El clima ese dia era especialmente nublado, una pequeña llovizna cubriendo las calles de Seúl y también, causando un cierto desagrado al grupo de amigos en aquella cafetería al tener que ingresar con los zapatos mojados.

Pero para Jeongin, nada podía borrarle aquella alegría de estar festejando el cumpleaños número 24 de su hyung Minho.

Bueno, al menos él y Seungmin se veían ilusionados.

Hyunjin parecía que iba a echarse a dormir en cualquier momento y Changbin como siempre malhumorado al ser obligado a asistir en aquel mini festejo.

- Hyung, no sea aguafiestas, habrá pastel- Jeongin intentó animar a Seo solo consiguiendo que este le gruña, luego que Hyunjin le gruña a Changbin y ambos comiencen una mini discusión de miradas de muerte y bajo gruñidos.

Suspirando Jeongin se alejó de aquel par y poniéndose de pie rodeó la mesa, tomando asiento a un lado de Minho quien se hayaba en la punta de la rectangular mesa de aquella cafetería, al lado derecho se sentaba Seungmin y al izquierdo se encontraba él en ese momento, siguiendo Hyunjin, la silla del menor que ocupaba segundos antes, y Changbin alado de Seungmin.

Se alegro a ver lo tranquilo y relajado que se encontraba Minho.

- No tenias por que hacer esto, omega. No suelo festejar mi cumpleaños- Seungmin quien se apoyaba contra la mesa y reposaba la cabeza en sus manos soltó un sonido de desaprobación.

- Siempre hay que destacar haber cumplido un año más de vida, significa que no has muerto.

Minho rodó los ojos hacia Seungmin.

- Vaya, no lo había pensado. Eres tan inteligente- Jeongin comenzó a reír cuando Seungmin no capto la burla y asintió de acuerdo.

- La otra vez fui a retirar la liquidación de mi antiguo empleo. Así que compré un regalo a hyung..- Minho arqueo una ceja con curiosidad, esta vez con más ánimos al realmente notar lo ilusionado que se encontraba el omega.

- Muchas gracias, en serio- Jeongin sonrió cuando el alfa le ofreció un leve asentimiento.

Girando hacia Hyunjin se inclinó hasta su regazo y le arrebató el pequeño bolso que habían traído, sacando el pequeño sobre de papel con líneas verdes, un pequeño moño de tono amarillo pegado en el centro, girándose hacia el alfa le extendió entusiasta.

- ¡Tadah!- Minho apretó los labios para no reír por lo infantil que era omega, sumando a Seungmin aplaudiendo a un lado suyo.

Tomando el sobre tanteo con sus dedos ante las miradas expectantes de todos en la mesa, sintiendo un objeto redondo y con pinchos contra su palma el alfa no tardo en ladear la cabeza curioso al apretar el papel y escuchar el pequeño sonido chillón salir del interior.

- Como alfa puede comprar cualquier joyería cara. Me atreví a averiguar y a comprarle pequeños juguetes a sus gatos.

Listo, Jeongin tenía el eterno amor de Minho.

Jeongin sintió su corazón acelerarse al ver como los ojos del alfa brillaban con intensidad y una tierna y agradable sonrisa se posaba en sus labios mientras abría el sobre rápidamente.

- Joder, ni siquiera yo tengo tiempo de conseguir obsequios a mis gatos- riendo Minho saco la pequeña pelotita morada con pequeños pinchos, encontrando también tres pequeñas prendas de colores, ropa que no dudaría en ponérselo a sus gatos una vez vuelva a casa.

Jeongin infló su pecho de aire orgulloso al haber sacado aquella bonita sonrisa al alfa.

- En serio, realmente te lo agradezco- Jeongin asintió satisfecho.

- No hay que agradecer, feliz cumpleaños hyung.

- Sí hay algo que desees, o necesites. No dudes en pedírmelo- bueno, ya que estaban.

Mirándose cómplice con Seungmin el omega peino su cabello disimuladamente.

- Pues, si lo dice así..- murmuró, divertido al ver la mueca curiosa y desconfiada de Minho.

Incluso Hyunjin observo curioso a su ángel cuando se puso de pie y con pequeños saltos se dirigió al mostrador de la cafetería.

Jeongin le sonrió amable a la beta detrás del mostrador, alegre de que ellos sean los únicos quienes utilizaban el lugar, probablemente gracias a Hyunjin. Apenas la trabajadora noto de quien se trataba sonrió cómplice.

- Puede dármelo ahora- la joven cajera se inclinó mirando entre las repisas y en segundos ya le extendió el objeto suave y puntiagudo.

Y al girar, todos tenían una reluciente sonrisa malvada y Minho negaba horrorizado.

- Me niego en toda expresión de la palabra.

Haciendo un puchero Jeongin se acercó al alfa.

- Hyung, solo es un gorrito, será por unos minutos, ¿si?- pero alfa no cedió cruzándose de brazos.

- Me niego- murmuró entre dientes.

- Hyung..- se quejó tratando de convencerlo.

- Vamos Minho lindo- Changbin ya estaba activando su cámara del teléfono mientras tarareaba.

- Me vuelves a llamar así y te dejo sin testículos- riendo entre dientes Changbin apunto al cumpleañero con su cámara.

- Hyung, dijo que me concedería cualquier cosa que deseara- Jeongin se quejó estirando de la goma del pequeño gorro en forma de triángulo, era de un color azul y con pequeños lunares morados y dibujos de confeti.

- ¡Pero no quiero concederte razones para verme como payaso de circo!- el omega no estuvo de acuerdo, juntando las manos implorante.

- Hyung se vera bonito, lo prometo- Minho ya estaba abriendo la boca para negarse una vez más antes de ser interrumpido.

- Póntelo de una vez. Estas haciendo que Jeongin supliqué por algo absurdo- Minho quiso lloriquear cuando la situación dio un giro.

No podía acotar nada más cuando fue Hyunjin quien le dio la orden con una mueca seria.

Con una expresión lamentable se dejó cuando Jeongin se acercó con una tierna e ilusionada sonrisa que al menos lo reconfortó, terminando por apretar los labios cuando la goma se ajusto a su mentón y tuvo el odioso gorro en su cabeza mientras Jeongin terminaba de acomodarlo.

Y apenas el omega se alejó de su espacio personal el click de una fotografía siendo captada resonó frente suyo.

- Changbin te mataré si no eliminas esa mierda- pero el alfa pareció ignorarlo mientras compartía su teléfono con toda la mesa y explotaban de risas y halagaban lo tierno y pequeño que se veía.

- Yah, ¿estas seguro que cumples 24?, te ves como de 15- Minho gruñó avergonzado cuando Seo le coloco el teléfono en una distancia prudente para para no pueda arrebátarselo, encontrándose con una expresión de sufrimiento y un odioso puchero que ni siquiera noto que lo portaba antes mientras lucia el gorrito.

- Hyung se ve muy bonito- Seungmin trato de aligerar el ambiente al ver al mayor a punto de lanzarse sobre Changbin.

Minho bufo ante la voz suave, apoyándose derrotado en la silla cediendo ante el omega.

- Como sea.

Minutos después, la situación no había cambiado tanto, los alfas reían al ver a Minho con el gorro y su pequeño pastel de colores frente suyo, y los omegas intentaban animarlo mientras cortaban del dulce postre, ya que el cumpleañero ya no había cedido en que le canten las felicitaciones.

Fue Seungmin quien repartió el postre, tomando de la bonita jarra de vidrio blanco con decorados dorados, la cual llevaba chocolatada caliente que era lo que se les había antojado con aquel tiempo nublado, sirviendo a cada uno en su vaso correspondiente.

Jeongin por fin pudo disfrutar del dulce sabor del pastel, saboreando contento al notar que Minho ya no se quejaba por el gorrito y también comenzaba a comer de su porción totalmente enfocado en saborearlo mientras conversaba con Changbin y Seungmin.

O más bien peleaban por cual prenda debía ser para cada gato mientras Minho les mostraba fotografías de cada uno.

- Sinceramente, cuando te mencione sobre el cumpleaños de Minho, no creí que terminaría en una cafeteria y con mi mejor amigo luciendo un gorro ridículo- Jeongin entre cerro los ojos hacia el alfa por lo último dicho, pero de igual manera termino sonriendo contento.

- Claro que teníamos que reunirnos, hyung tonto. Cada que una persona importante para usted cumple años debe acompañarlo ese día- Hyunjin dio un bocado a su torta divertido por lo serio que podía ser al respecto el menor.

- Pues no creí que a Minho le importaría estas cosas- Jeongin se inclinó hacia el alfa para poder susurrar recibiendo la misma acción departe del mayor.

- Claro que le importa, sus ojitos brillan, alfa- Hyunjin observo de reojo a Minho, apretando los labios para evitar sonreír al verlo reír y limpiarse el rostro lleno de pastel, quien sabe como llego ahí. Y se veía tan tranquilo y brillante.

- De acuerdo, si se ve que lo disfruta- el omega asintió rápidamente.

- Y se ve bonito con el gorro, no ridículo.

- Pff, es ridículo.

- Es bonito, se ve bonito- Jeongin mastico como si nada pasara mientras de reojo podía apreciar la expresión irritada del alfa.

- Puedo conseguirme el mismo jodido gorro y veras que me puede quedar mejor a mí.

- También lo creo, pero Minho hyung sigue viéndose bonito- Hyunjin se aguanto las ganas de tirarse Minho y arrebatar el gorro de su cabeza para hacerlo añicos.

Se cruzó de brazos haciendo de lado su torta enfuruñado.

- Hyung, termine de comerlo- Jeongin quiso reír al ver la expresión malhumorada del alfa, el omega sabía que no estaba molesto, lo notaba en su aroma y en la posición relajada, solo estaba actuando infantil.

- Ya no quiero- Jeongin termino su pastel en ese momento, girando hacia el alfa encontró su mirada expectante.

- ¿Ya no quiere comer?.

- No- y Hyunjin lo decía sinceramente.

Pero no se quejó ni un poco cuando el omega relamio sus belfos y se inclinó dejando un pequeño beso en sus labios, parpadeando a gusto al verlo alejarse con un ligero sonrojo y una pequeña sonrisa.

- Hyung no está enojado- Hyunjin soltó una risa entre dientes, volviendo a inclinarse hacia el omega sonrió ladino a verlo apartar la mirada hacia sus labios y encogerse tímido.

- Ya no, el dulce en tus labios es más delicioso- Jeongin casi se quejó ante las palabras vergonzosas, sintiendo el suave aliento del alfa chocar contra sus labios.

Pero antes de refutar una voz detrás suyo lo interrumpió.

- Oh basta, no quieran traumarme de nuevo- Jeongin se alejó casi de golpe, girando casi con tensión hacia Seungmin.

Changbin quien se estaba volviendo a servir otra porción del pastel no tardo en preguntar.

- ¿Volver a traumar?- Jeongin enrojeció ante la sola mención indirecta de la llamada con su amigo.

- N-no se de que hablas- su voz salió torpe, pero eso no evito que Seungmin entienda viéndolo entre cerrar los ojos hacia él.

Hyunjin rodó los ojos extendiéndo su mano hasta el cabello del omega acaricio sus suaves mechones para reconfortarlo.

- Ya lo creo.

- ¿Qué trauma?- Jeongin enrojecía cada vez más al ver que su amigo no está dispuesto a callarse, tapando su rostro avergonzado.

- ¡Pues ellos..-

- No hay ningún trauma, ni nada parecido- Hyunjin aclaró lentamente, observando al omega mayor con severidad hasta verlo apretar los labios y apartar la mirada.

- No es justo que me mire así y me calle, ¡hyung dile algo!- Hyunjin volvió a ignorar a Kim Seungmin satisfecho con su cometido, relajando sus facciones cuando su ángel lo observo agradecido.

Minho se quejó cuando escucho la voz demandante del menor.

- No puedo, ¡es mi jefe!.

- Nunca debes poner el trabajo encima de tus amigos.

- También soy su amigo- recordó Hyunjin.

- Pero el habla del trabajo.

- Pues también soy el jefe que puede noquearlo por llevarme la contraria.

Seungmin gruñó rendido al ver que definitivamente Minho no pensaba ayudar y sin eso no tenía argumentos.

El grupo de amigos termino por finalizado su encuentro cuando la llovizna dejó de apreciarse y podían ir por sus autos con tranquilidad. Siendo acompañados por sus respectivos guardias ingresaron al auto y concordaron en volver a reunirse en la mansión, a excepción de Seungmin.

El viaje fue tranquilo para Jeongin, había un frío cálido gracias a los abrigos y el acogedor auto, y el interior olía especialmente bien a causa de Hyunjin.

- ¿Hyung saldrá hoy?- Jeongin se atrevió a preguntar.

No era tonto, en la tarde era la hora del pastel, y el omega sabía que de noche, era tiempo del alcohol y el descontrol.

- Lo haré, iré con Minho y Changbin para que lo pasen bien, solemos salir en nuestros cumpleaños, así que- Jeongin asintió tranquilo, observando por la ventana el cielo nublado la cual ya estaba tiñendose en colores oscuros.

Hyujin aprovecho a que una ventanilla dividía a el chófer y su guardia con el omega y él. Contento de que no los puedan ver y así el menor no pueda alterarse.

Así que con cautela se deslizó hacia su ángel y abrazando su cintura lo atrajo cerca suyo. Una sonrisa complacida posándose en sus labios al sentir al omega temblar y encontrarse con sus ojos tímidos y asustados.

- Hyung..- soltó un bajo carraspeó a la voz de advertencia del menor, ah, era tan lindo estando a la defensiva.

Se inclinó hacia la oreja del omega, mordiendo su labio inferior cuando Jeongin se encogió entre sus brazos y se quejó bajito. Aspirando de su aroma encantadoramente dulce e inestable no tardo en deslizar su mano por las piernas del omega, sintiendo su calor encima de los pantalones que llevaba y con sus dedos hizo espacio debajo de su abrigo.

Entre cerrando los ojos no se aguanto, soplando juguetón contra el oído del omega al escucharlo quejarse bajito por la intromisión fría de su dedos dentro de sus prendas superiores.

- Sí ángel me pide, me quedaré este año, y la pasaremos juntos, toda la noche..- Jeongin tembló avergonzado, cerrando los ojos ante la voz sumamente sensual y baja.

Su corazón...su corazón iba a explotar.

- Frío- se quejó bajito, arqueandose un poco al tacto helado del alfa subiendo por sus costados.

Y claro, ignorando la oferta tan tentadora sin una respuesta coherente y directa.

Divertido Hyunjin se inclinó más cerca del omega, la piel cálida y suave de su cuello llamándolo a frotar su rostro, haciéndose espacio en los gruesos abrigos y respirando con fuerza de aquel aroma que lo enloquecía, demasiado.

Le enloquecía cada que lo aspiraba, cada que tocaba el cuerpo de Jeongin y su mente le repetía como disco rallado que lo que tocaba era tan suyo que dolía, ahí abajo principalmente, pero se sentía tan irreal y creía que sería un momento efímero.

Tenía que serlo, algo tan jodidamente precioso a su lado terminaba siendo efímero.

- Oh oh- Hyunjin sonrió ante la voz dulce y recriminatoria del omega, y es que Jeongin ya se había puesto alerta al sentir la lengua del alfa pasar por su piel, y por lo vulnerable que ponía su cuerpo, estaba más que seguro que estaba prestando atención a los chupetones que solo los días anteriores había creado.

- Solo estoy tocando, si no haces ruido esto no terminará mal, para ninguno- Jeongin se estremeció ante la voz maliciosa del alfa.

- ¿Q-qué ocurre con nuestros aromas?.

- Son betas, ambos- el menor cerro los ojos con fuerza, avergonzado por aquella alocada y tentativa situación al percibir la mano del alfa subir por su vientre hasta su pecho, reaccionando de golpe ante su dedo índice acariciando su pequeño y sensible botón.

- Alfa es cruel- susurro, temblando cuando el mayor soltó un bajo murmuró divertido y siguió con las suaves caricias que ponía de punta cada uno de sus vellos, encogiéndose y temblando por lo placentero y tortuoso que era ser tocado de esa manera.

Inclinándose Hyunjin busco los labios del omega, viéndolo abrir sus ojos nublados y brillantes solo pudo dar un beso esquimal, sintiendo sus respiraciones casi inestables comenzando a reaccionar sincronizados cuando el alfa comenzó a levantar las prendas superiores del menor.

Jeongin se quejó al sentir el aire frío chocar contra su piel, tensandose al apoyarse contra el respaldar y sentir al alfa inclinarse hasta comenzar a besar su torso con marcas levemente rojizas y violáceos.

Subiendo hasta en medio de su pecho, Hyunjin dejó un beso en su piel, demasiado concentrado en la manera frenética en que latía el corazón del omega y poder aspirar el aroma dulce, olía a caramelo y era tan sensual la manera en que lo soltaba, estando excitado e inestable.

- Hyung..-

Cualquier muestra vulnerable de parte del omega se le fue interrumpida por algo metros suyos deslizándose con un golpe en seco.

El guardia abrió la ventanita.

Jeongin sintió que el alma se le iba del cuerpo mientras chillaba avergonzado y sin medir su fuerza tomó el abrigo del alfa y lo estiro con brusquedad hacia arriba con la sola intensión de que tape algo de su torso desnudo.

Con eso consiguió que la cabeza del alfa choque contra el techo del auto y un gruñido de dolor escape de sus labios.

Hyunin ni siquiera se tomó tiempo para procesar el dolor, apoyándose en el respaldar del asiento intentó tapar el cuerpo del omega algo complicado en la manera en que Jeongin se aferraba a su abrigo y temblaba.

- ¡L-lo siento, jefe..- maldijo es voz alta ante la voz temblorosa de su guardia detrás suyo.

- ¡Cierra esa puta ventana!- rugió.

Jeongin se encogió aún más, quejándose ante la voz enojada y solo pudiendo llegar a relajarse un poco ante el sonido de un botón siendo presionado sabiendo que la ventana estaba siendo cerrada, quedándose unos segundos en silencio intentando recuperar el aliento.

- Joder- Hyunjin gruñó ante el dolor punzante en su cráneo.

Apoyándose en el asiento de nuevo el alfa estiro la ropa del omega hacia abajo, claro que ambos ya habían perdido cualquier hormona de calor.

Parpadeando Jeongin acomodó mejor su abrigo y giro a mirar al alfa, estaba demasiado avergonzado e intranquilo pero no podía ignorar aquel golpe que recibió por su culpa.

- ¿E-está bien?, lo siento tanto, alfa- se acercó cauteloso al ver al alfa frotar su cabeza con una mueca de dolor, deslizando sus dedos algo tembloroso por arriba de su cabeza presiono delicadamente en el mismo sitio que Hyunjin frotaba.

Un puchero instantáneo apareciendo en sus labios al verlo saltar levemente por la presión.

- H-hyung..- Hyunjin se obligó a relajarse al ver que rápidamente los ojos del omega se humedecían.

- No, no llores. Solo es dolor momentáneo, pasará- tratando de ignorar el dolor punzante tomó el rostro del omega, viendo su labio inferior temblar tiernamente de seguro aguantando el llanto.

- L-lo siento- negando Hyunjin dejó un sutil beso en la mejilla del menor, sonriéndole con tranquilidad buscando relajarse también.

