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Una racha de rojo y cruzó los pasillos del cuartel general de Maverick Hunter. Zero estaba empezando a preocuparse, X no estaba a la vista. Ya había buscado en el dormitorio de X sin suerte y en cualquier otro lugar en el que pudiera pensar que estaría el hunter azul. También preguntó a los amigos de X, incluido Axl antes de emprender una misión, pero fue en vano.

¿Dónde podría estar? Espero que no haya sido capturado de nuevo. Pensó Zero mientras revisaba el dormitorio de X por última vez.

Cuando Zero cerró de nuevo el dormitorio de X, estaba tan perdido en sus pensamientos que no se dio cuenta de que Alia estaba detrás de él hasta que se topó con ella, ambos cayendo sobre su espalda. Eso sacó a Zero de ello.

Alia: No hay suerte, Zero? -Preguntó Alia, levantándose del suelo.

Zero: Ni siquiera un rastro. -El rubio vestido de rojo respondió desanimado mientras se levantaba.

Alia: Informé a la sala de reuniones. Creemos que lo hemos encontrado.

Su tono era tranquilo y algo triste mientras caminaba hacia la sala de reuniones. Zero la siguió en silencio, algo estaba muy mal.

Su boca se abrió un poco ante la noticia, sus pensamientos corrieron más rápido que antes, y no podía creer lo que veía y oía. La imagen que tomó Alia mostraba una tundra que había sido nivelada con una figura azul observando desde un acantilado.

Zero: ¿X?, ¿Se ha ido Maverick? Pensé que era inmune al virus. -Dijo Zero con incredulidad.

Signas: Eso es lo que pensamos también, Zero. Toma tu unidad y capturenlo antes de que se adentre en la civilización. -Signas respondió estoicamente.

Un recuerdo jugando en la cabeza de Zero.

X: Zero, si me convierto en un Maverick, tu tendrás que encargarte de mi.

Zero: No seas ridículo. Ahora date prisa en volver.

Desapareció y reapareció en su armadura Absoluta, reuniendo sus pensamientos.

Zero: No, voy a ir solo.

Antes de que alguien pudiera decir algo, el rubio pálido desapareció en una racha de ónix.

Una tormenta de nieve había levantado la tundra donde supuestamente se había visto a X. Zero caminó lentamente a través de la nieve pesada, el viento frío lo azotó en la cara con fuertes ráfagas. Todo era completamente blanco, su visión estaba muy dañada por los copos de nieve que salían de sus ojos, parte de ella aterrizó en su cabello de platino, el viento hizo que algunas de las hebras subieran. No se molestó en intentar volar, la dirección del viento no lo dejaría llegar muy lejos y no podría ver a dónde iba.

Después de lo que parecieron horas de pisar nieve y enfrentarse a fuertes vientos, la tormenta desapareció. El rubio se encontró acercándose a una colina que terminaba en un acantilado. Con su visión regresada, notó algo azul en el borde del acantilado. No tenía dudas de quién era, solo un reploid se veía así.

Zero tenía razón, era X, de espaldas a la parte de la tundra que había nivelado. Sabiendo que el cazador vestido de negro estaba detrás de él, la cabeza de X giró ligeramente a la izquierda.

X: Entonces, has venido. -Dijo en tono siniestro.

Cuando el Maverick azul se volvió hacia él, Zero no vio los ojos verdes que tanto amaba. En su lugar tenia ojos de rubí, brillando con malas intenciones. Una sonrisa siniestra en la cara de X ayudó a desprender la vibra malvada que Zero sintió exudar de él.

Zero gruñó humildemente y cargó contra él, llevándolos a ambos por el acantilado hacia el terreno baldío nivelado que había debajo, golpeando a X con fuerza contra el suelo. Él apretó los dientes con rabia.

Escoria Maverick. Pensó para sí mismo.

Un zumbido llenó sus oídos. Rápidamente soltó el cuello del androide más pequeño y saltó a un lado, pero era demasiado tarde. El tiro cargado de X hirió gravemente el costado de Zero, su sangre salpicó al Maverick azul y lo tiró a la base del acantilado.

X se echó a reír como loco mientras se acercaba lentamente al herido Zero Absoluto.

X: ¿Eso es todo? Qué lástima. -Él gruñó cuando se acercó.

Zero yacía justo debajo del acantilado, inconsciente. En ese momento, otro recuerdo se jugó en su mente. La batalla de él y X durante el incidente de Eurasia y cómo había esperado que nunca más tendría que luchar contra su preciado amor.

Mientras estaba inconsciente, el pequeño Maverick comenzó a patear a Zero en su nueva lesión, su risa resonando en el área. Luego levantó a Zero y lo golpeó varias veces en la pared del acantilado.

La sangre comenzó a escapar de la boca del hunter alado cuando se despertó y abrió los ojos. X agarró el cuello de Zero mientras golpeaba su espalda contra la pared una vez más. El único ruido de él fueron sus gruñidos al impactar.

X: ¡Contraataca! ¿Por qué no te defiendes?
-X exigió.

Zero: No me has dejado nada más por lo que luchar. -Zero logró decir débilmente.

Esto hizo que X se detuviera y mirara a los ojos de color azul pálido de Zero. En ese instante, Zero vio que los ojos de X pasaban del rojo al verde jade normal.

