⚠️Advertencia: Contenido y lenguaje explícito/lascivo +🔞 Wangxian/Xicheng⚠️

Algunos podrían decir que la niñez fue la mejor etapa de sus vidas, otros dirían que la etapa de la rebeldía al ser adolescente fue la que más los marcó como personas para desarrollarse, ni hablemos de ser adultos responsables y organizados... Otros solo esperan llegar a ser ancianos y no preocuparse por nada... Pero para Wei Wuxian ¡Por supuesto que el meterse en problemas y que su hermana se hiciera responsable de sus actos era la etapa que más le encantó!

A sus dieciséis años era de esos alumnos que se había convertido en una leyenda del colegio, todo el mundo hablaba de él aún si muchos no supieran cómo era. ¿Y por qué una leyenda dirán? ¿Acaso hizo algo por su escuela que le hizo ganar una gran reputación?

Bien.. en realidad, no.

Era porque aparecía de vez en cuando como un alma en pena en los asientos de al fondo del salón sólo para dormir o refutar los argumentos que no le parecían correctos de los profesores.

Nadie sabía cómo, pero Wei Ying siempre lograba pasar de año de alguna manera. Era un completo misterio.

Aunque casi nunca entraba a clases, siempre estaba puntual en la puerta del salón a la hora de salida para esperar a su hermano menor. No le importaba que sus compañeros susurren a su alrededor, él sabía que era porque era guapo y no por su increíble cara dura al aparecer así cómo así sin una pizca de vergüenza.

Wei Ying no conoce la vergüenza.

Wei Ying siempre hacía lo que se le daba la gana, nadie le podía mandar ni imponer reglas contra él.

Wei Ying era la definición de ser un pandillero juvenil.

En cambio, su hermano siempre estaba puntual en clases y era un ejemplo a seguir para muchos, todo lo contrario a él.

Jiang Cheng se levantó de su asiento para retirarse del aula, y al ver la cara de cachorrito feliz esperando a su dueño de su hermano mayor en la entrada se acercó a él sólo para pasar de largo e ignorarlo.

- ¡A-Cheng! - Wei Ying agarró fuerte su mochila y corrió hasta poder alcanzarlo - A-Cheng, creo que tu vista está fallando porque no me viste de nuevo, deberías comprarte unos lentes.

En respuesta el pelinegro limpió su oreja con un dedo y susurró - Que raro, me pareció escuchar una irritante voz..

Este comentario le dolió al castaño.

- A-Cheng.. ¿No me extrañaste acaso?

- Te veo todos los días en la casa, el colegio es el único lugar en el que me libero de tu presencia.

- Ash~ si tan sólo no fueras tan correcto y quisieras escaparte de clases conmigo verías lo divertido que soy.

- No me interesa espiar a los atletas hombres de la universidad cuando están practicando en la cancha, eso es muy gay - dijo asqueado.

- ¡Yo no hago esas cosas! Ellos son sólo mis amigos, y los amigos se respetan - se indignó - Además son muy mayores para mí, jamás se fijarían en un niño como yo.

- ¿Entonces qué cosa interesante hiciste hoy en vez de entrar a clase?

- Yo.. - miró hacía los lados y le dijo en voz baja - Encontré dos conejitos vagando en la parte trasera de la escuela, así que estuve construyendo una casa en dónde está el huerto para que vivan. Me quedó muy linda y ellos son tan tiernos~, así que los adopté.

- Ah, que bueno. No me interesa.

- Son mis hijos ahora ¡Estamos hablando de tus sobrinos, A-Cheng! Debería importarte.

Jiang Cheng suspiró ante la actitud infantil de su hermano """"mayor"""" que estaba hablando cómo un padre con derecho, quería golpearlo, pero no podía, le tenía mucho respeto a su mano.

- Siempre supe que serías padre adolescente luchón, pero no creí que fuera tan rápido.

- Idiota - volteó los ojos.

Las calles de Yunmeng eran hermosas y acogedoras por la tarde, para suerte de Wei Ying su hermano no tuvo reunión del consejo estudiantil, por lo que se pudieron regresar juntos a casa por el camino que ambos solían siempre tomar desde niños.

