Tener que lidiar con todo esto era una gran perdida de Tiempo, quien se atrevia a ponerse en sus talones para echarle en cara todos sus errores como emperador.

El era el gobernante de este Reino, su querido reino Baharuth no por algo era despiado con aquellos que eran en el pasado sus nobles inservibles e insuficientes.

Son un par de Imbeciles!—exclamo con fuerte enojo y un impulso de ira con querer destrosar todo que estubiese a su alcanze.

No pudo pensar bien con claridad, su cabeza daba vueltas y no podia controlar su Ira hacia sus guerreros oscuros, y pensar que Todo este tiempo la mitad de sus ciudadanos quisieron revelarse contra el, hacer una rebelión a estas alturas solo perjudicaria su Imagen como emperador.

Y si le pedimos ayuda al Reino echisero?—pregunto con seriedad uno de sus sirvientes, su mirada solo estaba perdida pero se notaba su inquietud.

Estas demente?!—respondío con gracia mientras se retorcia de la locura y su propia desesperacion.

S-su majestad..—pidio clemencia uno de sus sirvientes preocupado por el estado de animo de su emperador.

El ambiente se habia vuelto desagradable, era como si una bruja les habia tendido una maldición, aunque no les sorprendia mucho eso cualquier cosa podria pasar en este caotico mundo.

Sin pensarlo dos veces pudo notar cierta siluta observandolo desde la alcoba, por su silencio y su siluta amenazante dedujo que talves podria haber venido por el.

Olvidenlo, vayanse a casa.—menciono mientras sostenia su palma de su mana en su frente como signo de su frustracción.

Pero mi Señor!—exclamo uno de sus guerreros personales no convencido con su decisión.

Todos afuera.—sentencio con seriedad hacia sus subditos presentes mientras mantenia su notorio estres presente.

Al no ver nada relevante que hacer,decidieron captar la orden obedientemente llendo no asi contra los Ideales de su emperador.

Entendido su majestad.—respondieron con obediencia Todos, mientras que algunos solo miraban un tanto preocupados por el estado de Salud de su gobernador Jircniv.

Una ves que estubo a solas aquella presencia se manifesto de manera silenciosa.

Fufufu~, es bueno conocerlo en persona emperador Jircniv.—comento con alabanza hacia su persona.

Que es lo que quieres?—Ahora mismo tenia tantas dudas muy serias que queria preguntarle; pero aun era consciente que no debia precepitarse a Tanto manteniendo aun la guardia.

Sabes..,vi lo que sus insolentes pueblerinos hacian.—susurro con descaro mientras agachaba la mirada.

Como si fuera algo casual de la vida, aquel ser de forma un poco amenzante lo observo a detalle mirando de cerca su costosa vestimenta, examinando con cuidado si tenia algo de valor en su persona.

Como lo supuse, no sirbes de mucho..—dedujo con seriedad, su respuesta era clara y precisa asique no habria ningun problema si lo decía.

Eso solo puso en más aprietos al rubio, no pudo evitarlo y se arrodillo.

N-no se lo que quieres..,pero p-por favor no me mates.—solicito con angustia mientras que aun intentaba estar al margen con el sujeto.

No, no lo hare porque me eres utíl ahora.—se sincerero con el mientras veia como este ya relajaba ahora su postura.

entonces.?—pregunto dudoso.

Eres parte ahora de nazarick, no puedo permitirme matarte ahora sabiendo que puedo usarte como mi marioneta.—esa respuesta no fue mucho de su agrado pero acepto eso, el no era lo suficiente fuerte como para enfrentarlo.

Pero luego recordo a Ainz, si este sujeto solo queria usarlo a como un perro humano bajo su mano ebtonces tenia el derecho de replicar el porque.

Debia arriesgarse aunque sea por su orgullo,debia intentar persuadir a la criatura.

No creo que al señor Ainz le agrade mucho la Idea.—

Esto llamo la atencion del sujeto, quien solo se burlaba de el, de lejoz se notaba su macabra sonrisa.

Al Señor ainz dudo mucho que le importe, sabiendo que esto esta bajo las manos de su propia creacíon no creo que le preocupe tanto. —ante tal declaracíon el rubio de casta grises quien se mostraba confiado al principio, se vio abrupto por tal confesíon.

Ya era Todo un caso perdido, ahora el seria la mascota de aquel ser que fue creado por ese mounstro arsurdo de
harto Poder magico.

Supongo que es un echo.—exalto con rendicíon, de igual manera ya no importaba nada era un echo irreversible.
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Regrese, solo para dar esta dedicatoria a aquellos que son fanaticos de overlord y quienes votan por mi libro.
Muchas gracías.