Una vez siendo una niña me contaron la historia del príncipe de ceniza un ser creado de magia negra pero este extraño ser se rebeló contra su creador como era un ser sin cuerpo ni siquiera corazón, pues atacaba sin ningún miramiento a veces miraba a los humanos como comida hasta que dio con una humana que estaba siendo perseguida por monstruos la extraña criatura de ceniza pensó ¿para qué molestarse en rescatar a un débil humano? Así que paso de largo.

- ¡ayuda por favor que alguien me ayude por favor quien sea! - dijo la muchacha con desesperación esperando que alguien la salvara, pero solo espero su muerte miserable.

La extraña nube de ceniza seguía su camino haciendo oídos sordos a todos los gritos de desesperación de los mortales.

Pero un día algo sucedió la extraña nube de ceniza estaba harto de su soledad que incluso bajo a tierra para verse en el río y hay fue cuando le salieron pies, manos, pelo, etc. lo sé un poco extraño lo mismo pensé, aunque si lo piensas seria incluso extraordinario como se veía un ser hecho de magia negra convertido en humano además el cuándo se vio en el reflejo de un río se asustó claro pasas de ser una nube de ceniza a humano cualquiera se asustaría claro estaba desnudo, pero se acordó de que como ahora era un mortal necesitaría ropa y ¿comer? Eso le pillo de sorpresa era extraño que algo le llamase la atención así que fue a buscar ropa o algo que le tapase para no ir a cuerpo gentil además tenía el cuerpo musculoso las piernas fuertes como los de un atleta, el cabello largo y lacio, además, tenía un color gris sacio muy hermoso, una vez que se fue del lugar se dirigió a una aldea que había cerca de donde él se encontraba además le costaba andar a dos piernas, pero no le dio importancia hasta que de pronto una chica se le acercó.

- ¿perdone está usted herido? Por favor venga a mi casa le daré ropa- dijo la chica con una sonrisa cosa que el pobre chico se le quedó mirando y la siguió sin saber que quería ella de el así hasta que llegaron a una casa no era gran cosa, pero era agradable.

-Toma será de tu talla además no es bueno ir en... ya sabe así lo lamento- dijo la chica con una sonrisa además tenía la cara más roja que un Tomate el chico miro las prendas que ella le estaba ofreciendo y luego se miró a sí mismo.

- ¿Por qué me das esas cosas? Estoy bien como estoy además a quien no le guste que no miren yo no critico por como llevan lo que tienen en sus cuerpos ¿no crees muchacha? Además, huele algo rico - dijo el hombre de ceniza con total Tranquilidad cosa Que la chica se acordó de que tenía la comida echa, pero con la charla y ver al guaperas en cuerpo gentil se le había olvidado.

-A perdona es la comida vístete además vivo sola date prisa la comida se enfría- dijo con una sonrisa en la cara dirigiéndose a él para darle las cosas para que se vistiese él al ver aquellos trapos como él los llamaba le daba como repugnancia, ya que prefería ir como estaba desnudo, pero se dio cuenta de que la chica lo miraba de reojo porque esta estaba mirando la comida sin apartar la mirada solo un ojo y con la cara sonrojada que parecía que le iba a hacerle la competencia a un tomate Claro él al ver cómo estaba ella solo se quedó mirándola unos minutos para volver a ver los trapos que tenía en las manos y sin más se cambió con la chica dándole la espalda para que no lo viera la ropa consistía en un kimono de color azul oscuro con las mangas largas una vez que se cambió y tal se acercó a la chica y se sentó a su lado en ese mismo instante miro en el suelo un plato de sopa con dos pescados bien cocinado.

-Es para usted está caliente así que tómalo con cuidado para que no se queme- dijo la chica mirándolo a la cara cosa que a él no le hizo mucha gracia que una chica se porta se así con él así que los dos se pusieron a comer él mirando el plato y a los labios al igual ella, pero ella lo miraba de reojo mientras se ponía el plato a los labios para comerse la sopa cuando terminaron con el de la sopa después cogieron el del pescado cuando terminaron el chico de ceniza la miro como si ella fuera lo más hermoso que había visto claro ella era una humana tenía sangre, órganos, corazón cosa que él no tenía o eso pensó porque había nacido de la magia negra además eso a él no le importaba en absoluto pero se equivocaba además se dio cuenta de que ella le estaba mirando con ganas de preguntarle cosas de dónde venía, como se llamaba ese tipo de cosas en ese instante él se dio cuenta de que ella le seguía mirando.

- ¿quieres saber quién soy verdad? Dijo con tristeza mirando el fuego que había delante de él parece ser que el fuego le calmaba porque él era una parte, ya que él mismo era ceniza la chica lo miro con alegría porque siempre estaba sola sin padres, sin amigos, aunque tenía a los aldeanos, pero ellos no le hacían ni caso por eso cuando vio al hombre de ceniza pensó que por fin tendría compañía.

-Bueno si no quieres lo entenderé además tu compañía es la mejor que he tenido en siglos ¿creo? Pero gracias de todo corazón por lo menos no me siento sola- dijo la chica con alegría cosa que él la miro y le sonrió cosa que se sorprendió la noche estaba cayendo así que se pusieron a dormir hasta el día siguiente la chica se levantó temprano para trabajar en la huerta porque apenas tenía para comer, pero la huerta daba frutas y siempre iba a pescar con lo primero que encontrase hasta el mediodía el hombre de ceniza se levantó con los rayos del sol no se sabía qué hora era, ya que la chica se había levantado la primera y más sin los rayos del cálido sol de la mañana así que se levantó y salió de la casa en busca de la huésped, pero no la encontró por el pueblo sino a las afueras así una vez que la encontró se sentó en la copa de un árbol para observarla de esa manera sabría cómo actuar, aunque él prefería ser libre e ir a su bola sin estar atado a nadie, pero esa chica le llamaba la atención hasta que ella se da cuenta de que había alguien detrás de ella.

-Anda, hola ¿cómo has dormido en la noche? Aquí es donde vengo a cazar el pescado- dijo con una sonrisa en la cara además ella era una chica alegre y eso es extraño a pesar de la situación en la aldea de que nadie le hablaba en ese instante él se sorprendió de su presencia ¿Cómo que una simple humana se había dado cuenta de su presencia? Esa pregunta estaba en su cabeza al igual que otras, pero no le dio importancia así que bajo del árbol para acercarse a la chica y mirar como los peces del río nadaban tan tranquilos sin preocuparse de que serían comidos así que los dos estaban hay tan tranquilos hasta que el sol apretó con fuerza, además, ya era hora de irse.

-Bueno te echo una carrera el que llegue antes limpia el pescado y el que pierda hace la comida preparados listos ya te espero allí así que no tardes- dijo la chica tan contenta que se fue y dejo al chico hay tan tranquilo y lo único que pensó es que

Que extraña es

Aunque no le importo así que cogió los pescados que estaban en el suelo y se los llevo y echo a correr como el viento al llegar a la casa encontró a la chica en el suelo muerta llena de sangre al igual que a los aldeanos no sabía qué había pasado estaba ¿asustado? Esa sensación era nueva en él así que vio en los alrededores para ver si veía quien había sido el culpable de toda aquella sangre apenas le asustaba, ya que él mismo había visto cosas peores o eso creyó así que cogió el cuerpo de la pobre chica y la llevo al campo de flores que había cerca del pueblo y allí la enterró luego volvió al pueblo para hacer lo mismo con los aldeanos, pero a ellos fue en la misma aldea luego se marchó sin antes de despedirse de aquella chica le había dejado flores y se quedó un poco rezando, aunque no sabía por qué se hacía eso o porque él mismo lo hacía una vez que termino salió de allí para nunca volver una vez que se fue hecho un último vistazo hacia atrás para Despedirse de aquella aldea no sabía a donde ir estaba perdido por primera vez en su vida lo que si paso por su cabeza es ¿Por qué le habían creado? ¿Qué iba a ver del mundo? Cosas así además solo había pasado apenas unas horas y aun así extrañaba a aquella muchacha.

-Los humanos viven tan poco y otra vez solo- dijo con tristeza, aunque la echase de menos había dejado un vacío en su pecho que pensó que no se llenaría de nuevo ahora estaba solo sin su forma de nube para viajar más cómodo ahora tendría que ir a pie o buscar algún caballo además con el pescado que tenía en las manos empezó a pudrirse cosa que él se dio cuenta y los lanzo lejos hasta caer a un río y estos volvieron a la vida por arte de magia lo se cosas raras pasan una vez que lanzo los peces se puso a andar para encontrar a los asesinos de aquellos aldeanos y de la chica que fue amable con él Cosa que le iba a costar trabajo en encontrar a aquellos Asesinos.

¿Crees que lo conseguirá vengar a la aldea?

por favor darle una oportunidad 

gracias