―¿Listo? ―Jungkook pregunto con sarcasmo.

―Así es ―Taehyung dijo orgulloso

―No lo creo ―Jungkook puso los ojos en blanco para luego regresarlos a la guía.

―Es que tu no entiendes, te lo demuestro constantemente ―Taehyung quito las hojas del sillón y las puso en la mesa de centro― Y soy tan pero tan listo ―Alargo― Que me he dado cuenta de algo...

―¿De qué? ―Pregunto el azabache divertido

―De que te encanto ―Poniéndose de rodillas, Taehyung comenzó a avanzar la corta distancia que había entre ellos― De que te vuelvo loco ―El rostro de Jungkook no demostraba ningún gesto o emoción, no había sonrisa, no había mueca, no había nada―. De que muy dentro de esa rudeza que demuestras, hay sentimientos

―¿Ah sí? ―Pregunto con mofa― ¿Qué te hace pensar eso?

―¿Qué me hace pensar eso? ―Taehyung sonrío, se acercó más al azabache y lo tomo de los hombros― Tú ―Se sentó en las piernas de Jungkook poniendo las suyas a sus costados, el azabache no quiso caer así que rápidamente saco sus manos que estaban guardadas en su chaqueta y las puso sobre la cintura del rubio para poder quitárselo de encima, pero ante un movimiento que hizo quedaron recostados en el sillón, o más bien, Jungkook quedo recostado sobre Taehyung― Tus reacciones, me hacen pensar eso ―paso sus brazos por el cuello del azabache, evitando que se alejara― Te gusto Jungkook ―Se atrevió a asegurar.

La mirada de Jungkook iba de los labios de Taehyung hacia sus ojos, eran escasos los centímetros que los separaban, con su brazo izquierdo el azabache sostenía a Taehyung, levanto su mano derecha y la acerco a su rostro, con una suma delicadeza corrió un mechón de cabello que estaba sobre la frente del rubio acomodándolo detrás de su oreja. Jungkook colocó su mano en el cuello del contrario y lentamente acorto la distancia entre ellos uniendo sus labios de la manera más perfecta posible.

Por primera vez el azabache lo besaba de una manera tierna, sus labios se rozaban tan dulcemente con los de Taehyung, era completamente increíble, era tan diferente a los besos anteriores, todos habían sido fantásticos y claramente este no había sido la excepción. Jungkook comenzó a subir un poco la intensidad bajando al cuello del menor, por reflejo, los ojos de Taehyung se cerraron, disfrutando del placer que el azabache se encargaba de producir en él, este se retorció al sentir la húmeda lengua rozar su piel, produciendo cosas inexplicables en su interior, algo que jamás había sentido, y para ser sincero le encantaba.

―¿Así que crees que me gustas? ―Preguntó Jungkook. Su mano derecha, la que anteriormente se encontraba en el cuello de Taehyung, bajo hasta su pierna en la cual comenzó a brindar tortuosas caricias. Taehyung no pudo evitar soltar un bajito ¡sííí!― Que estos encuentros ― chupo el cuello del rubio haciéndolo soltar un gemido―. Son porque estoy enamorado

―Yo nunca dije eso ―Contesto Taehyung atontado al sentir la mano del azabache subir por su trasero― Pero ahora que lo dices ―Mordió el piercing del azabache de manera provocativa― Puede que si lo estés. ―Jungkook simplemente soltó una fuerte carcajada y ronroneo sobre el cuello de Taehyung.

―Creo que te equivocas ―Jungkook fue dejando un camino de besos pasando por el cuello y mejillas de Taehyung― Puede ser que... ―Susurro en su oido― Puede ser que solo quiera acostarme contigo y adiós ―Comenzó a juguetear con el lóbulo de su oreja.

Esta vez fue Taehyung el que soltó una carcajada.

―Puede que entre más te rechace más me deseas tu a mí ―Taehyung se estremeció. Se suponía que Jungkook no debía jugar con él― Pero no, en realidad te detesto ―sintió como las manos del azabache se dirigían a su clavícula y con esta comenzaba a dibujar figuras abstractas e invisibles con las yemas de sus dedos.

―Entonces acabas de descartar todas mis opciones. ―Taehyung sonrió sin abrir los ojos― Así que queda solo por sexo.

—Tal vez.

—No lo creo —Taehyung afirmo mientras conectaba sus miradas.

—¿Ah no?

—No.

—¿Y por qué no? —Regreso al cuello de Taehyung tratando de aturdirlo nuevamente.

