligeramente rotos, pero se veían tan apetecibles y bonitos como siempre, y es por eso que no pudo evitar pasar su dedo índice por su labio inferior, carnoso y suave.

Eso hasta que la lengua de Hyunjin salió traviesa y lamió su dedo robándole un quejido al omega.

- Iugh.

Hyunjin sonrió ligeramente por el tono infantil y tierno, abriendo de nuevo sus ojos encontró los del omega cristalizados, lo vio sorber la nariz y volvió a sentir su dedo índice algo frío y suave delinear su rostro en silencio, no parecía tener ganas de hablar, y el alfa comprendió, simplemente le ofreció su compañía y estuvo en silencio hasta que este se anime a hablar realmente.

- Hyung...- el alfa lo miró y simplemente escuchó-. E-estoy triste...

- Lo sé- Hyunjin vio al omega fruncir ligeramente el ceño conteniendo su llanto.

- Y usted también...

- Lo sé, ángel- Jeongin asintió lentamente.

- Y estoy cansado de llorar, alfa.

- Y yo de verte hacerlo.

Una pequeña lagrima resbaló por el rostro del omega y su labio inferior tembló, de nuevo contuvo el llanto para no volver a hacer que los separen, simplemente hizo un ligero sonido roto y dolido, donde recibió un ligera tensión departe del alfa y lo vio pasar saliva.

- ¿Q-qué podemos hacer?- Hyunjin lo observó unos segundos, y no respondió. Notó sus labios apretarse y su corazón se apretó en su pecho, dolió de manera asfixiante, y pareció que Hyunjin soltó todo el aire contenido antes de que él omega reciba una mirada triste y resignada.

- No lo sé...lo siento, ángel...pero no lo sé- Jeongin se lo esperó.

Y no culpaba a Hyunjin, él tampoco sabía, él ni siquiera estaba seguro de poder sobre llevar algo cuando salga de ese hospital, o simplemente enfrentar una realidad que estaba de lejos ser deseada.

Ninguno dijo nada más, Jeongin no pudo retener mucho más el nudo en su garganta y lloró, de la forma más silenciosa y dolorosa posible, se recargo en el pecho de Hyunjin y apretó los ojos, ahogando sus sollozos en su garganta y permitiendo que las lágrimas fluyan hasta la última gota.

Y Hyunjin no se interpuso, en ningún momento. Solo lo sostuvo hasta que finalmente su cuerpo ya no aguanto y cayó rendido en el cansancio.

En la madrugada, de nuevo sintió su ausencia, pero no se permitió volver a buscarlo.

+

Un mes.

Solo un mes, pero Jeongin podía jurar que fue hace tan solo unas horas. Se sintió así. Cuando una semana después salió del hospital no espero que un mes pase tan rápido, pero a la vez, que se haya sentido tan desgarrador.

Nada había mejorado.

Pero tampoco empeoró...fue neutro. No hubo ni un solo día feliz, pero Jeongin no estuvo solo, no sabría decir si esa fue la peor parte o no. Porque a pesar que Hyunjin, Jisung y Byungchan estuvieron con él, por alguna razón, siguió sintiéndose solo.

O mejor dicho, sintió que había aún un hueco en su pecho. Aquella horrible sensación de que algo le faltaba, y se sentía aún más asfixiante al pensar en que tampoco volvería a llenarse, aquel hueco parecía querer estar vacío por siempre.

Tal vez no pudo ir peor, pero había excepciones cuando Jeongin recordaba lo mucho que había vomitado cada vez que alguien intentaba hablarle de Seungmin, o cuando despertaba con pesadillas de Hyunjin o pesadillas donde Seungmin le gritaba que era su culpa, o simplemente no dormía recordando a su mejor amigo siendo atropellado y luego rodeado de sangre en el suelo.

Fue así hasta ese día, donde esa mañana volvió a despertar gritando y lo único que lograba recordar fue que Hyunjin pareció llorar con él también, mientras lo consolaba y volvía a repetirle que estaba ahí, que ya había pasado.

Que todo iba a mejorar...

Él no le creía, pero fingía hacerlo, para no romperse, para sostenerse de una falsa esperanza. Y ese día Hyunjin pareció darse cuenta que él tampoco se creía a sí mismo, ya no.

Así que Hyunjin le dijo que era hora de hacer algo al respecto. Y Jeongin se aterró.

Tanto que ahora estaba hecho un ovillo dentro de unas gruesas cobijas debajo de la cama de una habitación de huéspedes. Cerrando los ojos con fuerza mientras sentía la desesperación de Hyunjin por no encontrarlo.