Wei Ying caminaba tan relajado y con un estilo único, aunque parecía un delincuente por las pintas que traía con los tatuajes, pircings, la ceja con un corte en medio y su ropa mal acomodada. No le quedaba mal, pero era un llamado de alerta para esas personas que creían que todo era satánico para tomarlo y hacerle un exorcismo a la fuerza en plena calle.

- A-Cheng~ ¿No tienes nada que hacer hoy?

- ¿Qué cosa quieres ahora? Tengo que estudiar para el examen de admisión.

- Que aburrido, ¿no te duele la cola de estar tanto tiempo sentado estudiando?

- ¿Y a ti no te duele la cola de estar todo el día metiéndote dedo, puerco de mierda?

Wei Ying frunció el ceño acompañado de un puchero por la respuesta tan ofensiva pero acertada que le pudo dar.

- Idiota, relájate un rato que se te va a inflamar el cerebro. Mejor acompáñame dónde están mis amigos de la universidad, no quiero ir sólo.

- Si te están extorsionando los superiores y me quieres entregar como pago déjame decirte que yo sé morder.

- No es eso, quiero comprar algo~ Bueno, en realidad ellos lo compraron por mí, sólo tengo que pagarles y llevármelo.

- No soy cajero automático, no te voy a prestar dinero.

- Tengo mis ahorros de la mesada que me da Shijie~

- ¿Qué quieres comprar?

- Si no me quieres acompañar, no vale la pena contarte~

Jiang Cheng suspiró molesto.

- Dime antes de que me arrepienta.

Wei Ying sonrió al ver que captó la curiosidad de su hermano, y no dejaría pasar la oportunidad para joderlo.

- Bueno, yo quiero... - se acercó a él para susurrarle en el oído, así nadie más podría escuchar sus depravaciones.

Jiang Cheng, como un instinto de supervivencia, lo tomó del rostro para empujarlo lejos antes de que se le pegara lo estúpido.

- ¡¡¡AGH QUE ASCO!!! ¡¡¡NO VOY A ACOMPAÑARTE A COMPRAR ALGO ASÍ!!!

Su rostro tenía grabado en letras grandes «"Aléjate joto"»

- Aiya~ ¡A-Cheng, tampoco me trates así! Sólo te lo puedo decir a ti.. ¡Si le digo a Shijie se puede infartar! Y Nie-Xiong está de viaje..

Wei Ying retrocedió unos pasos para alejarse del salvaje de su hermano, se sobó la mejilla que había quedado marcada y le estaba ardiendo. Siempre que le decía algo que le disgustaba, lo atacaba sin piedad alguna.

- ¿Por qué te alocas? - sollozó el castaño - Son sólo juguetes sexuales de sadomasoquismo lo que quiero comprar.

- ¡¿Y para qué mierda quieres comprar eso?!

- ¡Para experimentar~!

- ¡¡¡Que te vendan eso debería ser ilegal!!!

- No seas paranoico - hizo un puchero - ¿O es que acaso te da miedo ver una polla de plástico y que se te antoje?

Jiang Cheng era una bomba de tiempo apunto de estallar ¿Si lo mataba ahora sería capaz de ocultar su cuerpo sin ser descubierto nunca? Necesitaba comprobarlo.

- ¿Para qué lo quieres si ni novio tienes? En serio, Wei Wuxian ¡¡Haz algo productivo por tu vida y empieza a estudiar!!

El castaño se cruzó de brazos disgustado que siempre le repitiera lo mismo, era un discurso tan cansino que lo volvía loco.

- Pfff los chicos lindos no necesitamos estudiar porque nuestro futuro no puede brillar más que nosotros - lo miró de reojo - Además, parece que estás celoso porque a mí se me declaran chicas hermosas todos los días y a tí ni te piden la hora por la cara de culo estreñido que siempre traes - le dió unas palmaditas de consuelo - Tranquilo hermano, tienes el camino libre porque no me interesan las mujeres, pero aún así échale ganas que la belleza cuesta.

Furioso no sería la palabra que usaría, no, lo siguiente a furioso, "Voy a mutilarle las piernas a ese tragapitos" era el nivel al que había llegado.

- ¡¡¡Vete a la mierda, Wei Wuxian!!!

