25. Miguel
Joder... voy a sonar como un enfermo posesivo de mierda, pero no puedo evitarlo...
Odio, odio, ¡Odio! tanto que otros hombres devoren a Rubén con la mirada, ¡Lo odio tanto!
Lo dejaría pasar si fueran mujeres...
¡¿Pero con hombres?!
No... eso si que no. Tengo que dejarles en claro a cualquier gilipollas que le eche ojo a mi Rubén, que ya tiene dueño.
Uno que lo ama con todo su corazón.
Rubén es solo mio, es MI novio. Nadie tiene derecho a mirarlo con malas intenciones.
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