La habitación se inundó de feromonas, siendo una mezcla entre el dulzor del omega y la presencia imponente del alfa.

Euihyun se encontraba sumamente emocionado al ver el miembro del menor, le parecía un deleite saber que dicho pedazo de carne entraría en su interior y le haría retorcer de placer. Incluso su entrada estaba palpitando, con ganas de recibir todo de su alfa.

A pesar de que Taeju estaba sin bóxer, no se acercaba a meterlo. Estaba completamente seguro de que iba a seguir sus instintos, que le indican protección a su omega.

Así que, en una búsqueda por tranquilizar la excitación de este, decidió hacer otra cosa.

Lentamente, sus manos elevaron las piernas del pelinegro y dejó a la vista toda su intimidad.

Euihyun aunque estaba un poco confundido, no opuso resistencia y se quedó expectante a lo que podría pasar.

Taeju, sin miedo, introdujo su lengua y se abrió pasó en las paredes internas del mayor, mezclando su saliva con los fluidos que salían de este.

Habilidoso, rápido y muy insistente, su boca a veces daba pequeños besos por esa zona y su lengua llegaba hasta lo más profundo de su ser, humedeciendo por completo la zona y absorbiendo cada escencia que salía del omega.

Los fluidos de Euihyun eran deliciosos, prácticamente podría volverse adicto a eso y tomarlo como comida diaria. Su sabor dulce lo invitaba a seguir tomándolo, porque no resultaba empalagoso.

Euihyun, sorprendido simplemente se limitó a gemir y llevó sus manos a la cabeza del pelirrubio, intentando alejarlo de su intimidad. Ya le había dicho lo mucho que lo quería dentro, ¿por qué simplemente no le hacía caso?

Sin querer, volvió a fruncir el ceño, pero ya no iba a suplicar. Ahora, se centraría más en la caricia que le brindaba el menor.

Era tan gustoso poder sentir esa blanda lengua ingresar dentro suyo, era una sensación al inicio extraña, pero con el paso del tiempo estaba acostumbrándose por completo.

Todo iba bien, su cuerpo retorciendose de placer y sus pies apretados, intentando lidiar con el placer. Todo era perfecto, él jalando los cabellos de su pareja con desesperación. Todo era bueno, hasta que Taeju se detuvo.

Euihyun protestó inmediatamente con un jadeo lastimero, estaba tan cerca de su orgasmo que le parecía una maldad que su pareja se hubiera detenido en ese instante. Su entrada, rojiza y palpitante estaba esperando más estinulación.

El alfa lo miró directamente a los ojos y sonrió, relamiendo sus labios y acercándose a la boca del mayor, besándolo con suavidad.

En medio de dicho beso, Taeju tocó el miembro del omega y acercó su propia polla, pegando ambas y envolviendo con sus manos.

—- ¿Q-qué haces? —- preguntó el omega, en medio de tartamudeos. No quería ver hacia abajo, podía notar como el miembro de su pareja era más grande que el suyo y eso, era un poco intimidante y vergonzoso.

El pelirrubio siguió con su labor, llevando sus manos de arriba hacia abajo, masturbándose y masturbando a su pareja al mismo tiempo. Estaba cerca a llegar a su climax, luego explicaría la situación.

Sus fluidos se mezclaban a la perfección, llenos de la sensación de lujuria que tenían al estar juntos. La presión que existían entre ambos, era excitante, podían sentir la vibración de cada uno.

El pelinegro arañó la espalda del alfa, sintiendo como su liberación nuevamente estaba cerca. Sus emociones se desbordaban y su corazón latía ferozmente, haciéndolo temblar más de lo acostumbrado.

Una oleada de placer vino, recorriendo cada centímetro de su cuerpo, llegando hasta el último de sus cabellos. Su abdomen vibraba, su cuerpo temblaba y su respiración se habia vuelto completamente irregular, teniendo que inhalar varias veces para recuperar el oxigeno que había perdido.

Sus ojos, por pura reacción, se llenaron de lágrimas, desbordando el placer que sentía y estaba mordiendo su labio inferior para acallar los pequeños gritos unidos a gemidos que inevitablemente soltaba.

Su abdomen, se habia llenado de un liquido blanquecino, tanto suyo como del alfa. Pegajoso, de olor neutro y un poco espeso que lentamente se iba aguando.

Por su parte, Taeju había cerrado los ojos por un breve instante, justo después del clímax del omega. Pues, se había encargado de observar hasta el mínimo detalle en las expresiones de este, para luego, repetirlo una y otra vez en su mente.

Sonrió inconscientemente, recordando el sonrojo en el rostro de su omega y su mira desafiante, era por completo un deleite saber lo mucho que ambos disfrutaban sus encuentros juntos.

Su carga, había sido inmensa, siempre su primer climax era así y estaba más que satisfecho con eso. Suspiraba constantemente, intentando tranquilizar sus alocados sentimientos, seguido de una ola de autocontrol.

—- Lo siento —- susurró Taeju cuando finalmente pudo hablar con normalidad—- Mi instinto me dice que no puedo meterla.

Euihyun abrió los ojos, un poco avergonzado, ahora entendía porqué se negaba a entrar a su interior. Se sintió abochornado por su insistencia, sabiendo que era algo que no podían hacer.

Pero, ¿por qué el alfa era el único con instinto? 

¿No se suponía que la persona que llevaba el bebé debería saber lo que es mejor?

Le resultaba un poco extraño, pero sin duda haría caso a la recomendación de su alfa. De todas formas, no es como si pudiera seguir, estaba realmente cansado, soportar tres orgasmos seguidos no era fácil.

A pesar de que Taeju no había completado con la penetración, podía sentir sus piernas flaquear, completamente débiles. Y realmente necesitaba tiempo para recuperarse.

—- Vamos a tomar un baño —- propuso el alfa, abrazando el cuerpo desnudo de su omega. Acariciando especialmente el vientre de este.

Euihyun asintió, llevando sus manos y poniendolas alrededor del cuello de Taeju, susurrando suavemente que quería ser cargado. Y recostando por completo su cabeza en el hombro de su alfa, sintiendo una tranquilidad inmediata.

Agradecido de que todos los malentendidos se eliminaran y que, en su pequeña burbuja de cariño, existieran solo Taeju y él. Lo amaba, realmente lo hacía. Y se sentía tan seguro con él.

Con mucho cuidado, el alfa hizo caso a la petición, elevando al mayor y cargándolo tocando sus caderas, para evitar que se cayera le ordenó que rodeada su cintura con sus piernas.

Y como si fuera un bebé, lo cargó hasta llegar a la ducha.

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Continuará...

Holi! Espero que les haya gustado el cap. 

Y quisiera comentarles de esta pequeña historia (recopilación de one-shots) con temática navideña jsjs.

Habrá muchisima dulzura, gogogo y risas.

Empecé publicando de Taeju y Euihyun, de ahí seguirán de Jaekyung x Dan y Seungho x Na-kyum

Espero les guste y le den mucho apoyo, ¡gracias! 💕