10 años después

Una pequeña de once años de pelo negro con unos mechones blanco y de ojos verdes corría atreves del bosque tan rápido como podía ir, en repetidas ocasiones resoplo y jadeo en busca de aire, tratando de no perder el aliento antes de que la atraparan. Sus ojos miraban constantemente hacia atrás, sintiendo su adrenalina mezclada con el miedo de no poder dejar atrás a ese ser que la perseguía no muy lejos.

Girándose para mirar hacia adelante de nuevo, jadeo e inmediatamente se detuvo en seco. No se había dado cuenta de que había llegado al borde de la isla, y ahora la única forma de volver sería que la atraparan y saltar tampoco era una opción así que retrocedió, jadeo de nuevo cuando se dio vuelta viendo una figura corriendo directamente hacia ella. Dejando escapar  un grito de terror, fue derribada al suelo, incapaz de escapar del agarre sorprendentemente fuerte de quien la había inmovilizado.

—¡¡Ayla!! ¡Te dije que no me inmovilizaras!!— resoplo enojada

—Perdona hermanita pero la oportunidad apareció— dijo la niña de diez años de pelo pelirrojo y ojos azules, mientras se apartaba de ella— Perdiste Ana— se burlo y se sentó a su lado

—¿Cuándo te volviste tan competitiva?—

—Supongo que lo aprendí de mamá, el abuelo dice que no soporta perder y él tampoco al igual que la abuela—

—Yo espero que Hallfrid no resulte así— 

—Ana estas olvidando de quien es hija—

—Ah es verdad, por cierto y Harold—

—No lo se, lo perdí de vista en cuanto salte las rocas—

—Ahí viene— dijo señalando al pobre chico de catorce años de cabello negro atado en una pequeña coleta y de ojos color miel, que estaba cansado, cubierto de ramas y uno que otro rasguños— ¿No te cansas de seguirnos?—

—Yo me pregunto lo mismo— dijo tratando de recuperar el aire y luego se recostó en el suelo— Estoy considerando cambiar de familia—

—Ya no seas exagerado Dustin—

—Ayla ¿Por qué me sigues llamando por mi segundo nombre y a tu hermana la llamas Ana?—

—Porque ya todos los llaman igual y yo no quiero ser como los demás, por eso te digo Dustin en vez de Harold y a mi hermana Ana en vez de Roxy—

—¿Y Ana qué tienen que ver?—

—Porque mi nombre es Roxana solo que me dicen Roxy— explico Roxy y ambas se levantaron

—Sabes llevo toda mi vida junto a ti y no sabía eso—

—Nunca preguntaste— dijo ella y comenzaron a caminar

—Oigan no sean así, déjenme descansar tan siquiera— se quejo

—Nadie te pidió que nos acompañaras— dijo Ayla

—De hecho si, fue tu mamá y mi tío Dagur—

—Lo sabemos pero te dieron el día libre—

—Por eso las seguí pues su madre me pidió que fueran inmediatamente al muelle—

—¡¡OH NO, LO OLVIDAMOS!!— gritaron ambas y corrieron hacia la aldea

—De nada, yo también las quiero y espero que me comiencen a pagar porque no pienso seguir con eso— murmuro sarcásticamente— Y estoy solo... hablando solo...— siguió murmurando y luego comenzó a tararear— Por que toy solito... noy nadie aquí a mi lado... Enserio necesito amigos o tal vez una novia—

Con las niñas

—Espero que mamá no este molesta— dijo Ayla

—Y si lo esta... Que los dioses nos ayuden— suplico Roxy  llegando al muelle

—¿Dónde estaban?—

—Perdón mamá es que estábamos jugando en el bosque—

—Por esta vez se los paso— dijo volviendo a ver el barco que acababa de arribar— Sean bienvenidos a la isla de los defensores del ala—

—Muchas gracias por recibirnos Reina Meghan— dijo el hombre bajando del barco y a su lado estaba una mujer— Es un honor para mi y mi reino firmar este tratado de alianza—dijo e hicieron reverencia

—El honor es mío Jefe Aron y Jefe Emilie— hizo una reverencia— Les presento a mis hija ella es Roxana, la mayor— Roxy hizo una reverencia— Y ella es Ayla— ella hizo una reverencia

—Un gusto conocerlos— dijeron ambas

—El gusto es nuestro— dijo la Jefa Emilie— De hecho trajimos a nuestra hija— miro al barco donde justamente apareció una niña y se acerco a ellos— Ella es Elizabeth—

—Mucho gusto—

—Igualmente— dijo Meghan— En ese caso mis hijas pueden mostrarle la aldea a Elizabeth mientras nosotros estaremos en el gran salón para firmar el tratado—

—Me parece bien— dijeron ambos Jefes— Pórtate bien— le dijeron a su hija

—Si— contesto ella de manera cansada para que luego los adultos se fueran— Ustedes tienen suerte de que no tener padres sobreprotectores— dijo mirando a las niñas

—Si tu lo dices—

—Así que son Roxana y Ayla—

—Si pero dime Roxy— 

—A mi dime Ayla, no es largo—

—Bien entonces díganme Lise— dijo y comenzaron a caminar

—De acuerdo lise ¿Qué edad tienes?—

—Tengo doce años—

—¡Por fin!— dijo Ayla— Alguien que por lo menos se acerca a nuestra edad—

—¿Cómo? ¿Enserio no hay nadie de su edad?— dijo Lise un poco sorprendida

—No, la mayoría tiene quince y los que son menores son de ocho años para abajo— explico Roxy

—Y eso algunos se aprovechan se eso— dijo Ayla

—¿Por qué?—

—Porque no somos lo suficientemente pequeñas para que nos protejan pero si para proteger a los más pequeños—

—Protegerlos de qué—

—Vaya vaya miren a quien tenemos aquí, a la princesitas— dijo burlonamente un niño haciendo reír a sus amigos

—¡Déjanos en paz Frans!— gritaron ambas

—¿Y que sino lo hacemos?—

—A eso nos referíamos— susurro Ayla a Lise

—Buena esa Isak—

—Cállate Karl— dijeron ambos al él

—Me cayo— murmuro Karl

—Miren chicos, no queremos problemas— dijo Lise

—¿Y a ti quien te metió?— dijo Frans en un tono amenazante

—Nadie pero odio a los abusivos y usted joven lo es— dijo en un tono amenazante

—Vaya esa es la actitud me gusta de una chica— dijo el tratando de acariciarle la mejilla pero Lise lo aparto de un golpe— Lastima muñeca, ya pierdes la oportunidad de estar con un chico guapo, apuesto, fuerte e inteligente— alardeo un poco acomodando su cabello

—¿Enserio?— dijo de manera emocionada lo que confundió a las chicas— ¿Y dónde esta ese chico?— lo ultimo hizo reír a la chicas y a Frans sentirse ofendido— Vámonos chicas solo perdemos nuestro valioso tiempo aquí—

—¡Oigan no hemos terminado con ustedes!— grito Isak

—Mira los iba a insultar— dijo Lise—Pero sus caras es suficiente castigo—

—Uhhh— dijeron los que estaban cerca e Isak la empujo haciendo que ella cayera al suelo

—Mira tu hija de tu...— dijo Isak  levantando la mano para golpearla, Lise puso sus brazos para protegerse pero el golpe nunca llego

—¡¿Qué diablos tratas de hacer Isak?!—

—¡NO TE METAS EN ESTO HAROLD!—

—Es cierto nadie te llamo— dijo Frans

—Lo se y qué si me meto... ya que ustedes estarán en grandes problemas— dijo Harold cruzando sus brazos poniéndose enfrente de Lise— Ya que son un trio de tontos—

—¡No somos tontos!— gritaron los tres

—Oh perdón claro que no lo son— dijo Harold y ellos se tranquilizaron— Solo tienen mala suerte cuando piensan—

—¡¡OOOHHH!!—

—Hijo de la..— dijo Frans lanzándole un puñetazo pero Harold lo esquivo y luego le devolvió el golpe haciendo que se alejara

—¿Alguien más?— pregunto y no contestaron

—La próxima les diremos a sus padres— dijo Roxy

—Bueno por lo menos nosotros tenemos Papá— dijo Karl 

—Oh oh lo dijo— dijo Harold teniendo compasión de ellos

—Cómo te..— decía Roxy

—Yo que ustedes corro— 

—¡Atreves a decir eso!— fue lo ultimo que dijo ella y correr tras ellos

—Bueno ellos se lo buscaron— dijo y luego dio media vuelta— ¿Estas bien?— le pregunto a Lise

—Ah s-si estoy bien— dijo nerviosamente y a la vez estaba sonrojada

—Que suerte— dijo luego le extendió la mano, ella lo acepto y la ayudo a levantarse— Me llamo Harold Dustin Tryggvason—

—Elizabeth Westberg— 

—Más bien Princesa Elizabeth Westberg— dijo Ayla haciendo que Harold se sorprendiera 

—¿Princesa? Alteza— dijo y se arrodillo

—Oye no tienes que hacer eso—

—Claro que debo, le hable de manera irrespetuosa—

—Pero lo hiciste sin saber quien era así que no paso nada— ella retrocedió un poco y perdió el equilibrio pero Harold logro atraparla a tiempo— Hay que torpe, ¿Quiero decir que la tope soy yo— dijo mientras se separaba— Tu eres lindo ¿Qué dije?—

—Bueno aun así perdóneme—

—Oye Harold ¿no es tu hermana la que esta allá?— pregunto Ayla señalando al cielo y él miro en esa dirección donde volaba un dragón y que sobre este venía alguien

—Si, si lo es— dijo mi luego silbo haciendo que el dragón bajara— Lena ¿Quién te dio permiso de subirte a Rex?—

—Hay hemanito no te enojes además ya ni si quera vuelas con el— dijo bajándose de Rex

—Bueno si pero es porque estoy ocupado—

—Si tu como no— dijo Lena sarcásticamente y luego miro a Lise— ¿Quién es ella?—

—Lena ella es la princesa Elizabeth Westberg, princesa, ella es Lena mi hermana—

—Es un placer conocerte— dijo Lisa 

—¿Entonces estas "ocupado"—

—¡LENA!—

—Ya tranquilo peo ahoda que me acuedo, mamá me dijo que te dijeda que vayas aplendiendo este guió— le paso un pequeño cuaderno y Harold o tomo

—¿Pero por qué y para qué?—

—Pues paLa la obra que habrá en Nuevo Berk y tu pelsonaje será Estoico el Vasto—

—¿Qué no era el papel de Ragnar?—

—Y ese es polque, ya que Ragnar se lompió una pierna y un blazo—

—Bien— murmuro sin ganas de aprenderse eso— Bueno princesa fue un gusto conocerla pero me tengo que retirar— dijo camino hacia Rex

—Oye— Lena llamo a Lisa y ella se agacho para estar a su altura— Si quedes tener la atención de mi hermano solo debes sel muy seguda de ti misma—

—OK—

—Nos vemos— dijo y subió junto a Harold a Rex para luego irse

—Oye Ayla, ¿Dónde se encuentra Nuevo Berk?—

—Bueno esa isla se encuentra a una semana al este, por barco, pero a cuatro horas en dragón—

—¿Y de que obra van hacer?—

—Oooooohhh por dónde empiezo— dijo y ambas se fueron mientras Ayla le explicaba sobre lo que trataría la obra

Continuara...