El castaño estaba frente a varias cámaras, los flashes de estas hacían que parpadeara con incomodidad. Ya hace una media hora se presento una declaración por parte de la empresa Vongola, en donde se desmentía toda la información que había salido a la luz el día anterior. 

La prensa no dejaba de hacer preguntas incomoda, entre mas información recopilaran era mejor para ellos. Varias de esas preguntas eran sobre la relación que tuvieron Mochida y Tsunayoshi, las cuales el castaño respondió con sinceridad y calma. 

Reborn llego al lugar antes de que terminar la ronda de preguntas, por lo que opto sentarse al fondo de la sala a esperar que concluyera.

Mientras los minutos pasaban, el azabache se ponía mas absorto de su entorno. Su mirada oscura estaba fija en su pareja, tenía que contarle sobre la visita de Bianchi.

Al terminar, Tsuna camino hacia su oficina, encontrándose con su antiguo tutor esperándolo en la estancia.

-Reborn -nombro con una sonrisa- ¿Como te fue la reunión? -pregunto acercándose al contrario.

-Todo salió bien -contesto pasando una mano por la mejilla del menor -Tengo que contarte algo -dijo fijando su mirada en los ojos castaños.

- ¿Ocurre algo malo? -preguntó inquieto.

-Luego de la reunión, Bianchi me estaba esperando en mi oficina -relato tomando las manos de Tsunayoshi -Mencionó que ella era la mente detras de esto.

- Hay algo más, ¿Cierto? -intuyó el menor.

- Sí, amenazo con subir el video en donde Mochida te ataco en el hotel -hizo una pequeña pausa- Si yo no me entregaba a ella.

- ¡¿Qué?! -dijo sorprendido- Esa mujer esta loca -hablo alarmado- Obsesionada contigo -miro a su pareja.

-Lo sé -suspiro cansado- Aunque le diga que ya no siento nada por ella, sigue insistiendo -paso su mano por su cara.

-¿Que vamos hacer? -pregunto Tsuna abrazado a Reborn, el cual correspondió el cariño.

-Tendremos que estar alertas, en caso de cualquier cosa -beso la frente del menor.

-Creo que sería lo mejor decirle a Hayato, puede que el sepa donde se queda o algo -levanto su mirada para conectar sus ojos.

Unos minutos después, luego de uno que otro beso, la pareja dejo el edificio sin antes despedirse y notificando que Tsunayoshi se quedaría con Reborn.

La razón para esto, es que era un día especial, se cumplian dos meses desde que empezaron su relación. Por lo que habían acordado días anteriores a compartir una cena juntos.

Antes de llegar a su destino, pasaron al supermercado, Reborn quería preparar algo especial, algo que Tsunayoshi no olvidara. Al salir del lugar, el mayor fijo su mirada en un ramo de rosas rojas, decidido se acerco a comprarlas bajo la mirada de su pareja, la cual sonreía tiernamente. 

-Para la persona más maravillosa -tendió el ramo frente al castaño- Mi amado Tsunayoshi, mio amore -sonrió.  

Con las mejillas sonrojadas, las manos de Tsuna aceptaron las hermosas flores con una sonrisa, se acerco al azabache y le dio un pequeño beso en los labios.

- Gracias professore -dijo el menor bajando su mirada a las delicadas rosas, tocando uno que otro petalo.

El departamento que había estado todo el día cubierto por el silencio, ahora se encontraba armonizado por la conversación y las risas de dos personas. Estos se encontraban preparando la cena, aunque Reborn quería hacerlo por el mismo, el menor insistió en ayudarlo en lo que podía.

-¿Cuando empezaste a cocinar? -preguntó Tsuna mientras se limpiaba las manos en el delantal que tenía puesto.

-De la universidad -comento el azabache cortando algunas verduras- Tenía que sobrevivir y la comida de tres minutos no bastaba, por lo que empecé con recetas simples -decía moviendo con expertiz el sartén.

El castaño admiraba cada faceta de su novio, desde el reconocido profesor hasta el cocinero atento con su pareja. Sonrio mientras seguía escuchando algunas anécdotas de este.

La cena fue agradeble, como todas las veces que estaban juntos. Todo el ajetreo y estrés del día anterior hasta el presente, se desvanecía como si nunca habia existido.

Posteriormente, el menos se ofreció a recoger y llevar las cosas a la cocina, en donde mientras dejaba la última vajilla limpia en la encimera, fue rodeado por los fuertes brazos de Reborn.

Un escalofrío recorrió su cuerpo, por lo que cerró sus ojos sintiéndose el suave roce de los labios ajenos contra la parte posterior de su cuello.

Se dejo mimar por un par de minutos, entrelazó sus manos con las contrarias y las llevo a su cara para darle unos pequeños besos.

El mayor se recargó en el hombro de Tsuna, entrelazando su mirada oscura cargada de sentimiento con la castaña.

Hipnotizado por esos ojos negros que tanto amaba, giro su cuerpo y demando un beso, primero tierno y lento, para pasar a uno apasionado y hambriento.

Caminaron hasta la habitación sin separar sus cuerpos, tenían la necesidad de estar lo más cerca posible, demostrar ese sentimiento que brotaba por todo su ser de todas las maneras posibles.

Tiernamente Reborn recostó a Tsuna de espaldas en la mullida cama, posicionándose encima y distanciando unos centímetros sus cuerpos.

- ¿Estas seguro? -preguntó acariciando el cabello ajeno.

- Si lo estoy -respondió el menor con un suspiro tocando la mano que tenía Reborn en su mejilla.

Con una sonrisa el azabache se acerco a devorar los rosados labios una vez más. Algo que se iba a repetir muchas veces durante la noche.

Continuará...

Hello!!!! Primero que todo mil disculpas por demorar 84 años en actualizar, la verdad me quede sin ideas y mi finalización de semestre me esta matando de muchas formas.

Espero que entiendan 😔😔😔😔 y tengan paciencia, creo que en un par de semana estaré mas desocupada.

Gracias por esperar la actualización y nos vemos lo mas pronto posible 😚