Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

10

Denise

—¿Lista para nuestra primera lección?

Tres días antes

Me quedo en silencio, intentando analizar las palabras mientras miro las sábanas blancas de mi cama. No sé qué responder, ni el cómo hacerlo. Aunque no es una decisión tan difícil, soy consciente de lo que lleva dicha decisión.

Ver a mi profesor todos los días... cosa que he estado evitando desde que tuve ese sueño. Pero tampoco puedo decirle libremente a Kiara que no quiero aceptar porque he estado soñando con su hermano, que de paso es mi profesor. No me hace falta alzar la mirada para sentir sus ojos sobre mí, de alguna forma no quiero hacerlo porque sé que me voy a sentir muy presionada.

Mi cabello rubio cubre mi vista y, en un acto nervioso, lo muevo hacia atrás para volver a enfrentarme a sus ojos negros —Kiara...

—Sé que no tengo ningún derecho a pedirte algo así —habla con rapidez, como si yo me fuera a molestar con lo que ella me va a decir a continuación —pero pienso que tal vez mi hermano lo hace por alguna razón.

Sí... para torturarme.

Pero claro... nadie debe saber eso, y mucho menos que yo sueño con él.

De repente, entre todos los pensamientos que tengo esparcidos por mi cabeza, aparece una idea que puedo utilizar a mi favor. Miro a la mayor que espera mi respuesta.

—Lo haré —ella sonríe, pero me adelanto a hablar —pero vas a permitir que comience a trabajar.

La sonrisa es remplazada por una mueca de confusión —¿Trabajar?

Asiento sin bajar la mirada —Vivo en tu casa, y creo que si voy a vivir aquí tienes que saber que no vives con una desconocida, además, odio ser mantenida.

—Denise, no me importa eso, tú no tienes...

—Si trabajo, acepto las clases —me adelanto, porque sé que iba a decir eso.

...

—Buenos días, profesor.

Respondo por puro instinto, pero me aseguro de no conectar mis ojos con los de él y los mantengo en el escritorio frente a mí. A Kiara se le ocurrió la "maravillosa" idea de estudiar después de clases en la biblioteca, la cual descubrí que estaba en esa puerta desconocida en el pasillo.

Puedo asegurar que la biblioteca es lo más bello de toda la casa. Parece irreal, sacado de un libro de fantasía. Madera oscura sostienen las estanterías repletas de libros. Kiara me asegura que esta casa es antigua y me lo esperé al ver la estructura de la misma, pero ver esta habitación de dos pisos, como si fuera un mundo aparte del que hay fuera de estas puertas...

Es fascinante.

Los pisos de madera clara hacen contraste con las estanterías. Pero lo que más me gusta, es ver cómo había un segundo piso en la misma habitación. Una escalera en espiral que da acceso a la otra sección de libros en el piso superior. Noto por lo enorme de la habitación, que esta se extiende a todo lo largo de la casa. En resumen, la habitación más grande de la casa es esta.

En el piso inferior hay menos estanterías que en el segundo, pero en el medio de la habitación, los escritorios de madera de dos mesas, esparcidos de forma desordenada, es lo que le da un toque también más interesante. Aunque lo que en verdad le da elegancia a la pieza son las gigantes ventanas coloquiales y la lámpara en forma de araña.

Cuando entré esta mañana, me quedé con la boca abierta. Al ser la ventana lo primero que mi vista capta para que luego lo hiciera la lámpara, Kiara me dijo que esta biblioteca es lo más preciado y hermoso para la familia de Oliver, no me extraña. Hay años de historia aquí en que desperdiciarlos es un crimen. Me mantuve en el aire viendo cada uno de los tomos de los libros, sentada en una de las mesas, con unos impulsos inmensos de correr y buscar algún libro para leer.

Eso, hasta que siento la puerta abrirse y tengo que fingir completo desinterés, ahora y durante una hora en adelante, solo para que mi profesor se rinda.

—¿Kiara te dijo que será durante una hora? —Asiento aún con la cabeza gacha mirando la madera fina de la mesa. —¿No me vas a mirar, Denise?

No, querido profesor, porque me recuerda a esos sueños prohibidos.

Casi digo esos pensamientos en voz alta, pero me apresuro en cerrar esa puerta prohibida en mi mente y buscar las palabras correctas.

—Solo debo tomar notas —digo con una sonrisa que claramente le generó confusión. —¿Quién me obliga a mirar al profesor?

Escucho su suspiro, él opta por no buscar más mi palabra, así que solo se sienta frente a mí y trato de no ponerle mucho esfuerzo a la manera en la que él viste.

—No tiene caso comenzar con lo que perdiste el primer año, empezaremos con este año para que no lo pierdas.

Por más que quiero mirarlo, lucho conmigo misma para no alzar la vista. Soy consciente de que tal vez esto solo retrase las cosas, pero no soy capaz de sentirme segura si miro sus ojos negros. Él está tejiendo una red, en la cual odio saber que me tiene envuelta, por más que luche por alejarme, siento como si todo lo que hiciera fuera en vano.

—Por suerte, no hemos tenido muchos contenidos. Cada día repasaremos durante una hora una materia distinta y los viernes te haré una evaluación para saber si has avanzado.

Luego de que dice eso, me siento mejor en la silla con la vista puesta en los libros que trajo consigo. Veo algunas hojas que tiene en sus manos y las señalo aun sin mirarlo.

—¿Tengo que copiar todo esto?

—Sí, ahí lo expliqué, pero tienes que hacer los ejercicios para comprenderlos mejor.

—Está bien.

De repente el ambiente se siente pesado cuando él comienza a explicarme cada una de las cosas que tenía escritas, hablaba con una naturalidad sin siquiera mirar el papel. Y para mi pesar, a pesar de que no dejaba de tomar notas, se me hace más fácil entenderlo de esta forma.

Muy en contra de lo que quiero, tengo que ceder a la hora de alzar la vista para mirarlo. Pero mi sorpresa es mayor cuando sus ojos negros ni siquiera me miran. Debería sentir alivio ante eso, aunque, al contrario, algo amargo se asienta en la boca de mi estómago mientras sigo escribiendo.

Su imagen, tan natural mientras me explica, es otra distracción, aun cuando no dejo de copiar. Admito, en verdad, que si hubiera puesto atención desde el principio, tal vez esto se hubiera ahorrado, porque después de todo no es tan difícil.

Los minutos pasan mientras sigo escribiendo y todo se queda en mi cabeza... no está mal después de todo.

Miro todo el contenido que escribí en menos de una hora, todas las clases en una hora.

—Terminé.

Él me mira con confusión mientras yo voy recogiendo mis cosas —Aún tienes que hacer los ejercicios.

—Yo solo dije que copiaría las notas, no dije que estaría en la clase completa —sus ojos se abren como platos al mismo tiempo que es testigo como me pongo en pie.

Noto que tiene intenciones de hablar, pero eso es remplazado cuando sus ojos me recorren de pies a cabeza sin vergüenza alguna. Tengo unos jeans negros con rotura en las rodillas y un top corsé blanco. Encima, luzco un suéter corto de color blanco, dejando a la vista todo el escote. Un par de botas del mismo color de tacón medio completa el conjunto.

Mi piel se estremece al mismo tiempo que sus ojos se pasean por mi cuerpo. Guardo un jadeo que casi se me escapa de mis labios, al recordar esa lejana caricia de sus besos contra mi cuello. Aun cuando fue un simple sueño, es como si las sensaciones aún se aferran a dejarme sin cordura.

Cuando se cansa de detallarme, al parecer se da cuenta de su error y cierra los ojos, para luego volver a conectarlos con los míos.

—Es necesario hacer los ejercicios para que lo comprendas mejor.

Suspiro con fuerza mientras echo mi cabello hacia un lado sin dejar de mirarlo, ignorando las recientes sensaciones que mi cuerpo experimenta solo por su causa.

—Yo hice esto por Kiara, no tengo ninguna necesidad de quedarme el resto de la hora, tengo cosas más importantes que hacer.

La biblioteca se queda en total silencio en el momento en que la dejo atrás.

//////////////////////

Tzuyu

La realidad deja de tener sentido frente a mis ojos...

¿Dónde estoy?

No es la existencia a la que estoy acostumbrada...

Es como si el mundo se hubiera vuelto sombras y luces... como si no existiera.

Pero mi cuerpo duele... él grita ¿Por qué? ¿Por qué permito el daño?

Este mundo inexistente frente a mis ojos es mejor que la vida a la que me enfrento cada día.

Tzuyu...

Escucho el susurro de mi nombre a lo lejos, solo puedo gemir en busca de ayuda, porque mi garganta se ha cerrado por completo. Solo me puedo permitir llorar de miedo.

Estoy aterrorizada porque me siento sola y no sé dónde me encuentro.

De repente estoy en el jardín de mi casa. Ese lugar tan mágico que se escondía entre los bambúes, que era mi sitio secreto, el lugar en donde nada ni nadie me podía hacer daño. Pero sé que no es real, mi mente me asegura que el lugar donde yo estaba solo es producto de mi imaginación.

O tal vez ya morí y este es el cielo al que tanto yo espero llegar...

La luz ciega mis ojos de repente y veo muchas sombras sobre mi cabeza, murmullos que no logro identificar para nada, que hacen que me sienta abrumada. En el medio del caos, siento una mano tibia contra la mía. A pesar de la pesadez de mi cuerpo, muevo mis ojos a la izquierda y veo una cabellera roja que reconozco.

Sus ojos están llenos de lágrimas... los ojos de la persona que considero mi hermana están llenos de lágrimas y ahí comprendo todo.

He regresado de la muerte...

////////////////////

David

Miro la página en la computadora y desordeno mi cabello sin saber qué hacer. El silencio de mi habitación, contrario en otras ocasiones, no me ayuda mucho a concentrarme. Solo está ahí para burlarse de lo cobarde que soy.

Veo la solicitud con todos los espacios en blanco para llenar en la planilla, sintiendo por primera vez en mi vida que nada está resuelto como ha sido durante años. Las paredes de mi dormitorio se ciñen sobre mí, haciendo que el aire se dificulte para respirarlo.

No comprendo el momento en que todo se vino abajo... lo que no entiendo en verdad es el "¿por qué?" Se vino abajo todo lo que creía que estaba bien.

Las paredes mostazas se ven más oscuras por la falta de luz. Noto todos los libros en el estante de madera negra en la esquina de mi habitación. Nada me puede calmar por mucho que lo intente, ni encuentro una solución por mucho que la busque.

Cuando me dieron la noticia me alegré, en serio lo hice, pero como un balde de agua fría, recordé las palabras de mi madre mientras conversaba con sus amigas acerca de sus hijos:

"Nunca aceptaría que mi hijo no estudiara una carrera industrial"

Soy consciente de lo que habla regularmente mi madre junto con el resto de sus amigas. Es la cita semanal para lucir los logros de sus hijos, los cuales la mayoría estaban en la misma escuela que él. Pero eso no es lo verdaderamente importante, cuando escuché esas palabras no pensé en ellas... no, hasta que mi profesor me dijo que una importante Universidad de Medicina me había dado una beca por mis notas extremadamente sobresalientes, especialmente en Biología.

Siempre ha sido ese mi sueño, poder convertirme en un médico que pueda salvar vidas, pero a pesar de mis notas, de alguna manera se aleja de mí. Tal vez las palabras de mi madre son como una soga, tampoco quiero decepcionarla, la amo en verdad. Y sé que a pesar de lo dura y estricta que se comporta, ella solo quiere lo mejor para mí.

