Murat Arslan

Me había ido a trabajar como todas las mañanas.

Ya tenía mi rutina, arreglarme, alistar mis papeles, desayunar e irme al trabajo.

Hace una semana había secuestrado a Sharon, una semana de infierno porque no come, no sale de la habitación, no hace absolutamente nada.

La quiero conmigo, pero bien, no como si estuviera muerta en vida eso no me gusta.

Estaba en una junta importante, pero me tuve que salir, porque uno de los guardias de la casa me llamó.

-Mas te vale que sea algo importante, porque estoy en una junta.

-Es que... La..... Señorita Sharon.... Ella...

-Ella que, Imbécil

-Ella escapó, señor.

-¿Cómo mierda se les escapó?

-No se como distrajo a los guardias señor, ella es muy inteligente, aun no sabemos exactamente como lo hizo.

-Me averiguaran como lo hizo y la encontrarán, más vale que lo logre antes de que vaya a la casa.

Regrese a mi junta y no tardaron ni media hora cuando me el guardia me volvió a marcar.

-¿Qué?

-Todo indica que pudo a ver escapado por la azotea.

-¿Cómo mierda se puros hacer ido por la azotea?

-Registramos la habitación señor y la ventana estaba abierta, vimos las cámaras y se ve claramente como ella se va escondida en una de las camionetas después de haber saltado, de milagro no se mató, pero esas camionetas son las que salieron hacia las empresas.

-¿Y no han hecho nada?

-Llame al conductor y me dijo que ya estaba adentro de un hotel de su propiedad señor, le dije que revisará la camioneta, lo hizo, pero me dijo que no había nada, todo apunta que ella se fue.

-QUIERO QUE LA ENCUENTRAN YAAA, ANTES DE QUE MI JORNADA LABORAL SE TERMINE

Colgué furioso

Se fue.