El sonido del despertador se escuchó con gran fuerza en la habitación, el erizo de color blanco se levantó rápidamente y miró la hora que este marcaba. Era la hora de su entrenamiento matutino por lo que procedió a levantarse de la cama y fue a prepararse.

―Los zapatos ¿Dónde los puse?...¡Ahh sí, debajo de la cama! ―recordó el erizo blanco.

El erizo blanco fue a mirar debajo de su cama y efectivamente los zapatos estaban donde él pensaba, así que metió su mano debajo de esta para sacarlos y luego ponérselos.

―Ay Dios mío Silver ¿Dónde tienes la cabeza? ―se preguntó el erizo con una sonrisa.

Silver miró por un momento hacia su estantería, en ella se encontraba una foto que se hizo con sus compañeros durante el cumpleaños del erizo azul lo que le trajo unos buenos recuerdos de aquella vez.

―Y pensar que hace poco tuvimos que acabar con una guerra ―pensó Silver.

Silver salió de su casa, al salir el sol le dio de lleno en la cara molestando un poco su vista, cuando esta se acostumbró, empezó a mirar a la gente que salía temprano a trabajar y a los vehículos que circulaban por la calle.

―Je mejor no me distraigo más, el maestro debe de esperar ―pensó Silver.

El erizo inició su caminata hacia su destino esquivando a las personas para evitar chocar con ellos, aunque bueno ya la gente estaba acostumbrada a ver como el erizo iniciaba esa caminata diaria así que era como una costumbre más del día a día.

―Deténgase por favor ―le pidió un guardia.

―Uy, perdón je ―se disculpó Silver deteniéndose.

―Pero si eres tú Silver, ay ¿Cuántas veces te diré que no corras así por aquí? ―le preguntó el guardia.

―Oh vamos no me trate como un niño pequeño anda ―le respondió Silver.

―Je, venga anda ve, pero ten cuidado de no chocarte con nadie ―le advirtió el guardia.

―Por supuesto ―dijo Silver.

Silver continuó con su caminata hasta un callejón donde se preparó para empezar a volar con sus poderes telequinéticos, lo mejor para él del día a día era poder sobrevolar el cielo y ver la ciudad, la hermosa ciudad donde él había crecido.

―Será mejor que me concentre a este paso me chocaré contra un edificio ―pensó Silver mientras proseguía su camino hacia su destino.

El erizo no era muy rápido, pero bueno tampoco era algo que le importara sabiendo que podía volar de esa manera y sobre todo a esa velocidad.

―¡Rumbo a la Master Esmerald! ―dijo Silver animado mientras potenciaba su vuelo.

Tras aumentar su potencia de vuelo Silver no tardó mucho en llegar a su destino donde descansaba la Esmeralda Maestra y a su vez era el antiguo hogar del equidna Knuckles que ahora era custodiado por nuevo equidna.

―Fists ya he llega... ―dijo Silver sin poder terminar su frase.

―¡Silencio joven erizo, necesito concentrarme! ―le ordenó el viejo equidna.

―¡Lo siento! ―se disculpó el erizo mientras se ponía de rodillas.

El viejo equidna estaba intentando entrar en contacto con la Esmeralda Maestra, cosa que no lograba lo que preocupaba al equidna pues normalmente respondía positivamente.

―¿Hoy tampoco responde? ―le preguntó Silver.

―Lleva ya una semana así, pero no conseguirá doblegarme ―le respondió Fists.

―Es incluso más agresivo que el propio Knuckles ―pensó Silver.

―Bueno si no está por la labor de colaborar reanudamos el entrenamiento ―le comentó Fists.

―¡Si! ―afirmó Silver.

Silver y el maestro se alejaron un poco de la Master Esmerald para acercarse a un terreno un poco más despejado.

―Muy bien Silver hasta ahora has progresado muy bien con tus habilidades telequinéticas diría que ya las has perfeccionado del todo, sin embargo eso no es todo ―le comentó Fists.

―Ya me comentó sobre eso ―le recordó Silver.

―Nunca está mal recordar las cosas más de una vez y más si hablamos de lograr una forma que supere a la super ―dijo Fists.

―¿Se refiere a la Hiper forma? ―le preguntó Silver.

―En parte sí, pero a la vez no ―le respondió Fists.

―Explíquese por favor maestro ―le pidió Silver.

―Es evidente que la Hiper forma es el nivel más alto que la esmeralda madre puede brindar, pero para poder hacerlo habría que hacer que las esmeraldas evolucionarán algo que no puedo lograr que suceda ―le comentó Fists.

―Vaya ―dijo Silver algo sorprendido.

―Sin embargo creo que podemos intentar mejorar la super forma ―le comentó Fists.

―¿Mejorarla? ―le preguntó Silver sin entender del todo lo que decía.

―Verás una cosa que he notado de tus entrenamientos es que eres capaz de sacar más poder psíquico de tu cuerpo de lo que tú piensas así que he pensado que podrías aplicar ese pequeño poder extra a tu super forma para fortalecerla aún más ―le respondió Fists.

―Pero si normalmente uso mis poderes psíquicos ya transformado ―dijo Silver.

―Solo usas tus técnicas, más no tu poder latente y créeme chico estoy seguro que es superior al de tus compañeros del pasado ―le comentó Fists.

―¿Me está diciendo que si activo mi poder latente en mi Super forma podría conseguir como una Super forma evolucionada? ―le preguntó Silver.

―Emm no se si se podría llamar así, pero estoy seguro de que algo positivo de ahí saldría ―le respondió con algo de dudas Fists.

―Solo por probar creo que valdría la pena intentarlo ―opinó Silver.

―Pues entonces ya sabes que hacer ―dijo Fists.

―¿El qué? ―le preguntó Silver algo dudoso.

―¿Te lo tengo que dar todo en bandeja chico? Vamos, ve a buscar las esmeraldas ―le respondió Fists.

―¿¡EEEE!? ¡No las tiene! ―dijo Silver sorprendido.

―Creo que la Esmeralda Madre las esparció sin querer porque hace unos días todas estaban en su respectivo pilar ―le comentó Fists.

―¿Enserio me va a tocar ir a buscarlas? ―le preguntó Silver esperando que no fuese así.

―Por supuesto chico, si esas esmeraldas caen en malas manos a saber qué harían con ellas ―le respondió Fists.

―Tiene toda la razón, iré a GUN a ver si me pueden prestar un radar para las esmeraldas ―dijo Silver.

―Suerte chico y recuerda hidratarte bien ―se despidió Fists.

―Chao maestro cuídese ―dijo Silver para luego comenzar a levitar e iniciar su camino hacia GUN.

―Ayy los jóvenes de hoy en día, volando de aquí para allá ignorando los problemas ―se quejó Fists.

La Esmeralda Maestra volvió a actuar de forma extraña, brillando una y otra vez llamando la atención del equidna que no sabía del todo que le estaba pasando a aquella gema antigua.

―Espero que solo sea una mala racha ―pensó Fists algo preocupado.

Mientras el viejo equidna se preocupaba por el estado de la Esmeralda Maestra, el erizo blanco recorría nuevamente la ciudad mientras volaba, aunque con ciertos pensamientos respecto a lo dicho por su maestro.

―Una nueva forma que supere a la super, podría ser bastante útil porque en un futuro quién sabe si aparezca un enemigo capaz de superar las formas súper puede que sea pronto para pensarlo, pero quien sabe lo que podría pasar en futuro, además no puedo depender siempre de Sonic y sus amigos para todo ―pensó Silver

El pensamiento de Silver se tuvo que ver interrumpido cuando una extraña luz verde apareció en el cielo, el erizo blanco se tapó la cara con su mano derecha para evitar que la luz le diera en los ojos y esperó a que esta se apagase.

―¡AGG! pero bueno la luz de... ―dijo Silver ya que algo le cayó sobre su cara.

Silver perdió el control de su vuelo cuando esa cosa le cayó en la cara lo que provocó que fuese a ciegas sin saber como volar adecuadamente.

―¡AAAAAA! ¡Que me voy a chocar! ―gritó Silver intentando volar correctamente.