- Yah, te había dicho que puedes pisarme los huevos y te lo agradecería, esto no es nada, ángel.

Quejándose avergonzado Jeongin se vio más relajado el ver al alfa reír ante su sonrojo. Volviendo a acercar la mano en la zona golpeada y frotando con la mayor delicadeza del mundo, aliviado al notar al alfa encogerse y soltar un suspiro.

Antes de que alguno pudiera decir algo un suave golpe en la pequeña ventana hizo que ambos se volteen hacia su dirección.

Y si la mirada del alfa traspasará materias, el guardia ya se estaría haciendo pipí.

O probablemente ya lo estaba haciendo.

- D-disculpe, jefe...- chasqueando la lengua Hyunjin se acercó a un lado de la odiosa ventana ignorando los botones cercanos.

- Más te vale que sea importante por que detendré este auto e iré por ti a sacarte los ojos.

Jeongin no podía pensar en otra cosa que no fuera lo dulce y romántico que era Hwang Hyunjin.

- L-lo siento, por favor discúlpeme. He recibido una llamada del señor Seo, desea que su presencia en el establecimiento sea lo más rápido posible.

Hyunjin soltó un bajo gruñido, su guardia no sería él único con quien haría correr sangre.

- ¿Menciono algo más?, mira que necesitas convencerme para no morir.

- E-el señor Seo solo mencionó a su padre, Seo Dawon.

Salvado, lo convenció.

Tensándose Hyunjin ordenó los más rápido que pudo sus pensamientos.

No había olvidado a Seo Dawon, quien lideró la trata de omegas a sus espaldas al menos por el tiempo en que él no se había enterado, luego de que Khangpae estuviera al tanto de su traición y Hwang Jinah muriera, no hubo rastro de aquel alfa por más que Changbin lo haya buscado.

Y Seo Dawon no tenía fama por ser idiota y despistado.

Al contrario, era jodidamente inteligente, tenía poder, había llegado a hacer muchas perversidades a espalda de la organización, y por más que siempre era pillado, no era un hombre a quien solo podías matar y ya, Seo Dawon era un alfa a quien Khangpae necesitaba más vivo que muerto, por que aparte de la rebeldía, Hyunjin odiaba admitir que era jodidamente bueno en su trabajo.

Ni siquiera le sorprendía al ser sabedor de lo idéntico que era su hijo, Seo Changbin a sus habilidades.

Solo que Changbin era su mejor amigo, y Dawon ahora, su peor enemigo.

Era quien estaba intentando ir contra su omega, contra Jeongin.

Y Hyunjin odiaba estar siendo consciente que era él quien más cercano estaba a hacer algo que el jefe no podría predecir fácilmente.

Desapareciendo aquí, desapareciendo allá, dejando pistas pequeñas otro lado y dando confusiones para el otro.

Era malditamente impredecible y demasiado complicado saber que estaba planeando, tenía información, hombres, terreno, inteligencia.

Tenía todo lo que tenía Hyunjin, tal vez un poco menos, pero al final de todo, seguía siendo un difícil rival.

- Llama a algún negocio cercano y que me esperen con un auto listo, ustedes lleven a mi omega a la mansión.

- Entendido, jefe.

Girando hacia el omega suspiro ante su mirada expectante y nerviosa, viéndolo ladear la cabeza tiernamente en busca de alguna palabra o incluso orden de parte del alfa.

- Llega a casa y no salgas, aun hay un poco de rocío y puedes enfermar- Jeongin asintió lentamente.

- De acuerdo- Hyunjin se permitió disfrutar la sonrisa tranquila que le ofreció el omega.

Inclinándose repartió pequeños besos en sus labios hasta sentirlo encogerse y escuchar su melodiosa y baja risa. Sonriendo suavemente tomó su rostro y presiono con más intensidad sus labios contra los calientes belfos, sus alarmas saliendo disparados al sentir la tímida y caliente lengua del omega acariciar su labio inferior.