Sí, estaba siendo cruel, pero él no estaba listo aún, no quería aceptar nada, no deseaba escuchar nada de lo que fuera la realidad. Incluso si estaba ocasionando más problemas, esta vez no podía pensar en otra cosa más que en lo quebrado que estaba su mente.

Pero claro, no podía esconderse por siempre.

Y es por eso que no se sorprendió al ver los zapatos plantarse frente suyo, se le fue dificultoso ver a través de la pequeña rejilla de espacio entre sus ojos y la cobija y sus ojos empañados. Pero en segundos confirmo que se trataba de Hyunjin.

No se movió ni un milímetro, escuchó a su alfa soltar aire exhausto y su corazón se oprimío asustado a lo que diría.

- ¿Saldrás solo o tendré que sacarte yo?- seria horrible si Hyunjin lo sacaba.

Por un momento incluso sintió miedo, pero no contestó, se hundió dentro de las cobijas y negó frenéticamente incluso si el mayor no lo veía, se rehusó y lloriqueó casi en silencio evitando un grito de sollozos por lo vulnerable que se sentía.

Incluso si lo evitó, fue imposible no reaccionar cuando sintió unas manos envolver sus tobillos y tirar de él. Su grito lo habrá escuchado toda la mansión, pero a Hyunjin no pudo importarle menos, jalando de él a pesar de sus sollozos y sus pataleos. Jeongin hasta se vio obligado a sostenerse de la pata trasera de la cama pero aún así estaba tan débil y su herida comenzó a doler que tuvo que dejar de luchar y aceptar su destino.

No dejó de llorar, se cubrió el rostro cuando Hyunjin hizo voltear su cuerpo y con cuidado retiro las telas que lo envolvían para dejarlo expuesto. Sus sollozos fueron lo único que se escuchaba en la habitación, fuerte y desastroso, Jeongin no podía dejar de hipar y lloriquear incluso cuando sintió la mano del alfa acariciar la venda de su herida en su vientre.

- Ángel...- escuchó el llamado, pero fue como si ahora su peor enemigo estuviera intentando hablarle.

Hyunjin soltó un suspiro preocupado, su omega siguió llorando, y él sentía a su lobo golpearle la cabeza con un bate por no estar haciendo nada, y su corazón latía de forma tan dolorosa que se preguntaba como no estaba llorando él también.

Sin más opciones, separó las piernas del menor y se hizo paso en medio, inclinándose hasta apoyarse en sus codos de un jalón se aferró a las muñecas del menor y lo obligó a apartar sus manos. Casi se quedó sin palabras cuando se encontró con su rostro lleno de lágrimas y la piel roja de las emociones, su garganta se secó al encontrarse con los ojitos suplicantes y lastimados de Jeongin.

- Por favor, ángel...déjame ayudarte, te dije que no me gusta verte llorar, ¿cierto?- Jeongin tembló bajo suyo, y su puchero se acentuó incluso más triste.

- N-no puedo...no quiero...- fue lo único que dijo antes de volver a llorar, a retorcerse suplicando bajito por que lo deje ir.

Hyunjin claramente no obedeció, se negaba a hacerlo de nuevo. Así que inclinándose pegó sus labios en el oído del menor, sintiendo el calor que emanaba y su aroma tan triste y amargo acariciarle la nariz como advertencia.

- Solo déjame cargarte, no tienes porque escuchar, no tienes que ir a donde no quieras, solo deja que yo te cargue y te ayude, ¿puedes hacer eso ahora?, ¿ese gran paso, ángel?- Hyunjin notó como primera señal que el llanto del omega bajó de volumen, sus hipidos no faltaron pero pareció comenzar a pensar sus palabras.

- S-solo...solo estaremos usted y yo, ¿c-cierto?- Hyunjin cerró los ojos preocupado y frotó con cuidado su pulgar por el dorso de la mano contraria.

- Nosotros, Minho y Chris, ¿está bien?- Hyunjin casi lloriqueó cuando Jeongin comenzó a hacerlo de nuevo-. Solo ellos, ángel...solo ellos...

Jeongin tuvo que hacer fuerza voluntad para asentir lentamente, sin deseos de seguir peleando. Solo disfrutó el suspiro aliviado de Hyunjin y sus brazos envolverlo con cuidado y suavidad, aferrándose al mayor cuando finalmente lo levantó y cargó como hacia dicho. Incluso levantó con él las cobijas y lo dejó envolver su cuerpo con las mismas hasta sentirse cálido y protegido.

Y Jeongin cerró los ojos, no quiso saber nada, ni mucho menos ver. Así que solo se dejó transportar, hundiéndose en el cuello del mayor y envolviéndose con su aroma para sentirse más relajado, para evitar otro llanto desgarrador y cansado.

Para cuando fue consciente sintió que había pasado todo en un parpadeó. Sólo sabía que Hyunjin ahora estaba sentado en un sofá y él se encontraba encima suyo aún acurrucado y con los ojos cerrados, sintió los dedos del alfa acariciar su cadera lento y suave hasta generarle agradables cosquilleos, y con la otra mano frotaba su cabeza con pequeños mimos.

Esos instantes eran los que Jeongin amaba tanto y lo disfrutaba en silencio.

- Ya estamos aquí con Minho y Chris, ángel...- Jeongin solo respondió apretando más su agarre en el cuello del mayor-. ¿Quieres saludarlos?.

Hyunjin recibió una mirada triste departe de Chris cuando Jeongin se quejó asustado y negó frenéticamente negándose a alejarse. Ninguno dijo nada, lo aceptaron y comprendieron mientras Hyunjin se aseguraba de que Jeongin no comience a llorar y le repetía que estaba bien.

Estaba tan frágil que Hyunjin estaba seguro que si le alzaba la voz Jeongin se rompería en llanto por máximo una semana hasta que Hyunjin le pida perdón de rodillas y besando el suelo, así o peor.

Chris carraspeó sutilmente, lo suficiente suave para no asustar al omega y se acercó un pequeño paso para que así su voz pueda ser audible.

- Jeonginnie, ¿no te sientes muy a gusto ahora, cierto?- eso era obvio, pero todos estaban conscientes de que debían dar pequeños pasos para generar confianza.

No recibió respuesta, pero el omega tampoco se quejó o lloró, simplemente silencio.

- Ya veo...entendemos que no estés listo para enfrentar muchas cosas, nosotros tampoco lo estamos, pero nos sentimos capaces de enfrentar algunas cosas más que tú para ayudarte...¿Jeonginnie puede dejar que le ayudemos?.

Ni Minho quien era un repelente de la ternura pudo negarse ante la voz suave y dulce de Chris. Y fue casi como un estallido de fuego artificiales cuando Jeongin se movió, simplemente giro la cabeza y lo apoyó en el hombro de Hyunjin pero era una señal, les dio a entender que los escuchaba y eso casi hizo chillar a Chris quien carraspeó para controlarse.

- Gracias, omega. Eres muy fuerte- Jeongin sintió las lágrimas bajar por su piel pero se contuvo para no hacer ruido y dejar que sigan hablando, ellos se estaban esforzando, él debía hacerlo también-. ¿No deseas descansar un poco de que tu corazón se siga estrujado?.

Caray, eso le interesa.

Soltó un ligero quejido, quiso decir que si pero su voz no iba a cooperar aún, el nudo seguía ahí, impidiéndole a su voz salir. Así que simplemente gimoteó bajo y pareció que eso fue respuesta suficiente porque Hyunjin soltó aire aliviado a su lado, la tensión se alejó de su cuerpo e incluso su espalda recibió más mimos y caricias.

- Excelente, ángel, lo haces genial- Jeongin no creía que estaba ayudando mucho, pero si Hyunjin decía que lo hacía genial, entonces debía ser así.

Casi perdió el aliento cuando Hyunjin se puso de pie sin avisar, sus uñas rasguñaron la ropa del alfa de la rapidez en que se aferró a él, y lloriqueó con fuerza mientras volvía a esconderse en el cuello de Hyunjin. Lo sintió tensarse levemente pero no lo apartó.

- Esta bien, ángel, esta bien. Solo iremos a descansar, ¿bien?, solo eso...- Jeongin asintió contra su piel y cerró los ojos sin refutar nada, mientras Hyunjin no lo suelte él podía ir a donde sea.

Lo sintió moverse una vez se aseguró de que estaba seguro. Caminó por rumbos que Jeongin no vio ni estuvo enterado de nada, simplemente espero hasta el momento en donde Hyunjin y él lleguen a una cama y se acomoden juntos para él recibir mimos y descansar luego de un día completo de pesadilla.

Supo que habían acabado de subir unas escaleras para cuando sintió su corazón acelerarse de las ansias, y por un momento incluso creyó que el corazón de Hyunjin estaba igual o peor.

Caminó tan solo unos pasos más antes de detenerse en seco y luego escuchar una puerta abrirse justo detrás suyo. No dijo nada, Hyunjin ingresó y luego la puerta se cerró detrás, Jeongin se tensó cuando la cobija cayó lejos de su cuerpo pero no dijo nada.

Al final, el alfa avanzó unos pasos más y luego subió los brazos hasta sostenerlo debajo de los suyos, y Jeongin abrió los ojos asustado cuando comprendió que quería bajarlo.

Nuevamente comenzó a lloriquear mientras apretaba con fuerza las piernas alrededor de la cadera del alfa, llorando y comenzando a suplicar bajito para que no lo baje, y juró que iba a gritar cuando Hyunjin no volvió a alzarlo y en cambio se tensó sin reacción.

- Solo un momento, ángel, solo un momento. Sabes que no te dejaré solo, no me alejaré ni un paso, solo quiero que bajes y me hablemos, ¿sí?, estaremos cerca siempre- Jeongin lloriqueó aún con miedo y fue respondido con una presión en su espalda-. Solo un momento, solo es un rato, por favor.

Y Jeongin bajó, casi pataleando y arrancando el cuello del alfa pero lo hizo. Sus piernas temblaron ligeramente exhaustos, pero se mantuvo de pie, y con rapidez su mano se aferró a la de Hyunjin y su rostro se apoyó en su pecho buscando refugio, contento cuando el alfa le ofreció un pequeña caricia a su mentón hasta su mejilla.

- Incluso si te enfadas, no nos separaremos, ángel- Jeongin parpadeó ligeramente cansado, y algo confundido se alejó lo suficiente para subir la cabeza y observar al mayor, este tan solo lo miró y sonrió ligeramente pero cansado-. Aunque quisieras no podremos separarnos.

- ¿Q-qué esta diciendo?- Hyunjin borró su sonrisa lentamente pero siguió mirándolo relajado, neutro, su mano volvió a pasar por su rostro y sintió el pulgar repartir caricias en su mejilla.

- Él no está empeorando, pero tampoco hay mejora, solo está así...- Jeongin tembló asustado, sin entender ni una palabra, sin comprender la sonrisa triste-. En coma, ángel.

Se colocó tenso cuando las manos de Hyunjin cayeron sobre su hombro y lo apartaron. Amplió los ojos aterrado pero la mirada de Hyunjin por alguna razón le transmitió tranquilidad, obediencia. Tuvo que luchar contra sus deseos de echarse a llorar y obedeció cuando las manos del alfa lo hicieron voltear.

Se encontró con una cama, era una habitación normal y espaciosa. Con sábanas blancas, puertas que de seguro conducían al baño y el armario, mesitas de luz, máquinas extrañas con un pitido más extraño, cables y números por la pantalla.

Solo eso.

Ah, y Seungmin durmiendo en la cama.

Seungmin durmiendo en la cama.

Seungmin durmiendo en la cama...

¿Seungmin durmiendo en la cama?.

¡¿SEUNGMIN DURMIENDO EN LA CAMA?!.

Jeongin parpadeó, sintió tantas sensaciones en su cuerpo que no sabría si alguna vez podría explicarlo a otra persona. Sintió...la respiración atascarse en su garganta, su cuerpo helarse hasta la punta del dedo, sus oídos cerrarse obstruyendo los sonidos, el corazón bombardeando contra su oído terriblemente rápido, con fuerza, doloroso y shockeante.

Sintió las inmensas ganas de gritar, llorar, chillar, volver a llorar, golpearse tal vez. Abrazar a Kim Seungmin, y tal vez seguir llorando.

Lo dijo, fueron tantas emociones que un omega como él no pudo soportar.

E incluso si todo se volvió negro y cayó en la inconsciencia. Incluso si se desmayó en el momento más inoportuno.

Estaba seguro de algo. Había una mínima y pequeña y a la vez enorme probabilidad...

De que Kim Seungmin esté vivo, su mejor amigo.

Ahora voy a esperar que retiren las trescientas mil amenazas de muerte, los comentarios de que iban a matarme. Tal vez necesitaría un pequeño perdón y si no es mucho pedir que me den el país que me prometieron y háganme presidenta también 😋

No voy a negar que esperaba tanto su reacción a la "muerte" de Seungmin como a la reacción cuando vean que puede estar vivo. La re viví estas semanas AKDKF.

Bueno, los amo, besos en las nalgas si me permiten, tomen awa, perdónenme por actualizar muy tarde, felix navidad, meri crismas y gusbai xd💗