Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo Once

"Mis sentimientos que son tan puros como las gotas de una nube,

¿quieres que los exprese con palabras torpes?"

— ¿Estás bien?

— ¿Sí?

La respuesta dudosa de Taehyun hizo a Kai sonreír. No es que llevara una relación muy estrecha con el mayor, ya que este último no lo permitía, pero de alguna forma sabía que él lo consideraba un amigo.

— ¿Por qué el sol está tan caliente? —Taehyun se preguntó a sí mismo—. ¿Por qué estamos parados aquí? Deberíamos ir a la sombra.

— Hyung, recuerda que estamos esperando a Choi BeomGyu.

Oh, cierto.

Un puchero apareció en sus labios. De seguro BeomGyu quedaría sorprendido cuando viera a Kai a su lado, pero no lo pudo evitar.

Simplemente se levantó y pidió al menor que lo acompañara, rogándole -algo que no frecuentaba hacer más que para pedir las galletas de leche que le gustaban.

Y claro, el aprovechador de Kai no dejaría escapar una oportunidad para salir de su casa; su mamá confiaba mucho en Taehyun, aún si tenían la misma edad.

A lo lejos, pudo ver perfectamente a BeomGyu llegar, y una sonrisa se escapó de sus labios cuando vio que a ese rubio lo acompañaba el idiota peli-azul.

Que bien, al parecer él no era el único tonto que estaba nervioso.

— ¿Cuál te gusta? —Kai jaló su manga, tratando de llamar su atención—. A mi el azul.

— El rubio.

— ¿Rubio? A poco había un peluche rubio, yo no veo ninguno.

Taehyun tiró un golpe en el brazo de Kai mientras sus orejas se calentaban por la vergüenza. Claro, HueningKai hablaba de los juguetes que estaban colgados en un local adyacente a la puerta del zoológico.

Desvió la mirada cuando BeomGyu le sonrió ya cerca de ambos. YeonJun parecía solo estar preocupado en su celular, mensajeando rápido y sin prestar atención a su alrededor.

— ¡Hola, Taehyunnie! —la voz emocionada de BeomGyu lo obligó a mirarlo, este último ahora se enfocaba en su acompañante—. ¿Uhm, tú no eres el hermano de SooBin hyung?

Taehyun miró al menor sorprendido, de la misma forma que Yeonjun.

— ¿Sí? —Kai se vio tímido—. ¿Y usted no es el novio de hyung?

— Sí.

La sonrisa engreída de YeonJun hizo rodar los ojos a Taehyun: seguro el idiota ese estaba alegre de que el chico de suaves mejillas no dijera nada de "ruptura" frente su familia.

— ¿Kai también irá a la cita? —Taehyun frunció el ceño ante las palabras de BeomGyu, ¿consideraba esto una cita?

— ¿Sí? YeonJun también irá, supongo, ¿no?

— Ni modo, la cita es de él y SooBin —BeomGyu soltó una risa ante la pregunta "tonta" del menor.

— ¿Qué? ¿SooBin también vendrá?

— ¿Qué? Espera, ya me mareé.

Taehyun se quedó en blanco, ¿BeomGyu no estaba trayendo a YeonJun para que lo acompañara? ¿YeonJun se iría luego? ¿BeomGyu creía que Kai se iría de paso con YeonJun a lo que sea que este último tendría con SooBin? ¿Acaso no se daba cuenta que Kai sería parte de la cita de ellos?

¿BeomGyu no había traído a YeonJun con las mismas intenciones que Taehyun a Kai?

¿BeomGyu no sabía que Kai estaría con ellos hasta que la "cita" terminara?

Mierda, que vergüenza.

— Uh, no, nada. Kai se irá a la cita de YeonJun y SooBin también —respondió como defensa.

— ¿Qué? —el peliazul y el menor lo miraron confundidos.

— Sí.

BeomGyu pareció confundido también, su comportamiento extraño, ¿quién no?

— Uh, bueno, Kai, ¿adiós? —Taehyun lo miro suplicante, tratando de hacer entender al menor con los ojos de que no debía venir con él—. Ya me voy.

— Espera —YeonJun se entrometió y Taehyun quiso golpearlo—. ¿Kai vendrá conmigo y SooBin? Binnie no me dijo nada de eso.

— ¡Fue algo imprevisto! —Huening quiso salvarlo, y Kang suspiró aliviado—. No se preocupe, YeonJun hyung, no los molestaré.

— Ah... bueno —el mayor lo escaneó unos segundos antes de voltear a la otra pareja, que parecía de piedra—. Buena suerte, capo —le dijo a BeomGyu con una sonrisa burlona.

Taehyun evitó mirarlo, si veía al mayor sonrojarse de seguro él también lo haría.

— Adiós.


— ¿Y si nos tomamos un descanso?

Taehyun formó un puchero no visible para el rubio que estaba detrás suyo. No quería descansar, él solo quería volver a pedalear aquel barco con forma de cisne y mirar a los lindos patos que estaban en el lago.

— ¿Ahora? De seguro se oscurece y el lugar cerrará —respondió volteándose hacia él y agarrándose del muro para no caer—. Aunque se me antojó una malteada.