Pienso en pedirle ayuda a mi hermana, pero la conozco demasiado bien como para saber lo que me va a decir:

"Eres tú quien tiene que tomar las decisiones de su vida, nadie va a vivirla por ti, ese es tu trabajo, no el de los demás"

Por tonto que parezca, en ese sentido, mi hermana menor es más madura que yo. Y en segundo plano, sé que Denise ahora mismo tiene cosas muchas más importantes en la cabeza que mi tonta indecisión. Conozco la respuesta, sé lo que tengo que hacer... pero no me atrevo.

Mi móvil suena, rompiendo la marea infinita de pensamientos. Respondo sin ver de quien se trata—David.

Me siento mejor en el sillón cuando reconozco la voz—Hola papá, ¿ya estás en Londres?

///////////////////

Denise

El movimiento dentro de la cafetería no parece tener fin, pero me gusta, es entretenido verlo. Cuando entro, una chica de pelo azul recogida en una coleta, me guía hasta una mesa de dos sillas al lado de la ventana, lo que me permite una vista panorámica completa del local. Solo pido un batido helado de chocolate y mis ojos no dudan en barrer todo el interior.

Paredes celestes que casi son blancas, combinan a la perfección con el piso verde limón. Una combinación algo particular, pero que le da más estilo y originalidad al espacio. Las mesas marrones claras, todas de metal con una base del mismo material de color negro, en ellas hay desde dos hasta cuatro sillas. Esparcidas de forma ordenada por todo el salón.

La decoración es bastante alegre, pero sin ser desordenada, le da un toque tierno, pero a la vez atrevido. La barra en donde se toman los pedidos está a mitad de la pared al lado izquierdo, mientras que junto a ella se ve una puerta blanca, seguida una media ventanilla, en donde un chico de pelo rubio se mueve de aquí para allá. Era el encargado de la cocina.

La sonrisa no puede esconderse de mis labios; algo más fuerte se asienta en mi pecho que me impulsa a trabajar en este lugar. Con un pequeño gesto, llamo a la misma chica que me atendió y ella llega frente a mí. Ahora, más cerca, defino cada una de sus características. Su rostro es alargado, al igual que su nariz, alta, se nota a simple vista. De complexión mucho más delgada que yo, pero con una figura sencilla.

Sus labios se destacan en un rojo vivo, haciendo contraste con su suave sombra de ojos. Un vestido rosa perla de cuello cerrado, con falda de volantes por encima del muslo, pero lo que, si llama la atención por completo, es el delantal rosa chillón que tiene amarrado a la cintura. Cosa que no noto hasta ahora, detallo que cada uno de los trabajadores también portan delantales con distintos colores chillones.

—¿Hay algún problema?

Niego con una sonrisa y no voy a dar vueltas por las ramas para decirle lo que quiero. —Hace unos días vi que buscaban a alguien para trabajar atendiendo las mesas.

La chica abre sus ojos un poco sorprendida, pero luego de unos segundos su expresión se suaviza con una sonrisa suave de labios cerrados —Sí, ya no damos abasto para todo y necesitamos ayuda.

—No tengo ningún tipo de experiencia, pero aprendo rápido.

Ella suelta una suave carcajada, cosa que yo imito por lo bajo. —Eres muy sincera cuando buscas trabajo.

—¿Cuál es la necesidad de mentir?

Le digo con una sonrisa divertida y su gesto aumenta —Me caes bien, escribe tu número aquí, hablaré con el jefe y te llamo en la noche.

No me demoro mucho e hice exactamente lo que ella dijo. Luego de pagar, me permite seguir sentada mientras consumo el batido. De repente una notificación llega a mi teléfono con un mensaje de mi hermano.

Hermanito

Papá regresó

Asiento con la cabeza como si él fuera capaz de verme, tomando un sorbo de la bebida entre mis manos, sin dejar de leer.

