Disclaimer: Los personajes, hechizos y todo lo correspondiente al mundo mágico, son obra de JK Rowling, yo solo los tomo prestados, juego con ellos y los mezclo realizando una adaptación de la película "A la Mala".

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Se preguntarán como es que yo, Hermione Granger, una chica que toda su vida se la pasó estudiando y trabajando arduamente, que es honesta, ve por el bien de los demás y lucha por sus derechos, quien pelea por obtener una mejor vida para aquellos seres y criaturas desamparadas en el mundo mágico; ahora está en un club a las 12 am con un poco de glamur, bueno tal vez demasiado para mi gusto, con un mini vestido de tirantes de seda negro, cabellera lacia y negra, tacones de infarto y un labial nada sutil color rojo pasión. Chocando "accidentalmente" con un hombre, para después brindar con él, coqueteándole sutilmente.

Unas cuantas miradas, pestañeo, sonrisa, una lamida del labio superior y mordida en el labio inferior y listo ya había caído ese pobre diablo. 1 hora Después ya me estaba llevando a su apartamento para ser descubiertos en la entrada por la novia de éste.

-Lo sabía, eres un maldito-. Le grito a su novio, quien solo boqueaba y negaba pasando su mano frenéticamente sobre su cabeza, despeinando aún más su cabello en el proceso.

-¿Qué no estabas en París amor?- logró articular el tipo.

-Pues ya ves que no, a ver ¿con quién venías? -Le respondió ella dándole unos empujones tratando de abrirse paso para abrir la puerta y lograr ver mejor.

Logre escuchar el alboroto tras la puerta, pues éste me la cerró en la cara al ver la cara de su novia.

-Con Vanessa la... la novia del vecino el... el del 5, me la topé en las escaleras.

-Vanessa mis pelotas tarado-. Le respondió y abrió la puerta.

-Te presentó a Hermione Jane Granger.

Por el rabillo del ojo pude observar como ella le apuntaba con su varita mientras sostenía la puerta abierta para mí.

-Llámame Jane, Parkinson, frente a ellos soy Jane-. Le sonrío al tipo y me despido de Pansy Parkinson quien me entrega una bolsa con algunos galeones, sé que son demasiados debido al peso de la bolsa y me largo de ahí, dejando que ellos arreglen su situación, si es que hay arreglo.

Esto no es culpa de Gerónimo, el tipo es un cabrón, como todos los hombres, no lo pueden evitar está en su ADN, igual que no bajar el asiento del escusado después de ir al baño, o desnudar a una mujer con la mirada y eructar cuando ya agarraron confianza.

Y antes de que entremos en discusiones, yo no hago esto por poder, lo hago por cobrar galeones. Si lo sé suena muy egoísta o ambicioso en mí siendo yo Hermione Granger y lo que represento para la comunidad mágica, pero de verdad que necesito cada knut que gano. Además, podría decirse que soy una profesional, aunque no lo parezca y no, no soy una prostituta o un detective, eso es otra cosa. Más bien me considero una mujer solidaria en el mundo femenino donde podemos apoyarnos entre nosotras y así no dejarnos embaucar por el machismo en este mundo.

Mientras llego al apartamento compartido con mi amiga Luna, voy pensando, <<Merlín con este sujeto van 15 tipos que resultaron infieles>> entro a mi hogar y me dirijo al gran ventanal que se encuentra frente al comedor del pequeño apartamento y dibujo una línea más en el vidrio. Suspiro, porque esta vida, esto que estoy haciendo en mis ratos libres no es lo que quería para mí, no es lo que soy yo en realidad. Me quito las zapatillas, el glamour y recuerdo cómo empezó todo, gracias al novio de mi amiga Luna.

8 meses atrás.

Me encontraba en la cuarta planta del ministerio, en un minúsculo escritorio lleno de papeles bien ordenados, dentro de un minúsculo cubículo, hasta el fondo del pasillo del Departamento de regulación y control de criaturas mágicas, trabajando en la división de bestias.

Y cómo llegué ahí se preguntarán, bueno tal vez no quise utilizar mi fama como la amiga del "niño que sobrevivió" o como "la chica más inteligente de la época", tal vez solo quería tomar un descanso de todo lo que viví en la adolescencia, durante la guerra; por lo que me decidí a buscar a mi familia que se encontraba en Australia. Utilice todo el dinero que tenía en esa búsqueda y en el tratamiento para regresar los recuerdos de mis padres, pero aún siguen sin recuperar la memoria.

Cuando regresé al Londres mágico, me di cuenta que no había cambiado tanto como lo esperaba, las ideas clasistas y supremacistas seguían y me arrastraban. Logré entrar al departamento de criaturas mágicas gracias a mis logros, pero nunca pude sobresalir, seguía siendo la "hija de muggles" así que tenía que esforzarme el triple, pero ni eso servía, cada idea que tenía, cada ley que quería promover, el Wizengamot me la rechazaba, a menos que tuviera un apoyo de algún miembro, obviamente sangre pura podrían validarla; pero claro las personas que tenía a mi favor por el momento no podían apoyarme, pues no formaban parte del comité.

Ginny y Harry se mudaron a Estados Unidos cuando fue requerido por la MACUSA en calidad de Auror, él queriendo huir de su creciente fama, comenzaría en un lugar donde podría iniciar de nuevo y dejar atrás la guerra con sus pérdidas; así como también los reporteros, entrevistas y todo lo que conllevaba ser el niño que venció a Voldemort. Y mi querida Ginny esta vez lo siguió, comenzando así su vida en matrimonio y su creciente familia. Hace tres años de eso, aunque vienen a visitarnos de manera constante, es poco el tiempo que logramos compartir.

Con el fallecimiento de Fred y Percy en la guerra, los Weasly salen muy poco. Arthur solo trabaja medio tiempo en el ministerio y corre directo a la madriguera procurando dejar a Molly lo menos sola posible, Ron y George se encargan de Sortilegios Weasly, aunque parezca que Ron se la vive más en mi departamento que en el negocio de su hermano. No, no es lo que ustedes piensan, después de la guerra nunca salimos, creo que era más un amor fraternal que un amor juvenil, así que prácticamente sería incestuoso pensar en salir con él ¡guiiiuuu!

Pero estábamos platicando de cómo yo, Hermione Jane Granger paso de ser la ¿Cómo decían los Slytherins? ¡Ah sí! come libros, pelo de arbusto a una mujer fatal. Pues verán, aunque no lo crean esto es debido a Luna, si mi rommie, o compañera de piso como quieran decirlo.

Y mientras yo escuchaba las quejas de Luna sobre su novio Rodolph, Ron que parecía que prácticamente vivía en nuestro departamento engullendo toda la comida que tenemos, también se quejaba.

-Hermione, se acabó la leche- me dijo, abriendo la puerta del refrigerador y buscando hasta el fondo.

-Híjole Ron, sabes qué paso, que nos acabamos nuestra leche, de nuestro refri, de nuestra casa, tal vez deberías de ir a tú casa, y traer tú leche, de tú refrigerador. O salir y comprar leche ya que prácticamente te la pasas aquí y eres tú quien generalmente se la acaba-. Le indique, cruzándome de brazos.

-Bueno entonces quizá puedo mudarme y pagar la renta junto con luna ya que tú no has podido hacerlo o ¿cuántos meses te debe, Luna? -Ron sonrió en dirección a Luna.

Bufé, si pudiera lo haría, prácticamente lo poco que puedo ganar es con lo que apoyo a Luna o más bien ella me apoya a mí y lo demás es para seguir pagando el tratamiento de mis padres que avanza, pero de manera muy lenta, todo es un desastre en mi vida ahora.

-¿Crees que Rodolph me esté engañando?- intervino Luna, la cual estaba en el comedor con la cabeza agachada y sus manos la cubrían, al parecer tenía depresión o quizá estaba en esos días, a los que yo llamo "monstruación".

-Claro que no Luna, Rolf es un amor, jamás te haría algo así- le respondí tomando su mano y dándole mi mejor sonrisa alentadora.

-Es que ayer soñé que me picaba un narglee, lo cual es raro porque los narglees no pican, y yo hablaba en sueños, pero Rolf no me entendió nada, nada.

Ron y yo volteamos a vernos, pues no, nosotros tampoco entendimos nada.

-¿A ver, ese wey es hombre?-. Dijo Ron cruzando sus brazos y levantando una ceja.

Al modo las intervenciones de Ron que no ayudan para nada con la situación.

-Obvio- respondimos Luna y yo rodando los ojos.

-Entonces sí es un cabrón- dijo levantando los hombros.

-Ah por cierto Hermione, ya casi se acaba el papel de baño.

Cerré mis ojos, respiré profundamente y conté hasta cinco, <<este hombre no va a cambiar>>.

-Necesito conseguir otro trabajo de medio tiempo-. Aunque lo dije para mí misma pensando en las deudas que aún tengo, Luna logro escucharme, y con sus grandes ojos azules y soñadores me observó y puso esa cara como si estuviera en otro mundo, casi, casi podía ver una bombilla encendida sobre su cabeza y ahora qué idea loca se le habrá ocurrido, me hubiera quedado callada.

-Ahora vuelvo- Luna se levantó del comedor, volvió con una bolsita y juro por todos los dioses y magos que las palabras que dijo después no las olvidaría nunca, pues fueron las que cambiaron mi destino.

-Quiero contratar tus servicios-. Me dijo colocando la bolsita de galeones sobre la mesa y empujándola hacia mí.

¿Qué, qué? Parpadee, una vez, dos veces y creo que no fue suficiente, demonios y me decían la bruja más inteligente de mi generación, pero es que de verdad que no lo comprendía. 

N/A hola, hola!! espero les haya parecido interesante este primer capítulo, como mencione en el prólogo, esta historia es una adaptación, serán capítulos cortos. Espero les guste, lo hago con muchísimo cariño!! Hasta la próxima