- Aunque hay algo en lo que estás en lo correcto.. - ignoró los insultos del menor - No me gusta nadie ni nunca me he enamorado de alguien, es verdad. Quizás puede ser un desperdicio de dinero por ahora, pero.. - se acomodó a su costado y agarró sus mejillas embobado - Cuando llegue ese hombre especial que haga latir mi corazón con locura.. Primero tendremos una cita romántica con una velada bajo la luna tomando un delicioso vino, después le confesaré mis sentimientos más profundos y le pediré que sea mi novio, y le daré un tierno beso para que nunca olvide mis palabras.

Está confesión parecía ser la de un chico normal que soñaba con tener pareja, uno con tendencias que pueden llegar a dar cringe a muchos, y sólo sería ese el caso.. si no hubiera continuado hablando.

- Y para cerrar la noche con broche de oro lo llevaré a mi habitación y le haré cosas malas~ Lo amarraré y haré lo que quiera con él, estará completamente a mi merced, sólo para mí obedeciendo mis órdenes. Voy a montar su polla hasta dejarlo seco y él no podrá reclamar hasta que yo le dé permiso de hablar.

La cara de Jiang Cheng había pasado de ser pálida a tornarse de color verde, sentía su garganta arder y no podía caminar recto. Estaba tan asqueado que de verdad quería vomitar por haber tenido que escuchar tremenda porquería de los sueños húmedos de su hermano, es que de verdad ¿Quién en su sano juicio le contaría algo así a su hermano? ¡Solamente el sin vergüenza de Wei Ying podría hacerlo!

- Ay Dios.. ¿Por qué me sigo juntando con este imbécil? - susurró A-Cheng para sí mismo esperando la hora en que un avión se equivocara de ruta y le cayera encima a Wuxian.

El castaño seguía metido en su mundo mientras sonreía de oreja a oreja.

- ¡Mi primera vez será mágica, caliente y por supuesto con mucho amor!

La belleza de la inocencia plasmada en un joven con grandes sueños..

Las citas románticas..

Un estable y lindo noviazgo correspondido con sus altas y bajas..

Explorar nuevas cosas junto a esa persona antes de pasar a la lujuria incontrolable..

Es lo que toda persona que busca el amor quisiera..

¿Verdad?

- Setenta y ocho, setenta y nueve.. - el sonido del golpe de un látigo chocando contra la suave piel de las nalgas aún vírgenes de un pequeño que se condenó a sí mismo hacían eco en la silenciosa habitación, las cuáles eran acompañadas de gemidos ahogados - ¿Por qué lloras? ¿Quieres que me detenga?

- ¡Ngh mngh! - protestó con lágrimas en sus ojos que eran cubiertos por ese antifaz negro que evitaba ver a su verdugo.

- ¿No? No iba a hacerlo, sólo pregunté por consideración.

Parece que para todos no es así.

Uffff.

Que duro golpe de realidad.

«¡¡Esto no es lo que había planeado desde que era adolescente!! ¡¡Tenía que ser al revés sí o si!! Debí obedecer a Jiang Cheng ese día y tenía que haberme puesto a estudiar..» aunque sus reclamos eran sólo mentales, intentaba liberarse de las cadenas que lo tenían atado a una mesa negra que no lo dejaba escapar de ahí para expresar su desacuerdo con los roles.

Hanguang-Jun dió un último latigazo que hizo que Wei Ying encorvara más su columna y chocará su rostro contra la mesa, elevando así más su culo hacia la visión de Hanguang-Jun. Analizó detenidamente la obra de arte que había creado en esas redondas y apetitosas nalgas, que ya no tenían ese tono pálido, sino un rojo intenso con marcas en ellas. Lo tocó con las yemas de sus dedos para no causar ardor en el castaño, se mordió el labio por lo bien que eso le hacía sentir, pero.. no era suficiente.

Necesitaba más.

Tiró el látigo a un rincón de la habitación y rompió las cadenas que tenían atado a su presa de un tirón, su fuerza sin duda era increíble, y lo era más cuando estaba hambriento.

- Hace falta mi marca personal.

Tomó a Wei Ying del brazo para jalarlo hacía sí, el menor se asustó del cambio tan repentino de posición, de antes estar sobre algo duro, ahora se encontraba encima del regazo de Hanguang-Jun. ¡¿Qué es lo que estaba planeando hacer?! ¡Él estaba indefenso sin poder ver y aún con las manos atadas entre sí!

Wei Ying giró su cabeza para intentar reclamar, pero fue callado al momento de sentir una mano rebotar contra su culo. Una y otra y otra vez. Cada golpe era más fuerte que el anterior, no podía evitar gemir involuntariamente de placer por las nalgadas, aún si él creía que eso era demasiado vergonzoso ¡Su cuerpo traicionero no estaba colaborando con su protesta!

No iba a rendirse aún, pataleo como un niño pequeño haciendo un berrinche para captar la atención de Hanguang-Jun, lo cuál fue un éxito. El mafioso miró en dirección de dónde escuchaba los gemidos incesantes del delincuente, que por debajo del antifaz veía que aún recorrían algunas lágrimas. Quizás estaba siendo muy duro con él, se cuestionó sobre sus acciones por un momento y decidió darle el derecho a la palabra.

Lo envolvió en sus brazos, lo cuál sorprendió nuevamente al menor, pero no por estar haciendo contacto directo con el Lan, sino porque este lo lanzó contra la cama sin piedad.

- Si necesitas decir algo, hazlo rápido - se acercó a él para retirarle la mordaza de la boca.

¡Al fin! ¡Al fin podía hablar!

- ¡¡¡Hanguang-Jun detente por favor!!! ¡¡Nunca nadie en mi vida me había tratado así ni me había pegado ahí!!! ¡¿Cómo eres capaz?!

Hanguang-Jun no respondió a esto, quería seguir escuchando las quejas de su amado. Era.. divertido escucharlo.

Verlo suplicar era tan encantador.

- Seguiré las reglas, ¿bien? ¡¡Pero no me golpees así que no estás ajustando cuentas con otro mafioso!! - su expresión aunque era de miedo resultaba tierna - ¡Sé que recién nos estamos conociendo, pero al menos antes invítame a desayunar en la noche, o no sé!

- ¿Soy el primero entonces..? - preguntó con una pequeña sonrisa escuchando sólo lo que le convenía, mientras que con sus manos volvió a liberar su enorme erección que dejó estúpido a Wei Ying. De por sí la polla de Lan WangJi era grande, pero ahora que había llegado a un grado máximo de excitación por estar jugando con las nalgas de este, estaba más que duro.

- Eh.. ¿Pe-pero qué ven mis oídos? - su voz se escuchaba temblorosa - Hanguang-Jun.. ¿Acaso estoy alucinando por las nalgadas.. o acabas de sacar un rifle de tus pantalones? ¿Acaso me vas a matar?

Nunca imaginó que las palabras que había usado para molestarlo y hacerlo enojar se volvieran realidad. Se había dado un spoiler así mismo sin darse cuenta.

Si mide más de 14 centímetros, es un pene.
Si mide menos, es una pena.
¿Pero y esa monstruosidad..?

¡Esa cosa iba a partir su culo virgen! Incluso se atrevería a decir que ya tenía carnet de identificación como un ciudadano más.

- Calibre 25 - respondió orgulloso sin expresión alguna.

Sin duda lucinante.

Aunque el Lan no tuviera sentido del humor, compartía la misma neurona que Wei Ying para seguirle la broma.
Solamente él podía complementarlo perfectamente.

- Tú-...

- Wei Ying, sólo me has dado respuestas negativas, sin embargo, tu cuerpo dice todo lo contrario - con sus dedos separó ambas nalgas para dejar expuesta su dilatada y húmeda entrada que se contrajo con el tacto del Lan - Mira, ya estás todo mojado.

- ¡Bueno, es que sí me provocas así yo-! - su voz se cortó cuándo un gran trozo de carne lubricado se empezó a sobar lentamente contra su trasero, de arriba hacia abajo jugaba para provocar una reacción del menor, estaba tan caliente que su agujero pedía ser penetrado ya.

Está acción prendía tanto a Wei Ying que su miembro se había puesto erecto también. Sólo lo estaba provocando pero no actuaba, no podía dejarlo así.

- No logró comprender tus deseos - apretó con fuerza una de sus nalgas, el menor sólo atinó a mover sus caderas hacia atrás deseoso para intentar introducir la polla de Hanguang-Jun dentro suyo. Acción que el Lan notó rápidamente, así que lo detuvo sosteniendo sus caderas con ambas manos - Wei Ying, dime ¿Qué es lo que quieres?

Wei Ying no lo miraba, escondió su rostro entre sus manos para evitar que viera lo rojo que se había puesto hasta las orejas, estaba tan cachondo que no aguantaba más y deseaba sentirlo dentro suyo ya.

- ¿Por qué debería decirlo? - preguntó y bajó la voz para susurrar - ¿No es obvio lo que quiero? Sólo me haces esperar, eres tan cruel..

- No te escuché, dilo claro.

Wei Ying apretó las sábanas y giró en dirección de WangJi.

- ¡Dije que quiero que me folles-! ¡Ah-! - fue interrumpido por un salvaje movimiento que hizo que su cabeza se inclinara hacia atrás, Lan WangJi había jalado de su cabello para tenerlo cerca a sus finos labios fríos.

- Si es lo que quieres, entonces ruégame.

- ¿Ah~?

El mafioso lo jaló más para sí, dejando expuesto el cuello del menor el cuál se volvió su objetivo. Pasó su húmeda lengua sobre esta recorriendo esa suave piel que lo volvía loco.

- Ruégame, dime "Er gege" - dijo serenamente - Quiero escucharte.

Wei Ying sintió un escalofrío caliente recorrer su encendido cuerpo al escuchar esa sexy voz que retumbaba en sus oídos. Desesperado por sentirse lleno por su amo se recostó sobre la cama elevando sus caderas y abriéndose de piernas para que Hanguang-Jun pudiera apreciar mejor por dentro de sus nalgas.

- Lan Er-gege, amo.. Te lo ruego ¡Follame sin piedad esta noche! ¡No me hagas esperar más, deseo que me llenes de tu semen ahora mismo hasta dejarme embarazado! - Lan WangJi abrió los ojos de par en par lentamente por las palabras sin filtros de Wei Ying - Por favor, quiero tragarme tu gran pene con mi hambriento culo y me hagas gemir tu nombre miserablemente.. Toma mi virginidad, amo ¡Destrozame!

Esto sin duda era demasiado para Lan WangJi.

Pero él era incapaz de negarse.

Tomó su enorme erección, dirigió la punta hacia la entrada de Wei Ying y la golpeó contra ella. Wei Wuxian al sentirlo tragó saliva, nunca había tenido algo tan grande dentro suyo, sabía que eso le dolería así que se mordió el labio inferior para distraer el dolor de cómo su "virgen" entrada empezaba a abrirse para que la polla de su amo ingresara.

- No pienso detenerme aunque ruegues.

Una chispa de dolor lo hizo estremecerse cuando Hanguang-Jun no aguantó más e introdujo de un empujón todo su largo miembro dentro de Wei Wuxian, chocando su pelvis contra las nalgas del menor - Ahhh~ mierda, a-amo~ es de-demasiado, ngh~.. - Estaba tan apretado y a la vez tan caliente que hacía que se le pusiera más duro a Hanguang-Jun por cada segundo que pasaba dentro suyo, el menor en cambio sentía un fuerte ardor y sólo podía apretar con fuerza su trasero involuntariamente, sin saber que esto sólo prendía más a WangJi.

Sus caderas se movían en un vaivén desesperado, viendo cómo el culo de Wei Ying se tragaba su pene en cada embestida, envolviendolo en esas ardientes paredes internas de su amado. ¿Cómo carajo podía ser eso tan jodidamente excitante? Desde la posición de Hanguang-Jun podía ver claramente el recorrido desde la espalda de Wei Ying, su fina cintura, sus caderas que se movían al mismo ritmo que él y sus redondas nalgas, que parecían verse aún más grandes desde ahí.. Dios, que hermosa vista.
Ver cómo lo hacía agitar a Wei Ying por cada estocada que le daba, cómo lo hacía gemir de placer al ser follado por él, su amo.. sólo hacía que acelerará más el ritmo, soltando así sonidos obscenos de dónde estaban conectados.

- Amo~ ahhh~ tu pene es de-demasiado enorme~ ngh~ - apretó fuertemente las sábanas intentando voltear a verlo, pero WangJi no medía su fuerza con sus embestidas por lo que se le dificultaba mantener la postura - ¿Me vas a llenar por completo de tu leche? ¿De verdad quieres dejarme embarazado, eh~? Ahh~ - gimió - Con un desconocido.. que irresponsable, er-gege~

- Silencio - aún si era imposible, estás lascivas palabras sólo lo encendían más - Nada de quejas.

- L-lo digo en serio~ Ngh.. es demasiado enorme.. mi culo virgen no puede tomarte por completo aún~ mngh~

Hanguang-Jun se agachó para estar encima de Wei Ying sin dejar de mover sus caderas violentamente, pasó su mano por los pechos sudados de su amado para así llegar hasta la boca del mismo y hacerlo callar. Su saliva se escurría por la comisura de sus labios al igual que sus gemidos de placer al ser invadidos por unos largos dedos.

- Recuerda, tú iniciaste esto - tomó el rostro de Wei Ying para poder encajar sus dientes sobre su cuello, mordiendo más y más fuerte hasta hacerlo sangrar. Quería dejarlo marcado, para que todos vieran que ahora tenía dueño y que nadie se lo arrebataría jamás - Y yo decido cuándo se acaba.

Y tal cómo lo había pedido el sexy delincuente, el Lan lo llenó con su espeso líquido por completo, chorreandose por sus muslos hasta ensuciar la cama porque no era lo suficientemente apto para almacenarlo todo dentro suyo. Eso respondía a su pregunta, si pudiera si lo dejaría embarazado todas las veces que Wei Ying se lo pidiera porque amaba estar dentro de él, así cómo le encantaba todo de ese chico.

Las horas pasaban y Lan WangJi aún no regresaba a casa, aún si el toque de queda era a las 11:50 él desobedeció está regla. Seguramente algo malo había sucedido.

Xichen había visto a su hermano salir corriendo de su habitación, parecía enojado, lo cuál le preocupó por si iba a enfrentarse a alguien. Miró el rastreador que tenía en su celular y localizó su ubicación: "Muelle de loto, Yunmeng" ¿Qué hacía ahí a esas horas?

Tomó su chaqueta y fue en dirección hacia allá, no le tomó mucho tiempo en llegar ya que conocía atajos, y el GPS lo llevó hasta un gran Bar que destellaba luces moradas. Dedujo rápidamente la razón del porqué su hermanito había decidido romper una regla, bueno en realidad eran tres.

«Ay la juventud de hoy en día..»

Ingresó al lugar en busca de su hermano, ya eran casi las 2AM y no respondía a las llamadas, estaba empezando a preocuparse. Hanguang-Jun siempre avisaba a dónde iba y dónde estaba, era la primera vez que lo estaba ignorando.. ¿Y era por un chico que recién conocía..? No lo podía creer.

Un día antes, su hermano, algo nervioso, le preguntó:

«Xichen, ¿soy aburrido?»

Lo conocía perfectamente, sabía que esa pregunta tenía un trasfondo, y que tenía que ver con aquel chico que lo dejó babeando cuando lo vió en esa foto.

Era su contrario, y él tenía la creencia que los opuestos se atraen, así que decidió aconsejarlo.. ¡Sólo que no pensó que lo haría tan rápido y mucho menos se desaparecería con él!

Debía respirar y tranquilizarse, WangJi nunca haría nada imprudente.

Llegó hasta la barra del bar para estar en una zona más tranquila y poder buscar como un ave carroñera a su presa, pero la voz de un chico detrás de él llamó su atención.

- ¿Qué bebida desea? - preguntó un joven que vestía un traje morado.

«Esa voz.. jamás podría olvidarla»

Xichen tosió y se acomodó pasando su mano por su cabello evitando mirarlo a la cara. No es que no quisiera hablar con él, sólo que no quería que pensara que estaba ahí para coquetear con chicas o algo por el estilo.

- Oh, no, yo no bebo, soy abstemio - dijo la primera excusa que se le vino a la mente.

- Esto es un bar, no un asilo para ancianos.

- Ah...

- El cementerio está a unas cuadras de aquí, puedo llevarte si gustas, Doctor Xichen.

Mierda, fue descubierto en menos de un minuto.

Xichen volteó a verlo con una débil sonrisa, estaba nervioso pero eso era algo que él podía controlar con facilidad.

- ¿Me recuerdas? - preguntó.

- Por supuesto, si te conocí sólo hace unas horas - levantó una ceja - No subestimes mi inteligencia.

- No, no lo hago - sus palabras eran sinceras, sólo que así cómo él veía cientas de personas a diario en el hospital y no recordaba a la mayoría después, pensó que ese sería el mismo caso. Le sorprendía la inteligencia y alta capacidad de aquel chico de traje morado.

