Pánico.

Esa seria la única palabra que definiría lo que sintió al ver como el arma lo apuntaba, para luego sentir como el azabache lo protegía con su cuerpo.

Miedo.

Al escuchar el sonido del disparo cerro sus ojos involuntariamente. ¿A quien le había llegado la bala?

La respuesta llego cuando escucho un pequeño quejido del mayor, el cual sin importar salir lastimado, prefirió proteger a Tsunayoshi. Pudo haber sido peor, el proyectil solo rozo su brazo derecho, el dolor era intenso como una quemadura y la sangre empezaba a empapar sus ropas.

-¡Reborn!- nombro el castaño al ver la herida- Hay que detener el sangrado- comento con miedo en la mirada, acercándose mas a su pareja hasta poner su bufanda sobre la herida.

- ¡¡Tú!!- dijo refiriéndose al castaño- ¡Todo es tu culpa!- grito con lagrimas en los ojos- ¡Mi amado Reborn esta lastimado por tu culpa!- hablaba intentando apuntar el arma con sus temblorosas manos.

Tsuna observo como el arma lo apuntaba peligrosamente, sin embargo cuando Bianchi estabilizaba sus manos para disparar, la puerta fue derribada, causando un sonoro golpe cuando cayo al suelo.

-¡Suelte el arma!- ordeno un oficial de policía, acompañado por varios mas.

Para el menor, todo sucedió como en una película, las tomas en cámara lenta cuando le quitaron el arma a la pelirosa con brusquedad para evitar que disparará otra vez. Observar como la reducían en el suelo y la esposaban, su cara tenia una mirada de furia, la cual fue dirigida al castaño.

Una mirada que solo desaparecio cuando fue sacada de la habitación para subirla al carro policial.

En ese instante, el curso de los acontecimientos lo trajeron a la realidad.

Volteo hacia Reborn, cargando su mano en la herida para contener el flujo de sangre, entre eso los amigos del azabache, Lal y Coronello entraron. Preocupados por su amigo, el cual solo les daba una mirada de agradecimiento, ayudaron a llevarlo a las afueras.

Timoteo hablaba con los oficiales, pero al ver salir a su nieto y a su amigo, se acerco a ellos con preocupación.

La noche había pasado con lentitud, ahora en el hospital Tsunayoshi intentaba calmar sus nervios en la sala de espera, ya que a su pareja le estaban curando la herida.

- Querido nieto, ten -dijo el anciano con un tono tranquilo mientras le entregaba una taza de café.

-Gracias -hablo en voz baja, tomo la bebida en sus temblorosas manos- ¿Qué paso con Bianchi?-pregunto mirando a su abuelo.

-Esta donde debe estar, tras las rejas -comento sentándose al lado del castaño- No volverá acercarse a ti -dijo al momento que Reborn venia hacia ellos, acompañado por sus amigos.

-¡Reborn! -nombro el castaño acercándose con rapidez- ¿Como esta tu herida? -pregunto con los ojos cristalinos.

-Estoy bien, amore -dijo con una pequeña sonrisa abrazando al castaño con su brazo sano.

-Eres duro de matar, kora -hablo en rubio entre risas.

-No hables estupideces -comento Lal con cara de enojo detrás de el.

Intentando volver a la normalidad en lo que restaba de noche y luego de que la policía tomara las declaraciones de los hechos a Tsunayoshi y a Reborn, estos decidieron ir a descansar al hogar del azabache.

Al entrar al oscuro recibidor y al sentir que por fin estaba a salvo, el castaño abrazo con fuerza al azabache, asegurándose que de verdad el estaba ahí con el y que no le había sucedido nada grave.

-Tsuna...- nombro el mayor intentando ver el rostro ajeno.

-Tenia tanto miedo -dijo con un sollozo- Que algo te pasara, que Bianchi disparará otra vez y que tu me protegieras- hablo con la voz cortada- ¡No vuelvas hacer eso! - conecto su mirada con la oscura de su pareja- ¡No te das cuenta que no podría vivir sin ti! - hablo derramando varias lagrimas.

- No dejaría que nada te pasara- acaricio la mejilla ajena y de paso seco las lagrimas que poco a poco se iban deslizando por el rostro del menor- Eres lo mas valioso para mi, tesoro mio, amore mio - acerco sus labios y toco levemente los de Tsuna, el cual no paraba de llorar- Desde el primer momento supe que no podría vivir sin ti, el destino nos volvió a reunir y no desperdiciaré la oportunidad que nos a dado -junto sus labios con un demandante beso.

- Nunca pude olvidarte -susurro el castaño entre besos- Nunca deje de amarte -las palabras no bastaban para expresar los sentimientos que desbordaban por todo su ser.

Se fundieron en un suave contacto, una necesidad casi hambrienta de poseer la boca ajena, saboreando y explorando. Con los nacientes rayos del amanecer caminaron hacia la habitación sin separarse en lo mas mínimos temiendo perder el cálido contacto de sus cuerpos.

Recostados en la mullida cama, uno frente de otro con sus manos entrelazadas, sucumbieron al cansancio y el sueño llego.

El nuevo amanecer traía consigo un nuevo comienzo, uno sin que nadie se interpondría entre ellos.

Continuará...

Hellooooo!!!! desde anoche he estado intentando acabar el cap, justo cuando me puse a lavar la ropa me llego la inspiración :'v

Espero que les haya gustado el cap y les comento que estamos en los últimos cap de este fic <3

---> ¿Qué les gustaría que pasara en estos últimos cap? Dejen su respuesta aquí :D

Sin nada mas que agregar, nos vemos pronto!!!!