Poco a poco Silver descendió hasta que perdió la capacidad de volar al no estar concentrado, para su suerte el erizo blanco logró caer de cabeza en un cubo de basura evitando así hacerse daño con la caída.

―No volveré a tener el pensamiento en otro lado mientras vuele ―comentó Silver mientras tenía su cara metida en la basura.

La cosa que antes se pegó a la cara de Silver había caído en otro cubo de basura, de primeras el erizo blanco no se dio cuenta de esto ya que estaba ocupado con otra cosa.

―¡BUAG! voy a tener que darme por lo menos tres duchas para quitarme el olor a podrido que llevo encima, me preguntó ¿Qué es lo que me habrá dado en la cara? ―se preguntó Silver mientras buscaba con la mirada a esa cosa.

Silver pudo localizar a esa cosa cuando el cubo de basura en el que se encontraba cayó hacia el suelo, el erizo se acercó algo curioso para ver qué era exactamente esa cosa. Cuando estuvo lo suficientemente cerca, apartó la basura de la cosa, al hacerlo Silver pudo ver que trataba de un extraño ser pequeño de color granate con algunas partes de su cuerpo blancas y con unas pequeñas alas.

―Vaya y yo que pensaba que lo que me había golpeado era un objeto, no me esperaba para nada que la luz proveniente del pequeñín ―dijo Silver sorprendido.

El pequeño comenzó a roncar, Silver se dio cuenta que se había dormido lo que le suponía un problema ya que sus planes de ir a GUN se tendrían que cancelar hasta que el pequeño despertara para poder preguntarle quién era.

―Lo mejor será dejar lo de las Esmeraldas para más tarde, lo principal ahora es hacer que este pequeño se despierte ―decidió Silver.

Silver cargó al pequeño con cuidado y luego comenzó a andar hacia su casa, puede que hoy el erizo descubriese ciertas sorpresas, pero no sería el único que se diera cuenta de esto, pues un pequeño dron observó todo sin perderse detalle alguno.

―Mi querido Silver por lo que veo tienes un pequeño amigo y parece ser bastante especial ―dijo aquel científico con una sonrisa observando al dron.

El dron siguió a Silver con mucho cuidado para poder seguir recopilando información sobre el pequeñín, aunque ese sería uno de los menores problemas del erizo en un futuro.

En un lugar apartado de la ciudad, cerca de una cueva un pequeño anillo oscuro apareció en el suelo, este se abrió poco a poco hasta ser lo suficientemente grande como para que lo que estuviese al otro lado pasara y así fue. Un grupo de criaturas oscuras salió poco a poco de aquel anillo hasta que el último salió.

El líder de aquel grupo de criaturas se aseguró de que pasarán todos y una vez que fue así sacó una pequeña bola de energía oscura.

―Hemos llegado al lugar donde se ha podido sentir esa energía por última vez ―le comentó el líder del grupo.

La bola negra tomó la forma de la tortuga oscura que hace poco destruyó el mundo de Blaze, parece que esa era la forma de comunicarse con los soldados.

―Bien, pues ahora busca esa cosa y acaba con ella, ese ser puede suponer un problema para tu amo Dark Gaia ―le comentó la tortuga.

―No se preocupe, encontraremos al opuesto del amo y lo mataremos ―dijo el líder del grupo.

―Bien Dark Guardian, nosotros estaremos atentos a ver si la gata hace presencia en algún mundo alterno ―le comentó la tortuga.

―Y nosotros cumpliremos nuestra misión sin problema alguno ―dijo el Dark Guardian para luego cortar comunicación con la tortuga.

Las tropas lideradas por el Dark Guardian se prepararon, pronto irán a por el objetivo que su amo les encomendó eliminar y por la gloría de su amo Dark Gaia, ellos no podrían fracasar.

Hoy ha sido un día de sorpresa tras sorpresa para el erizo blanco al saber que existe una posibilidad de superar a su super forma, pero sobre todo se ha sorprendido al ver como un pequeño ser desconocido apareció de la nada en su cara, ahora tendrá que esperar a que sus preguntas sean respondidas y mientras eso pasa diferentes enemigos quieren hacerse con el pequeño por distinto motivos ¿Quién será ese pequeñín? y ¿Qué secretos oculta?