Hermanito

Quiere que vayamos con él a una cena de la empresa

De no ser porque ya había tragado el batido, me hubiera ahogado de la impresión. ¿Una cena? ¿Cuándo mi hermano y yo fuimos a una cena de la empresa de papá? Celine, tal vez, ¿nosotros? Nunca. Y siendo sincera, no quiero que haya una primera vez.

Yo

¿Cómo que una cena? ¿Cuándo te dijo eso? ¿Cuándo es? No quiero ir, ¿es obligado?

Le mando ese maratón de mensajes de una sola, ansiosa que me dé una respuesta lo más pronto posible. Miro mi bolso solo por un segundo, cuando mi teléfono suena de nuevo, esperanzada lo tomo al pensar que mi hermano me da respuesta a mis preguntas. Pero estas cayeron cuando Kiara es la remitente.

Kiara

¿Tardas mucho? Mi hermano se quedará a cenar con nosotros

Mi pulso se congela, pero la inquietud que sentí segundos antes se desvanece sin que yo aún pueda sostenerlo. Porque prefiero la intranquilidad, la confusión que se genera dentro de mí, a esta serenidad, a esta sensación desconocida, una en donde mi pulso se calma por palabras mágicas que aún no sé cuáles son.

Durante mi viaje de regreso, busco la irritabilidad dentro de mí, pero al parecer, ella huyó de mí. Y ahora soy yo la que quiere salir corriendo, eso no es nada nuevo en mí, no desde que lo conocí.

Pero cuando lo veo en la sala, jugando con los mellizos, mi pecho me traiciona y mi cerebro me advierte que mis ganas de correr no son las mismas en comparación con el día de ayer.

¿Cuál era la diferencia?

—¿Cómo te fue joven Denise?

Miro a Esther con una sonrisa, completamente agradecida de que me haya sacado del remolino de mis pensamientos. Ahora mismo, todos estamos en la mesa cenando y, por suerte, no estoy sentada frente a Kevin.

—Mejor de lo que pensé, le di mi teléfono para que me avisara si conseguí el trabajo.

Sentimos cómo dos personas se ahogan; para mi sorpresa, son Kevin y Oliver. —¿Trabajo?

Kiara asiente tranquila mientras le da de comer a los niños —Ella me pidió permiso, no hay razón por la que decirle que no.

Alzo la vista ligeramente y me da un guiño seguido de una pequeña risa. —Pero ella aún es estudiante —no me sorprendo cuando él interviene. —Tiene que seguir estudiando.

—Tú no puedes hablar, Kevin —dice Kiara mirándolo con firmeza y yo me quedo un poco atónita ante el ligero enfrentamiento de ambos hermanos. —estuviste trabajando todo el tiempo que estudiaste, incluso luego de graduarte.

Kevin gruñe algo en francés que no entiendo para nada, pero un mensaje llama mi atención y bajo la vista, alejando mi interés de los hermanos Luisse.

Número Desconocido

Buenas noches, soy la camarera de la cafetería. Hablé con él y me dijo que sería muy buena idea conocerte. ¿Puedes venir mañana?

—Pero con ella es diferente —lo escucho decir y la felicidad nadie me la va a quitar...

Ni sus palabras, ni la futura cena que detesto, ni el hecho de que volveré a ver a mi madre.

—Me enternece su preocupación por una alumna —me pongo en pie, con todos los ojos sobre mí, pero especialmente esos negros, que ahora mismo no sé cómo sentirme con ellos —Pero fuera de la escuela es mi vida, así que yo tomo mis decisiones, y tengo que informar que ya tengo trabajo.










¿Como se encuentran todos? estoy tan contenta con las correcciones que hemos hecho.

tengo una comunidad en WhatsApp en donde me encantaría hablar con ustedes y saber que les parece la historia. en donde también pueden hacerle preguntas a sus personajes favoritos. el link está en mi perfil de Instagram.

¿Que les parece la historia? no olviden que los quiero mucho

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro