Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

💜I wish I would💜

Otro día más caminando solo hacia las clases de danza, sus pasos algo débiles reflejaban que no tenía mucho deseo de llegar, se preguntaba ¿para qué? para ver lo bien que se ven juntos, claramente eso era lo último que deseaba presenciar, pero no podía faltar, no otra vez. Minutos antes del comienzo de las clases Taehyung ingresa al salón con Heather, sonriendo como ya parece de costumbre, este rápidamente se acerca a su amigo para saludar.

-Buenos días Jimin-saluda un tanto serio.
- "¿Jimin?" - habló para sí mismo.
-Hola-respondió bajito.
-Faltaste varios días ¿Qué te ocurrió? ¿Estás enfermo? -después de recibir esas preguntas dejo de escuchar. Taehyung llevaba días sin verlo y ni mensajes o llamadas recibió, actuaba distante, no parecía Tae, su Tae ¿dónde se encontraba su mejor amigo que corría hacia el para envolverse en un cálido abrazo? No faltaba casi nada para que una de las lágrimas que retenía siguiera su curso.

De la nada aparece una Heather empapada, se acerca a Taehyung contando que el grifo de agua del baño de chicas le jugó una mala pasada. Los dos chicos llevaban un suéter colgado en sus mochilas, obviamente el que portaba Jimin era aquel que su amigo le había prestado días atrás, el cual le ofreció el suyo, pero extrañamente la agraviada enérgicamente escogió el suéter morado que Jimin estuvo adorando por días, la chica expresó que era su color favorito, su amigo sin previo aviso lo retira y se lo da a la chica de cabellos dorados.
Esta procede a cambiar sus ropas mojadas mientras alguien más en aquel salón desea salir corriendo, la presión de su pecho se hace insoportable ¿cómo paso esto?, todo el salón giraba, no lo soportaría por mucho, su cerebro le ordenó a sus piernas que lo sacaran lo más rápido posible y así fue hasta que justo antes de atravesar la puerta principal de la academia su mejor amigo alcanzó su mano, tirando su cuerpo sobre el suyo provocando un repentino abrazo. Ambos se separaron apenados, Jimin se disponía a continuar su huida, una vez más su amigo frenó sus pasos.

-¿Qué ocurre contigo Jimin?-le exige Taehyung con tono molesto.
-¡¡¡Joder!!! Otra vez me llamas Jimin.
-¿Qué pasa con eso? No es el problema ahora, estas actuando muy extraño.
-¿Qué qué pasa? ¿A caso no recuerdas como solías llamarme? - pregunta mientras observa dolido el rostro de su mejor amigo -Todo cambió en ti desde que...
-¿Desde qué? - Taehyung se acercó más a Jimin tomándolo de la mano.
-Olvídalo-este se zafa de su agarre, empuja el hombro de su compañero al caminar, este no se aparta y vuelve a encararlo.
-No, no me dejes hablando solo.
-¿Por qué no? Es lo que llevas haciendo tu conmigo-el más bajo siente que si sigue un minuto más hablando así va a romper en llanto.
-No digas eso-el chico de piel bronceada se acerca, toca sutilmente la mejilla de Jimin y antes de que pronunciara una sola palabra la chica de ojos azules se presenta ante los dos.
-¿Chicos, pasa algo entre ustedes? -la voz de la chica los sobresalta a ambos y se alejan.
-Absolutamente nada, me voy, todo para ti-Jimin les da la espalda, con las lágrimas picándoles los ojos.
-¡Jimin, espera!-el grito de su amigo lo sobresalta, hasta que se gira lentamente-¡Dile la verdad de una vez!
El estómago del nombrado dio un vuelco. ¿A qué verdad se refería Taehyung y porque debía de saberla esa chica?
-¿D-de que verdad hab...?
-¡No te hagas el tonto Park Jimin! ¡Confiesa lo que sientes no vaya a ser que te arrepientas luego!-a esta altura los ojos de Taehyung comenzaban a llenarse de lágrimas.
-Tae, y-yo...
-Heather, los v-voy a dejar solos, Jimin tiene algo que decirte, espero que no le rompas el corazón-comenzó a darse la vuelta hasta que la risa de Jimin lo paralizó.
-¿De qué te ríes?
El más bajo trató de serenarse y habló mirando a los ojos de su amigo.
-¿De veras crees que me gusta ella? Ahora si estoy seguro de que eres bien tonto- llevó sus manos al rostro con frustración- Heather, no lo tomes a mal, pero no eres mi tipo, ni siquiera estoy seguro de si me gusta tu género y este idiota con tal de no confesarse a ti me dice estas tonterías, no lo escuches por favor.
-¿Qué? ¿N-no te gusta ella? Y a que venían todos esos comentarios sobre su belleza, no entiendo.
-¡Por Dios que lento eres Tae! No me gusta, puedes estar en paz, ahora el que debería confesarse eres tú.
-¿Yo? ¿Por qué?-el chico se sonrojo profusamente.
-¡Ay vamos! Tú si gustas de ella no seas cobarde, ella al parecer tampoco es indiferente a ti.
-¿Qué dices Jimin? Estás equivocado eso n-no es ci-cierto y-yo-Taehyung se encontraba en negación total, no podía creer lo que estaba escuchando, era una broma de muy mal gusto a su parecer.
-Mmm, chicos, creo que se olvidaron que estoy aquí, discúlpenme si me retiro. La verdad creo que lo que pasa aquí es muy evidente, solo espero que ambos se den cuenta pronto.
Los dos chicos voltearon a ver a la chica anonadados. Por un momento se habían olvidado de veras que estaba ahí. Se miraron y avergonzados apartaron la mirada. La chica negó con la cabeza y sonrió, dándose la vuelta caminado hacia el aula nuevamnete.
-¿Ves lo que causas Kim? Perdiste una gran oportunidad y ahor...
-¡Detente Jimin! Solo estás hablando cosas sin sentido, no entiendo nada, yo pensaba que ella te gustaba y, ahora, me siento aliviado, pero triste a la vez-Taehyung subió la mirada y se encontró con un afligido Jimin con lágrimas en sus ojos. No quería llorar, pero al escuchar lo que él creía, que era el alivio de su amigo por tener vía libre para estar con Heather, no lo soporto y las lágrimas comenzaron a rodar descontroladas.
-¡Disculpa, no quería gritarte, disculpa!- Taehyung corrió a limpiar las lágrimas de su amigo y sin darse cuenta ya lo estaba abrazando fuertemente contra su pecho, sus manos en la cintura de Jimin apretándola, su nariz llenándose con ese familiar perfume que tanto había extrañado. Inconscientemente sus manos se deslizaron por la espalda hasta llegar a su pelo que suavemente tiró hacia atrás para mirar a los ojos a su amigo.
-Te he extrañado tanto-susurro bajito, al escuchar esto Jimin sollozó más fuerte aún.
-¡No, no llores más por favor! No quiero verte así nunca en la vida, yo te amo Jimin-diciendo esto acerco su boca a la de su amigo y lo miro directo a los ojos como esperando su confirmación, el chico solo cerró los ojos, lágrimas surcando sus mejillas.

Taehyung juró que nunca había visto nada tan hermoso y triste. Lo besó, como deseaba hacía una vida e intentó que en su beso sintiera lo que llevaba tiempo reprimiendo, escondido en su alma. Para Jimin el universo desapareció en el mismo instante que puso sus labios sobre los suyos, lo que tanto había esperado estaba sucediendo y pensó que podía desmayarse con la suavidad con que Taehyung lo tomaba entre sus manos, lo besaba exigente y amoroso. Y lo que sintió en ese momento fue indescriptible, cada movimiento de le llevaba una ola de amor, adoración gigantesca, se sentían más cerca y en sintonía, como nunca antes.
Después de un momento que se les hizo muy pronto a los dos, Jimin alejó delicadamente a Taehyung y mirándolo a los ojos le preguntó:

-¿Por qué? ¿Por qué hiciste eso?
-¿No es obvio Jimin?- dijo el chico sonriendo dulcemente-Estoy enamorado de ti y hace unos instantes podría jurar que tu sientes lo mismo ¿o me equivoco?
-Te equivocas, yo no estoy enamorado de ti- la sonrisa sonrojada de Taehyung comenzó a desaparecer-Yo estoy convencido de que eres el amor de mi vida y que quizás nunca encuentre a alguien que me haga sentir lo que tu provocas en mí.
Al escuchar estas palabras un eufórico Taehyung comenzó a dar saltos alrededor de Jimin para terminar abrazándolo y tomando la boca del más bajo entre sus labios nuevamente, para luego mirarlo a los ojos y decirle:
-No te imaginas lo feliz que me haces, lo mucho que desee esto, lo mucho que quiero hacerte feliz, para siempre Jimin.
-No más que yo, créeme no más que yo. Estoy en el cielo ahora mismo.

Se abrazaron un rato más, sonriéndose el uno al otro perdido en sus miradas y en el amor, decidieron entrar a la academia solo para recoger sus cosas y disculparse con Heather por el espectáculo, también por el malentendido anterior. La chica solo les sonrió enigmáticamente continuando con sus prácticas.
Los chicos salieron de la academia tomados de las manos, comenzaron a caminar por todos sus lugares favoritos de la ciudad, riendo, contándose todo lo que pasaba por sus mentes, con miradas de deseo y amor.

Esa noche terminaron subiendo al techo de la casa de Jimin para hacer el amor bajo las estrellas, que observaron cómo, sin hablar, la pareja se contaba con sus cuerpos y sus almas todo lo que llevaban tiempo callando.
El amor puede doler, sí, pero creo que más bien tú escoges si te duele por cobarde o por valiente herido en combate. Por favor, no dejes nunca de ir a la guerra, que en el amor los cobardes no han escrito nada.

Con cariño,
Heather.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro