Capitulo 11
Nota: me veo con la obligación de avisarles que este capítulo contiene lemon.
Me levanté en medio de la noche, entre el dolor en las heridas y el puto móvil sonando cada treinta segundos no podía dormir. Me dirigí al botiquín del baño y tomé un par de calmantes, así podría dormir por unos minutos; volví a la habitación, tomé mi celular, ya que este estaba sonando, no quería que Seobie se despertara. Miré la pantalla y vi que tenía una llamada de Gikwang.
-¿Cómo de digna a llamarme?-pensé volviendo a salir de mi cuarto para luego bajar a la sala; no quiero que Seobie escuché la conversación-¿qué quieres?-dije contestando el móvil.
-¿Qué maneras son esas de saludar a tus amigos?-escuché su voz del otro lado.
-Nunca fuiste mi amigo-respondí fríamente-ahora dime, ¿para qué me llamas?-volví a hablar de la misma manera.
-Oye tranquilo, solo llamaba para ofrecerte un trato-¿un trato? Es pero que sea algo como que se muda a Siberia si yo le compro el pasaje para ir-¿sabes por qué complazco todos los caprichos de Hara?-¿le gusta Hara? ¿Cómo alguien en su sano juicio está enamorado de Hara conociéndola? Gikwang está tomando algo bien fuerte.
-¿Estás loco? ¿Cómo mierda es que te gusta Hara? Sabes que es una arpía, ¿no?-dije sin poder creerme aún que a este idiota le guste ella.
-No, no estoy loco y no, no me gusta ella, solo quiero su dinero-eso es lógico, él mismo dijo que era un idiota por dejar a Hara y a su dinero por Seobie.
-Bien, entonces... ¿cuál es el trato?-cuanto más rápido me diga que quiere más rápido iré a volver a dormir.
-Es fácil, tú me dices que le gusta a Hara y yo hago que los chicos dejen de molestarte a ti y a tu... ¿novio?-esto me conviene, mejor dicho, nos conviene a Seobie y a mí, por fin los idiotas y mi ex van a dejar de molestarnos, ahora estaremos tranquilos-¿qué dices? ¿Aceptas?-¿cómo no hacerlo?
-Sí, mañana te haré una lista de lo que le gusta a ella-dije sin dudarlo dos veces; esto será lo mejor para que podamos estar tranquilos.
-Gracias-fue todo lo que dijo antes de que colgara. Volví a la habitación, dejé el móvil en la mesa de luz y me acosté en la cama con sumo cuidado, fue en vano ser tan cuidadoso, ya que en cuanto terminé de acomodarme, Seobie se giró hacia mí y me miró.
-¿Te encuentras bien? estuviste abajo un buen rato-dijo con un tono de preocupación en su voz.
-Sí, estoy bien-crucé mi brazo alrededor de su cintura y lo acerqué un poco-solo fui a hablar por teléfono con un conocido-dije cerrando los ojos.
-¿Un conocido?-volví a mirarlo; ¡mierda! Que no vaya a pensar que en realidad estaba hablando con una chica, después de todo a estas horas nadie llama para hacer sociales, ¿verdad?
-Era Gikwang, quería hablarme sobre algo, en el desayuno te contaré bien, ¿sí?-él solo asintió, se acomodó un poco y volvió a dormirse.
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Desperté temprano, me levanté mientras Seobie aún estaba dormido. Preparé algo de café para luego volver al cuarto y sentarme en mi escritorio; tenía que empezar la lista para Gikwang. Borré una y otra vez; si es que realmente no sé qué mierda le gusta a Hara. En los meses que estuve con ella no me interesé en ningún momento en sus gustos. Comencé a jugar con la lapicera pensando en qué podría gustarle a Hara.
-¿Qué haces Hyung?-sentí los brazos de Seobie cruzar alrededor de mi cuello.
-Nada importante-dije tomando una de sus manos y entrelazando nuestros dedos-Gikwang me llamó anoche y dijo que nos dejarían de molestar si yo le hacia una lista de las cosas que le gustaban a Hara-dije para luego apartar un poco sus brazos y girarme para poder mirarlo-el problema es que no tengo ni puta idea de que es lo que le gusta a ella-solté un suspiro.
-Tranquilo, te acordarás de algo seguramente-sonrió; ahora lo único que sé son cosas de Seobie, es lo único que me importa.
-¿Sabes?-dije llamando su atención-lo único que me viene a la cabezas son tus gustos, siempre le presté mucha atención a lo que te gustaba a ti-lo tomé de la cintura y lo senté en mis piernas-de Hara no se mucho, por más que haya estado con ella no sé sus gustos, ni siquiera sé su nombre completo-dije apoyando mi cabeza en su hombro.
-¿P-por qué solo te interesas en mí?-¿de verdad pregunta eso? Es mi mejor amigo, tengo que saber todo de él, además de que nos conocemos desde jardín de niños.
