Sharon Smith

Lo habíamos hecho toda la noche, sin ninguna tregua.

Giré mi rostro y tuve la mejor vista del mundo, unos ojos azules, me miraban con un increíble brillo

-Buenos días, pequeña leona.

-Buenos días, turco sabroso.

- ¿Turco sabroso? - tenía una sonrisa divertida y juguetona

-Si, turco sabroso.

-Tengo que decirte algo

-Mmmm

-Serkan no es mi hermano

- ¿Cómo que no es tu hermano?

-No lo es de sangre, yo lo conocí en una de las pandillas y siempre me apoyo, yo le hoce una promesa de que seriamos ricos legalmente y lo apreciaba mucho, así que lo presente ante todos como mi hermano.

-Ahora que lo mencionas desde la fiesta, aquella noche, no lo he visto.

-El día del accidente lo llame, me había dicho que iría cuando pudiera, pero después me dijo que tenia un viaje y que no sabía cuándo vendría, para no hacértela larga, nunca viajó, todo este tiempo planeo como robarme, bueno me robo un jet, pero ya lo encontraron y ya hablé con él y me dijo todo.

- ¿Qué?

-Los de la pandilla lo obligaron, porque él se quería salir de todo eso y tener una vida normal, también quería hacer una vida junto a alguien sin ponerla en peligro y la condición de ellos, fue que tenía que robar de las empresas lo más valioso que tuviéramos y así se podría salir mientras no, me pidió perdón, me dijo que él nunca me haría algo así por voluntad y ahora estamos bien.

-Pensé que tendríamos más obstáculos.

-Tal vez, si lo habrá muchos en algún momento, pero juntos lo solucionaremos.

-Siempre he tenido algo claro

- ¿Qué soy un bombón? Si, creo que todos lo tienen claro.

-Bueno aparte de eso

-A ver pequeña leona, ¿Qué has tenido claro?

-Que juntos somos un "Peligro... somos almas distintas, pero iguales a la vez"

-Explícamelo

-Si yo quisiera estar en tu ex pandilla, juntos nos temerían y seriamos un completo peligro y almas distintas porque cada uno tiene un punto de vista diferente e iguales porque iríamos por el mismo camino juntos.

-Sabes me gusta lo que dices, por eso, arréglate que vamos a salir.

-Pero quiero descansar y seguir ayudando a nuestro hijo.

-Te prometo que tendremos mucho tiempo para eso, además es un lugar muy bonito, vamos te va a gustar te tengo una sorpresa.

-Así y ¿cuál es la sorpresa?

-No te puedo decir, si te lo digo ya no sería sorpresa, así que ve a cambiarte.

No me lo dijo dos veces me fui a cambiar corriendo al closet como una niña, feliz de ir al parque.

No tarde en cambiarme me puse un vestido y no me maquille mucho.

Murat también se cambio estaba bastante guapo, es que le quedaba a la perfección el apodo de turco sabroso.

Estamos los dos listos, me tapo los ojos con una venda y el fue el que manejo durante casi media hora.

Estaba como en el burro en la película de shrek.

Ya lo tenia harto con mi ya merito llegamos, ya merito, hasta que me dijo, ya hemos llegado, bajamos del coche y dijo espera, me quito la venda.

-No abras los ojos.

- ¿Por qué?

-Bueno ya ábrelos

Los abrí y no lo pude creer.

-Se que no te lo esperabas- se arrodillo- Sharon Smith, ¿Quieres casarte conmigo?, ¿Aceptas pasar el resto de tu vida a mi lado?

Ahh, yo parecía, magdalena, lágrimas de felicidad se deslizaban por mis mejillas.

-Si, acepto pasar el resto de mi vida a tu lado, te amo.

-Te amo, pequeña leona.

***

Murat Arslan

No podía créelo, iba a hacer papá, yo había regresado porque se me olvidaron unos papeles, fue lo mejor que pude haber hecho, la vida de nuevo tuvo color para mi cuando escuche," Estoy embarazada", tendría un hijo con la mujer que amo.

Tenia que pedirle matrimonio ya, cuando le dije que me repitiera lo que había dicho, que en un momento hablaría conmigo, porque estaba con su familia, me iba a esperar, para hablar con ella, pero estaba ansioso por pedirle matrimonio, así que me fui.

Compre un hermoso anillo.

Una vez comprado el anillo, fui a una de las casas que tenía en Estambul y decoré en el patio.

Estaba muy emocionado, cuando termine, mire al cielo y...

-Se que estarían feliz por mí, porque al fin encontré a mi compañera de vida, se que desde el cielo me ven y me acompañan, no saben cuánto los extraño, me duelo saber que no podrán conocer a su primer nieto o nieta y que tampoco puedan conocer a alguien tan única como es mi pequeña leona, como lo es Sharon Arslan.

Sentí algo cálido en mis hombros, ellos están conmigo.

-Los amo.

Me fui a la casa y platicamos, solucionamos las cosas y follamos, para ayudarle a mi hijo a desarrollarse, solo por ayudarlo, la deje descansar una parte de la noche, al día siguiente la llevé, a la sorpresa, estaba hermosa tenía un vestido sencillo blanco.

Le tape los ojos, estaba diciendo al muy extraño, me decía ya merito, ya merito, no supe que significaba hasta que busque su significado y supe que en realidad me decía si ya casi llegábamos.

Todo el camino se la paso diciéndome esa extraña frase, hasta que por fin llegamos y se lo dije, le quité la venda e hice la propuesta.

-Se que no te lo esperabas- se arrodillo- Sharon Smith, ¿Quieres casarte conmigo?, ¿Aceptas pasar el resto de tu vida a mi lado?

Esta nervioso por la respuesta, lagrimas salían de sus hermosos ojos.

-Si, acepto pasar el resto de mi vida a tu lado, te amo.

-Te amo, pequeña leona.

Nos fundidos en el mejor beso.

Sharon es mitad será mi esposa y la futura madre de todos mis hijos, porque tengo planeado tener muchos y ya viene en camino el primero.

Soy el hombre más feliz del mundo.