Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo Veinticuatro

Ya no era sorprendente notar aquel rostro malhumorado de Taehyun mientras desayunaba. EunHan le estaba dando de comer en la boca por estar en un modo ausente aquellas horas de la mañana, y su papá no hacía más que hablar telepáticamente con su esposa.

— ¿Quieres que te lleve en el auto?

— Está bien...

La verdad es que no quería: ya se había acostumbrado a disfrutar la mitad del camino escuchando a BeomGyu hablar, preguntarle qué tal había dormido, qué había desayunado, qué clases tenía, qué parejas estaba uniendo.

Pero estos últimos días BeomGyu solo se aparecía unos segundos, siempre cuando estaba con Kai, siempre besándolo en frente suyo y siempre yéndose sin darle tiempo para hablar.

También se alejaba rápido en las horas de salida, encontrándose con una chica que Taehyun no lograba ubicar y que había visto frecuentemente con su novio en citas. Era muy bonita, muy cariñosa, muy angelical, muy amable, así se veía mientras Taehyun los miraba desde algún local esperando a que Minhyuk hiciera sus compras.

Se estaba comenzando a molestar. ¿Cuánto tiempo iban sin hablar? Una semana. ¿Cuántas veces BeomGyu le había puesto como excusa que tenía planes? Ugh, no puede contarlas.

Ah, ¿Cuántas veces el mayor lo estaba besando frente la mirada atónita de Kai? Eso era lo que más repudiaba. Beomgyu tenía el derecho de besarlo y usar su boca cuando quiera, Taehyun le dejaría, pero no de esa forma. No con ese estúpido próposito.

— Abuela —llamó, recibiendo la mirada y tierna sonrisa de la anciana, quien se acercaba al mostrador para atenderlo—, dame un malteada de fresa y...

Taehyun desvió la mirada a Kai, quien pareció salir de su sueño con aquello, dejando de mirarlo para decir su pedido a la señora de la cafetería.

— Galletas de vainilla, por favor —musitó el menor con una pequeña sonrisa amable. La mujer asintió y luego de preparar los pedidos, ambos chicos decidieron ir a la bibioteca a comer.

EunHan los había saludado con una sonrisa cuando entraron. Nadie se encontraba en ese lugar, no a estas horas de descanso, por lo que dejaron todos los aperitivos sin cuidado en una de las mesas.

— Ya se acerca el aniversario de la escuela —comentó Kai antes de meterse una galleta a la boca, masticándola rápidamente y siguió hablando— ¿Entrará al grupo de ópera.

— Iugh, claro que no. —Una mueca asqueada apareció en su rostro—. Juntarse con los de ópera es como juntarse con las porristas, son unos cabeza hueca que se creen lo mejor de la escuela.

— Yo quería entrar —musitó Kai—, me da vergüenza, no lo sé, también quería entrar al club de música, pero-

— Otros creídos, lo sé —Kang tomó un poco de jugo, dejando un pequeño silencio antes de contestar—. Pero por lo que tengo entendido que este aniversario será más formal, no habrán presentaciones de talentos ni nada.

— ¿Por qué?

— Porque a mi papá le da flojera mandar a decorar el gimna-

Taehyunnie.

Esa voz, ese apodo.

Cerró los ojos tratando de repirar y no tirar todo al vacío. La pequeña llama de furia que andaba dormida comenzó a arder en su estómago como una señal de advertencia, creciendo cada vez más. La mano de BeomGyu estaba acriciando su espalda mientras se sentaba a su lado en la silla larga de la bilioteca.

Su mirada se levantó a Kai, viendo cómo este solo bajaba la suya para no ver las muestras de afecto que de seguro comenzaría a dar Beomgyu, quien luego desaparecería completamente.

— Hola, Kai —había saludado el mayor, sin quitar su brazo alrededor de sus hombros.

— Buenos días, hyung.

Y era más molesto saber que Kai no tenía ni idea de lo que hacía Beomgyu apropósito.

Tal como veces anteriores, el de cabello azabache volvió a enfocarse en sus labios, acercándose y tomando su mentón, pero inmediatamente Taehyun lo empujó con poca fuerza en el pecho antes de que lo besara, dejándolo confundido.

Dudó en decir lo que estaba por decir.

— Quiero hablar cobtigo —Beomgyu frunció el ceño, confundiéndose aún más por aquel débil tono de voz, por lo que tuvo que tomar valor y hablar más fuerte— Que quiero hablar contigo.

— ¿Sobre qué?

— Solo vamos.

BeomGyu dirigió su mirada a Kai, antes de sacudir su mano en el aire como despedida y recibiendo una sonrisa incómoda por parte del menor.

— Ya vuelvo, Huening —musitó Taehyun, y el mencionado asintió rápidamente, viéndolos levantarse e irse.

Sus pasos eran fuertes y rápidos, y su rostro rojo por la cólera lo acompañó hasta que cerró la puerta principal  de los baños. Se sentía angustiado, molesto, con ganas de gritarle al chico que tenía una mirada confundida en frente suyo.