-Porque eres mi mejor amigo, porque prácticamente crecimos juntos y porque eres lo único que me importa-lo miré, su rostro estaba completamente sonrojado, sonreí, lo tomé del mentón y lo besé, él correspondió al instante. Cruzó sus brazos alrededor de mi cuello mientras yo lo acercaba más a mí. Pocos minutos después nos separamos.
-S-será mejor que sigas con la lista-me besó en la mejilla, se levantó y salió de la habitación. Seguí con lo que hacía, en un par de horas ya había hecho una lista de diez o quince cosas, tomé mi celular.
-"Ya tengo lista tu lista, puedes venir a buscarla"-escribí rápidamente para luego enviarle el mensaje a Gikwang, no tardó en contestar.
-"Está bien, en veinte minutos estoy en tu casa"-dejé mi celular en el escritorio, tome la hoja y bajé. Pasados los veinte minutos tocaron la puerta, Seobie abrió la puerta.
-¿Quién es, Seobie?-me acerqué a él, Seobie me miró con temor en su rostro para luego abrazarse a mí.
-Tranquilo, no vengo a hacerles nada-dijo Gikwang sonriéndole-solo vine por la lista que prometió tu novio-volvió a sonreír.
-Aquí tienes-le di la hoja-más te vale cumplir tu palabra y no molestarnos más-dije serio.
-Sabes que mi palabra vale, si te dije que no los molestaría, no lo haremos, ¿sí?-asentí confiando en su palabra-bien, ya no los molesto más-nos saludó a ambos y luego se retiró, cerré la puerta para luego mirar a Seobie.
-Espero tener, al menos, la semana tranquila-de verdad quiero que mis heridas se curen de una vez, quiero estar con Seobie.
Como lo prometió Gikwang, ninguno de ellos se metió con nosotros, la semana fue tranquila gracias a eso, ya no sufrí sus golpizas diarias y mis heridas pudieron sanar como yo quería. Las heridas de Seobie también sanaron. Él y yo pudimos salir tranquilamente, sin interrupción alguna. Hoy día no hicimos mucho, decidimos acostarnos y ver televisión; Seobie es como un niño, así que nos quedamos viendo una película infantil.
-Seobie, esta película me está aburriendo-dije bostezando, él me miró y suspiró.
-Está bien, ¿qué quieres hacer?-recordé lo que me había dicho hacía una semana.
-Oye, Seobie, tenemos un asunto pendiente aún-dije acercándolo a mí, él me miró, su rostro ya estaba sonrojado y aún no le había hecho nada.
-T-tienes razón-desvió la mirada-t-te lo prometí, a-así que tengo q-que cumplir-comenzó a jugar con sus manos.
-Si no quieres, no lo haremos-me daba la impresión que lo estábamos por hacer por pura obligación, solo porque él lo había prometido.
-Q-quiero hacerlo, H-Hyung-levantó la vista, se acercó y me besó tímidamente, le correspondí al instante. Rápidamente el beso se intensificó. Pasé mis manos por debajo de su camiseta, haciendo que él soltara pequeños gemidos, los cuales aproveché para meter mi lengua en su boca. Me aparté de su boca y comencé a besarle el cuello dejando, cada tanto, alguna que otra marca-H-Hyung...-me nombró entre gemidos haciendo que mi pantalón comenzara a apretar un poco. Bajé mi mano hasta su entrepierna y comencé a masajear su miembro, ya erecto, por encima de su pantalón haciendo que sus gemidos se intensificaran.
-Parece que no soy el único que está excitado ahora-dije sonriéndole, él se sonrojó más de lo que estaba antes y desvió la mirada, posé mi mano en su mejilla y la acaricié con mi pulgar, él volvió a dirigirme la mirada; su rostro vuelve a ser el de un niño inocente. Tiene aquella expresión de no entender lo que estamos haciendo que, combinado con el sonrojo de sus mejillas, lo hace ver realmente lindo. Volví a mover mi mano reanudando lo que estaba haciendo antes, Seobie dejó escapar unos cuantos gemidos. Bajé su pantalón para luego seguir masturbándolo por encima de su bóxer, gemidos y suspiros salían de su boca llenando la habitación.
Luego de unos minutos me detuve, ya no podía aguantar el calor que tenía así que me aparte un poco de él y comencé a desvestirme, bajo la atenta mirada de Seobie, quién estaba cada vez más sonrojado.
-¿Qué sucede?-pregunté con una sonrisa socarrona en el rostro, dado que él no dejaba de mirarme, él desvió la mirada-¿acaso no te gusta el cuerpo de tu novio?-dije sin esfumar aquella sonrisa de mi rostro.
-N-no es eso, e-es que todo esto me da vergüenza-dijo con voz temblorosa.
-Tranquilo-acaricié su mejilla-no te avergüences-me detuve por un momento-¿quieres que pare?-pregunté, acariciando su mejilla; estoy pasándome un poco, no debería está comportándome las lascivo con él como lo hacía con Hara.
-N-no-dijo haciendo que me sorprenda-y-ya empezamos, t-tenemos que terminar-bien, no me esperaba esa respuesta de él.
-Está bien, pero si quieres parar solo dime-él asintió, terminé de desvestirlo, luego me acerqué a la mesa de luz de al lado de mi cama para buscar en el cajón.
-¿Q-qué buscas, Hyung?-en cuanto encontré el pequeño paquete que contenía un preservativo.
-Esto...-dije mientras abría el pequeño paquete y sacaba el preservativo para luego ponérmelo-puede que te duela un poco al principio-en el rostro de Seobie de pronto apareció una expresión de terror.
-¿Q-qué es lo que me va a doler?-me apartó un poco de él aún con aquella expresión en su rostro.
-Tranquilo, Seobie-acaricié su mejilla-no haré algo que te lastime, ¿sí?, solo te dije que te dolería porque es algo normal, trataré que no te duela tanto-traté de tranquilizarlo un poco, si está tenso podría terminar lastimándolo de verdad-cálmate, ¿sí?-él asintió-respira profundo-en cuanto lo hizo comencé a penetrarlo lentamente, soltó un gemido de dolor y sus ojos se llenaron de lágrimas.
-H-Hyung... d-duele...-las lágrimas comenzaron a resbalar por sus mejillas, las sequé con mi pulgar.
-T-tranquilo, pronto no te dolerá-dije tratando de tranquilizarlo, volvió a respirar profundo-c-comenzaré a moverme, ¿sí?-dije para luego comenzar a moverme lentamente, él comenzó a soltar gemidos, al igual que yo; su interior apretaba bastante mi miembro, no tardaría mucho en correrme si seguía así. Comencé a darle embestidas más fuertes y rápidas, Seobie comenzó a gemir mi nombre. Por aquellos gemidos que soltaba me di cuenta de que ya no le dolía, o al menos no tanto como antes, y que ya estaba disfrutando esto como yo lo estaba haciendo. Tomé su miembro y comencé a masturbarlo, sus gemidos y jadeos eran más intensos ahora; realmente le gustaba esto.
-H-Hyung...-me nombró en un jadeo, su interior se contrajo, pronto se correría. Moví mi mano más rápido de lo que lo hacía antes mientras le daba embestidas más fuertes y rápidas. No pasó mucho hasta que Seobie eyaculó, contrayendo su interior, haciendo que yo también eyaculara. Salí de su interior, me sequé el preservativo y lo tiré en el suelo para luego acostarme a su lado; estaba realmente exhausto.
-Seobie-él me miró-te amo-dije para luego besar su mejilla.
-T-también te amo-el sonrojo en sus mejillas apareció, yo solo sonreí, crucé mi brazo por alrededor de su cintura y lo acerqué a mí, él se acurrucó y cerró los ojos. No pasó mucho hasta que él se quedó dormido. Me quedé unos minutos mirándolo hasta que el sueño pudo conmigo.
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Me desperté cuando escuché un golpe en el suelo y un quejido débil, miré a mi lado, me levanté rápidamente y puede ver a Seobie en el suelo.
-¿Estás bien?-me acerqué a él, lo ayudé a levantarse y luego lo acosté-te duele, ¿verdad?-él simplemente asintió-es normal, pronto se te va a pasar-acaricié su mejilla.
-¿S-siempre va a ser así?-negué con la cabeza; imaginaba que en algún momento me haría una pregunta así y que le tendría algún tipo de miedo al sexo después de su primera vez.
-Tranquilo, es solo porque eras virgen, luego ya no te dolerá-él asintió-iré a hacer el desayuno, si necesitas algo avísame, ¿sí?-volvió a asentir-descansa-le di un corto beso, me dirigí al baño, me higienicé, me di una ducha rápida y luego bajé a hacer el desayuno. Luego de unos minutos subí con una bandeja en mis manos, la cual puse sobre el regazo de Seobie.
Pasamos todo el día en la cama, Seobie afirmaba que ya estaba bien no dejé que se levantara, no quería que estuviera adolorido mañana también y tuviera que pasar más rato en cama, sé que a él no le gusta estar todo el día acostado, así que, ¿qué mejor que descansar hoy y salir mañana?
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Muy buenas, aquí traigo el nuevo capítulo, lo hice algo más largo y contiene el lemon que les había prometido ¬w¬, espero que les guste tanto como a mí me gustó escribirlo. Se les agradece muchísimo los votos y los comentarios.
PD: también quería agradecer que llegamos a los 3.304 leídos y los 200 votos, realmente les agradezco muchísimo el apoyo que dan a la historia.
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