—Porque tú no eres así —Aseguro, y el azabache saco su rostro del cuello de Taehyung para verlo a los ojos.

—Tú no sabes nada sobre mí —Dijo serio

—Estas equivocado lindo — Taehyung acarició con delicadeza la mejilla del mayor— No creas que eres el único que puede juzgar sin conocer.

—Te detesto.

—Yo más —Nuevamente Taehyung se aproximó a sus labios, pero Jungkook se hizo a un lado y se puso de pie— ¿Lo ves? —Rápidamente se levantó al igual que él y lo abrazo por la espalda —Eres tan tierno —Soltó con una carcajada y noto como el azabache quería reír también— Mira —Le dijo rodeándolo—. Vamos a llevarnos bien —Se paro frente a él.

—¿Qué parte de no me interesa convivir contigo no entiendes? —Dijo con fastidio

—Entiendo la frase — Le regalo una sonrisa cuadrada —Pero sé que no lo dices en verdad — movió su dedo índice alrededor de su nariz como tratando de hacerlo reír— Y sé que muy, muy pero muy adentro — Se puso de puntitas —Quieres convivir conmigo.

—Si, claro —Contesto sarcástico

—¡Vamos Jungkook! —Curvo su labio inferior hacia afuera haciendo una mueca de tristeza —Hasta me compre unas botas de tu estilo —Taehyung dirigió su mirada hacia abajo viendo las anti glamurosas botas negras.

—No soy superficial como tú.

—Bueno entonces por qué no me dejas conocerte e intentas conocerme —Propuso

—Ya te lo dije...

—No me interesa convivir contigo —Taehyung lo interrumpió terminando la oración que conocía a la perfección.

Continuaron contestando la guía, pero el silencio mataba a Taehyung, hasta que finalmente consiguió hacer hablar a Jungkook, él le hacía preguntas y el azabache las respondía, sin embargo, este se negaba a preguntarle algo.

Su color favorito era el negro, y era obvio ya que lo usaba mucho, amaba el ramen con mucho picante, sabía tocar la guitarra y trabajaba en la tienda de música de lunes a domingo, su amigo Jin lo cubría mientras terminaban el trabajo que les habían asignado, el chico peli rojo en la tienda de discos es al que Sana llama Bae, trabajaba igual en la tienda y se llevaba muy bien con los pequeños, no tenía novio o novia, y detestaba a Taehyung.

Aunque lo último no es algo que le sorprendiera.

—¡Vamos pregúntame ahora tú! —Insistió, pero Jungkook seguía negándose a preguntarle.

—No.

—¿Por qué no? Debe de haber algo que quieres pregúntame.

—¡Ya te dije que no!

Jungkook era difícil de convencer.

—Anda —Pidió nuevamente—. Solo una.

—¿Te callaras si te pregunto?

—Si, si, si —Contesto con emoción.

—Listo —Jungkook sonrió con burla y se volteó a la guía nuevamente.

—¿Listo qué? —Pregunto sin entender

—Te pregunte que si te callarías si te preguntaba y ya me respondiste, no molestes más— explico sin voltear a verlo.

—Que gracioso —se río sin gracia.

Continuaron contestando la guía, nuevamente Taehyung estaba aburrido además de que ya le dolían los dedos de las manos de tanto escribir.

—¿Tu y Jimin son algo? —Jungkook rompió el silencio.

—¿En qué sentido? —Pregunto curioso Taehyung, ya que no sabía bien a qué se refería

—O sea, salen o salieron... —Especificó

—No salimos ni saldremos —Explico sin despegar su mirada de Jungkook— Él es mi mejor amigo, como mi hermano —Sonrió inconscientemente— ¿Por qué? ¿Estás celoso? —Pregunto divertido.

—Quisieras —Contesto con una sonrisa.

—¡Estas sonriendo!

Pasaron veinte minutos cuando Jungkook le indico a Taehyung que ya era hora de ir por sus hermanos, el menor recogió sus respectivas pertenencias, quería preguntarle a Jungkook algo que le estaba carcomiendo la cabeza desde que hablo con Sana y esperaba no arruinar el pequeño avance que llevaban.

—¿Jungkook ? —Le pregunto una vez que el auto arranco.

—¿Qué?

—Se dice mande, grosero.

—Mande, señorito soy el más educado del mundo —bromeo.

—Quería preguntarte otra cosa —Dijo algo tímido ante la pregunta que haría.

—Pues pregunta —Contesto mientras manejaba entre las calles.

—¿Tus... tus padres fallecieron?