Ya fue suficiente. No podía permitir más las muecas tristes del menor cada vez que presenciaba tales escenas románticas hechas en sus narices.

— Basta de comportarte como idiota, BeomGyu.

El mayor no se inmutó, claramente mostrando que no había entendido nada de lo que dijo en esa frase.

— ¿De qué hablas?

— De que ya estoy cansado —masculló—. Estás siendo un inmaduro de primera, ¿acaso no te has puesto a pensar en qué puede sentir Kai cada vez que haces tus idioteces en frente suyo?

La respuesta de BeomGyu demoró y el menor trató de no abrir la boca. ¿Que había que pensar? ¿Cuánto le costaba pedir disculpas por las tonterías que hacía y aceptarlo?

— Taehyun —El menciondo asintió, esperando a que continuara—. Explícame por qué de la nada estás enojado, ¿quieres?

— ¡¿Y lo preguntas?!

— ¡Sí! —BeomGyu alzó la voz, notando al instante como los ojos del menor precían enfadarse cada vez más en un negro intenso. Se detuvo unos segundos, calmándose antes de seguir hablando—. No entiendo nada de lo que estás reclamando.

— ¡Que me harta que te comportes como un inmaduro! —Taehyun lo señaló, él no parecía poder mantener la calma como lo hacía el mayor—. ¡¿Acaso tienes cinco años?! ¡Compórtate como alguien de tu edad!

— Deja de gritar —demandó de inmediato, por lo que Taehyun trató de respirar, respira, respira antes de que explotes.

La llama ardiente en su pecho iba creciendo, y la quería apagar, quería mantenerse tranquilo y no terminar soltando cosas de más, como las citas con esa chica, el odio de la madre de BeomGyu, la noticia de un Kai enamorado de él la cual no fue dicha.

— Deja de besarme en fente de Kai —culminó.

Beomgyu rodó los ojos, apoyándose contra los lavados para suspirar pesado, alimentando aquel fuego de enojo de Taehyun.

— Eres mi novio.

— ¡¿Y qué mierda con eso?! — chilló con una voz exasperada, perdiendo la paciencia—. ¡En serio te estás comportando como un idiota!

— ¡¿Solo porque te beso?!

— ¡Sí! ¡Y si sigues con esas mierdas prefiero terminarte! —amenazó, sin titubear en lo absoluto, sin flaquer con el cambio en la mirada de su novio— ¡Yo no quiero una puta relación con un inmaduro! ¡Tienes dieciocho años, compórtate como alguien de tu edad!

— ¡Termíname si quieres! —Beomgyu se separó de los lavados, acercándose peligrosamente al pequeño chico que formaba puños en sus manos—. ¡No entiendo por qué debería enojarte algo tan simple, Taehyun!

— ¡Por que lo haces en frente de kai!

— ¡¿Y que diabos con eso?! ¡¿Acaso te gusta?!

— ¡Él gusta de mi!

— ¿Qué?

La expresión de Beomgyu había cambiado abruptamente, su ceño fruncido desapareció como el color en su rostro, notablemente desorientado, pero el enojo nubló la vista de Kang, siguiendo con su griterío.

— ¡Sí, y no te hagas el que no sabe, Yeonjun te lo contó!

— Taehyun, detente —pidió, no podía creer lo que estaba pasando, lo que Taehyun estaba diciendo—. ¿De qué mierda estás hablando?

— ¡De lo mierda que puedes ser con una persona aún sabiendo de sus sentimietos! ¡¿Acaso nunca te han rechazado?! —Taehyun esperó una respuesta, el silencio del chico confundido lo obligó a continuar— Oh, claro, tú ni siquiera puedes saberlo cuando todos siempre estuvieron a tu disposición para una cita.

— Eso no tiene nada que ver —Beomgyu jadeó irónico, el enojo parecía poco a poco también aparecer en su rostro— Yo no sabía que le gustabas a kai, ¿cómo diablos voy a imaginar eso?

— ¡Te lo dijo YeonJun!

— ¡Yeonjun ni siquiera sabia de nuestra relación hasta el día que fuiste a mi casa!

— ¿Qué? —La llama ardiente que parecía haberlo estado quemando completamente había sido apagada por un balde de agua fría. Una helante corriente lo  traspasó de arriba a abajo, quedándose con la misma expresión en blanco como BeomGyu tiempo antes— ¿YeonJun no lo sabía?

— Se supone que tú no querías eso —explicó el mayor, mirándolo como si...— Yo te hice caso.

Taehyun tragó grueso, sus piernas estaban comenzando a temblarle y unas suplicas inconscientes de no haberse equivocado le rogaban a Dios exactamente eso. BeomGyu sabía, definitivamente lo sabía, por favor, que lo supiera.

— Ese día me dijo que Kai le contó a soobin sobre nuestra relación, y tuve que decírselo —BeomGyu esperó una respuesta, dedicándole su mirada dolida al menor que parecía una piedra en frente suyo—. ¿Por qué debería de comportarme como un idiota por eso?