El rubio se arrodilló cuando lo soltó, agarrándose el costado, mirando y escuchando mientras X se daba la vuelta, alejándose temeroso, agarrando su casco y llorando de dolor. Los gritos de X lastimaron los oídos de Zero cuando los sonidos hicieron eco en el área, haciéndolo bajar la cabeza.

Después de unos minutos de esto, los gritos de X se detuvieron cuando se encontró de rodillas. Se levantó lentamente, mirando a la izquierda y luego a la derecha.

X: ¿Dónde... estoy? ¿Qué estoy haciendo aquí?

El Maverick azul se miró a sí mismo, sorprendido de ver manchas de sangre en su armadura.

X: ¿Sangre?

Miró detrás de él para ver dos grandes salpicaduras de sangre en la nieve. Uno no estaba lejos de él y el otro...

X se horrorizó cuando vio a Zero contra el acantilado y la segunda salpicadura a su lado.

X: ¡Zero!

Exclamó mientras corría hacia el cazador vestido de negro. Los ojos de Zero se habían cerrado, pero escuchó los pasos de X acercándose. X levantó con cuidado la cabeza del cazador, jadeando a la sangre que escapaba de su boca, las marcas de agarre en su cuello y su lesión lateral expuesta.

X: ¡¿Qué he hecho?!

Se lamentó tristemente, las lágrimas escaparon de él y se deslizaron por su rostro. Abrazó a Zero con fuerza, pero fue considerado con sus lesiones. Los ojos del rubio se abrieron, sintiendo el calor de X. Estremeciéndose, lentamente y con cuidado envolvió su brazo libre alrededor de X, observándolo de cerca.

X: Lo siento, Zero, lo siento mucho. -X lloró.

Zero no dijo nada y empujó al lloroso Maverick sobre su regazo, abrazándolo con más fuerza. Sabía que no era culpa de X que fuera Maverick. No podría haber sido, X no era así. La cara de X se sonrojó ligeramente cuando sintió que se acercaba. Observó de cerca la lesión en el costado del rubio, continuó goteando. Zero tendría que ser parcheado o vendado allí.

X: Por favor, Zero... Antes de que el virus vuelva a apoderarme de mí.

Zero sabía lo que X quería decir y levantó la cabeza del hombro del Maverick azul. Besó suavemente los labios del oji esmeralda antes de morder salvajemente el cuello de X, haciéndolo caer inconsciente sobre el hombro de Zero. A pesar de lo débil y mareado que se sentía, el rubio no perdió el tiempo volando hacia el cuartel general.

Axl fue el primero en verlos regresar.

Axl: Hola chicos, ¿cómo es-?

El reploid pelirrojo se detuvo al ver las heridas de Zero mientras pasaba. El cazador de alas negras no prestó mucha atención a Axl. Estaba demasiado concentrado en llevar a X a la enfermería para reparaciones. Colocó con cuidado al inconsciente Maverick en el banco de una de las habitaciones, se arrodilló a su lado y se desmayó. Cuando Lifesaver y las enfermeras entraron, rápidamente llevaron otro banco para el rubio. Las enfermeras trabajaron en las lesiones de Zero y Lifesaver trabajó en X.

Después de que habían sido reparados, fueron enviados de vuelta a sus dormitorios. El médico informó que X iba a estar bien, pero a Zero le tomaría algo de tiempo curarse y que necesitaba mucho reposo en cama. Insistieron en que X dejara a Zero solo, pero se sentía tan culpable, dejándolo solo.

A la mañana siguiente, X se limpió y se coló en el dormitorio de Zero. En silencio abrió la puerta de la habitación de Zero, el rubio parecía estar dormido. El cazador vestido de azul cerró silenciosamente la puerta y se sentó a un lado de la cama de Zero, bajando su cabeza sobre ella y entre sus brazos, cerrando los ojos.

El cazador más grande abrió un ojo adormilado y notó que X estaba a su lado, extendiendo el brazo y levantando la cabeza. X tenía lágrimas corriendo de nuevo por su cara y el rubio se las secó con el pulgar cuando X abrió sus ojos esmeralda.

Zero: Deja de llorar, X, tu sistema de reparación automática es inmune al virus Maverick. Claramente, otra cosa causó que te infectaras. Hablaremos de eso más adelante.

Zero dijo con firmeza, desactivando la armadura y el traje de X, quitándole el casco. X observó en silencio mientras Zero colocaba su casco a un lado en la mesita de noche. Su mirada todavía estaba fija en el costado del rubio con el torso desnudo. Las enfermeras lo habían vendado, pero el oji verde no podía superar el daño que le había hecho a su amante.

El rubio se acercó y rápidamente llevó al oji esmeralda a la cama con él. Un rubor de sorpresa ocupó la cara del hunter más pequeño cuando aterrizó a varios centímetros de Zero.

Zero: Vamos, ya te he perdonado, deja de preocuparte.

Zero sonrió mientras acercaba a X y gentilmente agarró su mano. X sollozó mientras entrelazaba sus dedos entre los del cazador más grande.

X: Eres el mejor, Zero. -X sonrió.

El rubio los envolvió a ambos en las mantas y trajo a X contra él. La cabeza del castaño descansaba sobre el pecho de Zero, donde estaba su corazón, y pronto se quedó dormido. Zero apoyó la cabeza en el hombro de X con una sonrisa y se unió a él en su sueño.

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Me extrañaron? Yo si a ustedes :3 💙💙💙 Recuerden que cuando pueda actualizaré los quiero mucho cuidense mis gatit@s