ㅡBeomGyu y YeonJun, dejen de susurrarse y presten atención a la clase.

Los sonidos de ambulancia por parte de sus compañeros no se hicieron esperar.

ㅡSilencio.ㅡRepitió de nuevo la profesora.ㅡComo decía; el movimiento LGTB o movimiento de libre orientación sexual bla bla bla.

Eso escuchaba el rubio. A él no le importaba si los homosexuales ganaban a los heterosexuales, o si los gays gobernaban el mundo. Lo único que quería era que YooBin (la chica más linda ante sus ojos) le haga caso.

YeonJun era uno de los chicos populares de todo el colegio, y BeomGyu también lo era, pero la diferencia era que este último no tenía pareja, mientras que el peli-azul sí.

El timbre tocó interrumpiendo el relato de la mujer y esta soltó un suspiro.

ㅡSalgan a su receso.

"Libertad"

Eso era lo que pensaban aquella manada de alumnos que corrían.

Estaban encerrados en una cárcel, ellos eran manipulados por un estricto control. Y cuando el timbre sonaba, todos muy obedientes se levantaban festejando, para luego "salir" a otro lugar cerrado, que era la cafetería.

Y cuando este timbre sonara de nuevo, ellos volverían como prisioneros a sus carpetas.

ㅡHoy comeré con SooBin.ㅡLe informó su amigo, haciendo que el rubio abriera la boca ofendido.

ㅡ¿Vas a dejar a tu amigo por tu novio?

—Suena bien —bromeó YeonJun, sacando dinero de su mochila.

ㅡHey, no seas malo. Estoy en una crisis; YooBin no me hace caso, pareciera que ni siquiera me nota.

ㅡ¿Y qué quieres que haga, BeomGyu? ¿Ponerme a llorar por amor como tú? Lo siento, pero tengo un enamorado y este me está esperando ahora mismo en la cafetería, si no llego a tiempo se enojará.ㅡEl peli-azul salió del salón dejando solo al menor.

— Dominado —susurró con un puchero.

Al parecer los gays sí gobernarían el mundo.

Nancy entró al salón para sacar su celular y al parecer notó el rostro deprimido del rubio. Lo pensó dos veces antes de dirigirle la palabra.

ㅡNo quiero ser amable contigo , pero ¿Qué te pasa?

BeomGyu levantó la mirada para después poner cara de cachorro, Nancy lo observaba como si fuera un bicho molestoso sin vida, esa mirada antipática de siempre que le dedicaba a los tipos populares.

ㅡNadie me quiere.

Ella hizo una mueca y se acercó sentándose a su lado, prendió su celular quedándose callada unos segundos y así enseñarle una foto.

ㅡÉl es Taehyun.ㅡLe dijo y BeomGyu miró el celular, viendo un chico de cabello castaño tomando jugo por una pajita, y al parecer leyendo un libro.ㅡSabes que desde hace cuatro meses estoy con JiWon.ㅡEl rubio asintió.ㅡPues... la realidad es que él nisiquiera me notaba, una chica me dijo que Taehyun tenía algo así como poderes mágicos.ㅡEl rubio sonrió de manera burlona ante esa teoría, recibiendo un golpe en su costilla que inmeditamente sustitulló su sentimiento burlón por una mueca de dolor.ㅡLa cosa es que él me ayudó a estar con mi bebé, así como ayudó a otras 30 parejas más. Deberías pedirle ayuda.

BeomGyu la miró incrédulo.

ㅡ¿De qué colegio es él?ㅡPreguntó.

La joven rodó los ojos por la idiotez del chico que tenía en frente.

ㅡEn el nuestro, solo que es un año menor. Tiene dieciséis.

El mayor abrió su boca en una "O" para luego echarse reír, mientras Nancy lo miraba con una ceja alzada.

ㅡ¿Quieres que le pida a un niño con "poderes mágicos" que me ayude a estar con YooBin? ¿Es una broma, Nancy?

ㅡHas lo que quieras. A toda persona que ayudó, hizo que esté con la que le gustaba. Si no quieres tener fe, sigue llorando por tu crush inalcanzable.ㅡNancy se levantó, empezando a caminar hacia la puerta.

Hasta que el chico pronunció su nombre de forma insegura.

Ella sonrió triunfante.ㅡ¿Sí?

BeomGyu pareció pensarlo, pero después preguntó decidido—: ¿Cómo decías que se llamaba?

ㅡKang Taehyun, está en el salón cuarto "A" del segundo piso y sale a las cuatro de la tarde.

BeomGyu anotó mentalmente toda la información y asintió.

ㅡGracias, supongo.ㅡNancy asintió sonriendo y salió del salón, dejándolo solo.

ㅡNo me siento bien.ㅡMurmuró el castaño al lado de la profesora que recién había llegado.

Esta soltó un suspiro.

ㅡPuedes retirarte.

La mueca de dolor cambió por una sonriente cuando recogió su mochila y todos sus compañeros lo empezaron a ver con envidia.

Salió del salón en dirección a la biblioteca, que llevaba por segundo nombre "lugar para dormir". El eco de las voces de los profesores dando clase estresaban lo suficiente como para caer dramáticamente en el sillón que adornaba la entrada del lugar lleno de libros apenas llegó, su mochila en el suelo y su cuerpo delgado sobre el mueble.

Era incómodo, pero ¿a nada?

Todo esto era visto por la bibliotecaria.

ㅡ¿Qué piensas que haces?ㅡregañó, empujándolo y haciéndolo caer de su "cama" al piso.

ㅡOuch.ㅡsoltó un quejido, mirando desafiante a la mujer.

ㅡLevántate. Si vas a estar aquí por lo menos ayuda a ordenar.

El castaño hizo un puchero, recibiendo unas libros en manos y mirando como EunHan se acomodaba el cabello negro.

ㅡVoy a salir un momentoㅡdijo la mujer.

ㅡA donde te irás, pillina.ㅡbromeó Taehyun, en el mismo instante donde la mujer le tiraba una pelota de papel en la cara.

ㅡSi alguien viene, lo ayudas, por favor.

ㅡOk ㅡsusurró, viendo como la mujer salía del lugar.

Caminó hacia los estantes cerca de la puerta y miró la sección de cada libro. Tomó la pequeña escalera y subió en ella, disfrutando del perfecto silencio que invadía el lugar.

Ya estaba por bajar, se agarró de un lado de la escalera y puso un pie en el vacío, justo en el mismo instante donde un imprudente rubio abría la puerta estruendosamente, asustándolo.

Fue inevitable tirar los libros al desconocido y que un grito saliera de sus labios.

Una vez en el suelo, mirando con miedo el cuerpo semi-inconsciente que estaba tirado a su lado, tomó un respiro, tranquilizándose para ver quien fue a la persona que mató.

Choi BeomGyu.

El castaño abrió los ojos de manera sorprendida al ver el rostro que tenía la nariz sangrando.

ㅡOh no, que miedo.

Luego de casi matar a un tipo de un año mayor, y este despertara, Taehyun decidió cometer un acto amigable que era sanar a aquel chico.

Sacó algodón, alcohol, y un par de guantes, estos últimos se los puso para después acercarse al rubio.

ㅡSiéntate.ㅡSeñaló con su dedo un sillón, el rubio inmediatamente se sentó y Taehyun empezó a echar alcohol en el algodón.

ㅡSabes que no es necesario ponerte guantes para esto, ¿cierto?ㅡDijo el rubio levantando un poco el rostro para que Taehyun haga su trabajo.

ㅡSí, pero me da asco.ㅡRespondió simple, recibiendo una cara ofendida del mayor.

ㅡOuch, duele.ㅡSe quejó.

ㅡNisiquiera te he tocado, niñitaㅡEl rubio se ofendió aún mas.

Esperen, ¿ese no era el chico de la foto?

Rayos.

¡Sí lo era!

¡Él era cupido!

ㅡ¡Tú eres Taehyun!ㅡExclamó BeomGyu emocionado, haciendo que el castaño se asustara y de casualidad metiera el algodón con alcohol en su ojo.

Oops.