Eso le encantaba.

- ¿Entonces no beberás nada? - insistió ya con algo de molestia. Su paciencia se acababa muy rápido.

Aunque el clan Lan era fabricante del alcohol "La Sonrisa del Emperador", Xichen no era muy fanático de ese tipo de bebidas, porque su tolerancia era nula. Quería reprimir el beber para evitar cualquier humillación pública, pero al ver la insistencia del menor aceptó ¡Sólo fingiría que bebería y todo estaría bien!

- Dame lo más fuerte que tengas, hoy estaré aquí hasta que cierren ya que tengo turno en el hospital hasta la noche.

- Vaya, quién diría que un doctor pudiera ser así - Jiang Cheng se sorprendió - Eso me gusta.

Xichen sintió que su corazón se aceleró por lo último mencionado.

- ¿En serio?

- Sí - afirmó y se acercó un poco a Xichen para aclarar su respuesta - Me gusta que pidan el más caro, así gano más.

- Ah - su felicidad cayó por los suelos de golpe, de verdad ¿Por qué se emocionó por unas palabras vacías? - Tomaré una ronda entonces. Podemos beber juntos, claro, si no te incómoda.

- ¿Por qué me incomodaría? - levantó una ceja dudoso.

- Bueno, hoy mientras conversábamos saliste corriendo y-

- ¿Pensaste que fue por ti?

- ¿No lo fue?

- No, claro que no - negó con la cabeza - En ese momento se me ocurrió una gran idea, y estaba intentando aguantar la risa - «Y el vómito también» pensó - Detesto que otros me vean en ese estado, así que me fuí rápido.

- Entonces era eso.. - susurró aliviado.

- Las personas no me incomodan, no siempre, muchos creen que por tener está cara ya estoy renegando, pero no es así. La compañía me agrada, a no ser que se llamen Wei Wuxian.

- Entiendo - sonrió, él tenía el mismo "problema" que WangJi, era divertido a su manera - Los hermanos son todo un caso.

- ¿Cómo sabes que él es mi hermano? ¿Lo conoces?

Xichen apretó los dientes y todo lo que pudiera apretar, de nuevo estaba siendo descuidado con sus palabras. Se supone que debía actuar cómo si no lo conociera de nada, o quedaría como un "seguidor" más.

- ¿Adiviné entonces? Cada día desarrollo más mi habilidad psíquica. No te lo dije, además de ser médico puedo leer la mente.

- Ajá.. ¿En qué estoy pensando ahora?

- Mmm - lo miró detenidamente, aprovechando en captar toda su belleza en su mente - En "Este idiota cree que me creeré una estupidez así", ¿verdad?

- Wow, es algo que diría tal cuál - dijo con una sorpresa sincera - Pero no.

- ¿Fallé?

- En realidad estaba pensando en que tu rostro me parece familiar.. por qué será.. - Jiang Cheng se apoyó del mostrador y se inclinó para acercar su rostro al de Xichen - Te pareces a alguien que ví hace un rato, pero no estoy seguro si relacionarlos.

¿Quizás se estaba refiriendo a WangJi? Sus rasgos eran casi idénticos, por lo que habitualmente los confunden. Si era así, significaba que él estaba cerca, y seguro que estaba bien.

- ¿Dónde?

- Mmh.. quizás en alguna revista de ancianos que se mantienen bien.

Xichen río ante este comentario.

Jiang Cheng se perdió en esa cálida expresión.

¿Qué era ese extraño sentimiento que invadió su pecho durante unos segundos?

- ¿Y cuál fue tu gran idea? - preguntó el doctor con curiosidad en sus palabras.

- Sólo te diré que es una idea millonaria, a la cuál sacaré provecho todas las noches. Saldré de deudas, compraré una moto nueva, llevaré de vacaciones a mi hermana y pagaré lo de mi universidad.

- ¿Entonces ya no te veré perdido por los pisos del hospital?

- Iré de vez en cuando a visitar a una pareja de ancianos hasta que les den de alta, no me sentiría tranquilo si los dejo solos - aún si su mirada estaba concentrada en mezclar las bebidas, está mostraba angustia.

- Atiné al decir que eras de buen corazón.