- Sí aún no duermes, recuerda que continuaremos esto en nuestra habitación- enrojeciendo Jeongin río tímidamente solo asintiendo y dejando ir al alfa cuando el auto comenzó a aparcarse a un lado de la autopista de las calles de Seúl.

Recibiendo un beso en su frente vio a Hyunjin bajar del auto mientras una fuerte y helada ventisca golpeaba su cuerpo hasta hacerlo estremecer desagradablemente.

Girando hacia atrás pudo apreciar el auto de los otros cuatro guardias que lo seguían estacionarse metros detrás suyo.

Espero paciente cuando Hyunjin se alejó dejando la puerta levemente cerrada y lo vio ir hacia el auto, viendo a un guardia bajar y abrirle la puerta trasera, el alfa no subió por unos cuantos segundos viéndolo intercambiar palabras con aquel guardia.

Y cuando Hyunjin asintió hacia el y subió al auto, no tardo en reconocer a aquel alfa cuando giro hacia su dirección.

Era Choi Bomin, quien ese momento con un reluciente traje y un abrigo grande se acercaba trotando hacia el vehículo y con una pequeña deslizada ya estaba sentado alado suyo mientras cerraba la puerta y por fin el frío dejaba de ser insoportable.

- Buenas tardes, omega- Jeongin le ofreció una pequeña sonrisa cuando recibió un asentimiento de su parte.

Y luego el viaje fue en silencio.

Choi Bomin alerta a las calles y Jeongin pensando demasiado curioso quien era Seo Dawon.

+

Hyunjin camino por la acera con todos sus guardias rodeándolo, acercándose a la alta puerta ubicado en la parte trasera de aquel club, delante se posicionaban dos guardias a quienes ni siquiera les echo una mirada, ignorando sus reverencias e ingresando cuando le abrieron las puertas y recibió un largo y estrecho pasillo, totalmente iluminado y pulcro, la mayoría de los clubes con entrada VIP eran así.

Caminando con tranquilidad Hyunjin solo podía apreciar el ruido de las suelas de sus zapatos chocar contra el suelo a medida que avanzaban, un leve retumbar escuchándose a metros suyos gracias a la fiesta en los pisos de arriba.

Llegando al final del pasillo encontró la corta escalera de metal, comenzando a subirlo con las manos en los bolsillos giro hacia atrás una vez estuvo arriba, caminando de nuevo por aquel pasillo que esta vez portaba con varias puertas que conducían a salones de encuentros, al final del pasillo y como esperaba, siendo el salón que le correspondía y donde debería encontrar a sus amigos.

De nuevo lo recibían guardias, dando una seña a los suyos para que se queden afuera ingresó cuando la puerta fue abierta para él.

Y como espero, Changbin y Minho se encontraban ahí, en unos cómodos muebles de cuero, con bebidas alcohólicas en una mesita en el centro y un sobre grande de papel, algunos guardias posicionado detrás de ellos quienes le ofrecieron una gran reverencia.

- Concordamos encontrarnos en la mansión y apenas acaba de anochecer, espero que sea importante.

Ambos se mantuvieron en silencio mientras Hyunjin se acercaba al sillón de cuero individual en el centro del salón y se dejaba caer con un suspiro pesado, cruzándo su pierna encima de la otra impaciente ante las expresiones serias de sus amigos.

Vio a Changbin tomar un gran trago de su vaso de whisky, observando sin expresión como soltaba una baja maldición, de seguro el alcohol quemando su garganta.

- ¿Álo?, si se volvieron locos canten una canción de circo- bufo al ver la mirada perdida de Minho.

Changbin lo ignoro, tomando el sobre en la mesa se lo extendió.

Con un suspiro le arrebató de la mano, impaciente rompiendo el papel y sacando el contenido.

De nuevo una carpeta.

- Seo Dawon volvió a aparecer, y no con agradables noticias- Hyunjin abrió la carpeta.

Leyendo mecánicamente el contenido se irritó al ver casi el mismo contenido que la última vez, paraderos, llamadas, mensajes enviados y más traicioneros.

- Es más mierda, ¿qué evita que lo tenga enfrente mío ahora?- murmuró levantando la mirada hacia ambos.

Changbin fue quien le gruñó igual de irritado que él.

- Estuvo compartiendo información importante de la organización, a grupos pequeños, grandes, medianos y algunos que casi te pisan los talones- volviendo la mirada hacia la información Hyunjin maldijo internamente.

Sus ojos fueron a parar en la última hoja en aquella carpeta.

- Esto..-

- El infeliz de Dawon tuvo contacto con un famoso oficial de policía de la capital, y no quieres saber que anduvo haciendo- no, Hyunjin no quería saber.

Tratando de no irritarse más sacudió carpeta entre sus dedos.

- Tenemos comprados a muchos de la agencia nacional. ¿Qué mierda pudo conseguir encima del trato que yo di?.

- Él no tuvo pelos en la lengua, Hwang. Es obvio que dio información más valiosa que fajos de billetes- Hyunjin comenzó a golpetear la suela de su zapato contra el suelo.

Había algo raro, le molestaba esa situación, era sumamente irritante.

Que información...que podía haber revelado ese miserable que él aún no era consciente.

- Piensa maldito idiota. Aquel secreto que por más enterrado que esté, pudo haber salido a la luz- Minho habló por primera vez, se veía incluso más serio de lo normal, su voz sonando exasperada.

Y Hyunjin por otro lado solo sentía que los niveles de irritado ya estaban más que elevados.

Un secreto que por más enterrado que esté, haya salido a la luz.

- No puede ser eso- murmuró incrédulo-. Incluso yo quien no fui el causante de eso, ni siquiera de mí se ha podido sacar esa información, sabiendo lo mucho que odio a Jinah, ni siquiera yo, joder- arrojando la carpeta lejos Hyunjin llevo su cabello rubio hacia atrás más que alterado.

No lograba entender, había algo ahí, como podía ese hombre haber sabido.

- Algo esta mal, y no se a que niveles de molestias estamos hablando- Hyunjin observo a sus amigos carcomerse la cabeza igual que él.

Su cabeza divago, Seo Dawon, había sido amante de casi toda la organización, amante más preciado de su madre, e integrante favorito también.

Si su madre, quien era la mujer más desquiciada del mundo, se atrevió a compartir aquel secreto oculto con ese hombre, significaba que se había enterado de la manera más estúpida e irresponsable, y también...

¿Cómo lo hizo?, ¿cómo logro hacer que Hwang Jinah hable?.

¿Y con que intensión?, que haría con aquella información que con la pérdida de la antigua jefa, la responsabilidad no caía en nadie más que en él, en el nuevo jefe de Khangpae.

Que era lo que no lograba captar su mente...

- Hwang- sus ojos pararon en Changbin de golpe, y cuando sus ojos se encontraron, la respuesta llegó por sí sola sin necesidad de palabras.

Y antes de que siquiera pueda abrir la boca, la puerta frente suyo se abrió de golpe.

Sus ojos oscuros y sin expresión subieron a los cuatros hombres de traje oscuro y armas en manos.

Y aquella respuesta que paso por su cabeza, fue confirmado cuando el beta metros suyos subió su credencial frente suyo.

- Policía Nacional. Hwang Hyunjin estas arrestado por homicidio, incendio agravado, complicidad, contrabando, tráfico de drogas y extorsión.

Para Hyunjin ese solo fue el detonante, de aquella simple situación donde su cabeza solo podía pensar...

En cuanto desearía no haber dejado solo a su ángel.

Holaa AFKKDK, espero y les haya gustado es capitulo, esta cortito pero es para dejar con las ganas 😩

Para los que no saben, publique el prólogo de mi futura obra que lo llevare en desarrollo luego de finalizar Melifluo, para que pasen a darle el visto bueno o malo cuando puedan uwu.

Tengan una linda noche <3.