— Pero... —titubeó, negándose a aceptar lo que parecía estar pasando—. ¿Él no te dijo que kai y yo...?

— ¿Que Kai y tú qué?

— Que Kai me besó —musitó, viendo atentamente como el rostro del mayor parecía incomodarse, alejándose inconscientemente en un pequeño paso—. Él nos vio... Pensé que te lo había contado, yo-

— Pero tu no fuiste el que lo hizo —respondió, tratando de manener la compostura— ¿Acaso le correspondiste?

— N-no, yo le dije que estábamos en una relación —se adelantó— y él me dijo que yeonjun y soobin nos vieron pero que lo aclaró y... ¿en serio no lo sabías?

— ¿Me crees capaz de hacer algo así, Taehyun? —un silencio prejuicioso los abrazó a ambos, terminando por decepcionarlo—. ¿Por qué no me lo dijiste?

— No me dio tiempo, t-tú te habías vuelto cortante y-

— Mi mamá se enojó conmigo cuando le conté que fui yo el que empezó lo del otro día, me sentía mal-

— ¿Qué? —el menor se negó a creer eso, siguiendo y hundiéndose más— Tú estabas saliendo con una chica, nunca me lo dices y no respondes mis mens-

— Taehyun, con la única chica que salgo es mi hermanastra —BeomGyu no esperó una rspuesta, negando al rostro arrepentido del menor—. Su mamá murió, y mi papá propuso traerla a casa, estamos tratando de distraerla, es algo duro para ella. ¿Acaso creías que estaba tratando de devolverte algo?

— Tú-

— Yo nada, yo no sabía de tu beso con Kai, ni de sus sentimientos, ni de nada. Si no te envié mensajes es porque mi papá aún no manda a arreglar mi celular —La mirada confundida de Taehyun lo obligó desviar la suya, no quería mirarlo, estaba comenzando a hartarse—. He estado con varias cosas esta semana, exámenes, prácticas, mi hermana, mi papá, el celular, ¿Lo entiendes?

Un silencio pesado comenzó a invadir todo el lugar. BeomGyu no lo miraba, parecía enojado conteniéndose mientras apretaba sus labios en una línea fina. Y Taehyun no sabía qué diablos hacer.

"Pide disculpas"

Desobedeció a su cerebro, mordiéndose el labio inferior sin desviar la mirada del rostro afligido de BeomGyu.

— Yo no tengo la culpa —terminó musitando.

— ¿Entonces la tengo yo? —BeomGyu lo vio directamente a los ojos, su mirada tan afilada, un tono sarcástico y el resentimiento en su voz lo estaban comenzando a apuñalar, sentía el nudo en su garganta apareciendo—. Tú eres el que sabe todo aquí, el que tiene la razón, yo no, ¿me dirías si yo tengo la culpa de esto?

— Yo tampoco lo sé...

Una corta risa sin gracia desde lo profundo de la garganta de BeomGyu resonó, este último negó sin desviar aquella mirada fría de los del menor, quien parecía no poder hablar.

— Creo que quedó claro que yo no soy lo que tú necesitas para una relación, Taehyun —Las palabras en un tono bajo pero llegando a su oído, ¿en serio estaba pasando?—. Es mejor terminar esto.

«No»

El no quería terminar con el mayor. Tan solo la palabra lo espantaba lo suficiente como para querer correr a BeomGyu y abrazarlo, pedir disculpas aún si no sabía quién las tenía realmente. Pero lamentablemente Taehyun no se dejaba influenciar por el dolor que estaba sintiendo en esos momentos, no se dejaría llevar por aquel nudo en su garganta que le pedía a gritos desatarse y estallar.

— Sí.

Una daga inexistente pero igual de dolorosa que la real fue clavada en su pecho mientras veía a BeomGyu no dudar ni en segundo en salir del baño luego de dar un portazo.  Taehyun se sentía tan desorientado que se tuvo que apoyar sobre una de las paredes y tragar duro, tragarse ese nudo molesto que le comenzaba a dificultar la respiración.

Bien, eso era lo mejor. Ya había pasado, ya todo se solucionó.

Respiró hondo. Las cosas no habían funcionado, y esa relación no sería correcta. Taehyun quería un romance duradero, con BeomGyu no lo tendría.

Y aún con eso en mente, una terrible opresión en su pecho lo hizo pensar eso dos veces. No lo quería, no quería terminar así, por errores de ambos. ¿Quién se había equivocado? ¿En serio Beomgyu le terminó?

¿Él había aceptado?

Algo tibio resbalando por su mejilla le avisó de lavarse el rostro rápidamente, sus torpes manos formaron una pequeña fuente bajo el chorro de agua y dejó que ésta limpiara rastro de cualquier marca débil capaz de delatarlo.

Taehyun estaba bien, eso trataba de decirle su reflejo en el espejo de los baños antes de salir como si nada hubiera pasado.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro