Luego de que Namjoon, en su forma bestial, arrancara hacia lo más oscuros del bosque, el silencio se hizo dueño del paraje. Jungkook, con sus ojos que destellan destellos carmesí en la penumbra, y Taehyung, con su habitual serenidad, se adentraron en la espesura de un bosque que parecía cobrar vida propia. El aire estaba cargado de susurros y el retorcido danzar de las sombras jugaba con sus sentidos.

No habían caminado mucho cuando el suelo bajo sus pies comenzó a vibrar. Al principio, pensaron que podría ser el eco de los pasos de Namjoon, pero la regularidad del temblor les indicó que se acercaba algo mucho más grande. Con una mirada de confirmación mutua, se prepararon para el encuentro.

-Taehyung, ¿lo sientes? - preguntó Jungkook, tensando cada músculo, preparado para cualquier eventualidad.

-Lo siento - respondió Taehyung, su voz tranquila en contraste con el creciente temblor que les rodeaba. -Algo grande se aproxima.

La vegetación se partió y una serpiente de proporciones mitológicas emergió ante ellos. Su piel era de un verde profundo con escamas que relucían como esmeraldas bajo los rayos filtrados del sol. Sus ojos, dos abismos de pura sabiduría ancestral, se fijaron en los dos jóvenes con algo que parecía ser curiosidad.

Jungkook, quien había heredado la conexión con las bestias de su linaje, sintió un lazo invisible tirando de su alma hacia la criatura. Taehyung, por su parte, extendió su percepción espiritual y notó la presencia de la energía de la Perla de las Almas en el coloso que tenían enfrente.

-Jungkook, mírala - Taehyung señaló hacia la frente de la serpiente, donde tres fragmentos de la perla brillaban con una luz inquietante.

La serpiente gigante los observaba, su lengua bifurcada probando el aire. Entonces, con una voz que parecía emanar de la propia tierra, habló.

-Saludos, guardianes de la perla,-siseó la serpiente con una voz que resonaba en sus mentes más que en sus oídos.-He esperado mucho tiempo para que los dignos se presentaran ante mí.

Jungkook, aún cauteloso, respondió.

-Hemos venido en busca de los fragmentos de la perla. Sentimos su presencia en ti, oh gran ser. ¿Nos permitirías tomar lo que nos pertenece por derecho y destino?

La serpiente gigante se retorció, creando un arco sobre ellos con su cuerpo que parecía tocar las mismas estrellas.

-La perla es parte de mí tanto como yo soy parte de ella desde tiempos inmemoriales. Si la deseáis, deberéis demostrar que sois capaces de portar su carga.

Taehyung intervino,

-Estamos dispuestos a enfrentar cualquier reto. La perla debe ser restaurada para mantener el equilibrio entre los mundos.

-Entonces,-siseó la serpiente, -demostrar nuestra valía.

En un abrir y cerrar de ojos, el entorno cambió. Los árboles se convirtieron en altas columnas de piedra, y el suelo se transformó en un ajedrezado de luces y sombras. La serpiente se dividió en tres partes, cada una con un fragmento de la perla incrustada en su frente.

La prueba había comenzado.

Jungkook y Taehyung se lanzaron al desafío con una sinergia perfeccionada por incontables batallas. La fuerza bruta de Jungkook, combinada con la agilidad de Taehyung, les permitió esquivar y atacar con precisión. Cada movimiento que ejecutaban estaba imbuido con la determinación de cumplir su misión.

Los fragmentos de la perla en las frentes de la serpiente brillaban con una luz que se intensificaba cada vez que los desafiantes acertaban un golpe. Sin embargo, la serpiente no era un enemigo común se regeneraba y replicaba con una velocidad que ponía a prueba cada fibra de su ser.

La batalla se prolongó, con cada segundo exigiendo más de los jóvenes guerreros. Justo cuando parecía que la fatiga tomaría lo mejor de ellos, Jungkook y Taehyung encontraron un ritmo que parecía resonar con la misma frecuencia de la tierra que pisaban.

Taehyung, con una voz serena pero poderosa, entonó un antiguo cántico que parecía calmar el ardor de la bestia. Jungkook, siguiendo el flujo de la melodía, encontró el patrón en los movimientos.

...

Sin otra opción, los dos compañeros asintieron. La serpiente se dividió en tres, como si cada fragmento hubiera cobrado vida propia, y la prueba comenzó.

-Jungkook, a la izquierda. Yo me encargaré de la derecha - ordenó Taehyung, su voz ahora cargada con la gravedad de la situación.

-¡Entendido! - gritó Jungkook, y se lanzó hacia su objetivo.

Los dos lucharon con una destreza sobrenatural, sus cuerpos moviéndose en perfecta armonía con los elementos. Pero la serpiente era un enemigo formidable, cada segmento atacando con la fuerza de la naturaleza enfurecida.

-Taehyung, ¡cuidado! - gritó Jungkook, advirtiendo a su compañero de un ataque venenoso que se dirigía hacia él.

Con un movimiento fluido, Taehyung esquivó el golpe y contratacó, su voz elevándose en un antiguo cántico que parecía debilitar a su adversario.

La lucha se intensificó, cada golpe resonando con el poder de antiguos rituales. Jungkook sentía cómo su mitad bestial luchaba por salir, sus instintos más salvajes al borde de tomar el control.

-Taehyung, la canción está funcionando. ¡Voy a intentar algo! - avisó Jungkook, mientras sentía que la bestia interior se agitaba.

-¡Hazlo! Yo te cubro - gritó Taehyung, confiando plenamente en su compañero.

Con un rugido que desgarró el aire, Jungkook permitió que su forma de media bestia emergiera. Su fuerza se multiplicó, y con un salto prodigioso, alcanzó la cabeza de una de las serpientes, arrancando el fragmento de la perla con una precisión letal.

-Taehyung, ¡ahora los otros dos! - exclamó Jungkook, su voz una mezcla de humano y bestia.

Con la primera victoria, la marea de la batalla cambió. Taehyung, utilizando el poder de su voz y su espíritu, junto a Jungkook, en su forma híbrida, enfrentaron a las serpientes restantes con una determinación inquebrantable.

Finalmente, después de un combate épico que pareció durar una eternidad, los dos compañeros se alzaron victoriosos, cada uno sosteniendo un fragmento de la perla en sus manos. La serpiente gigante, ahora reunida en una sola entidad, los observaba con lo que podría interpretarse como orgullo.

-Han demostrado ser dignos de la Perla de las Almas - siseó la serpiente. - Lleven estos fragmentos y restauren el mundo.

.....

Les dejo un nuevo capítulo
Mis bellas lectoras 🥰 🥰