Jeongin se dejó caer en la silla de aquella cafetería. Se aferró a los bolsillos de su gran abrigo y echo una que otra mirada a los guardias que lo protegían desde las calles y sentados en otras mesas.

Era un día especialmente nublado, pronto se despedirán del otoño y dejarían entrar al helado invierno. Había una neblina en las calles de Seúl que indicaba que probablemente pronto comenzaría la llovizna.

A los segundos otra persona ocupo lugar frente suyo mientras dejaba su bolso a un lado en el suelo. En realidad ya estaba consciente de él desde que entró al local.

Jisung le ofreció una sonrisa la cual fue devuelta al instante.

- Hola, ha pasado un tiempo- Jeongin asintió.

- Casi tres semanas- el mayor asintió frente suyo, llevaba ropa bien abrigada y el cabello teñido de rosado cayendo en rizos por su frente.

Ambos se quedaron en un largo silencio, levemente incómodo y expectante. Jeongin no sabía que había pasado del mayor, a decir verdad, con los nuevos acontecimientos apenas habría notado que Jisung ya no estaba viviendo con su hyung Minho si no hubiera recibido un mensaje de su parte pidiendo reunirse en secreto.

No tan secreto ya que Hyunjin estaba consciente de ese encuentro, precaución más que cualquier cosa.

- Hyung puede...comenzar diciendo que ocurrió- Jeongin observó al mayor morder su labio inferior con nervios y sus manos entrelazadas sobre la mesa se movieron inquietas.

Y segundos después se cubrió el rostro con un lloriqueo avergonzado, Jeongin lo escuchó resoplar contra sus manos y suspirar.

- Yo...le robe a Minho- el menor parpadeó.

- ¿Qué cosa?, ¿dinero?- Jisung bajó los brazos y asintió con una expresión lamentable-. ¿Y huyó?- otro asentimiento.

Jeongin apretó los labios sin saber que decir, no podía mentir, no podía decirle a Jisung que lo que hizo no fue tan grave y probablemente sospechosamente misterioso, no quería insinuar nada del mayor pero que haya aguantado a un alfa que se supone no le agradaba dejaba mucho a la imaginación.

- Eso no es un comportamiento lindo, hyung- Jisung movió el dedo índice sobre la mesa, se veía realmente avergonzado y apenado que por un momento Jeongin se arrepintió de sus palabras-. ¿Usted está arrepentido?, ¿es por eso que me habló, para ayudarlo a encontrarse con hyung?.

- ¡No!- Jisung hasta pareció horrorizado-. Prefiero matarme yo primero a dejar que la furia de ese animal recaiga sobre mí al volver a verme.

- Hyung...no creo que sea de esa forma...- trato de aligerar la exageración-. De todas formas, ¿entonces para que pidió verme?.

Jisung suspiró profundamente antes de tomar su mochila del suelo y colocarlo sobre sus piernas, abriendo el bolso no le tomó nada sacar del interior de este una bolsa de plástico transparente, y dentro de este una gran cantidad de dinero. Jeongin observó con algo de incomodidad al mayor dejar caer el plástico frente suyo.

- Y-yo...no pude gastarlo, y tampoco pude regresar a devolverlo- Jisung bajo aún más la mirada-. Era la primera vez que estaba tan avergonzado.

- Es...¿el dinero que tomó?, ¿el mismo?.

- Sí- Jisung volvió a la acción de mover el dedo sobre la mesa mientras se removía nervioso-. Por más charlatán que sea, la vergüenza de haberme comportado de forma tan cruel no me permite volver a disculparme.

- Sin embargo...los dos sabemos que es lo que debe hacer- el mayor soltó un gimoteo casi de sufrimiento, se le veía en serio lamentable, le costaba mantener su mirada y se removía nervioso.

En serio estaba avergonzado.

- ¡No puedo!...y-yo no podré mirar a ese idiota sin hacerme pipí- Jisung abrazo su bolso contra su pecho-. La razón por la que vine a Seúl fue para conseguir dinero y mandárselo a mi padre. No podía irme sin tener realmente un sustento confiable y suficiente, por más que lo que ganaba ofreciendo mi cuerpo era suficiente, no tardaba en acabarse al mes y medio o máximo dos.

Jisung se removió aún más incómodo en su silla, cuando sus mejillas comenzaron a enrojecer Jeongin ya fue consciente que lo que fuera a decirle el mayor no se le era nada fácil ni cómodo.

- Y-yo nunca he...- Jeongin se inclinó hacia la mesa cuando Jisung miró a los lados cauteloso y se acercó más a él-. Nunca he dado mi cuerpo estando en mi ciclo de calor- susurró, y Jeongin no pudo evitar sorprenderse, observando de cerca la mirada expectante y avergonzada del mayor-. Y nunca creí que los alfas pagarían tanto por un servicio así.

Jeongin cayó en cuenta, él en serio...se había arriesgado a todo por dinero.

- H-hyung...-

- Lo sé lo sé, soy asqueroso, pero cuando ese hombre me ofreció el dinero yo vi la gran oportunidad, y las ganas de volver a ver a mi padre, por mas mierda que sea, el dinero en la solución a todo, lo necesito para ser feliz, para que mi padre lo sea y poder sentirme satisfecho- aunque Jisung ya estaba perdiendo el aire tratando de justificarse Jeongin negó con las manos.

- Hyung no es asqueroso, tampoco lo veo como una mala persona...es solo que, realmente se arriesgó mucho- Jeongin hizo una mueca preocupada-. Pudieron aprovecharse de la peor forma de usted, negarle el dinero o marcarlo en un estado tan vulnerable- explicó, en pánico incluso si Jisung ya estaba en carne propia frente suyo y totalmente bien.

