Después de haber salido de la enfermería volví a mi escritorio donde me estaba esperando Heesok con el montón de papeleo que teníamos que organizar para el reporte de ventas.

— ¡¡ ¿Te encuentras bien?!! — Me grito desde su escritorio.

— Estoy bien, no necesitas gritar que tal si te escucha el Jefe Park, nos podemos meter en problemas.

— Lo dudo, desde que el regreso de la enfermería no ha salido de su oficina y el Director Taehyung no ha dejado de llevarle papeles, debe estar demasiado ocupado para atender asuntos menores como lo nuestro.

— Cielos, entonces no perdamos tiempo y comenzamos con nuestros pendientes para terminar más rápido.

Heesok y yo estuvimos revisando papeles por papeles registrando todos los reportes de ventas del último mes, además el Jefe Park salió un momento de la oficina a dejarnos más trabajos. Quería conocer cuáles fueron los productos más vendidos y cueles no. También cual fue el total en ventas en cada establecimiento de la marca.

Con tanto trabajo, me di cuenta que no podré ir a trabajar a la cafetería. Salí al balcón de la cafetería y llame a Mina.

— Mina, creo que esta vez no voy a poder asistir al trabajo, tengo muchos pendientes aquí y no creo acabar pronto.

— No te preocupes Jungkook, entiendo que a partir de hoy no podrás venir tan seguido. Solo mándame mensaje cuando llegue a ocurrir.

— Gracias Mina.

— Y un favor, Si mi hermano no ha comido oblígalo a comer. Tiene la mala costumbre de trabajar por horas sin parar ni siquiera para un almuerzo.

— No lo sé...

— Por favor Jungkook, plis....— Me imagine a Mina juntando sus manos en suplica y poniendo ojos de cachorrito.

— Ay, está bien. Tú ganas.

— Gracias, adiós.

Corto la llamada y regreso a la oficina pero no vi a Heesok en ninguna parte. De pronto me entraron muchas ganas de ir al baño, fue cuando caí en cuenta que me vería muy acosador si entro al baño de mujeres, luego recuerdo que estoy disfrazado y no habría problema, solo me asegurare de que al entrar los baños estén lo mas vacío posible. Corro al baño y me llevo una gran pero gran sorpresa.

— T-tu...tu, tu...eres...un...un...

— Ji-Jisook... pué-puedo explicarlo... — Heesok tenía una peluca en el lavamanos revelando su verdadera identidad.

— Pe-pero...

— ¡¡Jisook, por favor no me delates con el Jefe Park, necesito el trabajo por favor!! — Heesok se arrodillo ante mí y jalaba mis pantalones como un niño pequeño llorón y berrinchudo.

— Eres un...chico... — Para estar tranquilos sin que nadie nos descubra, cerré la puerta con llave.

— ¡¡Puedo explicarlo pero por favor no digas nada!!

— ¡¡Esto es excelente, al fin no estoy solo!!

— ¡¡Por favor escu...!! Un momento, ¿Dijiste excelente?

— ¡¡Si, eso dije!! Saber que hay otro hombre disfrazado de mujer ya no me hace sentirme tan loco.

— Bueno eso es..., ¡¡Alto! También eres un chico!!

— ¡¡Sí!!

— Jajaja — De pronto el chico comenzó a reírse sin parar.

— Oye, no es gracioso estás haciendo que me moleste.

— Perdón Jisook pero es imposible que seas un chico, eres muy hermosa como para creer tu broma, buen intento.

— ¡¡No es una broma, realmente soy un hombre!!

— Si como no, jajaja.

— Claro que soy un chico, a los dos nos cuelga lo mismo — Sujeto su mano y la pongo en mis partes nobles, espantando a Heesok que retiro su mano.

— ¡¡Oh por dios si eres un hombre!!

— Ahora me crees, tenemos el mismo bulto entre las patas.

— Guau, al fin alguien que me entiende. Dime, ¿Porque lo hiciste?

— La misma razón que tú, necesitaba el trabajo y nadie me quería contratar decían que tengo todo menos.

— Experiencia, si...a mi también me decían lo mismo.

— Es una estupidez.

— Pero es la política de las empresas no podemos luchar con eso.

— Creo que debemos presentarnos nuevamente pero con nuestro verdadero ser.

— Tienes razor, Soy Hoseok, Jung Hoseok.

— Jungkook, Jeon Jungkook.

— Jajá, en lo único que no mentimos fue en nuestros apellidos.

— Saliendo de aquí hay que ir a comer para conocernos mejor y sin nuestros disfraces.

— Acepto tu invitación.

Después de arreglar nuestro maquillaje y vernos lindas y hermosas. Volvimos a terminar nuestros deberes, realizábamos pausas de vez en cuando, tomando café he incluso una vez que Taehyung termino con sus deberes se ofreció a ayudarnos a terminar.

— Mu-muchas gracias Di-director Kim.

— Es un placer ayudarlas. Y Heesok, no sé porque te sigues poniendo nerviosa al tenerme cerca ya te he dicho que no tienes por qué temerme.

— Lo sé, solo que no puedo evitarlo.

Tal parece que a Hoseok le gusta mucho Taehyung, con solo ver como se sonrojan sus mejillas y su actitud nerviosa ante Taehyung. Por otra parte, es muy raro que el Jefe Park aun no salga de su oficina, no sé si deba entrar a su oficina sin permiso pero me estoy preocupando un poco.

Ya habíamos terminado el trabajo y Hoseok se fue junto con Taehyung a casa, yo me quede a arreglar un poco el desastre en el que terminaron los escritorios pero el seguía en su oficina.

— ¿Estará bien? — Toco la puerta de su oficina sin recibir respuesta — Jefe Park, ¿Puedo entrar?

Toque varias veces y el resultado fue el mismo, en primer lugar porque demonios me estoy preocupado por el cuándo ya me puedo ir a casa, debería abandonarlo aquí pero tengo un corazón de pollo así que decido entrar con o sin permiso.

Algo se removió en mi interior al ver al Jefe Park. Lo encontré dormido sobre su escritorio con muchos papeles sin terminar, checo su agenda y ese trabajo junto con lo que hicimos hoy debe tenerlo listo para mañana. Al parecer tiene una reunión con unos inversionistas.

— Debes estar cansado — Dije para mí en un susurro.

Con su propio saco cubro a Jimin como una manta. Su escrito es un vil desastre, acomodo sus cosas intentando no despertarlo y me propongo a ayudarlo a terminar su papeleo después de todo ya saldría tarde del trabajo.

Y por lo que veo en su proyecto, creo que el Jefe Park busca un patrocinio para su nueva colección de ropa primavera-verano.

El proyecto es muy interesante y prometedor, quizás si obtenga lo que busca. Me concentre tanto en sus papeles que no me di cuenta cuando pise el pie del Jefe Park con mis tacones que pego un grito en cielo.

— ¡¡ ¿Qué te pasa y que haces en mi oficina?!!

— Fue un accidente, y no me grites, eso me gano por quererlo ayudar.

— ¿Ayudarme a qué?

— Jefe Park, usted quizás no se haya dado cuenta pero ya son las 7 de la noche y usted se quedó dormido. Terminé mis deberes antes de las 4, entre a avisarle y me encuentro que se quedó profundamente dormido con su papeleo sin terminar, así que decidí ayudarlo.

El Jefe Park me miró confundido mientras frotaba sus ojos, observa su escritorio y miro como estaban sus cosas más ordenas.

— ¿Algo más que hayas hecho? — Dice adormitado.

— Nada más señor.

— Bien, no tengo nada más que agradecerte, te pagaré tus horas extras. Para la próxima si vuelves a verme cansado solo déjame y vete.

— Muchas gracias, Pero lo último no se lo puedo prometer.

— ¿Porque no? — No me mires de forma desafiante.

— Me preocuparía mucho por ti.

El Jefe Park cambio su semblante con mis palabras, se levantó de su escritorio y se para frente a mí.

— Te invito un café.

Fue lo único que dijo antes de salir de su oficina y esperarme fuera. Si les soy sincero eso fue muy repentino Pero comida gratis no se le niega a nadie, en especial si tú no pagas.

Fuimos a la cafetería de la azotea y ya no había nadie, entramos a la cocina y el Jefe Park intento utilizar las máquinas de café pero sin éxito.

— Pensé que esto funcionaba igual que las cafeteras.

— Con permiso Jefe Park, un experto le enseñara a cómo preparar un buen café.

— Ya lo veremos.

— ¿Cómo lo quiere?

— Proveemos con uno americano.

— Enseguida — Mina en la cafetería nos enseñó a todos a ser Baristas para que el día que alguno de nosotros no se presente podamos suplantar su puesto. Mi jefe estaba fascinado con la facilidad con el que hacia el café. Termine de preparar el café y lave los trastes sucios.

— Tengo que admitir que es el mejor café que haya bebido — Nos sentamos cerca del balcón para disfrutar la vista que nos daba la luz de los edificios por la noche — ¿Antes trabajabas de barista en algún café?

— Ah, si yo trabajaba en un café debido a que no conseguía trabajo de lo que yo me especializo — Y eso no es una mentira, aún sigo trabajando para Mina. Solo espero que jamás se le ocurra visitar su cafetería o me meteré en problemas.

— Pues si miras las ventajas, fue algo bueno que estuvieras ahí, ahora puedes decir que eres empresaria y una excelente barista.

— Muchas gracias Jefe Park.

— Deja de decirme así, dime Jimin.

— No es correcto mi señor.

— Porque no lo seria, yo se lo he dicho a todas mis empleadas que me digan Jimin, cuando me dicen Jefe Park me siento como un señor de 40 años amargado y enojón.

— Pero si eres exactamente eso, al menos esa es tu actitud conmigo. Mira si fue por el café en esas ocasiones que lo derrame ya te pedí disculpas, incluso te ayude a terminar tu proyecto. No sé de qué otra forma pueda ganarme tu confianza.

— Yo te pido una disculpa, la verdad ese día tuve una pelea con mi padre y descargue mi enojo contigo, estuvo mal y lo lamento. Si lo deseas podemos volver a comenzar.

— ¿Entonces...todo quedo atrás?

— Si, todo quedo atrás — Después de este tiempo al fin me dio una sonrisa que lo hace ver lindo. Un momento, ¡¡Jungkook que te pasa, no actúes como una chica hormonal al ver un chico lindo!!

— ¡¡No me sonrías como un idiota, das miedo!!

— ¡¡Deja de decirme idiota aparte no estaba sonriendo!!

— ¡¡Si lo haces!!

— Jajajaja

— ¡¡De que te ríes!!

—Nada, es solo que para ser una mujer te comportas como un varón, creo que eres la única chica que se atreve hablarme como si fuéramos amigos cercanos.

Reflexionando un poco me di cuenta que él tiene razón, no me he comportado como una "dama" como me enseñaron mis amigas. Las decepcione pero hay mujeres que se comportan así, no veo lo malo en no ser delicada, también las mujeres deberían de dejar de pensar así.

— Lamento hablarle de ese modo, cuidare mi vocabulario de ahora en adelante.

— No te creo, en cualquier momento vas a explotar mejor se cómo eres y ya. Por cierto ya es muy tarde, te llevare a tu casa.

—¡¡No!! — Asuste a Jimin con mi grito — Digo, yo puedo irme sola. No te preocupes.

— Claro que me preocupo, no puedo dejar que una mujer se vaya sola a estas horas de la noche sería muy peligro y una negligencia de mi parte si lo permito. No está a discusión.

¡¡Ayuda!! No quiero esto, en que momento pasamos de estar peleando entre nosotros a estar en el auto de mi Jefe, no tiene sentido. No intercambiamos ninguna palabra y el viaje era algo incómodo. Tanto así que decido encender la radio.

— Oye, Jefe Park.

— Dime Jimin.

— Ok, Jimin, para la próxima hay que ir a comer en un café fuera del edificio.

— Mientras solo haya chicas, no tengo ningún problema.

— ¿Porque no puedes convivir con hombres, los odias demasiado?

— No los odio, es solo que...no puedo decirlo.

—Lo sabía...— Lo apunto con un dedo.

— ¿Lo sabes? — Jimin me mira con panico.

— ¡¡Eres un acosador!! — Jimin freno de golpe.

— ¡¡No soy un acosador, estas enferma!!

— Pues todo indica que lo eres, solo contratas mujeres, tienes choferes mujeres, se dice que tus empleadas domésticas son mujeres y que vas a sitios lleno de mujeres. Es obvio que eres un acosador.

— No soy un acosador, tengo mis motivos para estar con chicas.

—Tus motivos son acosarnos.

— ¡¡Tengo Arrenofobia maldita sea!! — Recuesta su cabeza sobre el volante — Perdón, no quise gritarte.

— ¿Arrenofobia? ¿Y eso con que se come?

— Es una fobia que causa un miedo o pánico incontrolable a los hombres.

— ¿Eso existe?

— Si aunque no lo creas, esto es muy complicado para mí. Las consecuencias de esta fobia es que sufro de taquicardia, hiperventilación, mareos, sudores y temblores, náuseas y vómitos, también puede que llegara a tener una crisis de ansiedad.

— Pero en la junta, habían muchos varones y actuaste con tanta normalidad.

— Al terminar la junta, me fui al baño corriendo porque tuve una crisis ansiosa. Es por este motivo que intento alejarme de los hombres lo más posible. No tengo este problema con los demás debido a que los conozco desde la infancia, fuera de mi círculo cercano, me da mucho temor.

— No lo sabía, perdóname. No fue mi intensión que me dijeras algo tan personal.

—Ya no importa, al final no puedo mantener esta mentira para siempre tarde o temprano algo así pasaría. Soy muy patético.

— No lo eres, yo me entrometí en lo que no me importa.

— ¿Alguien más lo sabe?

— Solo mis amigos y Heesok se enteró por accidente. Ahora tú sabes, por favor te pido que no le digas esto a nadie o podría afectarme en el futuro.

— Lo prometo Jimin.

Al llegar al edificio donde está mi departamento solo nos despedimos y él tomo su camino. Ahora me siento culpable de aceptar el empleo, si él se llegara a enterar que todo este tiempo estuvo al lado de un hombre, me sentiré terrible, puede que su fobia empeore. Estoy entre la espada y la pared.

Después de mil años por fin traje un nuevo capitulo, perdon por la demora pero después de regresar a la universidad, la carga de tareas y proyectos finales es alta y me esta matando. además de estar guardando mis historias por si llegaran a ser eliminadas.

Cree nuevas cuentas en Inkitt y Inkspired, despues les subo los links de las cuentas y subir de a poco las historias en esas dos apps. Sinceramente no las entiendo mucho pero en lo que me adapto, voy a subir las historias y espero que me puedan seguir por esos medios.

También tengo cuenta de Ao3 pero la verdad esa si no le entiendo nada jajaja, quizas nunca suba nada ahí.

En fin, espero que les haya gustado el capitulo y nos leemos pronto si es que la plataforma naranja no me elimina.

Los quiero :3 

Me despido...adios...chao...