- No es así, le estoy mintiendo ya que no saben a qué me dedico en realidad.

- ¿Cuál sería el problema? No deberías avergonzarte por lo que haces, mientras estés agusto.

- No es eso, su único hijo falleció en un accidente por culpa de un conductor ebrio, así que le tienen mucho rencor al alcohol.

- Oh..

- Aún así estoy aliviado que este calvario terminara y pueda empezar de nuevo.

Jiang Cheng terminó de servirle la bebida y se llenó una para él también. Xichen levantó su copa en dirección al menor.

- Entonces brindemos por eso.

- ¿Por?

- Por un nuevo comienzo.

Jiang Cheng sonrió cálidamente, lo que dejó sin aliento a Xichen que se quedó embobado viéndolo mientras sostenía torpemente su copa. Si es que el mayor no lo hubiera visto nadie le hubiera creído.

El joven de aspecto atractivo tomó su copa de vino y la brindó con la de él.

- Por un nuevo comienzo.

El inicio de algo maravilloso empezaba para las dos parejas que estaban en el bar Jiang esa noche. Mientras que unos recién se estaban conociendo paso a paso, los otros dos también lo hacían pero a su manera descontrolada y lujuriosa.

Mientras tanto, la habitación roja pasión era invadida por unos sonidos obscenos que hacían competencia a la música del bar, acompañados por los melodiosos gemidos del castaño que sólo lograban encender más a WangJi. Aún si ya se había corrido muchas veces dentro de Wei Wuxian, este seguía provocandolo para que no abandonara su hambriento agujero.

- Hanguang-Jun~ nmgh~ ya no p-puedo más.. quiero poder caminar mañana ¡Hah~! - se aferraba con fuerza a las sábanas mientras encogía los dedos de sus pies intentando aguantar la bestialidad de su amo.

- Reclamas.. cuando tú eres el causante de todo - gruñó.

- Es q-que creo.. mmgh~ que aún n-no estoy listo para tener b-bebés~ ahh~..

- No bromees con eso.

- Lo digo muy en serio, amooo~

WangJi aumentó la velocidad de las embestidas, salpicando un poco de lo mojado que estaba ya el culo de Wei Ying, el cuál se tragaba agusto cada metida de la erección de su amado mafioso.

Aún si era su primera vez, con los minutos se acostumbró a las estocadas de WangJi increíblemente. Era cómo si ambos estuvieran hechos el uno para el otro.

- Si quieres que me detenga, entonces deja de hablar.

- ¿Acaso no te gusta escucharme gemir~? - Wei Ying empujaba más sus caderas hacia WangJi para atraparlo por completo y que lo destrozara más profundo - Seré lo más ruidoso posible~ quiero que toda China se entere de cómo me estás haciendo tuyo esta noche.

- Silencio.

- Ponme tu gran polla en mi boca y sólo así me callaré.

- Silencio, o te arrepentirás después.

Wei Ying parecía que estaba grabando su propio vídeo porno junto a su futuro esposo, él vivía el momento y se armaba su propia historia. Le gustaba molestar a Hanguang-Jun y que este reaccionara follandolo más duro, aún si él pedía clemencia este se lo negaba.

Odiaba admitirlo, pero le encantaba que Lan Zhan le diera órdenes. Era tan jodidamente sexy.

Se apoyó de sus brazos para levantarse un poco, dobló más su espalda y elevó su trasero para que la punta del pene de WangJi chocara directamente en su próstata. Sus gemidos sensuales e incontrolables no dejaban de escaparse de sus labios, el Lan acompañó esto nalgueando a Wei Ying con fuerza.

Y tal cómo el castaño lo había pedido irresponsableme, la puerta empezó a sonar.

Ambos girando en dirección a esta, Wei Ying pensó que había sido una alucinación suya hasta que un "A-Xian ¿Podemos hablar?" se escuchó al otro lado de la puerta junto al sonido de unas llaves metiéndose dentro de la perilla.

¡Era su Shijie intentando entrar!

«Dianxia, no decía en serio eso de que todos se enteren de que me estás rompiendo la cola.. ¿cuál fue el mal que te hice? Ya estoy pagando por mis pecados con sacrificios, ¿por qué me castigas de esta manera? ¿No ves que ya no podré caminar después de esto?»

Toc toc, el juego se ha terminado.