Jisung se vio aliviado a su respuesta y comenzó a sonreír de la forma característica y burlona que tenía.

- Ah Jeonginnie, no soy tonto. Obligue a ese idiota a depositarme el dinero antes de que mi celo empiece o no iría hasta él- Jisung se encogió de hombros-. Ya te lo dije, fue ese alfa el idiota al depositar sin pensar en que podría huir con el dinero. Es por eso que te digo, el omega en celo vale unos buenos meses de comodidades. Y bueno, la parte de la marca probablemente si fue estúpido...bueno lo fue, pero era mi una opción de ganancia, era eso o quedarme en la calle en plena etapa de celo- Jisung hizo una mueca-. Por qué gastar el dinero de ese animal ya no era opción...yo simplemente hice todo ese show para después tenerlo de adorno en mi bolso.

Jeongin se volvió a apoyar en el respaldo un poco más relajado. Tal vez Jisung había hecho muy mal, probablemente debía disculparse con Minho y luego volver. Así que carraspeando empujó con las manos la bolsa de nuevo hacia él.

- Propongo que se vaya luego de hacer las cosas bien. Devuelva el dinero hoy- Jisung volvió a la expresión de pánico mientras negaba con las manos.

- No puedo, simplemente no, prefiero huir de una vez- Jeongin entre cerró los ojos.

- Hyung, esa es una acción de plena cobardía y no es correcto.

- ¡Es que soy cobarde!- gritó, para luego carraspear al recibir miradas de reproche por el personal de la cafetería-. Puedo ser muy valiente cuando se trata de golpear a puño cerrado...pero enfrentando problemas...

Negó frenéticamente, su cabello rizado acompañando la decisión con pequeños saltos.

- Tal vez debería ir y lanzarsélo a la cara y correr a lo loco...ni lo verá venir- Jeongin negó divertido al ver que Jisung realmente lo estaba considerando.

- Esa es una idea más horrible que simplemente huir sin una disculpa- Jisung se encogió de hombros.

- ¿Lo ves?, no se lo puedo arrojar por precaución a su ojo y no soy capas de hablarle de frente sin orinarme. La mejor y única solución será que tú me ayudes- Jisung le ofreció una mirada suplicante mientras juntaba las manos y hacia un puchero profundo, eso rápidamente hizo flaquear a un vulnerable Jeongin-. Por favor, ayúdame solo esta vez Jeonginnie.

Jeongin hizo una mueca, era tan débil a un favor tan despertado.

- Esta bien. Sin embargo sigo pensando que debería devolvérselo usted- Jisung bajo los hombros y le ofreció una sonrisa, sin ánimos y pequeña.

- Lo sé. Simplemente soy un cobarde.

+

Hyunjin observó a su ángel de pies a cabeza, lo olisqueó, palpó todo su cuerpo y escucho el sonido de su corazón. Al final al comprobar que había llegado totalmente ileso y estable permitió ir a sus guardias mientras el omega le ofrecía una mirada de reproche.

- Y...¿que dijo la ardilla?- relajando sus facciones Jeongin ingreso a la casa detrás de Hyunjin, le permitió retirarle su bolso de su hombro y antes de que lo cuelgue en la entrada lo señaló.

- Me devolvió el dinero- Hyunjin abrió la mochila con curiosidad y enarcó una ceja al ver la bolsa de dinero dentro.

- Minho no lo aceptara- aclaró.

- Dijo que es el mismo dinero que sacó de la casa, no lo usó- Hyunjin hizo una mueca incrédula.

Y sí, era difícil de creer sin saber el contexto, probablemente Hyunjin no lo crea nunca. Sin embargo Jeongin no podía contar que la realidad había sido que Jisung había ganado mucho dinero para necesitar esos fajos en la mochila, no era algo que a él le concierne decir o divulgar.

- ¿Quieres que lo entregue yo?, ¿o cómo?- Jeongin ladeó la cabeza pensativo.

Al final terminó por negar lentamente.

- Creo que hay cosas que debo aclarar con hyung- Hyunjin entre cerró los ojos hacia el omega.

- ¿Aclarar qué?, yo puedo entregárselo. Literalmente trabajo con él- Jeongin negó y le arrebato el bolso caminando hacia las escaleras.

- Solo cosas.

- ¿Cómo que cosas?, aclara conmigo cosas también, es más, les puedo hacer compañía- Jeongin se sostuvo en la pared unos escalones arriba con Hyunjin pisándole los talones.

Se llevó una mano al corazón haciendo una mueca.

- Hyung...duele- Hyunjin lo rodeó con rapidez mientras su corazón saltaba asustado dentro suyo.

- ¿Qué?, ¿qué duele?, ¿aquí?- Hyunjin presionó sobre su mano justo en la altura de su corazón, Jeongin volvió a asentir con una mueca mientras recibía una expresión de extremo espanto y preocupación.

- Duele...sus celos oprimen mi corazón- comenzó a reír cuando el rostro de Hyunjin pasó a uno de completo fastidio, uno no tan sincero y real pero fingía que le irritó.

- Ángel...- la voz de advertencia solo lo hizo reír de nuevo.

Tomando la mano del mayor siguió subiendo hasta el segundo piso con el contrario siguiéndolo a regañadientes. Retirándose su campera siguió subiendo mientras volvía a tomar la mano del alfa.

- ¿Cree que hyung se sienta mal por que lo devuelva yo en vez de Jisung hyung?- Hyunjin asintió lentamente.

- Sé que si, no lo demostrará. Sinceramente esperaba un poco más de ese omega, después de todo, aunque no es su problema o culpa, Minho también está pasando malos momentos para recibir ese trato- Jeongin volteó hacia Hyunjin y encontró la seriedad en su mirada, bajando la suya soltó un sonido pensativo.

- Jisung hyung debe tener sus razones- murmuró-. No quiero hacer pequeño su error, sin embargo todos tienen su propio tormento. Puede que no se sienta cómodo volver a ver a Minho hyung.

Hyunjin se encogió de hombros y condujo al omega hacia el baño. Pronto sería la hora del baño del omega, y realmente ya no era necesario que él esté ahí para bañarlo o limpiar la herida por él, pero se le hizo tanta costumbre que a pesar de las quejas del menor él siempre lo seguía detrás a la hora de ducharse.

Jeongin observó pensativo a Hyunjin preparar el agua de la tina.

¿Debería él meter su nariz donde no le llaman?.

Él nunca había hecho eso, forzar algo que no se da o no se puede, después de todo lo peor que alguien puede hacer en meterse en la relación o problema de otro.

Pero una pequeña ayuda, una ayudita no vendría mal, ¿cierto?.

+

Minho acarició la pequeña nariz de Sonnie con su dedo índice, en cuclillas en la habitación de sus tres mínimos se preguntaba cuando debería bañarlos otra vez. Los tres estaban vestidos con las prendas que le había regalado Jeongin. Por más que había más en la colección, le hacía ilusión que lo sigan usando a ser estos un regalo.

Se puso de pie luego de cerciorarse que los tres dormían acurrucados en su caja. Apenas había dado la noche y ellos ya estaban muertos. Saliendo del cuarto soltó un largo suspiro antes de dirigirse a la puerta de su casa, tomando asiento en el suelo retiro sus zapatos del estante un lado de la entrada y comenzó a colocárselos.

Tres semanas. Ya habían pasado tres semanas, de que hubo un revuelo en Khangpae por la pérdida de equipo, tres semanas de que el trabajo y la seguridad en la organización subió a niveles altos.

Tres semanas de que Jisung se fue.

Y una semana para que Changbin cumpla un mes de haber fallecido.

Era tanto que pensar, y no le aliviaba no tener la mente en que ocuparse.

Cuando pasaba a ajustar sus cordones para finalizar, el timbre de su casa siendo presionado lo hizo levantar la mirada. Todas las persianas de su casa estaban cerradas y sus luces a excepción del garaje estaban apagadas, para él era una precaución y comodidad tenerlas así, ya que si alguien lo atacaba o intentaba robar algo él podría asustarlos y sorprenderlos en el acto.

Poniéndose de pie retrocedió hasta el perchero del vestíbulo y retiro con cuidado su arma del interior de su abrigo. Observó la puerta fijamente mientras iba avanzando e intentaba percibir un ruido aparte de su respiración.

Cuando se plantó frente a la puerta el timbre volvió a sonar.

Estirándose hasta la mirilla observó el exterior de su casa.

A penas vio la silueta acercarse se alejó y abrió la puerta. Levantó el arma en el acto y apuntó la cabeza del omega.

Jisung se paralizó con una expresión de espanto.

Minho no se inmutó ante su mirada agrandada y en pánico. Volteando a ver detrás de él encontró la reja de su casa abierta.

- Ya veo, debería ponerle seguro a la entrada, hay muchos ladrones estos días- Jisung apenas pudo pasar saliva antes de soltar un carraspeo nervioso.

- P-podrías...¿bajar el arma?- el alfa ladeó la cabeza.

- ¿Por qué?, tal vez podría hacerte un hoyo en la frente de una vez y cobrarte el dinero que me robaste- Jisung frente suyo contuvo una oración de insultos.

¿Había razón para que el alfa esté molesto?, claro, ¿tenía el derecho de tratarlo mal?, por supuesto, ¿un disparo era poco?, probablemente. ¡Pero Jisung no venía preparado para morir!, bueno sí, pero ahora más que nunca se acobardó.

Apretando las manos en el borde de su sudadera Jisung trató de mirar a Minho sobre el cañón del arma pero por más que se apartaba la mano del alfa lo seguía sin pensarlo.

- Hablemos...por favor- Jisung casi perdió el aliento con el por favor, pero lo dijo.

Sin embargo Minho le saco el seguro al arma.

Ya va, ¿en serio lo mataría por unos fajos de billetes?, era más probable que eso suceda con los roles invertidos. Pero Minho era un jodido millonario, no podía estar tan rencoroso por una bolsa de billetes.

- Oye, animal. Deja de jugar- gruñó ya a la defensiva.

Y aunque por un momento se armó de valor terminó flaqueando cuando el alfa se acercó y el cañón se pego a su frente. Su cuerpo tuvo un escalofrío desagradable al encontrarse con la mirada oscura y carente de emociones del alfa. Su pulso se aceleró como nunca cuando el dedo índice del alfa se colocó en el gatillo y sin ser consciente dejó de respirar.

Intentó decir algo, suplicar por su perdón o insultarlo de nuevo para que se detenga de una vez. Cualquiera de las dos opciones no se veía lo bastante convincente para el alfa.

Sin embargo la voz murió en su garganta cuando Minho apretó el gatillo.

De nuevo, lo dejo más tieso que el pan vencido de la cocina cuando ninguna bala estaba cargada en la pistola y esta solo hizo un click sordo. Y al levantar la mirada Minho le ofrecía una sonrisa seca y burlona.

Lo vio bajar el arma lentamente mientras él dejaba escapar aire tembloroso y exagerado.

- Mi venganza- murmuró como si nada. Jisung lo observo sacar pequeñas balas del bolsillo de su pantalón y abrir el tambor de su arma comenzando a llenarlo-. La próxima puede ser una bala de verdad.

- ¡Idiota!- Jisung chilló y no tardo en golpear su pecho, el alfa dejó caer algunas balas pero no presto atención a eso, sino a la mirada rabiosa del omega-. ¡Casi me matas del susto!.

Minho no dijo nada por varios segundos. Observando sin ninguna expresión a Jisung mirarlo con los ojos brillantes del susto y la furia mientras apretaba los puños a cada lado de su cuerpo, su cabello de un rosado claro cayendo en rizos sobre su frente.

Parpadeando cerró el tambor de su arma y lo guardo en el interior de su pantalón hacia atrás.

- ¿Qué haces aquí?- preguntó sin rodeos.

Eso pareció desestabilizar la confianza del menor quien cambió su expresión a una sorprendida, se vio perdido por unos segundos mientras respiraba lento y pausado. Minho espero alguna respuesta pero lo único que recibió fue al omega abriendo y cerrando la boca sin palabras.

Eso por alguna razón lo molestó.

- ¿Ya no tienes dinero?, ¿necesitas más?, ¿es para eso que vienes?- Jisung paso saliva por la voz dura pero terminó negando lentamente con la cabeza.

- N-no...yo vine a...- carraspeó y entrelazó sus manos frente suyo-...disculparme.

Minho no cambio su expresión en ningún momento, y segundos después una risa sarcástica escapó de sus labios que dejó aún más descolocado al omega. Lo observó meter la mano en el bolsillo de su pantalón y retirar su billetera, abriendo y tomando algunos fajos de billetes.

- ¿Cuánto necesitas?, ¿10mil, 20mil?- Jisung observó sin palabras a Minho decidirse por tomar todo el contenido del la billetera y extenderlo hacia él-. No importa, tómalo todo, después de todo yo soy el rico aquí, no me preocupa que te lleves unos fajos más.

A Jisung le tomó un mini segundo para explotar, y es que él era por naturaleza un cuerpo de explosivos fácil de irritar.

- ¡¿Podrías dejar de ser un maldito animal por un pequeño segundo?!.

Chilló y con fuerza abofeteó la mano del alfa logrando hacer caer los billetes al suelo. Minho apenas pudo reaccionar antes de recibir otro chillido furioso.

- ¡Dinero, dinero, dinero!- repitió como un loco-. ¡Debería ser yo quien esté hablando de eso desde el puto momento que pise esta casa!, ¡Pero tú no dejas de mencionarlo!.

Gruñó y con brusquedad se retiro la mochila sobre sus hombros y sin medir su fuerza abrió el cierre probablemente rompiéndose en el proceso y retiró la bolsa de dinero ajeno, lo arrojó contra el pecho del alfa y luego dejó caer el bolso.

- ¡No gaste ningún solo billete!, ¡y para que que sepas estoy rodeado con muchos de esos así que no necesitó tú estúpida lastima!- Minho lo observó tomar aire, no parecía ni cerca de acabar con su griterío-. ¡Lo siento si te hice pensar que soy tan patético que volvería a este lugar solo por unos billetes más!, ¡y si lo que quieres es convencerte de que me gusta el dinero, pues si, lo amo, me casaría con los billetes por que puede dar más felicidad que un alfa tonto como tú!- chilló en su último aliento y Jisung juro que le saltó una vena en el cuello pero no le importaba verse como un ogro en ese momento, en realidad no le importaba si estaba haciendo el ridículo o no con sus palabras, él solo necesitaba sacar toda esa rabia o tomaría el arma del alfa y se dispararía solo.

Gruñendo y pataleando se estiro el cabello ante la mirada muda del alfa.

- ¡Lo siento por robarte!, ¿bien?. Juro que no quise hacerlo pero no iba a poder irme de aquí si tú aún merodeabas cerca pero si me iba sin nada me quedaría en la calle y yo estaría en celo pronto, y necesitaba dinero. ¡Sabía que no me dejarías ir así que tuve que tomarlo!...- y mientras Jisung siguió gritando lo que se supone era la verdad Minho descendió la mirada a la bolsa en el suelo y unió piezas.

- Pero la bolsa está aquí- murmuró interrumpiendo los chillidos. Jisung volteó hacia Minho con la respiración agitada y siguió la mirada hasta el suelo.

- ¡Pues si!, te estoy diciendo que no lo gaste, ¿acaso me estas escuchando?...- Minho enarcó una ceja.

- La bolsa está aquí, si este es mi dinero, ¿cómo lograste conseguir dinero tú solo?- Jisung abrió y cerro la boca una vez más mudo.

Carraspeando tomó aire reuniendo valor de nuevo.

- ¿E-eso que importa?, lo que importa aquí es que necesito tu perdón para poder irme en paz...-

- No tenías ninguna moneda cuando saliste de aquí- Minho lo volvió a interrumpir, el omega ya no supo como cambiar de tema mientras su mirada huía de la del alfa y su cuerpo se tambaleaba dudoso en retroceder cuando el mayor comenzó a avanzar-. Y dijiste que estabas por entrar en celo, te fuiste sin palabras entonces eso da a entender que ese ciclo de calor estaba doblando la esquina...¿Cómo conseguiste dinero si no gastaste ningún billete de lo que me robaste?.

Jisung juraría que Minho creció más en esas tres semanas, eso o nada podía explicar por qué se sentía una pulga diminuta frente suyo cuando el alfa se detuvo a centímetros. Tuvo que subir la mirada mientras intentaba procesar la pregunta y proseguir a procesar una mentira.

Pero tener el rostro de Minho tan cerca debía ser trampa.

¡Su atractivo lo desconcentraba!.

- Y-ya te devolví el dinero, y pedí disculpa...puedo irme sin tu perdón- volteó e intento caminar rápidamente hasta la reja.

Pero a Jisung tenia que agarrarle las patas locas de sus pesadillas, esos sueños donde uno intenta huir de su asesino y sus piernas pareces debilitarse y no avanzar a ningún lado, por mas que se veía corriendo parecía correr sobre el aire y no avanzar ni un centímetro.

Y eso fue lo que le paso, por que pareció dar dos pasos en el aire y su asesino (Minho) ya lo tomó de la muñeca y lo atrajo de un tirón.

Perdió el aliento, la habilidad de hablar, de moverse, de pensar, de razonar, de sentir de...de todo cuando recibió una mirada dura y seria departe del alfa.

Él más que nadie odiaba eso de Minho, la habilidad que tenía sobre él para desarmarlo, como podía imponer sobre él desde ese maldito beso hasta dejarlo flaqueando y escondido en un rincón de su cama como la última vez.

Esa era en definitiva, una de las razones por la que huyó como un cobarde.

Pero es que podían culparlo todo lo que quieran, pero para él, el mayor terror era que alguien tenga poder sobre su cuerpo o vida, sus decisiones eran suyas, las ganas de coger y desechar, dar su cuerpo y no darlo si así quería, exigir y ordenar y tener poder en casi todo lo que un omega normal y sumiso no tendría.

Sin embargo cuando él intentaba ordenar o contradecir a Minho en algo, su mente decía "Syntax Error", y su razonamiento se desconectaba de su cuerpo, como ahora.

- Tienes ropa nueva y tu cabello teñido de otro color, acabas de decirme que tienes mucho más que los fajos de billetes en esa bolsa. ¿De donde lo sacaste, Jisung?- el omega pasó saliva.

¿Ups?.

Ahora si se arrepentía de hacerse el ogro y haber soltado toda la verdad sin darse cuenta. Uno caía en cuenta que fue estúpido cuando ve la estupidez frente a sus ojos.

- Tú sabes...- carraspeó y terminó por ceder a su razonamiento y apartó los ojos de la mirada del alfa-. Sabes como conseguía dinero antes.

- Lo sé- la voz volvió a ser dura y Jisung casi pero casi que tembló-. Pero dijiste haber estado en celo, omega.

Jisung pateó una piedra invisible en el suelo, Minho aún lo tenía aferrado en la muñeca mientras él paseaba la mirada por sus zapatos.

¿Por qué mierda parecía una escena de exponiendo infieles?.

Parecía que Minho lo hubiera pillado de omega infiel y sin corazón.

Carraspeando a Jisung se le hizo papilla la mente al tratar de formar una mentira creíble. Ni la Santa papaya podía con la autoridad de Minho para ayudarlo.

- Tú sabes...- volvió a repetir, pero esta vez más serio y avergonzado, probablemente esté susurrando-. Cuando un omega está en celo...la gente paga mucho...tú sabes- susurro lo último, y es que Minho más que nadie debía saber, el trabajaba en ese mundo, estaba consciente de lo que se ofrecía, era más consciente que el propio Jisung.

Minho observo mudo al omega, vio aquel semblante nervioso y avergonzado. Luego prosiguió a procesar las palabras, y mientras más consciente de la verdad era más se irritaba, más le picaba el cuerpo de la rabia, más recreaba escenarios donde el omega daba su cuerpo por dinero.

Y no, no era rabia por la razón por la que lo hizo.

Era por los malditos y asquerosos celos.

Y es que, Minho se derritió al haberle dicho al omega que se acueste con él, ¿y que recibió?, un "No puedo acostarme contigo". Y luego lo beso, y Jisung huyó, y para el colmo el omega estuvo en su celo, y más alfas de lo que pudiera procesar lo tuvieron tan vulnerable y perfecto en su cama mientras él hubiera pagado el doble de todo lo que recibió el omega para poder encargarse de él de forma correcta si se lo hubiera pedido.

Pero no fue él, otros idiotas lo tuvieron desnudo, tal vez con el cabello ya teñido y viéndose así de bonito. Y lo tomaron y él no.

¡Y él no!.

Apretando los labios en una fina línea no dejo ir el agarre a pesar de que Jisung se removía incómodo y con la vergüenza enrojeciendo sus mejillas.

- ¿Qué estás haciendo aquí, Jisung?- el omega parpadeó ante la pregunta.

Se obligó a subir la mirada cuando la confusión le ganó. Minho apenas había cambiado la expresión seria, aunque se veía más tenso y sus ojos más duros e irritados.

- ¿Qué?.

- ¿Qué haces aquí?- Jisung volvió a parpadear y pensó que en definitiva él no entendía a Minho.

- Vine a disculparme, ¿qué más?...-

- No- Jisung ladeó la cabeza con confusión-. Que haces aquí, en Seúl.

Oh.

Jisung se quedó mudo por la sorpresa y también por que no tenía palabras. ¿Por qué quería saber justo eso?, él no estaba seguro de tener la seguridad para contarle su vida al alfa, no cuando probablemente no le crea o simplemente le resulte aburrido.

Pero una vez más, Jisung flaqueaba ante la mirada expectante y seria del alfa.

- V-vine a conseguir dinero.

- ¿Para qué?, ¿simplemente te gusta o es por algo más?- el omega carraspeó nervioso, confundido, sorprendido, curioso. Todas las emociones juntas y deseando respuestas.

- Ya te lo dije, el dinero...-

- Trae felicidad, pero hay una felicidad que lo deseas más que nada, ¿qué es lo que necesitas comprar para ser feliz?- Jisung tragó en seco, Minho era posiblemente el hombre más calculador e inteligente que haya conocido.

Por qué santa papaya, haber deducido parte de su vida y estar acertando era sorprendente, y aterrador.

- ¿Para qué necesitas saberlo?- intentó saltar a la defensiva-. Minho, yo solo he venido aquí, en tu casa, para disculparme, no vine a platicar mi vida. ¿Podrías darme tu precioso perdón para poder irme?.

Minho enarcó una ceja y luego asintió de una vez. Aunque Jisung no espero una respuesta tan rápida, espero paciente las palabras finales del alfa para poder finalmente irse.

- Claro- Jisung asintió-. Tú respondes mi pregunta y yo te doy mi perdón.

¿Escuismi?.

Jisung abrió la boca para refutar sin pensarlo pero Minho lo interrumpió antes.

- Eso o nada, si no aceptas puedes irte sin decir nada más- Jisung se quedó mudo mientras Minho dejaba ir su muñeca y le ofrecía una sonrisa de boca cerrada totalmente falsa.

Él era odioso, en verdad que lo era.

Aunque Jisung buscó hasta por debajo de las piedras imaginarias de su mente, finalmente no encontró ninguna mentirilla o excusa para no poder responder al alfa. Así que dejando escapar un gruñido hastiado asintió de una vez.

- Bien, joder eres un curioso- el mayor le ofreció una sonrisa, más real y genuina que alertó a Jisung para controlar sus emociones.

Bajando la mirada el omega buscó como comenzar, rascando su mejilla hizo un ademán con la mano indicado que iniciaría con la verdad.

- Tengo a mi padre, lo que necesito comprar...- hizo comillas con los dedos-. Es la estabilidad económica de mi papá...él es un omega hombre, me crío totalmente solo y fue abandonado por su alfa, al criar él un bebé por si solo siendo omega le cerró las puertas a los limitados empleos para omegas de su época. Él es el mejor papá omega del jodido planeta y yo necesito que viva con los lujos que se merece al haber luchado por mí 19 años de su vida- Jisung frunció el ceño-. Yo lamentablemente también me presente como omega, y por más que busque un buen empleo con una ganancia estable, todos los malditos trabajos son ofrecidos solo para alfas o betas.

Jisung resopló molesto con aquella realidad, siempre que lo recordaba volvía a entender su independencia y mandaba a la basura sus tontas ideas de querer ser un buen partido para algún alfa para que lo pueda mantener. Él desde siempre fue independiente y consiguió lo que tenia por sus esfuerzos, separo muy bien el trabajo de lo sentimental y se contuvo en cada encuentro en la cama con los hombres para no vomitarles encima o en otro caso atreverse a generar sentimientos románticos.

- Vine a Seúl desde hace ya dos años, tampoco encontré un alma generoso que me reciba como empleado. Por lo que sin opciones decidí ir al lado oscuro del dinero- Jisung se encogió de hombros-. Desde entonces hasta la actualidad he estado ganando dinero de esta forma y mandándoselo a mi padre- Jisung dejo caer su mirada en los ojos del alfa, él se mostraba impasible, atento, no había indicios de nada en su expresión-. Por el momento ya estoy cansado de dar mi trasero y generar dinero, extraño a mi padre, han pasado ya dos años y no lo he visto. Hace una semana ofrecí por última vez mis servicios estando en celo...y gane demasiado.

Jisung entrelazó sus manos frente suyo y se balanceo sobre su lugar nervioso.

- Decidí irme y volver a encontrarme con mi padre...pero tenía que venir a disculparme por que fui un idiota y ambos lo sabemos- ofreció una sonrisa penosa al alfa-. En serio no quise robarte, yo en serio no quise, no me fui contento y satisfecho...yo en realidad tuve un nudo estas tres semanas que solo crecía al pensar en irme sin disculparme.

- ¿Qué te hizo venir?- Jisung hizo una mueca graciosa.

- En realidad, hasta el final no pensaba hacerlo...pero me encontré con Jeongin y digamos que me regaño mucho- Jisung soltó una pequeña risa-. Demasiado, me hizo acordar a mi padre, él también tiene esa aura dulce y sumisa pero que a la hora de la verdad puede dejarte con la boca cerrada con una sola palabra.

Minho asintió lentamente, ya sabía la razón, en realidad el alfa muy dentro suyo estaba seguro que el omega hacia lo que hacía por algo más que dinero, un omega que le gusta ser independiente pero dando su cuerpo a alfas por dinero debe ser una mala broma. Y ahora que sabía la razón era más que convincente.

A Jisung le gustaba el dinero por que el dinero da felicidad. Le dará felicidad a su padre viviendo en una casa bonita y con una cama cómoda y una habitación personal.

Jisung le apunto con el dedo mientras entre cerraba los ojos.

- Ahora estoy perdonado, ¿cierto?- Jisung pregunto con un toque de alivio.

Pero la confusión se delató en su rostro cuando Minho negó.

- Te mentí- una sonrisa inocente se extendió en el rostro del mayor mientras levantaba sus dos dedos cruzados-. Cruce los dedos, en realidad no es eso lo que necesito para perdonarte.

Jisung tuvo un cambio de reacciones en solo un segundo, paso de confundido a sorprendido, de sorprendido a estupefacto, de estupefacto a irritado, y de irritado a sentirse un tonto.

- ¡Yah!- Minho no se inmutó cuando Jisung le asestó un golpe en el hombro-. Eso es trampa, animal.

- Reglas son reglas- Jisung le ofreció una mirada de muerte mientras Minho bajaba la mano.

- Eres un idiota- incluso así él alfa no borro su sonrisa-. ¿Qué es lo que quieres?, vamos dilo rápido. De igual manera estoy seguro que la respuesta es no.

Minho remojó sus labios y asintió. Jisung espero expectante, por un momento su mirada se perdió en la vestimenta del mayor. A decir verdad cada vez que Jisung veía a Minho este siempre vestía con ropa ajustada, jeans ajustado, remeras blancas al cuerpo o chaquetas de cuero.

Y bueno, ya no estaba para negar que desde aquel beso Jisung ya andaba pendiente hasta de la última punta de cabello del alfa y terminaba resultándole tan atractivo.

No obstante y al contrario de su cuerpo trabajado y la buena vestimenta, el rostro del alfa se encontraba más pálido y ojeroso que la última vez. Podía seguir viéndose igual de guapo e irresistible pero Jisung no podía evitar destacar las ojeras y el rostro más casado que la última vez que lo vio.

Se preguntaba si acaso...Minho se sintió solo esas semanas sin él.

Tal vez se la pasó solo y al pendiente de sus recuerdos con su difundo mejor amigo.

Inevitablemente Jisung paso saliva y se sintió rápidamente la basura más asquerosa del planeta. Él por supuesto había prometido a Seungmin que estaría a su lado para que no se sienta solo, y lo primero que hizo cuando depositó su confianza en él: fue robarle y huir.

Vaya, ahora le sorprendía que incluso no lo disparó de verdad hace unos minutos.

Reaccionó cuando Minho tomó aire y metió sus manos en el bolsillo de su pantalón.

- Quiero hacerte una petición...más que nada- Jisung asintió cauteloso y se encogió de hombros.

- Todo lo que no implique dinero es bienvenido- bromeó ligeramente, Minho le ofreció una mirada divertida antes de asentir.

Jisung lo vio inhalar profundamente y luego mirar por un momento el suelo pareciendo buscar las palabras adecuadas. Cuando pareció decidido carraspeó y le ofreció al omega una mirada intensa y brillante, la cual descolocó al omega y logró agitar su corazón rápidamente.

Pero lo siguiente lo dejo más congelado que su mirada.

- Vive conmigo, Jisung...si vienes a vivir conmigo y me dejas ocuparme de ti, voy a perdonarte por haberme robado.

Jisung no supo como llamarlo a eso: ¿suerte o desgracia?, ¿fortuna o desdicha?, ¿destino o calamidad?.

Al omega le parecía todas las primeras opciones de las preguntas.

Al omega, por que para Han Jisung era un "Qué a la raíz cuadrada". No tenía sentido, como la petición de Minho.

Parpadeó unas mil veces como si esa acción estuviera procesando las palabras del alfa. Ya no había duda, Lee Minho le sorprendía cada vez más con sus palabras sorpresas. Primero: le pide acostarse juntos. Segundo: termina siendo virgen. Y tercero: ahora después de que se supone eran rivales por un robo, le pide vivir juntos.

¿Álo?, ¿Santa papaya?. Soy yo, Han Jisung de nuevo.

- ¿Qué?- Minho rodó los ojos al darse cuenta que el omega volvía a caer en aquel bucle de estupefacción.

- No me hagas repetirlo. Escuchaste muy bien, y no es una broma. Vive conmigo- Jisung parpadeó.

- ¿Qué?...digo osea...¿Qué?- Jisung se señaló-. ¿Quieres que yo...me...muah, viva contigo?.

Minho fingió mirar a los costados.

- ¿Ves a algún otro Han Jisung a nuestro alrededor?- Jisung se sentía tan tonto que si volteó a buscar a un tercero en ese patio.

Cuando no halló nada volvió hacia Minho y ladeó la cabeza.

- ¿Tas bien?.

- Sí.

- ¿Quieres que vivamos juntos?.

- Sí.

- ¿Y vas a mantenerme?.

- Sí.

- ¿Y así me perdonarás?.

- En efecto.

Jisung parpadeó, en realidad ya se le estaba secando los ojos de tanto hacerlo.

A decir verdad, el omega no tenía palabras. Lo único que pudo rondar en su mente terminó por carmomerle la duda.

- Minho...¿te gusto?.

- En efecto...digo, ¿qué?.

Jisung parpadeó.

Minho parpadeó.

Ambos parpadearon, uno más confundido que el otro.

Jisung carraspeó mientras volteaba a ver el suelo, los billetes sobre este, luego los zapatos de Minho, los suyos, prosiguió a mirar sus manos y luego algún punto de la casa totalmente pensativo, o totalmente sin palabras.

- Y-yo...no puedo quedarme por que mi padre esta lejos y yo vivo con él, no voy a dejarlo solo...-

- Traélo aquí, en Seúl. No hay límites, si te quedas conmigo tu padre tiene una estabilidad económica perfecta...tiene la felicidad que tanto deseas- Jisung abrió y cerró la boca y luego volvió a mirar sus manos.

Y por un momento comenzó a temblar, tal vez por los nervios, el pánico, el shock...o la emoción. Cual sea el caso terminó enrojeciendo su rostro y causando un agite desenfrenado a su corazón.

- Soy un idiota que ama el dinero...si me aceptas en tu casa te haré gastar hasta por el último chicle de la ciudad- amenazó pobremente.

Aunque en realidad era más una prueba. Intentaba ver si lo que Minho le pedía no fue algo solo precipitado y sin pensarlo, tal vez con aquella amenaza el alfa caería en cuenta de lo que acaba de ofrecer y se retractaría.

Por qué bueno, no iba a ser de sorprender.

Sería todo un riesgo aceptar mantener a dos personas donde uno de ellos es un insoportable, charlatán, molesto, berrinchudo, quejoso, llorón y flojo omega de 1,69cm y mejillas regordetas.

- ¿Crees que puedes dejarme en la pobreza?, ¿a mí?. Me gustaría ver que lo intentes- Jisung subió la mirada con el corazón a tope.

Minho le ofrecía una mirada tranquila, expectante, probablemente ansiosa. Sus manos dentro de su bolsillo seguían dándole un aire casual al momento que no dejaba de descolocar al omega y confundirse más. ¿En serio para el alfa no era algo de otro mundo tenerlo cerca?.

Jisung apretó las manos en los bordes de su sudadera. Volvió a la actitud y semblante de nervios como en el momento que llegó y Minho lo recibió con un arma en la frente, tan bonito.

Intentó una vez más. Él no iba a aguantar que esa sea una imprudencia y termine totalmente humillado.

- E-estoy hablando en serio, idiota...y-yo soy un mimado y exigente, no podrás tolerarme, ni tú ni tu tarjeta.

Minho sonrió divertido y relajado, sin poder apartar la mirada en el manojo de nervios que era el omega, pocas veces lo habría visto así y la verdad era que era una imagen extraña y adorable.

Tan, tan adorable.

- Yo también hablo en serio. Intenta vaciar mi bolsillo, Han Jisung.

El omega dejó escapar aire y se encogió en su lugar ante la mirada fija del mayor sobre él. Ah mierda, parecía una real ardilla frente a un león.

- Sin embargo...

Si embargo, había un sin embargo, sin embargo era sinónimo de pero, ¡así que había un pero!. Jisung se tensó y estuvo tentado a decirle: ¿pero?, ¡¿dijiste pero?!.

Pero prefirió callar y observar mudo a Minho acercarse a él. ¡¿Por qué se acercaba?!, Jisung tragó duro cuando Minho se plantó frente suyo y lo obligó a subir la mirada.

Y de nuevo lo dejó congelado cuando le ofreció una de sus mirada oscuras y serias y sus dedos fueron a parar en su mentón, sosteniendo su rostro y obligándolo a mirarlo. Jisung se mareo ante el embriagante aroma tan cerca, y sobre todo ante el rostro atractivo y serio de Lee Hot a centímetros.

Nadie podía juzgarlo por reaccionar tan hormonal, es que era Minhot.

- El dinero que ganaste estas semanas no lo usaras para ti- Jisung frunció el ceño rápidamente intentando aterrizar a tierra con esas palabras.

- Oye, eso fue a base de mis esfuerzos...-

- Se lo darás todo a tu padre- lo interrumpió, con una voz severa que logró callar al irritable Jisung quien observó hipnotizado a Minho ladear la cabeza casi de forma aterradora-. Desde ahora no importa cuanto dinero quieras, lo gastarás todo de mí, me usaras solo a mí, no vuelvas a dar tu cuerpo por dinero por que ya no lo necesitas, ¿lo entiendes?.

Syntax Error.

Santa papaya, eso sonó tan dominante que Jisung no supo si orinarse y temblar, o temblar y orinarse. ¡Él nunca era así!, ¿por qué Minho podía causar esas cosas en él ahora?, a él le gustaba dominar, ¡ser rudo!. Un omega rudo.

Pero ahora frente a Minho parecían solo ser vanos y ridículos intentos.

No puede ser que...¡¿le gustaba ser dominado?!.

Bueno, ya no debería sorprenderse tanto, desde que conoció a Minho todo había dado más vueltas que una montaña rusa. Y eso que se supone antes se odiaban.

Se suponía...por qué ya no, ¿cierto?.

Ya no...

¡¿En que fucking momento?!.

Fue ese beso, ¡ese maldito y muy muy muy muy buen beso!.

- B-bien...- Jisung carraspeó cuando su voz salió ligeramente débil y vulnerable, sus pensamientos ya lo estaba afectando-. Digo...esta bien, por que después de todo tu eres el rico aquí- el omega entre cerro los ojos-. Más te vale animal no estar bromeando, por que te exprimiré como un limón entre mis manos.

Ahora sus amenazas parecían ser más ridículas que antes. Pero al menos Minho asintió con firmeza hacia él, aceptando completamente sus palabras.

Carraspeando Jisung se alejó a rastras de alfa y terminó rodeándolo.

Tomando la bolsa de dinero en el suelo lo abrazó contra su pecho volteando a ver a Minho. Este también lo miraba.

- Ahora esto es mio.

Minho observó al omega entrar a la casa con pasos firmes y tranquilos llevándose el dinero en sus brazos. Plantado en el patio lo observo ir directamente hasta la cocina y desaparecer en el interior.

- ¡Ven y aliméntame!, ¡esto está más vacío que mis nalgas!.

Minho inevitablemente y tal vez viéndose como un loco, sonrió.

Tomando los billetes repartidos en el suelo se apresuró a juntarlos todo y guardarlo en su billetera de nuevo para así poder ingresar a su casa.

Su casa y la de Jisung.

Minho no supo que era, pero a comparación de esa mañana que estaba con ganas de tirarse de un puente. En ese momento sus ánimos estaban tocando el cielo.

- ¿Quieres que pida pizza?, mañana haré las compras- murmuró ingresando a la cocina y encontrando al omega ahogándose con una lata de coca cola mientras levantaba el dedo pidiéndole que espere para hablar.

Cuando bajo el plástico y soltó un sonido de satisfacción y alivio acotó.

- Pizza y hamburguesas.

Tal vez Minho si sabía lo que era. Solo que era difícil admitir que sus estados de ánimo dependían de un omega cascarrabias que olía a miel y le gustaba irritarlo como un hobbie.

OK, PERO YA VIERON A JEONGIN CON RULOS PERMANENTES 😭😭😭🤲🤲🤲🤲

Bebé pan es todo lo que esta bien 💔.

Bueno, todos sabíamos que habría suicidio colectivo si el Minsung no regresaba, je <3

Espero les haya gustado el capitulo, algo corto pero ya saben, fue centrado en el Minsung más que todo.

Tengan un lindo día o una linda noche.

Para los que estén o ya van a iniciar con los exámenes, buena suerte y no se estresen. La vida solo es una y los exámenes se pueden recuperar, pero el tiempo que gastas estresado no, solo se te va y no lo recuperas :(.

Ahora si, adió y muchas gracias por los 20k 💗