ℂ𝔸ℙ𝕀𝕋𝕌𝕃𝕆 𝟙𝟚
Mi novio y yo...
Meissa iba caminando por los pasillos hacia el gran comedor.
—Meissa...—Dijo Remus llegando a su lado
—Hola, Rems—Dijo Meissa—¿Todo bien?
—¿Haz visto a los chicos?—Pregunto Remus
—No. ¿Algo malo?
—Se supone que debimos vernos en el bosque hace como 20 minutos, pero nunca aparecieron.
—Seguramente hicieron una broma y Mcgonagall los castigo—Dijo Meissa—Ya sabes como son cuando los dejas sin supervisión.
—Si...seguramente—Dijo Remus—¿A donde ibas?
—Al gran comedor a ver si aún había comida—Dijo Meissa—No iba a venir. Pero después de unos minutos me dio hambre.
Ambos se rieron. Ambos comenzaron a caminar mientras platicaban. Ambos vieron a una chica castaña acercarse, Meissa no le tomó importancia ya que, no pensó en que fuera a hablar con ellos.
—Hola.—Dijo la chica
Meissa se sorprendió, pero aún así le sonrió.
—Hola, Mary—Dijo Remus
—¿Eres Meissa, cierto?—Pregunto Mary viendo a Meissa
Meissa asintió—Si...soy yo.
—Llevó días buscando a tu hermano...
—¿Sirius?—Dijo Meissa confundida
—No, Merlín, no. A Regulus—Dijo Mary
Meissa frunció el ceño y se mordió el labio inferior. Pues Mary había llamado por su nombre a Regulus, y Meissa sabe que Regulus odia que lo llamen por su nombre. A menos, de que sea alguien cercano a él.
—¿Qué sucede con el?—Pregunto Meissa
—Me prestó unos apuntes, pero no lo he visto. Y quería saber si tú lo haz visto—Dijo Mary—Es que, esto de traer los apuntes de un lado para otro por si lo veo o no.
—Pues...si quieres dámelos y yo se los doy cuando lo vea.
—¿Segura? No quiero que...
—Está bien. Le dire que lo estuviste buscando—Dijo Meissa
—¡De acuerdo! Muchas gracias—Dijo Mary dándole los apuntes
Una vez Mary se fue, Meissa aún estaba confundida.
—Que raro...
—¿Por qué?
—Llamó a Regulus por su nombre, y el odia que personas no cercanas a él, lo llamen así.
—A lo mejor son amigos—Dijo Remus alzándose de hombro
—Eso es aún más raro—Dijo Meissa—Regulus no tiene amigas mujeres.
Remus iba a hablar, pero otra persona se hizo presente en frente de ellos con una sonrisa.
—Meissa...hola—Dijo Matthew Davis
Meissa rodó los ojos.
—Te ves fabulosa el día de hoy—Volvió a hablar Davis
—Yo siempre, Davis. A parte, sólo es el uniforme—Dijo Meissa—Mira, no tengo tiempo para esto.
—Vamos, Meissa—Dijo Davis pasándole un brazo por los hombros
—No me toques—Dijo Meissa—Deja de una vez esa "obsesión" que tienes conmigo.—Meissa hizo comillas
—Ya te dije que no es una obsesión. Algún día, tú serás Meissa Davis.
—Ni en mis peores sueños—Dijo Meissa—Y si me permites...—Meissa tomó la mano de Remus—Mi novio y yo, tenemos cosas que hacer.
Meissa comenzó a caminar jalando a Remus. Segundos después Davis los alcanzó.
—¿Tu...tu novio?
—Si, Davis. Te lo he dicho siempre...¡No me gustas! ¡No me gustaste! ¡No me gustarás!
Davis no hablo, solo tiro el jugo de cereza que llevaba en la mano. Meissa se sorprendió, pero no hizo nada.
—¡¿Qué te pasa?!—Dijo Remus quitando a Meissa del frente
—Tu no te metas, Lupin—Dijo Davis y enseguida le tiro el jugo que le quedaba en el vaso
—Ella solo quiere que la dejes de molestar—Dijo Remus
Meissa veía a Remus apretar los puños a sus costados. Se le marcaban las venas.
—No te importa—Dijo Davis dándole un golpe en la cara a Remus
Meissa se sorprendió al ver que Remus le regresaba el golpe. Ambos solo intercambiaron algunos golpes, hasta que Meissa con el cuaderno de apuntes de Regulus le dio en la cabeza a Matthew.
—¡Suficiente!—Dijo Meissa—¡Largo de aquí!
—Pero...
—¡Largo!
Davis se fue, y en el camino tiro el vaso al suelo.
—¿Estas bien?—Pregunto Meissa
—¿Tu estas bien?
—Es un...no importa. Vamos, te llevaré a mi habitación para que te limpies. Y puede curarte un poco.
—Puedo ir a la mía, Meissa.
—No, después de que por mi culpa te mancharan y te pelearas...es lo mínimo que puedo hacer.
[...]
—Puedes entrar al baño y darte una ducha si quieres—Dijo Meissa entrando a la habitación
—No tardaré—Dijo Remus caminando hacia el baño
—Eso espero—Dijo Meissa
Escuchó la puerta del baño cerrarse. Meissa se quito la camisa y la tiro al suelo.
Buscó entre uno de sus muebles algunas cosas para poder curar a Remus. Una vez las encontró, se acostó en la cama en espera a que Remus saliera. Agarra de su cajón—que estaba a lado de su cama—una revista, y comenzó a leerla.
"El Quidditch es el deporte más popular en la comunidad mágica. Es una especie de fútbol-baloncesto aéreo que se juega volando sobre escobas..."
—Sigo creyendo que es muy peligroso—Murmuro Meissa
Escuchó la puerta de la habitación abrirse, y abrió los ojos ligeramente cuando vio a Apolo en la entrada de ella. Remus ya había salido del baño, pero ahora estaba sin camisa. Se levantó rápidamente de la cama dejando aún lado la revista. Se puso de nuevo la camisa manchada.
—Apolo...yo...puedo explicarlo...—Dijo Meissa mientras Remus se acercaba para intentar aclarar las cosas
—Solo ocurrió un accidente esta mañana...—Intentaba explicar Remus
—Claro, yo...te veo abajo Mei-Mei—Dijo Apolo cerrando la puerta
Remus y Meissa quedaron en un silencio algo incómodo.
—Te curará un poco, ¿de acuerdo?—Dijo Meissa mientras agarraba las cosas
—No tienes que hacerlo...puedo ir con Poppy y...
—Siéntate—Dijo Meissa
Remus se sentó en la cama. Y Meissa comenzó a curarlo.
—A veces me pregunto de donde sacas tantas cicatrices—Dijo Meissa mientras lo curaba
Remus trago saliva nervioso.
—Gracias por defenderme, por cierto—Dijo Meissa
—No tienes que agradecer nada, Meissa—Dijo Remus—Eres la hermana de uno de mis mejores amigos.
Meissa sonrió.
—Está cicatriz es reciente, ¿cierto?—Dijo Meissa viendo una cicatriz en el rostro
—Si—Dijo Remus
—Es raro...siempre llegas con nuevas cicatrices después del final de mes—Dijo Meissa
—Si te digo algo...¿prometes guardar el secreto?
—Completamente, Remus. Puedes confiar en mi—Dijo Meissa
—Yo...yo soy...
—¿Un hombre lobo?—Dijo Meissa con una sonrisa
—¿Que? ¿Como sabes?
—Fue fácil saberlo—Dijo Meissa—Tienes cicatrices...siempre están en la enfermería un día después de la luna llena. Sirius y James son animagos.
—Entiendo que Sirius te haya contado que es animago...¿pero James?
—De hecho...a Sirius se le salió.
—Ahora tiene más sentido—Dijo Remus—Entiendo si por lo que te acabo de decir tú ya no quieres...
—Alto ahí, Remus—Dijo Meissa—Se que no somos los mejores amigos. Y agradezco que hayas tenido la confianza para decírmelo. Pero no por eso me alejaré de ti. O te tendré miedo, ¿de acuerdo? Es más, de ahora en adelante, yo los esperaré en la enfermería para ayudarte.
—Meissa, te lo agradezco...pero no debes...
—Lo haré aunque me digas que no.
¿Que les pareció?
¿Meissa leyendo revistas de Quidditch? 🤫🤫
Nada mas deja que Apolo le diga lo que vio a Sirius y James.
Teorías...
Recuerden que pueden encontrar la otra parte en el perfil de Lune_black
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