1810

Alemania era uno de los países más pintorescos que había visitado Bloddy hasta ese momento, encontró más personas de su especie pero ninguno parecido a ella.

-El estaría muy feliz de conocerte-hablo un hombre lobo que conoció en un bar de mala muerte.

Bloody lo miro.

-¿Quien?

-Adolfo Hitler- le contesto el hombre- Un político que reside en el país.

Bloddy había escuchado del hombre, supo que mato a muchos judíos en hornos.

-Es algo cruel- contesto la rubia mirandolo fijamente.

-Es uno de nosotros. Nosotros somos creados por el demonio y no podemos ser algo bueno niña- el hombre dejó sobre la mesa una monedas y se giro hacia la barra del bar en donde unas mujeres preparaban las bebidas- ¡Rosa! Otra ronda para la señorita y para mi.

La mujer llamada Rosa asintió con la cabeza y se dio la vuelta para preparar lo ordenado. Hansel, el hombre lobo, regreso su vista a Bloddy.

-Yo se que no es el mejor político que ha existido en la historia, pero dime ¿que político no roba y piensa solo para si mismo? Es cruel, si, pero es de los nuestros.

Bloddy alzó una ceja.

-¿De los nuestros?

Hansel asintió con la cabeza

-Es uno de los vampiros más importantes del mundo- le contesto el hombre y soltó el humo del cigarro de su boca- Sus influencias han logrado que vampiros y hombres lobos tengamos de quienes alimentarnos-el hombre miro de unado otro y luego regreso su vista a Bloddy- Aquellos hombres que no son ejecutados en ños hornos son mandados a nosotros, sobre todo mujeres, hombres y niños que no están enfermos, nosotros los matamos y tenemos reservas de comida y para los vampiros, sangre extra que almacenar para las temporadas de invierno. Alemania llega a ser un lugar de mucho calor en verano, pero en invierno es realmente frío, es la temporada que todo ser se esconde para evitar morir con las frías heladas.

Bloddy asintió con la cabeza escuchando al hombre.

-Tu eres un ser diferente Bloody, nadie podría soportar ser mitad lobo y vampiro. Es anormal.

Bloddy soltó una risa y negó con la cabeza.

-Todos somos anormales en este mundo, solo que algunos más extraños que otros.

Hansel la miro.

-Acompañame- ordeno y se levantó de su silla en dirección a la salida del lugar.

***

<Hi Hitler> <Hi Hitler>

Eran las palabras que se repetían en todo el gran palacio protegido por Alemanes con armas en mano. Bloddy observo el extraño símbolo que estaba en todo el lugar. Hansel detuvo su andar y miro a Bloddy.

-Espera aqui

El hombre se adentro a una gran sala y los hombres que cuestionaban la entrada cerraron una vez que paso, Bloddy lo miro entrar y sus ojos recorierrieron el lugar. Minutos más tarde la puerta se abrió, del lugar salieron al menos una cincuenta personas vestidas de soldados y un hombre hablo en alemán.

Bloddy lo miro con el ceño fruncido, Hansel contesto y el guardia señalo la entrada.

-Vamos-hablo Hansel y subieron los escalones-Es tu día de suerte niña.

La puerta se cerró detrás de ellos, Bloddy miro el símbolo antes visto dibujado en la pared.

-Espero que tu visita sea corta, rápida e importante-hablo una voz desde una silla que daba la espalda impidiendo ver a la persona.

Bloddy sintió el frío recorrer su piel, era miedo. La voz de aquel hombre que aún no revelaba su identidad tenía voz imponente y tan filosa que podía destruir a cualquiera.

-No estaría aquí si no la creyera importante Adolf-contesto Hansel- Una vez me mencionaste que tus padres te contaban historias de la posibilidad de un ser mitad vampiro y lobo.

-Solo eran historias.

-No, eran predicciones- contesto Hansel.

Adolf se dio media vuelta en su silla giratoria, Bloddy lo miro, era un hombre de estatura mediana, poseía un cabello negro pegado a la cabeza y peinado, pero lo que más lo identificaba era su bigote. Adolf miro a Bloddy y este a ella.

-Ella es chica que une las dos especies mi señor- prosigio hablando Hansel- Quiere saber más de nosotros, de nuestro mundo.

Adolf miro a la chica.

-Así que las habladurías son ciertas-hablo el hombre- Una nueva especie.

Bloddy asintió con la cabeza. Adolf Hitler resultó ser un político más que veía por sus intereses y por los suyos como todos lo hombres, después de horas de intercambiar palabras, Hitler le entregó una dirección, en Francia, sobre la existencia de vampiros que podían ayudarla a saber más de su existencia.

2022

-Llegue a Francia ese mismo año, pero no encontré la información que quería. Los vampiros y hombres lobos estaban impresionados por mi, no se explicaban el porqué yo seguía con vida debido a mi especie. Un vampiro anciano no me dio mucho tiempo de vida, extrañamente estoy viviendo el doble que el, murió con una estaca en el corazón cuando su esposa lo descubrió engañandola- sonrió mirando hacia la camara- Hasta en nuestro mundo, las infidelidades se pagan.