-"santa mierda que me ha bañado desde que naci, llena eres de mierda, maldita sea tu bendición, no dejes que más mierda me cague la existencia, por una vez en tu jodida existencia impide que pise la mierda que dejas en mi camino, amén".

Hizo una reverencia luego de haber entrado a la sala de reuniones del palacio garnet.

-saludos al sol naciente de obelia, su majestad, el emperador.

Cuando se enderezó mantuvo sus ojos cerrados entrelazando sus manos a la altura de su vientre.

-"puto sea el dios de este mundo, que te joda tu pinche madre hijo de re mil" -abrió lentamente sus ojos encontrándose con un par de ojos cerúleo que la miraban fijamente.

-tienes un mana peculiar pero eres una mujer normal.

Incluso rimo, que hermoso halago.

Sonrió amable mientras era examinada por la mirada del rubio.

-"manten tu vista en sus ojos, no mires su cuerpo pecaminoso, no lo mires mujer!, eres una guerrera no lo mires!".

-la hija de Jim desea conocerte, espero que complazcas todos sus deseos.

-"complace a tu madre cabron suculento" es un verdadero honor estar ante usted su majestad.

El emperador se apoyó en el sillón y cerró sus ojos.

-puedes sentarte.

Nuevamente hizo una pequeña reverencia y se sentó en el otro sofá.

El silencio había reinado y solo se mantuvo mirando a los dulces que estaban ante ella.

-"mini Diana ven rápido mujer, tu padre por más sabroso que se vea es un joto".

Mordió su lengua al ponerse nerviosa, estar en la misma habitación que uno de los personajes principales del manhwa que leyó en su vida pasada la ponía incómoda.

Y más cuando éste la miraba en silencio examinando su mana.

[Maldito]

Mantuvo su vista en su regazo.

[Está. Maldito]

[Aléjate]

[La. Muerte. Lo. Persigue]

Se contuvo en suspirar al escuchar los susurros.

Miro de reojo a la vengan viendo que una mariposa se había posado en el vidrio mientras aleteaba levemente.

-"veo gente muerta we".

Otra mariposa se posó en la ventana.

[Maldita. Muerte]

Las puertas fueron abiertas dejando ver a un rubia de 8 años que sonreía alegré.

La Docoi se levantó e hizo una reverencia.

-gloria a su alteza, la princesa -sonrió amable a la rubia que le devolvió la sonrisa.

-mucho gusto Lady!.

La menor terminó sentada al lado de su padre mientras miraba emocionada a la mayor.

-he esperado ansiosa este encuentro, escuché muchas cosas de usted, es considerada la prodigio de la generación de la academia de medicina!.

-me halaga su alteza, es un honor ser conocida por usted, espero poder saciar toda su curiosidad -cerró sus ojos sonriendole.

-"es joven pero muy talentosa" me gustaría aprender un poco de su oficio, estoy interesada por la medicina.

-con gusto responderé sus dudas.

Claude concentró su mirada en los ojos de la mujer.

Se notaba nerviosa e inquieta, pero tras eso había una extraña tranquilidad y emoción.

Acaso no le temía?.
Parece que un poco, pero había algo que le daba la seguridad de que él no la mataría.

Como si ella lo conociera.

O acaso confiaba mucho en su suerte?.

-fue un gusto conocerla Lady Eneida, leeré los libros que me recomendó, espero que disfrute de su estadía en la ciudad imperial.

La princesa le sonrió alegré y totalmente satisfecha por la charla que tuvieron.

Fueron 4 horas largas de preguntas y respuestas.

Ni cuando hacia doble turno en el trabajo se cansaba tanto, estuvo todo el tiempo nerviosa e inquieta.
Luego de 1 hora la emoción se fue y ya quería largarse de ese lugar.

Odiaba cuando le preguntaban sobre sus cosas personales, las aborrecía.

-cuando guste volveré a responder sus dudas "ojalá nunca nos veamos linda Athy, eres hermosa y divertida pero muy estresante mi cielo".

Miro al emperador e hizo una reverencia.

-gloria y bendiciones su majestad, su alteza.

El rubio ni siquiera la miro y ella salió siendo guiada por un caballero.
Cuando las puertas se cerraron sus hombros decayeron un poco.

Quería llegar y darse un baño, esa charla fue muy estresante.

-gracias por haber aceptado la invitación Lady, su alteza estaba muy emocionada por este encuentro.

Ante esa nueva voz miro a su costado y se sorprendió al ver unos ojos grises.

E. Era Felix!.

Incluso su voz era armoniosa y sexi.

Maldito mundo podrido que fue bendecido con un angelito como él.

-n-no tiene por qué agradecer, Sir? -fingió curiosidad haciendo reír al caballero.

Ay santa mierda, si no se despedía rápido de ese pedazo de hombre se iba a caer por sus piernas hecha gelatina.

Y ni hablar de donde no le da el sol.

-Soy Felix Loebein, escolta de la princesa y mano derecha del emperador.

-un gusto Sir Loebein, soy Anette Eneida, puede decirme An -le sonrió amable mientras del otro lado se pellizcaba la pierna.

-entonces usted dígame por mi nombre, Lady An.

-"haste te diré Daddy si me sonríes así" por algún motivo siento que nos llevaremos bien estas semanas -le sonrío divertida haciendo reír nuevamente al caballero.

-siento lo mismo Lady An.

-"creo que me hice pipí".

Incluso juraba ver un aura celestial alrededor del caballero que sonreía amable mientras la guiaba hacia la salida del palacio.

La voz de Claude y Lucas era ronca, fría y sexi pero la de este hombre hermoso. Era amable y ultra sexi.

Estaba segura que en la cama sería ronca y fría, como todo adonis macho pecho peludo moja bragas.

-"no mi ciela, no saques a la luz la puta que eres y trates de conquistarlo, es de lily, el pedazo de hombre es de la bella lily.....y~ si le gustan los tríos?".

Sonaba tentador.

Pero si se involucraba con él, estaría involucrada involuntariamente con los personas principales.

Maldito creador que puso a Felix tan cercano a los tóxicos personajes principales.

-el carruaje la llevará hasta su estadía.

Ante ellos estaba un carruaje que valía más que la propia vida de Anette.

-"no mentían cuando decían que la alta sociedad literalmente caga oro" gracias por guiarme Sir.

Felix estiró su mano para ayudarla a subir y ella posó su mano encima de la de él, para luego subir al carruaje.

-que tenga un buen viaje Lady An! -le sonrió brillante haciendo que la joven escupiera sangre imaginaria.

-m-muchas gracias Sir Felix.

Cuando el carruaje partió, dejó de mirar por la ventanilla y miro su mano atentamente.

-"no pienso volver a lavarme esta mano...no sin antes hacer alguna travesura" -sonrió de lado tratando de tranquilizar su corazón.

3 Adonis en 1 día.

Rompió el récord.

Aunque, ahora que lo pensaba. Todos los hombres que se encontró hasta ahora tenían una belleza sobresaliente.

Incluso el director del hospital.

El viejo mago...estaba algo arrugado pero si de seguro lo estiraban, sacaba algo bueno de ello.

-"necesito un polvo o voy a envejecer más rápido".

Por suerte no solo avanzó las técnicas de cirugía gracias a sus conocimientos.
Sino los métodos de anticoncepción.

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