— ¿Sabor? —el mayor le ofreció la mano para que saltara del muro, ayudando a amortiguar la caída—. A mi me gusta el de café.

— Uhm, eso es amargo —justo ahora se sentía extraño al tener una conversación normal con el mayor, gran parte del día se la habían pasado mirando a los animales y riéndose de lo que decía el guía—. Me gusta de fresa.

— ¿Dulce?

— Uhum, es delicioso, las cosas dulces me derriten.

La conversación terminó con un asentimiento.

Pero las mariposas en el estómago del menor, no.

¿Era necesario decirle a BeomGyu que ya había saltado del pequeño muro y que ya no era necesario que agarrara su mano?

¿O debería aprovecharse?

¡No! ¿Y si BeomGyu no se había dado cuenta que estaba caminando de la mano con él y al final terminaba por enterarse que Taehyun se había aprovechado de su distracción? No, no, no podía pasar es-

— Tu mano está sudando.

Taehyun se soltó del agarre apenas el mayor le dijo eso, sintió su rostro calentarse de vergüenza y se preguntó si esto era algún tipo de juego para BeomGyu. ¿Cómo podía decir tal estupidez? Oh, maldita sea, se estaba volviendo nervioso, y se supone que BeomGyu tendría que ser el estúpido novato de la cita.

No Kang, él sabía mucho de estas cosas, no tenía por qué ponerse como un colegial enamorado.

— Es porque hace calor.

— No te pregunté, Taehyunnie.

El mencionado se quedó callado. BeomGyu no estaba ayudando. ¿Disfrutaba de verlo nervioso? Tonto.

Su mini-conversación terminó de nuevo. Y eso era mejor, si hablaba de seguro tartamudeaba y no, no se humillaría más.

Ambos llegaron al local y tomaron asiento, pidiendo unos aperitivos de más y estando en silencio de nuevo. Taehyun por fin se atrevió a abrir la boca—: Bueno, ¿y qué te dijo YooBin?

BeomGyu lo miró rápidamente, viéndose ahora sorprendido—: Ah... eh, yo, no, no lo hice. No me atreví.

— ¿Entonces los tips fueron por las puras?

— ¿No? Por lo menos aprendí, a la próxima lo haré mejor —Taehyun carcajeó, sin importarle el rostro confundido del mayor—. Es lindo cuando ríes, pero da miedo cuando es de la nada.

— Perdón —Taehyun susurró un "gracias" al mesero cuando este trajo sus malteadas—. ¿Cuándo será tu próxima cita con el amor de tu vida?

— No lo sé, ¿cuándo puedes?

Kang levantó la mirada para chocar con los ojos burlones de BeomGyu.

— Que payaso eres.

— Lo siento, quería bajar la tensión.

— Hacer ese tipo de bromas no es una buena forma.

BeomGyu sacó su lengua como respuesta, condenándose a mantenerse en silencio hasta que llegara la hora de los fuegos artificiales.

Eso debería salir mejor.


Ambos, sentados en el pasto, no sabían si era cómodo estar rodeados de parejas comiéndose la boca.

El lugar estaba demasiado lleno, aunque era algo normal; domingo, fuegos artificiales, ¿atmósfera romántica?, era muy obvio que este día estaría lleno de parejas.

— Faltan dos minutos.

— Ok.

No quería ser cortante. Sabía qué era lo que se estaba aproximando, Dios, Taehyun no era tonto. Entendía bien qué era lo que buscaba BeomGyu.

Pero no se podía quedar tranquilo si tenía en cuenta que en menos de dos minutos el cielo se llenaría de cosas coloridas y brillantes, explosivas, sonoras y fuertes.

Taehyun prefería estar en su habitación y poner alguna melodía tranquila que escuchar el estruendoso sonido de los fuegos artificiales.

— Taehyunnie.

Diablos.

El mencionado trató de verse tranquilo cuando BeomGyu puso una mano en su muslo, llamando su atención suavemente. Un minuto. Su rostro parecía volverse pálido, su cuerpo comenzaba a tener frío, tan solo quemando donde el mayor acariciaba suavemente.

— Sé que hice mal al besarte ese día.

— Ok.

— No es que me arrepienta, aunque puede que sí, un poco. Era tu primer beso, no tuve que haberte forzado.

— Ok.

— Creo que antes de hacer ese tipo de cosas, uno t-tiene que aclarar sus intenciones —BeomGyu pareció ponerse nervioso, mirando el pasto  sin alejar su mano—. Las mías no son malas, lo juro.

— Ok.

El mayor levantó la mirada, en el mismo instante donde se escuchaba el primer estruendo en el cielo. El oscuro panorama tomaba un color rojo y morado, de la misma forma que el pálido rostro del menor.

Taehyun cerró sus ojos sin prestar atención a la atenta mirada del mayor, que recorría su mandíbula, cuello, labios. ¿Qué estaba pasando? Beomgyu creía que su reacción sería un poco más...

¿Normal?

— Taehyun.

— Quiero vomitar —el menor abrió sus ojos, mirando los suyos directamente por primera vez en esa ocasión y dando un pequeño saltito cuando el segundo estruendo resplandeció, iluminando su rostro con un color rosa—. No me siento bien, quiero irme.

— Uhm, sí, vámonos.

Fracaso.

De esa forma calificaba BeomGyu a su cita con el menor, quien estaba parado a su lado esperando con él el bus.

La había pasado bien, en realidad, se la había pasado muy bien. Fue muy lindo apreciar el rostro del menor alegre cuando pedaleaban en el lago, también notar la emoción de Taehyun cuando las focas hicieron un "show", hasta fue divertido ver a Kang treparse en el muro solo para ver al león dormido, aunque desde un principio se le hizo peligroso, siendo imposible alejarse del menor.

El perfecto y tierno perfil de Kang iluminado por los fuegos artificiales, pudieron no haber estado mucho tiempo, pero sí el suficiente para que el mayor lo grabara y guardara en su memoria.

Pero todo esto habría sido más lindo si no se hubiera puesto tan nervioso cuando hablaban, cosa que también le pasaba a Taehyun, al parecer, claro que todo eso se multiplicaría por mil si su declaración no hubiera sido interrumpida.

— ¿A dónde iba a ir YeonJun y SooBin?

BeonGyu se alejó de sus pensamientos cuando escuchó la voz del pequeño, sonriéndole inmediatamente para que no notara su decepción.

— Creo que al acuario, está cerca de aquí.

— Nunca fui a uno.

— Podríamos ir —BeomGyu se obligó a relajarse, acercándose un poco para verse amistoso—. Mi papá tiene unos paces gratis.

— Uhm, sería divertido —increíblemente, Taehyun le sonrió.

Por primera vez en el día.

A él.

— Pero esta vez yo pagaré los aperitivos —advirtió el menor, desviando la mirada—. Podría ser la próxima semana, ¿o saldrás con YooBin?

— Ah, sobre eso, creo que no —le respondió, sintiéndose nervioso de nuevo—. Tal vez deje de intentarlo con ella.

— No me contaste nada de tu cita —Taehyun lo vio con una mirada desaprobatoria, antes de sonreírle de nuevo—. Espero que la hayan pasado bien.

— Sí, ¿y tú la pasaste bien hoy?

— ¿Y lo preguntas? Fue demasiado divertido que la vaca te lamiera el cabello —Taehyun rió suave, con notable burla.

— A mi me dio asco —BeomGyu formó un puchero—. Fue suerte que en ese local vendieran shampoo.

Taehyun rió una vez más, empujándolo levemente con el hombro.

Justo ahora el menor se veía lindo. Recostado en el poste de luz, riendo tan tierno mientras se frotaba los brazos a sí mismo, pero BeomGyu frunció el ceño cuando aquella risa no paró.

— Hey, ¿estás bien?

— Me está dando ataque de risa, espera —dijo como puedo, sosteniéndose ahora de su hombro—. Oh Dios, me hubiera gustado tomarte foto, seria divertido.

— Uhum —BeomGyu sonrió, frotando con su mano la espalda del menor para que parara de reír—. Si quieres a la próxima me quedo quieto para que tomes alguna.

— ¿Y que la vaca te coma la cabeza? Pobrecita, si supiera que tu cabeza está hueca —BeomGyu cambió su semblante, sacándole una carcajada más al menor, a quien poco a poco se le dificultaba la respiración—. Lo siento, ay, perdón.

— Por lo menos el día no terminó mal —Taehyun asintió rápidamente, respirando hondo—. Me alegra que la hayas pasado bien.

— ¿Tú no?

— Me gustó verte alegre.

BeomGyu no entiende como fue que Taehyun dejó de reírse, o cuándo fue que el menor tiró de su camisa para acercarlo a él y besarlo.

Sus labios se movieron suave, el mayor sin poder reaccionar. Se sentía tan bien, la sonrisa de Taehyun encima de sus labios se sentía tan malditamente bien, y esas cosquillas en BeomGyu aumentaron cuando los dedos del menor fueron a su cabeza, enredándolos suavemente con su cabello rubio.

¿Era correcto tomar su cintura? ¿Sería molesto que lo acercara con una mano en su nuca? BeomGyu no podía preguntárselo, además, ya lo estaba haciendo mientras se sumergía en aquella típica burbuja de la que hablaban esas novelas románticas de su madre.

La boca caliente de Taehyun lo hizo olvidarse de que estaban en un lugar público, su cintura pequeña lo distraía, y sus labios lo estaban mareando. Ese labio inferior grueso, quería morderlo. ¿El menor sabía que sentiría esas ganas?

Así como de inesperado comenzó, también terminó.

Taehyun ya había alejado su rostro, con una sonrisa y como si recién hubiera terminado de reír, como si no hubiera jalado a BeomGyu para un beso, haciendo que este último quedara embobado.

— Suéltame —musitó, pero el mayor no lograba escucharlo—, es extraño estar a-

— ¿Podemos hacerlo una vez más?

Y cuando luego de un silencio Taehyun asintió, BeomGyu pudo opinar que la cita no había salido tan mal.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro